viernes, 31 de julio de 2020

Disco de la semana 186: Jeff Beck Group - Truth


El grupo y el disco que protagonizan este artículo surgen en 1968, en un pub-discoteca londinense llamado The Cromwellian, dónde un entonces aspirante a cantante llamado Rod Stewart tiene un encuentro casual con un, ya por entonces, aclamado guitarrista llamado Jeff Beck, conocido por su trayectoria previa en The Yardbirds, entre otros, dónde había coincidido con Jimmy Page, antes de que éste diera cuerpo a su proyecto posterior de Led Zeppelin. Y según cuenta el propio Beck, algo tuvo que ver este disco en el sonido que, posteriormente, enarbolara Page para su famoso dirigible.

Según cuenta Rod Stewart en su autobiografía, publicada en España en 2012 por Plaza & Janes editores, la conversación comenzó cuando le preguntó a Jeff Beck si era un taxista. Beck, sorprendido por la pregunta, le contestó que no, y le preguntó a su vez si Rod era un portero. Rod contestó: "No, yo soy cantante". Y eso era justo lo que Jeff necesitaba, un cantante para crear su nuevo grupo, tras haber abandonado The Yardbirds por desavenencias de egos con el otro tótem de la guitarra del grupo, el ya mencionado Jimmy Page. Quedaron al día siguiente para hablarlo en más detalle, en el Museo de la guerra, pero ya entonces había nacido el The Jeff Beck Group, y el siguiente paso fue reclutar al resto de miembros del grupo (Ron Wood a la guitarra de acompañamiento y bajo, Nicky Hopkins a los teclados y un sinfín de baterías que llegaban y al poco eran despedidos por un extremadamente perfeccionista e inestable Jeff Beck, que también llegó a despedir a Wood durante unos días) y meterse en el estudio de Abbey Road para crear el que fue su álbum de debut.


TRUTH


Para el disco, que se basó principalmente en versiones de temas clásicos del blues (por influencia de Jeff) y en menor medida del soul (Rod cuela una versión del Ol' man river de Ray Charles), necesitaban componer algunos temas propios. Jeff no era muy creativo a la hora de componer, de modo que los inseparables Rod y Ron se fueron a casa de la madre de este último, y al calor de un brasero intentaron componer algunos temas. El problema fue que a la cita se llevaron un par de cuadernos de cuartillas amarillas, en lugar de llevarse las guitarras. Para ayudar a las musas a encontrar el camino, abrieron una botella de vino, que acabó vacía en el suelo, junto a dos veinteañeros tumbados sobre la moqueta, entre varias cuartillas vacías. Cuando la madre de Ron llegó y les sorprendió de esa guisa, su respuesta fue brillante:

"Vaya, me parece que vosotros dos no vais a ser una amenaza para los Beatles"


De modo que el disco se basó en adaptaciones de clásicos del blues, transformadas en bofetadas de blues rock y bases rítmicas con las que dar espacio al virtuosismo de Beck con la guitarra. Y sin embargo, el disco brilla por la magia y la solvencia con la que estos tres monstruos enfocaron la grabación de los temas. Rod Stewart se maneja como un cantante mucho más experimentado de lo que realmente era, asumiendo registros blues por los que no había transitado. La guitarra de Jeff Beck tiene su espacio predominante en todos los temas, y el guitarrista estaba realmente en forma. La voz y la guitarra empastan a la perfección, pero el tejido de acompañamiento que dibuja Ron Wood es también eléctrico y muy solvente. El disco tiene poso y aporta un sonido novedoso para entonces. Jeff lo aprovechó para soltar otro de sus ácidos ataques a Jimmy Page, que junto a John Paul Jones y Keith Moon colaboraron en la grabación del tema Beck's Bolero. Les acusó de copiar el sonido de este disco para su siguiente grupo tras los Yardbirds. Un proyecto que se llamaría Led Zeppelin.

Por economizar y reducir los costes de trabajar en Abbey Road, el disco se grabó en apenas dos días, algo impensable para los discos que se graban hoy en día. Uno a uno y sin apenas pausa, fueron grabando temas como You shook me de Willie Nelson, I ain't superstitious de Howlin' Wolf, Morning Dew de Bonnie Dowson o el Ol' man river de Jerome Kern, popularizado por Ray Charles, en la que Keith Moon tocó los timbales, acreditado como "You know Who" en los créditos por problemas contractuales.

Para el tema de arranque, se optó por Shapes of things, una canción compuesta durante un proyecto previo de Beck, que en la voz de Stewart adquirió otra dimensión diferente. Los temas "originales" aparecen firmados por "Jeffrey Rod" (un pseudónimo de Jeff Beck y Rod Stewart). Optaron por firmar así los temas que estaban de nuevo basados en otros temas clásicos, pero cambiando tanto la letra y el enfoque musical que llegaban a tener identidad propia. Let me love you se basa en Let me love you baby de Buddy Guy, Blues Deluxe en Gambler's Blues de B.B. King y Rock my Plimsoul en Rock me baby, también de B.B. King. El disco se completó con una versión de un tema tradicional de finales del siglo XVI llamada Greensleeves que abría la cara B de la edición en vinilo. La melodía de la época Tudor fue reinterpretada al son de las cuerdas de la guitarra de Beck, en un tema instrumental curioso pero poco trascendente.


