Nos
encontramos ante el tercer álbum de Sting en solitario (Segundo de estudio, ya
que entre su debut y este álbum edito un directo) y es para mí sin duda su
mejor trabajo en solitario. Lejos de su sonido cuando formaba parte del grupo
Police, aquí nos regala una amalgama de sonidos que se casan entre ellos de
forma magnifica. Aquí es donde podremos encontrar quizás sus temas más famosos
y durante 12 viajes nos sumergiremos en el genio del Norte de Inglaterra. Sting
dedica ... Nothing Like the Sun a su madre, quien murió antes de que el álbum saliera
al mercado a la edad de cincuenta y tres años, y las canciones sobre las mujeres
en el disco parecen creadas por el vínculo madre-hijo
Empieza el álbum
con “The Lazarus Heart” y el sonido
de sintetizadores inunda el comienzo del álbum, aquellos que hemos conocido al
Sting más macarra y salvaje de Police podemos arquear las cejas y pensar que
estamos haciendo escuchando esto, pero tras los primeros 30 segundos es la batería
la que está tomando el registro de la canción, a la que en ciertas partes del
disco se une en una danza tú a tú con los instrumentos de viento, un buen
comienzo pero lejos de lo esperado, pero eso se remonta rápidamente con "Be Still My Beating Heart" una
canción que rápidamente saca al Sting de los sentimientos, una canción que es
una montaña rusa cambia y se repite constantemente cuando se escucha con
atención, Sting canta “que su corazón se
ahoga en un mar de emociones”, se nos pone demasiado trascendente y poético
y puede llegar a sonar a falso, pero saca la pureza del mismo, sin ir más lejos
el tema fue nominado para la canción del año y la mejor interpretación vocal
pop masculina . Cierra la primera trilogía uno de los buques insignia del
artista, el archiconocido, cómico y a la vez reivindicativo "Englishman in New York",
tenemos toques de jazz en este tema al que, no me expliquen el motivo,
relaciono directamente con el gran Woody Allen y es que la temática de la canción
de verse perdido es muy del director de cine, pero frivolidades aparte, la canción
fue compuesta por Sting basándose en la experiencias del autor gay Quentin
Crisp y sus experiencias en la capital del mundo. Tiene un muy potente video
dirigido por David Fincher. Años más tarde el compositor hacía referencia a
esta canción como una consecuencia de la nostalgia, “Iba temprano, los sábados
por la mañana, a uno de estos pubs para ver fútbol en vivo desde Inglaterra por
satélite. Allí podías beber cerveza inglesa, disfrutar de un desayuno grasiento
y frito y codearte con ingleses de Manchester, Liverpool, Londres, y Newcastle.
Gritaríamos a la pantalla como si nuestras voces pudieran tener alguna
influencia mágica sobre una mala decisión de fuera de juego del árbitro o para
avisarle que se había cometido una falta cuando miraba hacia otro lado. Somos
supersticiosos y tribu primitiva, y cuando terminaba el partido, nos
desvanecíamos en la ciudad como fantasmas "
Empieza el
segundo trio del disco, con una canción bastante prescindible, a pesar del tono
Reagge y de los coros, no es esta “History
will Teach us Nothing” una de las mejores composiciones de Sting, aunque
haya que agradecerle el tono reivindicativo de la canción y la crítica al
estamento político se queda en un canción sencilla y casi vulgar con muy poco
gancho, quizás como escaparate para distraernos ante las dos joyas que no se
nos avecinan y es que la siguiente sigue la estela de la reivindicación, pero
en esta ocasión da en la diana con este "They
Dance Alone", siete minutos donde desangra su corazón en reivindicación
a los desparecidos durante la dictadura chilena de Pinochet, acompañado de
Ruben Blades que se encarga del speech en castellano. La canción fue creada en
exclusiva y dedicada a la "Danza de los Desaparecidos" realizada por
las esposas, madres e hijas de los presos políticos, pegadas a la foto de sus
familiares convirtiendo ese espectáculo en una forma legal de protesta. Sting
se inspiró en el pop, el rock, el reggae, el jazz y la música mundial. Las
tablas indias, el saxofón de jazz de Branford Marsalis y los sonidos
electrónicos se fusionan en un estilo homogéneo. Esta actitud abierta hacia
diferentes culturas y fuentes musicales va de la mano con un mensaje de paz y
protesta contra los regímenes violentos. Para cerrar otro tema sensible, uno de
los que más me han emocionado, me refiero a “Fragile”, canción inspirada en un voluntario del Cuerpo de Paz
estadounidense en Nicaragua, llamado Ben Linder, quien fue asesinado por
Contras, una canción donde vemos a Sting tocando la guitarra española, y desgrana
un mensaje de paz y solidaridad. Canción que también edito en Español y que
tuvo una versión de…. Julio Iglesias.
Que nada
bueno viene de la violencia
Y nada nunca
vendrá
Para todos
aquellos nacidos bajo una estrella airada
No vaya a
ser que olvidemos cuán frágiles somos.
Una y otra
vez la lluvia caerá
Como
lágrimas de una estrella (bis)
Una y otra
vez la lluvia dirá
Cuán
frágiles somos. (bis)
"We'll Be Together" puede ser
uno de los momentos mas roqueros del álbum, con un video que triunfó donde se veía
una relación de pareja no todo lo ideal que cada uno puede desear y donde
podemos ver a la actriz Trudie Styler, con quien Sting se casó más tarde, originalmente
la canción la escribió y lo realizó para un anuncio de cerveza japonesa Kirin
Brewery Company, el único requisito previo era que debía contener la palabra
"juntos". Paradojicamente fue la canción que más éxito tuvo del álbum.
Con "Straight to My Heart"
volvemos al Sting menos inspirado, aprovecha para volver al Reagge y a una
especie de baile tribal que no le quedó muy redondo, de igual manera que "Rock Steady" otra canción bastante
prescindible, juguetea con el blues y puede resultar hasta divertida pero no
esta a la altura de otras canciones que hemos disfrutado
Con "Sister Moon" volvemos a la
delicadeza que será el elemento común de las tres canciones con las que cierra
el álbum y que nos deja tan buen sabor de boca, la primera canción encontramos
unos aires de jazz realmente brillantes y un misterio en la canción que nos
contagia, una canción para lunáticos o una canción para los que se quedan
mirando a la misma mientras recuerda a la persona amada que ya no se encuentra aquí…
una delicada chuchería que no llega a empalagar. El siguiente tema es una versión
de Hendrix, nos estamos refiriendo a “Little
Wing”, con una versión sorprendentemente buena que le da otra vuelta de
tuerca al clásico de Hendrix y plagada de una poesía abstracta que hará las
delicias de los sensibles, súmale a la canción una guitarra que sin llegar a
los niveles de la original le da un plus, acompasando a los instrumentos de
viento. Maravillosa
Well, she's walking through the clouds
with a circus mind
that's running wild
Butterflies and zebras and moonbeams
and fairy tales
That's all she ever thinks about...
Riding with the wind
When I'm sad she comes to me
with a thousand smiles
she gives to me free
It's alright, she says,
it's alright
Take anything you want from me,
anything
Fly on, little wing
Cierra el disco con de "The
Secret Marriage" dos minutos de piano y poema que se clava en tu
cabeza por la melancolía que destila porque para este Matrimonio secreto no necesitamos
ni iglesias, ni estado, ni flores, ni velo blanco… ni si quiera una biblia
sobre la que jurar…. y lo mejor es que sin esos adornos nunca se podrá romper.
Es maravilloso la letra, así como la interpretación que del mismo realiza el
artista con el piano.
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