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viernes, 6 de junio de 2025

Tributo a Sandro – Un Disco de Rock (Disco de la semana 433)


Tributo a Sandro – Un Disco de Rock (Disco de la semana 433)

Un tributo que trasciende generaciones

En 1999, la escena del rock argentino se unió para rendir homenaje a una de las figuras más emblemáticas y complejas de la música popular: Sandro. El álbum Tributo a Sandro – Un Disco de Rock reunió a trece artistas de diversas corrientes para reinterpretar clásicos del Gitano desde el lenguaje del rock, el pop, el punk y la fusión. El resultado fue una obra ecléctica, potente y respetuosa que reafirmó el rol de Sandro como un pionero del rock en español, además de recordarlo como un artista visceral, escénico y moderno.

  • Sandro: el pionero inadvertido del rock en español

Roberto Sánchez, conocido por todos como Sandro, irrumpió en la escena musical a comienzos de los años 60, influenciado por Elvis Presley, Jerry Lee Lewis y el naciente movimiento beat. Fue uno de los primeros artistas latinoamericanos en adoptar la estética y el sonido del rock and roll, presentándose con su banda Los de Fuego en televisión, vistiendo cuero negro y moviéndose con una sensualidad hasta entonces desconocida en el panorama musical local. Su figura desató la fascinación de las jóvenes y el recelo de los sectores más conservadores.

A pesar de que luego orientó su carrera hacia la balada romántica, con éxitos masivos como "Rosa, Rosa", "Porque yo te amo" o "Penumbras", Sandro nunca perdió su raíz rockera. Su forma de interpretar, la entrega en el escenario, la construcción de una figura de culto y el control sobre su obra marcaron a generaciones de músicos que lo admiraron en silencio, por temor a ser malinterpretados en una época donde las etiquetas pesaban más que las influencias reales.

Este disco vino a reparar esa omisión, y lo hizo con arte, pasión y autenticidad.

  • El tributo: una lectura rockera del Gitano

Tributo a Sandro – Un Disco de Rock fue editado por BMG Ariola en 1999. Su propuesta era tan simple como potente: trece artistas de Argentina y otros países reinterpretan trece canciones del repertorio de Sandro. El criterio de selección incluyó bandas consolidadas, nombres emergentes y voces alternativas, lo que enriqueció la paleta sonora del proyecto.

1. Divididos – "Tengo"

La Aplanadora del Rock abre el disco con una versión cruda y vigorosa de este clásico de la esperanza amorosa. Mollo canta con pasión contenida mientras la banda despliega un riff distorsionado que refuerza la fuerza del deseo implícito en la letra.

2. Los Fabulosos Cadillacs – "Porque yo te amo"

Vicentico y su banda llevan esta balada a un terreno de reggae melancólico con aires de soul. La versión es contenida, introspectiva, elegante y muy respetuosa de la emotividad original.

3. Los Caballeros de la Quema – "Rosa, Rosa"

La canción más popular de Sandro recibe una lectura intensa, cargada de guitarras rockeras y una interpretación dramática de Iván Noble. La banda la transforma en una balada rock sin perder un án Noble. La banda la transforma en una balada rock sin perder un \xe1pice de su romanticismo.

4. Bersuit Vergarabat – "Una muchacha y una guitarra"

Bersuit reinterpreta esta canción con una mezcla de murga y candombe, dando un giro festivo a una canción de soñadores y trovadores. Una versión irreverente pero encantadora.

5. Attaque 77 – "Dame el fuego de tu amor"

El grupo punk no baja el voltaje y convierte este pedido desesperado de pasión en un grito cargado de guitarras afiladas y batería a todo ritmo. Una versión fiel al espíritu de Sandro pero con el sello de Attaque.

6. León Gieco – "Si yo fuera un carpintero"

Adaptando un clásico de Tim Hardin, Sandro popularizó esta versión en castellano. León Gieco, desde su sensibilidad folk, aporta una versión sentida, sutil, con guitarra criolla y armónica. Una joya sencilla y emotiva.

7. Erica García – "Quiero llenarme de ti"

La versión de Erica aporta una lectura femenina, sensual y alternativa. Su voz recorre la letra con un tono hipnótico sobre una base trip hop con guitarras ambientales. Uno de los momentos más originales del álbum.

8. Los Visitantes – "Trigal"

Una de las canciones menos versionadas de Sandro se transforma en una pieza psicodélica con aroma a tango y rock porteño. Los Visitantes logran una atmósfera bucólica y melancólica.

9. Aterciopelados – "Penas"

Desde Colombia, Andrea Echeverri convierte este tema triste en un bolero rockero lleno de reverberación, con su voz tan particular como emotiva. Una versión con vuelo propio.

10. Virus – "Atmósfera pesada"

La banda de los Moura, con su estética sofisticada, transforma este tema en una pieza tecnopop elegante, fría, perfecta. Ideal para una noche urbana de introspección.