Paradójicamente, Truth (Verdad) nació con una gran mentira. Pese a ser un disco grupal y con varios artistas relevantes en sus filas, el mánager de Beck (Mick Most) se la jugó al resto y lo publicó como disco en solitario de su pupilo, lo cual no sentó nada bien en el seno del grupo, que ya estaban cansados de alojarse en moteles de mala muerte mientras el guitarrista ocupaba las suites de los mejores hoteles durante la gira previa y posterior al disco. Eso hizo que el segundo disco, Beck-Ola, se publicara por fin como un disco de The Jeff Beck Group, y que aún hoy en día aparezca en muchas publicaciones como el primer disco de la banda, aunque en realidad fuera el segundo y, a la postre, último que grabarían juntos. Beck también estaba cansado de lo que consideraba, pese a las continuas artimañas de su mánager, una falta de reconocimiento y protagonismo. Su ego de estrella no le permitía lidiar con situaciones como la que sucedió en los camerinos tras uno de los últimos conciertos del grupo en EE.UU. Un enviado de EMI Records se acercó a saludar y se fue directo hacia Rod Stewart, para decirle:

"Jeff, un concierto cojonudo, sí señor. Y llevas un gran guitarrista..."

Todas estas confusiones, mentiras y malos rollos influyeron en que, pese a seguir la misma fórmula, Beck-Ola no tuviera la misma magia que su antecesor, y en que todos estos grandes de la música siguieran caminos diferentes, en busca de una verdad que unas veces fue mejor y otras peor, pero que siempre fue diferente, como las canciones que nos regalaron en Truth, el verdadero disco de debut de The Jeff Beck Group.

jueves, 30 de julio de 2020

Resultados canciones favoritas extranjeras de 1979

Vamos a hacer un repaso por esos temas que elegisteis como vuestras canciones favoritas de 1979 un años que podría parecer no muy fructífero dentro de la historia del rock, sobre todo si nos basamos en las canciones más populares, es decir, las que consiguieron los primeros lugares en las listas de éxitos. Digamos que dentro de lo más comercial incluso fue un año hasta deplorable en cuanto a calidad musical. Sin embargo, si empezamos a explorar sobre todo entre los álbumes que aparecieron ese año, nos encontramos con que hubo grandes canciones.



10.- David Bowie: Fantastic Voyage. Empezamos con el artista britanico en solitario por excelencia, que en es año publicaba el album Lodger que no tuvo un gran éxito comercial donde encontramos este tema donde Bowie teme que el fin del mundo esté cerca, pero aún canta su fe en la humanidad. Fue escrito en la época en que hubo un grave deterioro en las relaciones entre Occidente y la Unión Soviética durante la Guerra Fría.

9.- Police: Walking on the moon. Fue el segundo éxito del grupo británico, un tema escrito tras una noche de juerga donde a Sting llego a la habitación completamente borracho y se puso a andar por la habitación y se le ocurrió la letra ya que aunque la canción está ambientada en el espacio, es una alegoría de cómo se sentía Sting cuando estaba de gira, confinado en habitaciones de hotel y escenarios mientras el mundo seguía girando. El tema tiene un ritmo de Reggae muy jugoso.

8.- Queen - Crazy Little Thing Called Love. Estamos ante una de las canciones mas alejadas del sonido Queen, ya que tiene un estilo rockabilly que no habíamos escuchado antes. Posteriormente Bian May comento que la canción era un tributo a Elvis Presley. El tema fue escrito por Freedy Mercury mientras estaba en la bañera del Munich Hilton y fue un gran exito entre sus seguidores.

7.- Supertramp - Breakfast in America. Uno de los temas mas reconocibles de la banda Supertramp, y uno de sus grandes éxitos comerciales. De hecho este álbum se salio un poco del camino que estaban llevando y nos entregaron un álbum lleno de grandes melodías y a pesar de que la relación entre los dos cabezas visibles del grupo era buena lograron con esta y otra canciones del álbum y magnifico trabajo. Como muestra podemos decir que en este tema se utilizó una gran variedad de instrumentos inusuales por entonces, incluidos algunos que rara vez se escuchan en canciones de rock, esto fue gracias a John Helliwell, que podía tocar varios instrumentos, incluidos los instrumentos de viento de madera.



6.- Led Zeppelin - All my love. Nada mas alejado del titulo, cuando esperamos una canción de amor nos encontramos con un tema que homenajea al hijo de Robert Plant, Karac, quien murió a causa de un virus estomacal en 1977 cuando tenía cinco años. Led Zeppelin estaba de gira en Estados Unidos cuando sucedió, Robert Plant recibió la llamada de su esposa Maureen, quien le dijo que su hijo Karac, de 6 años, estaba seriamente enfermo. Dos horas después, recibió una nueva llamada en el que le anunciaban que su hijo había muerto.

5.- Pink Floyd - Comfortably Numb. Una canción que siempre ha sido asociada a las drogas pero que en cambio en una entrevista publicada en los años 80, Waters dijo que gran parte de la canción proviene de algo que realmente sucedió una noche cuando, para permitirle actuar en Filadelfia, el médico le dio un sedante para un dolor de estómago intenso, que probablemente había causado por los nervios. En el escenario, sus manos estaban entumecidas y su visión borrosa, pero nada influyo en la la multitud, que continuó bailando y cantando. . Ojo al segundo solo de guitarra, esta considerado uno de los mejores de la historia. La canción aparece en la película The Wall

4.- AC/DC - Touch too much. Este tema habla los peligros del exceso, con los que la banda estaba bastante familiarizada. Eran conocidos por sus fiestas salvajes, drogas y bebidas. El cantante Bon Scott murió seis meses después tras una borrachera y ahogarse en su propio vomito. Letra aparte podemos decir que es uno de sus mejores temas y no goza de la fama que otra tiene.



3.- The Clash - London Calling. Es sin duda el tema estrella del grupo, esta canción apocalíptica, que detalla las muchas formas en que el mundo podría terminar, incluida la llegada de la edad de hielo, el hambre y la guerra. El título proviene de la identificación de la estación de radio del Servicio Mundial de la BBC: "Esto es Londres llamando ..." La BBC lo usó durante la Segunda Guerra Mundial para abrir sus transmisiones fuera de Inglaterra. Una de las ironías de esta canción es que, viniendo firmado por una de las bandas líderes del punk británico, marcó el final definitivo de aquella música, o al menos, de la primera generación de punks, la surgida a finales de 1975 con los Sex Pistols a la cabeza. London Calling pulveriza los dogmas del punk y se queda únicamente con su espíritu combativo y furioso.