11. Molotov – "Mi amigo el Puma"

Los mexicanos aportan el momento más desfachatado del disco. Guitarras podridas, voces filtradas y actitud punk-metal para esta canción de contenido críptico. Provocadora y feroz.

12. Javiera & Los Imposibles – "Así"

La banda chilena propone una versión minimalista y melancólica, donde Javiera canta con una mezcla de nostalgia y devoción. Una joya escondida del disco.

13. Bel Mondo – "Penumbras"

El cierre está a cargo de esta banda que le da un aire cinematográfico a uno de los temas más intensos de Sandro. Con arreglos envolventes y una voz suave, la versión transmite misterio y sensibilidad.

Más que un homenaje: un manifiesto

Este disco no fue un simple ejercicio de nostalgia. Fue un manifiesto: Sandro fue rock. Tal vez no por el género que eligió durante su etapa más popular, sino por su actitud, su valentía artística, su entrega al escenario, su independencia creativa y su capacidad de romper moldes. Sandro encarnó muchas de las virtudes que el rock venera: autenticidad, pasión, rebeldía, sensualidad, drama.

Para los artistas participantes, el tributo fue también una forma de legitimar sus propias influencias. En una época donde el rock argentino se encontraba explorando nuevas sonoridades y redescubriendo sus raíces, revisitar a Sandro fue un acto de madurez cultural.

Tributo a Sandro – Un Disco de Rock es una obra que supera el formato de disco homenaje. Es una declaración de principios, una relectura desde el presente de una figura cuya complejidad merece ser redescubierta una y otra vez. Sandro, el Gitano, sigue iluminando la música con su fuego inextinguible. Y este disco, a más de veinte años de su salida, sigue siendo una prueba de que su legado vive en cada nota, en cada versión, en cada artista que se atreve a cantarlo a su manera.


viernes, 30 de mayo de 2025

Disco de la semana 432: Superunknown - Soundgarden

 


Superunknown es el cuarto álbum de larga duración de Soundgarden. El grupo fue, de hecho, uno de los referentes de la escena grunge de Seattle, ya que existía desde mediados de los 80, este álbum terminó siendo su apogeo comercial, y llegó unos años después que otras bandas grunge que eran, de hecho, varios años más jóvenes. Soundgarden siempre ha sido una banda a la que es difícil ponerle un sello. Se mueven en una delgada línea entre el hard rock y el heavy metal. Su segundo álbum, Louder than Love, se siente como un híbrido entre Zeppelin y Sabbath. Creo que la razón por la que me he encariñado tanto con este disco es porque es el álbum donde realmente encontraron un sonido propio. Sigo pensando que, de los cuatro grandes grupos grunge, Soundgarden fue, sin duda, el más singular. Se inclinaron más hacia afinaciones y compases poco convencionales, mientras que la magnífica composición de Chris Cornell pudo haber alcanzado su máximo esplendor en esa época. Cornell siempre pareció ser la principal fuerza creativa de la banda, pero con este lanzamiento tomó las riendas aún más. El álbum en el que el grunge tomó tanta presencia que algunos consideran que ni siquiera es metal alternativo ni grunge, sino solo grunge, incluso cuando la gran mayoría de las canciones muestran ser algún tipo de metal alternativo. Aun así, el grunge es el género principal del álbum y, por lo tanto, debería ser el foco principal. Soundgarden sin duda publicó el mejor álbum de estudio de grunge. Tristemente, o afortunadamente (dependiendo de cómo lo veas), Nirvana lanzó su legendario álbum MTV Unplugged el mismo año. Pero los logros que este álbum trajo a la mesa lo convierten en un álbum esencial incluso 30 años después.