2.- Pink Floyd - Another brick in the world part II. Un mito, una canción que de una manera u otra todos conocemos, ya sea por el poso que ha dejado en la historia, por la película o porque siempre ha sido identificada como una critica a los estados totalitarios, lo cierto es que todos la hemos escuchado alguna vez, y es que ademas es un tema brillante, desde las guitarras a los coros realizados por niños de edad comprendidas entre los 13 y 15 años. Roger Waters escribió esta canción dando su punto de vista sobre la educación formal, que fueron enmarcados durante su tiempo en la Cambridgeshire School for Boys. Odiaba a los maestros de la escuela primaria y sentía que estaban más interesados ​​en mantener a los niños callados que en enseñarles. El muro se refiere a la barrera emocional que Waters construyó a su alrededor porque no estaba en contacto con la realidad. Los ladrillos en la pared fueron los eventos en su vida que lo impulsaron a construir este muro proverbial a su alrededor, y su maestro de escuela era otro ladrillo en la pared.



1.- AC/DC - Highway to Hell. El título a menudo se atribuye a una frase que el guitarrista Angus Young usó para describir las giras en Estados Unidos, aunque según explicaron en realidad la cancion fue escrita para contar lo que era estar en el autobús camino de Melbourne o Sydney a Perth a través de la llanura de Nullarbor. Cuando el Sol se pone en el oeste y  estás conduciendo, es como una bola de fuego. Fue el primer tema del grupo que llegó a Estados Unidos, y de ahí al éxito quedaba que las emisoras descubrieran el potencial del grupo Australiano y lo subieran al cielo. Es sin duda uno de los tema mas representativos de AC/DC y una verdadera maravilla.





miércoles, 29 de julio de 2020

Joaquín Sabina - Juez y Parte (Mes Joaquín Sabina)


El #MesJoaquinSabina llega a su fin, y quería cerrarlo con un disco muy especial para mí porque, como su propio nombre indica, ha sido Juez y Parte de algunos momentos de mi vida. Pero más allá de la carga personal que pueda tener este disco, es además el álbum más homogéneo de su carrera, probablemente junto a 19 días y 500 noches sea el disco que más se acerca al nivel de una obra compacta y unitaria, un todo coherente en el extremo opuesto de otros discos que eran simplemente la suma de una decena de buenas partes.

Algo tiene que ver, en esto, que sea el único disco de estudio que grabó al completo con Viceversa, su banda de acompañamiento para los directos (ya con el fiel Pancho Varona entre sus filas), con la que grabó el directo Joaquín Sabina y Viceversa, que también tuvo su espacio a lo largo del mes que hemos dedicado a Sabina. Y algo tiene que ver también que sea su primer disco claramente "eléctrico", apuntando una tendencia que ya había empezado a salir a la luz en el anterior Ruleta Rusa, pero que es en Juez y Parte dónde adquiere su máxima expresión y profundidad.

Escuché por primera vez el disco en junio de 1987, dos años después de su publicación, y mientras Sabina estaba enfrascado en la gira de presentación de su siguiente disco Hotel, dulce hotel. El colegio había acabado, y los campamentos de verano no eran tan populares como lo son ahora, así que acabe enrolado en un viaje en coche a Logroño, para acompañar a mi tío Carlos a una feria de alfarería y cerámica que se celebró aquel año en la céntrica Plaza del Mercado. Nos hospedamos en una pensión cercana, que cumplía con los cánones de las sabinianas "pensiones sin mondas", y al día siguiente montamos nuestro stand en la feria. Allí, ya fuera como reclamo para los compradores, o para entretener a los sufridos alfareros (en mi caso, simple ayudante de alfarero) que pasábamos el día entero detrás de las vasijas, platos y figuritas de barro expuestas en aquellos pequeños stands, la organización "pinchaba" discos que sonaban de principio a fin por el hilo musical. Y sí, lo habéis adivinado, mi momento favorito era cuando le llegaba el turno a Juez y Parte.

JUEZ Y PARTE (1986)

Ya desde el principio, para un chaval de 14 años recién cumplidos, que no sabía que aventuras iba a depararle la vida ni que personas conocería durante el viaje, las letras de la crápula Whisky sin soda dibujaban intensas escenas en mi cabeza de adolescente, y eran la perfecta carta de presentación para el artista que estaba entonces descubriendo. En la misma línea pero con un mayor valor autobiográfico, Cuando era más joven despertaba sensaciones parecidas. ¿Qué experiencias y emociones similares serían las que yo llegaría a vivir? ¿Las contaría después en la edad adulta, desde la misma mirada nostálgica que tan bien reflejaba Sabina en aquel intenso tema?

De la mirada nostálgica y la declaración de intenciones, Sabina regresaba al presente y a la crónica social, para contar con sumo detalle y estética de novela negra el drama del anónimo Ciudadano Cero, episodio de locura que acaba en asesinato múltiple. Un tema lúgubre e intenso, con una letra tan visual que era imposible no sobrecogerse, no solo ante los "17 muertos en 30 disparos", sino también por el gato al que dejó cojo, y el "Volkswagen tuerto de un tiro en un faro". Para darle más verosimilitud al tema, los dioses se alinearon y en Logroño llovió durante varios días de aquella semana, a veces mientras sonaba este tema, mientras Sabina se preguntaba "que razón oscura te hizo salir del agujero, siempre sin paraguas, siempre a merced, del aguacero..."

Debo decir que, desde entonces, este joven aprendiz de alfarero no ha cambiado en lo más mínimo en su devoción por Joaquín Sabina, por lo que no se me puede reprochar lo mismo que se le echaba en cara al Joven aprendiz de pintor, uno de los mejores temas del disco y del cancionero del autor, que destila bohemia y decepción en cada uno de sus versos, intensas y acertadas puyas contra la envidia, la deslealtad y las críticas en el mundo del espectáculo. A través de las profesiones de pintor, novelista, torero y, por supuesto, cantautor, Sabina desgrana con brillante gracejo las miserias y mentiras de la fama y los aduladores que te suben al podio para después dispararte desde abajo.

Serán casualidades, pero son muchas, las que hacen que este disco sea tan relevante en mi vida. Mirando hacia atrás, como lo hacía Sabina en Cuando era más joven, me doy cuenta que años después fui yo mismo el que, "huyendo del frío, busqué en las Rebajas de Enero, y hallé una morena bajita que no estaba mal". Y dicho sea de paso, "apenas llegó, se instaló para siempre en mi vida".


En la línea de Ciudadano Cero, aunque bastante más idealizada, estaría la intensa descripción de la banda del Kung Fu. Prima hermana de otras odas a personajes del lado más salvaje y macarra de la noche madrileña, como Qué demasiao o la posterior Pacto entre caballeros, quizá sea la que menos me llega en el conjunto, aunque es un tema divertido y de fácil escucha. Como anécdota, y en una canción sobre pandilleros amigos de lo ajeno, no podía faltar un "hurto". La ovación de falso directo al final del tema se "tomó prestada" del disco doble en directo "Rock in Rios" de 1982.


Tras este pequeño lunar, el resto de la piel se nos pone de gallina al escuchar la Balada de Tolito, tierna descripción de un anciano sin techo, que a cambio de casi nada entretiene a quien quiere verle con pequeños trucos de magia. Sensible y respetuosa, surgió como un encargo para el programa "Vivir cada día" de TVE, para la que Sabina hizo un seguimiento del personaje real. Después de conocerle, tiró a la basura la letra inicial y compuso este bello y sentido homenaje.

Así como Kung Fu queda rara encajada entre una positiva canción de amor y una sentida tonada para un mendigo, después de una canción tan emotiva hacía falta una canción como Incompatibilidad de caracteres, un bálsamo de alegría rockandrollera, con una jovial gamberrada final en la que van repitiendo el título, pero eliminando en cada ocasión una de las sílabas de "Incompatibilidad". La broma final funcionaba, además, muy bien en directo, así que la canción fue más imprescindible que incompatible en los conciertos de Sabina.

Para el tramo final del disco, Sabina se guardaba lo mejor, y por fin en el penúltimo corte hace su aparición la gran Princesa de este afilado cuento urbano y suburbial. ¿Qué decir de uno de los temas bandera del artista? Pues que la casualidad me hizo un nuevo guiño con este tema y este disco. Años después, en el libro "Sabina en carne viva", el propio Joaquín contaba que: "Princesa es una chica de Logroño (...) Muy hippiosa, extraordinariamente joven y extraordinariamente hermosa. A la que conocía y con la que me acostaba cuando iba a Logroño (...) Luego se vino a Madrid y fue cayendo en picado. Eso llevó a la heroína y en ese momento hice la canción". Sabina se tomó algunas licencias en la letra de la canción, exagerada y dramatizada en beneficio de la intensidad de la historia. La princesa original no tuvo una sobredosis, dejó las drogas y lleva una vida normal y anónima. Quizá la Princesa de hoy en día, estable y reformada, le negara sus favores a un Sabina que en Quédate a dormir gasta la bala de la sinceridad y la asumción de la derrota como último intento de conseguir que la chica se quede en su casa. Estamos ante la típica rareza de final de disco, dónde hay licencia para asumir riesgos en lo musical y jugar con estilos poco habituales. En esta ocasión, le toca el turno al reggae, combinado con desenfadados arreglos de metales al estilo dixieland. Un gran acierto, y en contraposición una canción que no ha gozado de una gran repercusión y que no es habitual en los conciertos.


Y hablando de conciertos y casualidades, una de las últimas noches antes de que la feria acabase, salimos a pasear por Logroño. Andamos durante un largo rato, y llegamos a una plaza en la que había un escenario, y una multitud de riojanos estaban disfrutando de un concierto de... Joaquín Sabina. Nos quedamos un rato bebiendo (Coca Cola en mi caso) y escuchando canciones, y cada vez que atacaban alguno de los temas de Juez y Parte el corazón me daba un vuelco. Un motivo más para pensar que los astros estaban extrañamente alineados duran. Con el paso de los años, el recuerdo del concierto se ha ido difuminando, hasta el punto de no tener claro si fue real, o lo soñé mientras dormía en la pensión.

Sí que he podido comprobar el día exacto en el que terminó la feria, el 14 de junio de 1987, porque ese día nos invitaron a cenar en un restaurante que estaba muy cerca del ayuntamiento. Esa noche el Logroñés venció por 1-0 al Valencia, y logró el ascenso a primera división. La afición se agolpó frente al ayuntamiento, y los jugadores salieron al balcón para llevarse una gran ovación, que a mí me recordó más al final de Kung fu que a algo relacionado con el fútbol. Ahora por fin escribo esta historia para 7dias7notas, y me acabo de enterar que el nuevo Logroñes ha logrado el ascenso a Segunda. Alguien habrá sido Juez y Parte de tantas casualidades, que nos han llevado a todos al momento en el que estamos. El final del #MesJoaquinSabina. Es el momento de coger uno de esos "sucios trenes que iban hacia el norte" en busca de una nueva aventura y un nuevo artista que escuchar y sobre el que hablar. Nos prepararemos un buen whisky sin soda y decidiremos sin prisa. Tenemos todo un verano por delante.

lunes, 27 de julio de 2020

Canciones que nos emocionan: Balls to The Wall, Accept

Ballas To The Wall, Accept


     En esta ocasión para hablar del tema que ocupará el espacio de esta sección tenemos que ir a Alemania, concretamente a la ciudad de Solingen, integrada en el sector administrativo de Düsseldorf, en Renania del Norte-Westfalia, de donde es originaria la banda de heavy metal Accept. Si bien la formación se funda en 1976, su origen se gesta a finales de los años 60.