Desde el principio, Let Me Drown inculcó todo el conocimiento de un grupo entonces en la cima: la potente y melodiosa voz de Cornell, llena de soul, riffs potentes y una sección rítmica superior. Con un compás de 5/4 (aunque la banda, la cumbre del genio puro, afirmaba no saber ni siquiera teoría musical y lanzó instintivamente este género de riffs extremadamente raros, a menudo surgidos de la mente de Cornell, lejos de limitarse a las baladas), Cornell describió la letra de la canción como "arrastrarse de vuelta al útero para morir". Tiene un estribillo genial que aprovecha al máximo los registros agudos y graves de Cornell. My Wave es otro tema magistral que muestra a una banda al unísono, con una batería monumental de jazz/hard rock, un bajo sinuoso, ricos efectos de guitarra (wah-wah, abundantes solos psicodélicos) y la majestuosidad de Cornell y sus letras asertivas pero abiertas, que las convierten tanto en un elogio a la combatividad como en una crítica al éxito a toda costa (esta dualidad es el tema central del acertadamente llamado y contradictorio Superunknown), ademas tiene uno de los riffs de introducción más divertidos del disco. Definitivamente suena un poco a sencillo, pero descubrí que incluso las canciones más orientadas a los éxitos de este álbum no le hacen ningún favor a nadie. En cuanto a la letra, probablemente sea una de las más simples, pero funciona, sobre todo cuando eres joven, todavía me identifico con ella. Hay momentos en los que realmente no te importa lo que hagan los demás, siempre y cuando te dejen en paz. Fell on Black Days, lamentablemente hace honor a su nombre hoy, es la canción de Soundgarden que más he escuchado, la que, a los veinte años, me hizo reconocer definitivamente el talento de la banda, aunque antes me había limitado a apreciar algunos sencillos. Sobre unos acordes potentes notablemente obvios —que algunos compararon, con distintos grados de aprensión, con Nirvana— Cornell ofrece la balada oscura y potente definitiva: un texto de depresión combatida, una línea vocal lánguida y sobriamente elegante, un estribillo desgarrador ("¿Cómo podría ser feliz de que este pudiera ser mi destino?"), un truco de guitarra oriental, y Cameron dándolo todo (relanzando la canción regularmente con un relleno perfecto). Perfecta, es una de las mejores letras de Cornell, después de todos estos años, sigue siendo una canción a la que recurro a menudo cuando me siento desanimado. Entre las canciones mas pesadas ​​del álbum, Mailman inevitablemente ocupa un lugar destacado, a medio camino entre Black Sabbath y Pantera, confiados en su potencia, Soundgarden teje una red hipnótica: la voz de Cornell es inicialmente etérea, contrastando con la pesadez de la guitarra de Thayil, quien no duda en ofrecer un solo dantesco mientras el primero sigue cantando (una de las especialidades de la banda y, que yo sepa, una idea bastante innovadora para la época), antes de intensificarse a medida que se revelan diversos arreglos psicodélicos. El tema homónimo es el más directo, en Superunknown la guitarra abraza un hard rock y una psicodelia oriental totalmente conquistadora, el estribillo, a pleno pulmón, retoma el coro: "Alive in the Superunknown", un auténtico himno generacional. En esta etapa, Superunknown acumula así cinco temas definitivos, inmaculados, coherentes y, sin embargo, basados ​​en patrones muy diferentes.


Superunknown es el primer álbum de Soundgarden donde la influencia de The Beatles es evidente (así sin anestesia) y es que Head Down es el primer y mas claro ejemplo de ello. Esta canción, compuesta íntegramente por el bajista Ben Shepherd, tiene un gran toque psicodélico. Es una de las más largas del álbum y, en mi opinión, una de las más subestimadas, permite descansar y prefigura lo que escucharán en el siguiente álbum, Down on the Upside. Cantada con más suavidad, con una fuerte influencia de la psicodelia oriental y rozando el folk-rock ligeramente hippie con su guitarra acústica, ofrece un bienvenido descanso en medio de un álbum que quizás corría el riesgo de recargarse. No presentaré Black Hole Sun, el megaéxito mundial del grupo. Una balada apocalíptica bastante peculiar, pero lamentablemente uno de los temas más flojos de la banda, y un triste recordatorio de que durante los gloriosos 90, las bandas de rock a menudo dependían de las baladas para alcanzar el mainstream. Un hito generacional, como sea que lo llamemos, eso es lo que dice, es la canción que define a Soundgarden, como muchas de las canciones que definen a Soundgarden, Black Hole Sun no representa a la perfección el sonido esencial de Soundgarden. El toque psicodélico permanece muy presente en esta canción y es bastante famosa por el psicodélico video que la acompaña. Otro sencillo, Spoonman, tiene un enfoque muy diferente: un riff zeppeliniano al estilo de "Whole Lotta Love", hip-pegadizo, percusión variada y ruidos de cuchara para infundir una especie de locura, antes de que la sección rítmica no haga locuras y se beneficie de deslizarse por una de las montañas más efectivas que se encuentran a medio camino. Drogas, suicidio, acordes de alienación al son del hard rock desenfrenado. La música de Spoonman se remonta a la contribución de Chris Cornell a la película Singles, estrenada en 1992. Puedes escuchar la parte instrumental de lo que se convertiría en Spoonman en la película. La canción hace referencia a un artista callejero llamado Artis the Spoonman que actuó en Seattle. Con Limo Wreck, Superunknown toma un giro más vertiginoso, más cuaresmal, más sombrío, más melancólico. Sin excepción, se pueden trasladar al lugar de la creacion: ritmos asimétricos, arpegios retorcidos, armonías de guitarra o el arte de crear un sonido ambiental, es otra de las canciones de este álbum que merece un poco más de atención. Las letras de Cornell critican la avaricia y los excesos y es una de las mejores interpretaciones vocales de Cornell en el álbum. Hay un cierto resurgimiento del bajo en la introducción de The Day I Tried to Live, que también desemboca rápidamente en impredecibles convulsiones rítmicas. Potente, y otra prueba de la impecable configuración rítmica: Cameron es claramente uno de los mejores bateristas de rock, y con demasiada frecuencia se le pasa por alto. Cualquier persona con un mínimo de ansiedad puede reconocerse en la letra de esta canción. A menudo se la descarta como una canción negativa, pero en realidad tiene una perspectiva mucho más positiva de la que la gente parece percibir. A veces, el título simplemente lleva a la gente por el camino equivocado y no miran más allá. Puede que este personaje no haya tenido éxito en su búsqueda de la "vida", pero eso no significa que no lo intente en otra ocasión. 


Kickstand es un tributo a MC5 que Soundgarden toca, en todos los sentidos, es el más grave del álbum, una canción punk un poco rápida que podría considerarse relleno, pero siempre me ha gustado mucho. Con un minuto y medio, solía ponerla sola cuando necesitaba un impulso de energía. Fresh Tendrils, un tema doble y discretamente otra pieza fabulosa. Psique copla, estribillo luminoso, arreglos orientales, Cornell magistral. Tiene uno de los compases más extraños del álbum y un riff de introducción muy potente. Cameron contribuyó a la mayor parte de la canción. En 4th of July, que no es precisamente un himno patriótico, Soundgarden inició un riff que los Melvins de Bullhead no habrían rechazado (y Cameron también toca como Dale Crover, un break potente, un contratiempo principal), lento, pesado, macizo, lento. Una canción pesimista, supuestamente escrita sobre un viaje de ácido "en algún momento cercano al 4 de julio". Aunque no quedan sencillos para el final del álbum, hay mucho oro en el último tercio. Half también es una especie de motivación psíquica oriental. Claramente no es la cumbre del álbum, pero es una forma suave de cerrarlo antes del canto del cisne, Like Suicide, musicalmente más ligera de lo que su título podría sugerir, con su arpegio flotante y su línea vocal enérgica. Supuestamente Chris Cornell la compuso después de tener que matar a un pájaro herido con un ladrillo para acabar con su sufrimiento. Es una gran despedida para un álbum que aborda tantos temas personales como la ira, el aislamiento y la soledad.

La noticia del suicidio de Chris Cornell en 2017 me destrozó por completo. Siempre será uno de mis artistas favoritos. Obviamente, el hombre tuvo muchas dificultades, y este álbum es sin duda un vistazo a lo que pudo haber sido su psique. Superunknown es el disco más experimental de Soundgarden. Es un poco largo, pero nunca me pareció largo. Down on the Upside seguía siendo un buen álbum, pero se notaba que intentaban recuperar la magia. Superunknown debutó en el número uno del Hot 100 y tanto Spoonman como Black Hole Son ganaron premios Grammy. La victoria de Spoonman fue en la categoría de heavy metal, sobre la que Cornell obviamente bromeó en el podio: "No nos iremos de este escenario hasta que alguien nos diga que somos heavy metal". Recomiendo este álbum sin reservas si nunca lo has escuchado. Para mí, incluso más que Badmotorfinger. Esta es la obra maestra de Soundgarden. Es una inmersión profunda en las inquietantes profundidades de la depresión, el aislamiento, la soledad y la ira, a la vez que cuenta con suficientes canciones alegres y divertidas como para no resultar tan aterrador como sus colegas de Alice in Chains. Es el álbum grunge que recomendaría a quienes buscan algo más del género y, en general, es uno de mis álbumes favoritos de los 90.


viernes, 23 de mayo de 2025

Disco de la semana 431: Depedro (2008)

 


Según la teoría de los "Seis grados de separación" propuesta por el escritor húngaro Frigyes Karinthy en el cuento "Eslabones" de 1929, cualquier persona está conectada a otra a través de una cadena de conocidos compuesta por un máximo de seis enlaces entre ellos. Nunca me había parado a pensar si, en el caso de Jairo Zavala, el músico madrileño detrás del proyecto Depedro, esa teoría se cumplía, pero en los últimos días, diversas casualidades me llevaron a pensar en esa red de enlaces, y a sentir que era el mejor momento para reseñar su álbum Depedro (2008), una brillante fusión de folk, rock, música tradicional latina e influencias mexicanas y estadounidenses, fruto de su colaboración con la banda Calexico, de la que Joey Burns y John Convertino contribuyen en el disco, tomando las riendas de la producción.