Corre el año 1968, Y en la ciudad de Solingen, situada en la parte occidental de Alemania, y Udo Dirkschneider (voz), Michael Wagener (guitarra), Dieter Rubach (bajo) y Birke Hoe (batería) forman un grupo al que llaman Band X. El problema de la formación es la inestabilidad de la misma a causa del constante baile de músicos que entran y salen de la misma, lo que impide que ésta no acabe de arrancar profesionalmente, algo que al final provoca su separación.

En 1976 Udo Dirkschneider y Dieter Rubach deciden que es hora de crear su propio proyecto personal y se centran en crear su proxima banda, para ello cuentan con los servicios de los guitarristas Wolf Hoffmann y Gerhard Wahl y con el baterista Frank Friedrich. Acababa de nacer Accept. Ese mismo año consiguen tocar en el Festival Rock am Rhein y consiguen llamar la atención tanto de la gente como de la crítica, algo que no pasa desapercibido para el sello dicsográfico Brain Records que ofrece a la banda su primer contrato discográfico.

Se iniciaba la carrera de una de las mejores formaciones de heavy metal de finales de los años 80 y principios de los 90. La banda durante sus primeros años sufre varios cambios en su formación, y durante esa época ven la luz sus álbumes Accept (1979), I'm a Rebel (1980), Breaker (1981) y Restless And Wild (1982).

Y llegamos al año 1983, año que marcaría el punto de inflexión de la banda gracias a la publicación de su quinto álbum de estudio, Balls To The Wall; un álbum que llama la atención del mercado americano, tanto que sería publicado al año siguiente para éste país por el sello discográfico Portait. En 1983 sólo se había publicado para el mercado europeo a través del sello RCA Records. El grupo está conformado por entonces por Udo Dirkschneider (voz), Herman Frank (guitarra), Wolf Hoffmann (guitarra), Peter Baltes (bajo) y Stefan Kaufmann (batería).

Balls To The Wall es un álbum que generó cierta polémica ya que el mensaje de algunas canciones hablaban de la homosexualidad y la represión política. El grupo al respecto explicó que muchos temas del disco trataban de las minorías oprimidas en general. Incluido en el álbum encontramos el tema que da título al álbum, Balls To The wall, otro de esos temas que a mí tanto me emocionan. El tema es compuesto por la banda y por el mánager de la banda por entonces, Gaby Hauke, quien lo hace a través del pseudónimo Deaffy.

Según el guitarrista de la banda Wolf Hoffmann al grupo siempre le había interesado la política y los derechos humanos y el tema trataba sobre los derechos humanos, querían transmitir que un día los torturados y oprimidos se levantarían y patearían el trasero de los opresores. El tema se gesta a raíz de una sesión en el estudio de grabación donde se encontraban el cantante Udo y el baterista Stefan; en aquella sesión mientras hablaban y pensaban en la composición del tema tomaron muchas copas, y en un momento dado durante aquella sesión donde el alcohol fue el claro protagonista surgió la frase "Balls To The Walls". A raíz de ahí el grupo y Hauke darían forma al tema.


Too many slaves in this world

Die by torture and pain

Too many people do not see
They're killing themselves - going insane



Too many people do not know

Bondage is over the human race
They believe slaves always lose
And this fear keeps them down



Watch the damned (God bless ya)

They're gonna break their chains (Hey)
No, you can't stop them (God bless ya)
They're coming to get you
And then you'll get your



Balls to the wall, man

Balls to the wall
You'll get your balls to the wall, man
Balls to the wall - balls to the wall



You may screw their brains

You may sacrifice them, too
You may mortify their flesh
You may rape them all



One day the tortured stand up

And revolt against the evil
They make you drink your blood
And tear yourself to pieces



You better watch the damned (God bless ya)

They're gonna break their chains (Hey)
No, you can't stop them (God bless ya)
They're coming to get you
And then you'll get your



Balls to the wall, man

Balls to the wall
You'll get your balls to the wall, man
Balls to the wall - balls to the wall



Come on man, let's stand up all over the world

Let's plug a bomb in everyone's ass
If they don't keep us alive - we're gonna fight for the right



Build a wall with the bodies of the dead - and you're saved

Make the world scared - come on, show me the sign of victory
Sign of victory - sign of victory



You better watch the damned (God bless ya)

They're gonna break their chains (Hey)
No, you can't stop them (God bless ya)
They're coming to get you
And then you'll get your


Balls to the wall, man

Balls to the wall

domingo, 26 de julio de 2020

Joaquín Sabina - El hombre del traje gris (Mes Joaquín Sabina)

"Soy del color de tu porvenir, me dijo el hombre del traje gris..."




Nunca había estado Joaquín Sabina más cerca de un disco "conceptual" que con éste "Hombre del traje gris". Y no porque otros discos suyos no tengan una temática unitaria, pero en este disco la acertada metáfora de un tipo gris que simboliza el fracaso, la rutina y los sueños rotos está constantemente presente, ya desde la portada, un cuadro firmado por Juan Vida que Joaquín colgó en su casa, en el que el hombre gris le roba el sitio al propio cantante, e irá apareciendo también en varias de las canciones.


Es también el primer disco en el que comienza la entente Sabina - Varona - Gª de Diego, tras la descomposición de su grupo Viceversa. Comenzó aquí una relación fructífera y duradera con la que firmarán los mejores discos del cantante. Pancho Varona ya había aportado sus guitarras en los dos discos anteriores con Sabina, pero con la llegada del getafense Antonio Gª De Diego tuvieron la pieza que les faltaba para llevar musicalmente a las canciones hacia un paso más adelante. Antonio había estado en grupos de rock progresivo como Franklin, y después con Teddy Bautista en Los Canarios, llegando a grabar también con Triana. Tras grabar este disco con Sabina, el jienense insistió en que se quedara con plaza fija.