Mi conocimiento del universo Depedro se reducía hasta ahora a un puñado de estrellas en forma de canciones, y el culpable de que las conociera es un buen amigo al que llamaré "Miguelito", como el título de una de las canciones del disco. Con Miguelito, años atrás me embarqué en un proyecto musical amateur que nos llevó a tocar en sitios tan variopintos como un colegio de Villaverde o la Plaza del Pilar de Zaragoza, entre otros. Las canciones que mi amigo me recomendaba de cuando en cuando eran mi, por entonces, única conexión con Depedro, tan ligera "Como el Viento", la gran canción con la que comienza el disco, un tema de suave y agradable melodía sobre la sensación de bienestar que se experimenta al tener cerca a la persona amada, y una de las canciones que ya conocía. La otra era "Te sigo soñando", una de las canciones más introspectivas y emotivas del álbum.

Mucho tiempo ha pasado desde que a "Miguelito" y a mí nos dio por tocar música, pero más allá de aquello, la amistad ha permanecido intacta, así que no me falló "La memoria" (mi canción favorita del disco) cuando me invitaron al cumpleaños de una amiga en común con Depedro (a la que llamaré "Llorona", por aquello de la debida confidencialidad y para tener la excusa para hablar de la impactante reinterpretación a dúo con Fuel Fandango del clásico mexicano) y en cuanto tuve la ocasión de hablar con él, le pedí que se hiciera una foto conmigo para enseñársela a mi amigo.

¿Qué puedo hacer por ti? podría haberme preguntado mi amigo cuando le escribí y le hablé de aquel encuentro, pero en lugar de eso lo que me dijo fue que él también había tenido ocasión de conocerle... Y eso fue tan inesperado como que, en un disco predominantemente en castellano y plagado de sabores musicales latinos, emerjan de cuando en cuando canciones como "Two parts in one", "Tomorrow" o incluso "Don't Leave me Now", un tema que combina letras en español con estribillo en inglés. Indagando en la información sobre el disco, entendí estas influencias al descubrir que había sido grabado en Tucson, Arizona, pero para lo que no encontré explicación fue para esa extraña sensación de que los eslabones de los grados de separación estaban uniéndose de manera sorprendente.

Y aún lo hicieron más cuando, poco después, quedé con otro amigo, al que llamaré "Comanche" por su oportuno peinado mohicano, para ir a la feria del disco de coleccionismo, y le conté como había coincidido con Depedro¿Conociste a Jairo? ¡Iba conmigo al colegio en Aluche! me dijo sonriente, y aquello ya fue el colmo de la teoría del Sr Karinthy. Al volver a casa, y mientras escuchaba las optimistas y evocadoras notas de "La brisa", llegué a la conclusión de que, a riesgo de estar "Equivocado" y sin ánimo de molestar ni de resultar pesado, merecería la pena aprovechar alguno de los eslabones de este extraño fenómeno para hacerle llegar a Depedro esta humilde reseña, y conseguirlo idealmente antes de "Diciembre", porque con el invierno todo se enfría, aunque haya canciones como la del mismo nombre que nos ayuden a pasarlo de manera más agradable.

Con estos locos pensamientos en la cabeza llegué al tramo final del disco, y aún tuve tiempo de descubrir buenas canciones como "Sobre una línea" o "Running scared", y ese broche de dorada sensibilidad que es "Perfect Time" (con Russian Red) con el que cierra en todo lo alto un disco que no anda muy lejos de la perfección, y a solo unos clics en Spotify o Youtube Music de que comprobéis que estoy en lo cierto. Mientras os decidís a escucharlo, yo voy a dedicar mi tiempo libre a escuchar más discos de Depedro. Con ese objetivo, fui a Wikipedia a consultar su discografía, para comprobar estupefacto que, en toda esta cadena de eslabones y coincidencias, aún me faltaba descubrir que tiene un álbum titulado "Casualidades"... Sin duda, ese será la siguiente parada del emocionante viaje a través del universo Depedro.

viernes, 16 de mayo de 2025

Disco de la semana 430: Puppet Show - Ally Venable

Puppet show, Ally Venable



     Ally Marie Venable, nacida el 7 de abril de 1999 en Kilgore, Texas, es una guitarrista, cantante y compositora estadounidense de blues rock. Apenas tenía 14 años cuando lanzó su EP debut, Wise Man (2013), que le valió una reputación como estrella en ascenso en la comunidad de blues del estado de Texas. En 2014 y 2015 fue nombrada guitarrista femenina del año en los premios ETX Music Awards, y ella y su banda, Ally Venable Band, fueron nombradas banda de blues del año en los premios ETX Music Awards de 2015 y 2016. un más que notable currículum para una artista en ascendente proyección que iba dando los pasos adecuados hasta el día de hoy, donde se ha asentado como uno de los cantantes, y sobre todo guitarristas de una generación que viene pegando muy fuerte. 

El primer álbum de Venable, No Glass Shoes, grabado con la discográfica Connor Ray Music, terminó en el puesto número 16 en las listas estadounidenses RMR Electric Blues Charts de 2016. Su segundo álbum, Puppet Show, la confirmaba como una de las figuras más prometedoras del blues-rock contemporáneo. Lanzó este segundo álbum de estudio, Puppet Show, el 13 de abril de 2018, bajo el sello discográfico Connor Ray Music. Con apenas 19 años, esta guitarrista y vocalista consolidó su lugar en la escena del blues con un trabajo que combina la fuerza del blues texano, la intensidad del rock y una sensibilidad lírica sorprendente para su edad. El álbum no solo debutó en el número 7 de las listas de blues de Billboard, sino que también recibió elogios de la crítica especializada por su madurez musical y destreza técnica.


Ally Marie Venable nació el 7 de abril de 1999 en Kilgore, Texas, y desde temprana edad mostró un talento excepcional para la música. Comenzó cantando en la iglesia y, a los 12 años, ya dominaba la guitarra, inspirada por iconos como Stevie Ray Vaughan, Jimi Hendrix y Miranda Lambert. Su debut discográfico llegó a los 14 años con el EP Wise Man (2013), seguido por su primer álbum, No Glass Shoes (2016), que alcanzó el número 16 en las listas de blues eléctrico de RMR. Estos trabajos tempranos la posicionaron como una estrella en ascenso en la comunidad blues de Texas, ganando múltiples premios en los East Texas Music Awards, incluyendo Guitarrista Femenina del Año (2014, 2015) y Banda de Blues del Año (2015, 2016). Puppet Show marcó un paso adelante en la carrera de Venable, consolidando su reputación como una artista capaz de combinar tradición y modernidad. Grabado en varios estudios, incluyendo Red Shack Studio en Houston y KE Bushman’s Studio en Bullard, Texas, el álbum contó con la producción de Rock Romano, Steve Krase y la propia Venable. La banda, formada por Venable (voz y guitarra), Elijah Owings (batería) y Bobby Wallace (bajo), se complementó en este disco con invitados de renombre como Gary Hoey, Lance Lopez, Eric Steckel y Steve Krase, quienes aportaron texturas adicionales al sonido del trío.

Puppet Show es un álbum de blues-rock con profundas raíces en la tradición texana, pero con un enfoque fresco que refleja la juventud y la energía de Venable. Las 10 pistas, con una duración total de 52 minutos, incluyen ocho composiciones originales y dos versiones de clásicos del blues: Backwater Blues de Bessie Smith y She Caught the Katy de Taj Mahal. El álbum destaca por su equilibrio entre la intensidad de los riffs de guitarra, la potencia vocal de Venable y letras que exploran temas como la superación personal, las relaciones tóxicas y la resiliencia. Destaca la habilidad de Venable para rendir homenaje a sus raíces mientras imprime su propia personalidad. La inclusión de invitados como Gary Hoey (guitarra en Devil’s Son) y Lance Lopez (guitarra en Bridges to Burn) añade calidad y virtuosismo, mientras que el uso de armónica de Steve Krase y los teclados de Eric Steckel enriquecen los sonidos de la banda. 



La calidad de Ally Venable con la guitarra es impropia de una persona con su edad, y l
a interacción entre la banda y los invitados crea momentos de gran intensidad. algo que se aprecia desde el primer corte, Devil’s Son, tema que cuenta con la colaboración de Gary Hoey. El álbum abre con un riff inquietante y poderoso, marcando el tono con un blues-rock robusto. La colaboración con Gary Hoey aporta un toque de ferocidad a la guitarra, mientras que las letras nos hablan de un hombre problemático. Ally demuestra que, además de dominar el instrumento de seis cuerdas, también posee una gran voz. Bridges to Burn cuenta con la participación de su mentor Lance Lopez. La interacción entre las guitarras de Venable y Lopez crea un gran momento, con partes dobladas de guitarra, mientras que las letras tratan sobre dejar atrás relaciones destructivasCast Their Stones:tiene ese sonido que evoca el rock de los 70. La canción aborda la superación de las críticas y la adversidad. La batería acelerada de Owings y el bajo funky de Wallace crean una base rítmica sólida, mientras que los efectos en la guitarra y la voz de Venable añaden un toque psicodélico. Backwater Blues, la versión de Bessie Smith comienza con una introducción acústica que rinde homenaje al blues tradicional, antes de transformarse en un jam de blues texano con la armónica de Steve Krase. Esta transición del tema, que empieza más íntimo para acabar muy explosivo muestra la versatilidad de la banda. En She Caught the Katy apuesta por el clásico de Taj Mahal. La poderosa voz de Ally y la línea gran línea de bajo en este tema, dan nueva vida a la canción, con un toque moderno que respeta la original.