Como harían en otras ocasiones para varios de sus discos, Joaquín y Pancho buscaron un lugar en el que trabajar en las canciones, Joaquín creando letras y Pancho vistiéndolas de notas a la guitarra. La elegida fue Madeira, pero la cosa no funcionó. En Madeira, la falta de ambiente les llevó al aburrimiento y a la ausencia de ideas. Así que emigraron a Las Palmas, y de la animada isla canaria salieron los primeros temas de El Hombre del Traje Gris, entre ellos una joya del calibre de Eva tomando el sol, tema con el que se abre magistralmente el disco. La acertada e imaginativa letra, que juega con el paralelismo entre la historia de Adán y Eva y la de dos okupas de Moratalaz, es una de las canciones más brillantes del cancionero del artista.


También del período en la isla es el siguiente tema, Besos en la frente, pícara oda a las mujeres menos agraciadas físicamente, que a cambio ofrecen una pasión y un sentimiento mucho mayor que el de las bellezas de plástico y peluquería. Divertida y ocurrente sin más, no tiene comparación con el tema de arranque, ni con el auténtico boom del disco y de la carrera de Joaquín, la excelsa y melancólica Quién me ha robado el mes de abril, uno de los primeros temas que se grabaron para el disco, aunque su creación ya fuera en el período de vuelta a casa en Madrid. Es además, el primer tema en el que se menciona a ese hombre del traje gris, con su sucio calendario de bolsillo y su lamento y amargura por la pérdida de los años de juventud.


Una de romanos fue el single de lanzamiento, una mirada nostálgica a la candidez y la clandestinidad de las primeras citas, haciendo manitas en la última fila de un cine, en el que siempre ponían películas de romanos. La letra, de nuevo, es tan imaginativa y brillante que sólo podemos quitarnos el sombrero (de centurión) y proclamar "Ave Sabina" ante una nueva lección magistral del maestro. Y no es la única canción del disco con sabor a celuloide, si tenemos en cuenta que tres de las canciones del disco se concibieron para la banda sonora de la película Sinatra. Es el caso de Nacidos para perder, segundo tema en el que El Hombre del traje gris (que es además el título de una película de 1956) aparece, para decirle a nuestro protagonista que no tiene ningún futuro ("Soy del color de tu porvenir, me dijo el hombre del traje gris").

Peligro de incendio podría entroncar con Besos en la frente, con su temática juguetona sobre un encuentro sexual que eleva hasta el máximo la temperatura de los termómetros, algo de lo que sólo veía capacitadas a las féminas de menor atractivo pero mayor autenticidad. Y por esa razón, los adjetivos que la definen podrían ser los mismos, es divertida y juguetona, sin más. A destacar los arreglos de metal, que le dan un toque muy swing al tema. Mucho más seria y acertada es el himno al viejo carterista al que la edad ya pasa factura. El sabor bohemio de Al ladrón, al ladrón tiene el encanto de los temas mas "sabineros" del artista. Es otra de las canciones que surgieron en el periplo inicial en Canarias.

El disco llega a su tramo final con otro de los temas "cinematográficos", que junto a Nacidos para perder y Quién me ha robado el mes de abril se crearon inicialmente para Sinatra. Cuentan que Sabina pidió que tuviera un aire a la música de Bruce Springsteen, pero la participación de Jaime Asúa (guitarrista de Alarma) hizo que el resultado estuviera más cerca del grupo de Manolo Tena que del cantante de New Jersey.


Y para broche, el Rap del optimista, brillante parodia que en realidad es más un tema reggae, y auténtica hermana mayor de canciones posteriores como No soporto el rap o Como te digo una co te digo la o, en las que volvería a destapar el tarro de las esencias y la sorna con la que se ha acercado siempre a ese (para él) tan divertido como denostado género musical. El tema cierra con una declaración de humildad, que es una auténtica play list a tener en cuenta. ¿Acaso no querríais que Sabina os recomendara un buen puñado de canciones para combatir esos momentos de la vida en los que os sentís dentro de la piel de un hombre de traje gris? Pues aquí la tenéis:

"Ya quisiera yo, en lugar de este reggae, haber escrito:

Rapsodia en Blue
Chelsea Hotel
Guantanamera
Tatuaje o...
She loves you (Yeah, Yeah, Yeah)
Pedro Navaja
Like a Rolling Stone
Dos gardenias para tí
Mira que eres canalla
No hago otra cosa que pensar en tí
Marieta
La estatua del jardín botánico
Moon over Bourbon Street

Y qué culpa tengo, si a lo más que llego, es a Pongamos que hablo de..."  

sábado, 25 de julio de 2020

Canciones que nos emocionan: Baby, Please Don't Go, Big Joe Williams

Baby Please Don't Go


     Para hablar del siguiente tema, otro de esos que a mí tanto me emocionan tenemos que fijarnos inevitablemente en la figura de Big Joe williams.

Joseph Lee Williams, más conocido como Big Joe Williams nace en Crawford, Mississippi (Estados Unidos) en 1903. Big Joe tuvo una infancia harto difícil, pues sufre malos tratos habitualmente por parte de su padrastro, lo que hace que a la edad de 9 años decida fugarse de casa, encontrando refugio en un Medecine Show. Los Medecine Shows eran espectaculos de vodevil (teatro de variedades) muy comunes en las zonas rurales del sur y el oeste de Estados Unidos, donde había payasos y espectaculos musicales que acompañaban a oradores cuyo objetivo era vender elixires y productos supuestamente medicinales.

Durante su estancia en el Medecine Show Big Joe conoce a numerosos músicos, entre los que se encuentran una de sus mayores influencias, Charlie Patton. También pasa una temporada en Texas, donde conoce a Leadbelly. Finalmente se muda a Chicago donde acaba conociendo a Sonny Boy Williamson I, y se une a él, impulsando entre los dos el nuevo estilo imperante en la ciudad de Chicago.

Big Joe desarrolla durante su carrera un estilo muy personal, muy cercano al tradicional blues del Delta, creando una tensión dramática muy intensa con su voz, acompañando ésta con unos bajos muy marcados que iba entrecrotando con notas muy agudas usando una guitarra de nueve cuerdas. Más tarde, en la década de los 60 incorporaría asiduamente el uso del Slide.

Big Joe comienza a grabar temas a mediados de la década de los años 30 para el sello discográfico Bluebird. Y unos de esos primeros temas, es precisamente Baby Please Don't Go, otro de esos temas que a mí tanto me emocionan. El tema aparece publicado por el sello Bluebird en 1935 como single, siendo acompañado en la cara B por el tema Wild Cow Blues.

Big Joe Williams escribe Baby Please Don't Go basándose en el tema tradicional americano Long John, tema que había sido grabado por Alan Lomax un año antes, en 1934. Alan Lomax fue un etnomusicólogo estadounidense que se dedicó en vida a recopilar canciones populares del siglo XX para la Biblioteca Nacional del Congreso de Estados Unidos. Long John era una canción que cantaban los prisioneros negros que trabajaban en la Darrington State Prison Farm de Texas (Estados Unidos). Era un tema popular allí porque hablaba de Long John, un prisionero fugado que huía de las autoridades.

Big Joe Williams grabaría una segunda versión más modernizada del tema en 1941 también bajo el sello Bluebird. En 1947 grabará una tercera versión, esta vez con la discográfica Columbia Records. En 1953 Muddy Waters graba para el sello discográfico Chess Records el tema, bajo el título Turn The Lamp Down Low, conviritiéndose su versión en la que más influirá para la infinidad de versiones posteriores que irán apareciendo. Es Baby Please Don't Go uno de los temas más populares y reconocibles en la historia del blues estadounidense, siendo versionada por infinidad de artistas, de la talla de Lightnin' Hopkins, John Lee Hooker, Ted Nugent, Big Bill Broonzy, Muddy Waters, Van Morrison, AC/DC ó Aerosmith entre otros.


Now, baby please don't go

Now, baby please don't go home

Baby, please don't go
Back to New Orleans
And get your cold ice cream
I believe that a man done gone
I believe that a man done gone
I believe that a man done gone
To the county farm
Now, with his long chain on
Turn your lamp down low
You turn your lamp down low
Turn your lamp down low
I cried all night long
Now, baby please don't go
I begged you night before
I begged you night before
Begged you night before
Turn your lamp down low
Now, baby please don't go
I believe my baby done lied
I believe my baby done lied
I believe, my baby, she lied
Says she didn't have a man now
While I had my time
'Fore I'd be yo' dog
Play, I swore I'd leave your do
'Fore I'd be yo' dog
I'd pack my trunk this morning, baby
Go back to Rolling Fork
I believe I'll leave, here
I believe I'll leave you here
I believe I'll leaves you here
'Cause you got me way up here
An you don't feel my care
Now, baby please don't go
Oh baby, please don't go
Now, baby please don't go
Back to New Orleans
Even though I love you so
I believe you trying just leave me here
Why leave your daddy, here?
Why leave your daddy, here?
You got me way down here
And you don't feel my care

viernes, 24 de julio de 2020

El disco de la semana 185: Beth Hart & Joe Bonamassa - Don't Explain

Don't Explain


     Para la recomendación de esta semana en 7dias7notas vamos a hablar de dos artistas que cuando se conocieron lo tuvieron claro, tenían que grabar algo juntos, y no se equivocaban porque cuando se juntan son capaces de regalarnos temas maravillosos para nuestros oídos, con todos vosotros Beth Hart y Joe Bonamassa y su primer trabajo juntos, Don't Explain.

Beth Hart es una cantante y compositora estadounidense que goza de una gran popularidad ahora gracias a su calidad, pero hasta llegar ahí no lo tuvo nada fácil. Nace en Los Ángeles, California (Estados Unidos), y desde bien pequeñita se siente atraida por el piano, de hecho al ver en la televisión la pieza Sonata para piano nº 14 de Beethoven, más conocida como Claro de Luna, esa misma noche se sienta en un piano que sus padres tenían y es capaz de reproducirla, sólo tenía 4 años. Sus padres lógicamente le apuntan a clases de piano, pero Beth no se molesta en aprender a leer partituras, finge que las lee y las toca de oído.

En su jueventud se dedica a participar en concursos de canto y televisión al mismo tiempo que toca en locales en Los Ángeles. Consigue ganar un concurso en 1993, lo que le vale dar el salto y consigue publicar su primer álbum de estudio, Hart And The Ocean Of Souls en 1993. Beth iniciaba una brillante carrera como intérprete de blues, rock, soul y jazz. Pero no lo tiene fácil, pues padece problemas con las drogas desde los once años de edad, sumado al hecho de que de pequeña es diagnosticada de trastorno bipolar. Su madre consideraba ridículo que una niña pequeña tuviera que medicarse y no seguía tratamiento alguno.


Cuando Beth tiene 20 años su hermana Sharon, con quien Beth consumía drogas, fallece a causa del VIH por compartir jeringuillas. Beth se encuentra sumergidsa en una espiral de alcohol y drogas. el punto de inflexión llega en 1999, pierde su contrato discográfico con la discográfica Atlantic Records e ingresa en un hospital debido al abuso continuado de alcohol y drogas. Es allí cuando se entera que sus adicciones son debidas a su trastorno bipolar. Es en ese momento cuando deja de consumir dichas sustancias y se pone en tratamiento. Parte de culpa que Beth consiga centrarse la tiene su representante, Scott Guetzkow, con quien se acabará casando en el año 2000, pues le ayuda a poner los pies en la tierra. En 2003, y después de tres discos publicados e infinidad de problemas debidos a su enfermedad y adicciones, Beth regresa centrada y en forma y publica Leave The Light On. Beth Hart en forma y libre de adicciones es una artista maravillosa, y nada la detendrá, labrándose una excelente carrera de aquí en adelante.