Puppet Show, la canción que da título al álbum, es una reflexión introspectiva sobre la manipulación y la lucha por la autenticidad. Con teclados cálidos de Eric Steckel, la pista combina rock con un toque de soul, y Venable tiene su espacio para lucirse. Comfort in My Sorrows es una balada blues lenta donde destaca la tierna voz de Venable y su solo de guitarra, que rememora y rinde tributo al estilo de los grandes del blues de San Francisco. Survive cuenta de nuevo con la colaboración de Eric Steckel a los manods de r un órgano Hammond B3.  La guitarra de Venable brilla al entremezclarse e interactuar con el órgano de Steckel. Y mientras en Waste It On You Ally nos habla sobre relaciones fallidas, en Sleeping Through the Storm, la canción que cierra el álbum, nos habla de perseverancia a ritmo de un buen boogie rockero. Los riffs afilados y la batería de Elijah Owings nos regalan un enérgico final de un disco que nos habla resiliencia y de no perder la espranza. 

Puppet Show es un testimonio del talento y la ambición de Ally Venable, una artista que, con solo 19 años, logró crear un álbum que equilibra la reverencia por el blues con una perspectiva fresca y personal. El álbum captura la esencia de una joven artista en ascenso, respaldada por una banda sólida y colaboraciones de artitas consolidados en la escena musical, y pone de manifiesto un talento que continúa redefiniendo las fronteras del blues texano. El disco amplió su alcance internacional, pues tras su lanzamiento Venable y su banda realizaron giras extensas por el este de Estados Unidos, compartiendo escenario con artistas como Gary Hoey, Bernard Allison y Mike Zito. El éxito del álbum también la llevó a formar parte del show Ruf Records Blues Caravan 2019, donde actuó en más de 60 shows en Europa, exponiendo su música a una mayor audiencia. Puppet Show sentó las bases para sus trabajos posteriores, Texas Honey (2019), Heart of Fire (2021), Real Gone (20023) y Money & Power (2025), que han continuado elevando su proyección.

sábado, 10 de mayo de 2025

Disco de la semana 429: Welcome to Sky Valley - Kyuss

 


“Welcome To Sky Valley” siguió un camino musical bastante similar al de sus anteriores discos, todos los elementos que te atrapan en sus primeros trabajos seguían estando allí , pero de alguna manera parecían aún más atractivos esta vez, no podría decrite si hay más material psicodélico en esta ocasión, pero creo que los momentos más alucinantes son quizás más seguros y expansivos. Lo primero que te llama la atención es la forma de tocar la guitarra de Josh Homme, ha vuelto a mejorar notablemente y en este disco intenta algunas cosas mas desafiantes y extremas, y lo lleva a cabo perfectamente, puede que sea la primera vez donde descubrimo que tiene un pleno control en su instrumento y eso suena genial además la voz de John García es tan apasionante y vital como siempre y por encima de todo nos dan una composición de canciones de muy alta calidad, ya que hay muchos ganchos y aspectos destacados para atraer al oyente. Curiosamente, el álbum está organizado en tres suites, cada una con tres o cuatro canciones aparentemente no relacionadas, no tengo idea de por qué estructuraron las cosas de esta manera y debo admitir que lo encuentro un poco extraño, preferiría poder saltar de una canción a otra cuando quisiera en lugar de tener que avanzar rápidamente o escuchar varias pistas primero, esto no es algo determinante en el album, pero vale la pena avisarlo. Las dos primeras suites son impresionantes, estamos ante “rock fumeta” de la más alta calidad. A diferencia de los lanzamientos anteriores de Kyuss, no añoro la voz de John García durante las largas secciones instrumentales, la banda finalmente encontró la capacidad de involucrarme completamente en sus instrumentales y eso hace que la experiencia auditiva sea más placentera. La tercera suite comienza tan brillantemente como las dos primeras, pero las cosas comienzan a aplanarse un poco en el medio antes de convertirse en otra pista monstruosa épica al final. “Demon Cleaner” es mi canción favorita del álbum la razón es simple me llega mucho mas, dicho esto, realmente me encantan temas como “Gardenia”, “Asteroid”, “Space Cadet”, “Odyssey” y “Whitewater”, desafortunadamente, Kyuss ha vuelto a incluir una pista de broma completamente inútil al final del álbum. “Lick Doo” no tiene otro propósito que quitarle algo de brillo a un álbum que por lo demás es muy bueno. Sólo dura un minuto, pero mentiría si dijera que no me dejó un ligero mal sabor de boca al terminar el disco.