Joe Bonamassa nace en 1977 en la localidad de Utica, Nueva York (Estados Unidos). Al igual que Beth, Joe empieza a tocar la guitarra a edad muy temprana, a los cuatro años animado por su padre, quien además de melómano empedernido es también representante de guitarras. A los once años ya recibía clases de guitarra de Danny Gatton, famoso guitarrista que fusionó los estilos blues, rockabilly, jazz y country. A los doce años Joe ya tiene su propia banda, Smokin' Joe Bonamassa, pero sólo toca los fines de semana pues durante el resto de la semana tiene que asistir a clase como los demás niños.

Es con doce años cuando abre en aproximadamente una veintena de conciertos de BB King, siendo apadrinado por el mismísimo BB. Antes de cumplir los 18 años tocaba en una formación llamada Bloodline, compuesta además de por el mísmo, por los hijos de Miles Davis, Robbie Krieger y Berry Oakley. En el año 2000 publica su primer álbum de estudio, A New Day Yesterday, donde presenta composiciones propias y covers de Rory Gallagher, Jethro Tull y Warren Haynes, además de contar con la colaboración del mismísimo Gregg Allman en el tema If Heartaches Were Nickels. El álbum supone todo un éxito, alcanzando el puesto número 9 en la famosa lista americana Billboard Blues. Se daba el pistoletazo de salida a la fulgurante carrera de Joe Bonamassa.


El destino obrará su magia y hará que Beth y Joe coincidan. Joe Bonamassa había visto varias actuaciones de Beth Hart en televisión, además los dos se habían cruzado en Europa durante los espectáculos que ambos daban por separado. Definitivamente Joe queda muy impresionado al ver el espectáculo in situ de Beth en el Festival Blue Balls de Lucerna, Suiza. La idea de trabajar juntos se gesta cuando ambos coinciden en el bar de un hotel en Dublín y Bonamassa le plantea la idea a Beth de hacer algo juntos, algo que ella acepta de inmediato. En un principio Beth se pensaba que lo que Bonamassa le había pedido es que le hiciera las voces de respaldo, pero no, Joe le había propuesto hacer un disco juntos, al 50%.

Para la grabación de su primer álbum juntos recurren al productor Kevin Shirley, más conocido como The Caveman, quien ha trabajado con artistas de la talla de Journey, Iron Maiden, Led Zeppelin, Dream Theater, Mr. Big, HIM ó Europe entre otros. El álbum que Joe Y Beth quieren sacar adelante son covers de temas que siempre habían querido grabar, y en un principio escogen escogido 12 temas, si bien al final sólo serán grabados 10. La selección de los temas se hace de la siguiente forma, Beth escoge cinco de los temas que serán grabados y Joe los otros cinco.


El resultado es Don't Explain, su primer álbum juntos grabado en 2011, un compendio de versiones que están hechas con un cuidado y una calidad exquisitas.
La selección de Beth y Joe para éste álbum es la siguiente: Sinner's Prayer, una de las elecciones de Beth. Tema compuesto por Lowell Fulson y Lloyd Glenn y grabado por Ray Charles en 1957. Chocolate jesus, compuesta por Tom Waits y Kathleen Brenann y grabada por el mismo Tom Waits en su disco Mule Variations en 1999. Llegamos a Your Heart Is A Black As Night, para mí una de las joyas del disco, compuesta y grabada por la magnífica cantante y compositora de jazz Melody Gardot en 2009 para su álbum My One And Only Thrill. For My friend, otra de las elegidas por Beth, compuesta y grabada por el famoso compositor y cantautor estadounidense Bill Withers en 1973 en su álbum en directo Live At Carnegie Hall. Cierra la cara A el tema que da título a esta selecta recopilación, Don't Explain, compuesta por la cantante de jazz y swing Billie Holiday y el compositor Arthur Herzog Jr. (famosos ambos por sus composicionesde temas de jazz juntos), y grabada por Billie Holiday en 1946.

La cara B llega con otro de las grandes joyas de este disco, I'd Rather Go Blind, compuesta por Etta james, Ellington Jordan y Billy Foster, y grabada y publicada por Etta James en 1968 en los famosos estudios FAME, en Muscle Shoals, Alabama. Cerrad los ojos y dejaros llevar porque Joe con la guitarra y Beth con la voz están sublimes. Something's Got A Hold On Me, compuesta por Etta James, Leroy Kirkland y Pearl Woods, y al igual que la anterior, grabada por Etta james en 1962. Turno para la que es para mí la tercera joya absoluta del disco, I'll Take Care Of You, una de las escogidas por Bonamassa, compuesta por el famoso compositor estadounidense de los años 50 y 60 Brook Benton y grabada por el bluesman Bobby Bland en 1959. Turno para otra de las elecciones de Joe, Well, Well, compuesta por el compositor y productor Delaney Bramlett y grabada por el mísmo y por su mujer Bonnie Bramlett en 1972 e incluida en el álbum de ambos D&B Together. El álbum cierra con el tema Ain't No Way, tema que para mí no sólo cierra el álbum, también cierra el poker de joyas del disco junto con Your Heart Is As Black As Night, I'd Rather Go Blind y I'll Take Care Of You (todos los temas del disco son muy buenos, pero estos cuatro son maravillosos). Compuesto por Carolyn Franklin (hermana de Aretha Franklin), y grabada por Aretha Franklin en 1968.

Don't Explain es un maravilloso álbum de versiones realizado por Beth Hart y Joe Bonamassa, un trabajo realizado con un gran cuidado, exquisitez y respeto hacia los temas originales. Para la escucha de este disco nada mejor que hacerlo escuchando primero los temas originales y seguidamente los covers de Beth y Joe, así sacáis vosotros conclusiones, os garantizo que no os van a defraudar...