'Movement I' arranca el disco con el excelente 'Gardenia'. Junto con el conocido 'Demon Cleaner', 'Gardenia' fue sorprendentemente lanzado como single (sorprendente para mí, ya que no podía imaginar que esto alguna vez se vendiera como single, pero ¿qué iba a saber yo?) Kyuss no eran muy conocidos aquí, al menos no en los círculos principales, como otros han dicho, esta canción es la quintaesencia del rock fumeta: el estilo de guitarra característico de Josh Homme a todo volumen, cuando se le une Drums & Bass. Lo que me encanta de esta canción es su rebelión, insinuaciones sexuales mezcladas con algunos riffs y cantos funky. El solo de guitarra de Josh Homme es simplemente maravilloso, su Ovation GP realmente resalta esas notas altas de una manera que nunca había oído hablar. ¿Y qué pasa con la voz de García? ruda simplemente no hay una mejor manera de describirlos. 'Supa Scoopa and Mighty Scoop' es otro fantástico tema de rock fumeta, casi todas las virtudes más destacadas de 'Gardenia' están presentes aquí también, pero esta vez con una interpretación vocal más inspirada, aunque un poco más mesurada y menos "rudo". El riff es simplemente brutal, se integra en el coro épico con un ritmo de tambor militarista. 'Asteroide' separa estas dos pistas y es una grabación lenta que luego alcanza un clímax impresionante en sus últimos 90 segundos aproximadamente, una epopeya espacial, completa con efectos exagerados, reverberación y eco y demás (funciona aquí). Se vuelve más rápido e intenso hacia el final.


'Movement II' comienza con el corto y agudo '100°, rápido, enérgico, el efecto de desvanecimiento al final es genial. La pista del medio, 'Space Cadet', desafortunadamente es lo mas flojito de este álbum, no estoy en contra totalmente de la elección de la banda de insertar pistas con cambios más lentos, pero en este caso realmente altera el impulso del álbum, escrito por Josh Homme, su epifanía guitarrista mientras estaba en Kyuss. Termina con el contundente 'Demon Cleaner', la última pista es un poco más lenta, un poco sabática, con redobles geniales y voces espaciales, es una canción muy profunda, con una letra interesante. Recientemente vi una pieza en un foro de entrevista basada en la realización de este CD donde Josh Homme dice que esta canción en realidad pretende hablar sobre cepillarse los dientes, jaja, ese tipo tiene un gran sentido del humor.

'Movement III' comienza con otra porción del paraíso del rock fumeta 'Odyssey', que es un poco más espacial que fumetas anteriores, Es un rifferage de metal de ritmo rápido mezclado con un trabajo de guitarra muy psicodélico, guitarras al revés, guitarras distorsionadas, lo que sea. Conan Troutman es una verdadera golosina, la canción destaca por estar basado más claramente en el blues tradicional, pero aún funciona bien dentro del álbum con el tratamiento estándar. La última canción "real" del álbum 'Whitewater' es otra canción de calidad, esta vez con una introducción atmosférica realmente genial, tiene energía real... golpea tus oídos, voces distorsionadas y psicodélicas con un estribillo épico... luego todo se diluye en una agradable sesión de enfriamiento para deprimir al oyente.

Y finalmente, por supuesto, está la novedad no incluida en la lista 'Lick Doo', que es simplemente una canción carnavalesca con letras tontas de "single entendre". Es un poco divertido en ese momento en que las pistas no listadas/ocultas comenzaban a volverse populares.

En general, Welcome to the Sky Valley es una marcha constante a través del desierto nocturno, donde los únicos momentos de alivio son los breves descansos de suave improvisación que ofrecen algunos tonos más brillantes. Dado que estas cualidades tan extenuantes son el pan de cada día de la mayor parte de la música rock, no es difícil ver por qué este disco se ha vuelto querido por mucha gente. 


viernes, 25 de abril de 2025

Disco de la semana 427: Love Deluxe - Sade






Love Deluxe es absolutamente hipnótico, esta experiencia es absolutamente impresionante te hace llorar al darte cuenta de lo influyente y bello que es todo. Puedes decir que la voz de Sade es muy unidimensional si quieres, para mí es perfecta para enredarse con los instrumentos y con un álbum tan entrelazado con paisajes sonoros y estructuras de canciones minimalistas, todo se siente mucho más intenso de lo que es, especialmente una vez que te pierdes por completo en su mar musical. La entrega vocal de Sade es relajante y, a veces, aporta variación a los instrumentales con una repetición más poderosa de los pasajes líricos presentes, gran parte de su lirismo es fantástico, y nada de lo minimalistas que sean sus letras les resta fuerza a sus mensajes. Tomemos "Feel No Pain", por ejemplo. Sade no necesita decir mucho para transmitir un mensaje contundente sobre tomar las riendas y esforzarse por forjar un camino en la vida. Siempre luchando por seguir adelante. Un mensaje que no se escucha a mucha gente hoy en día. Ya sea hablando de amor o dando consejos, lo que dice son cosas que me encanta escuchar. ¿Cómo explicar todos los sentimientos y cosas que este hermoso álbum me hizo sentir? Tantas cosas hermosas a la vez, el simple hecho de descubrirlo me cautivó, en mi corazón, siento que el amor esta escondido, adormecido pero este álbum me hizo creer de nuevo en el amor, creer de nuevo en que puede haber una persona con quien compartir esos gustos. Todo en este álbum es excepcional, la voz de esta Diosa es como la de un ángel. ¿Y saben cómo me enamoré de este álbum? Siendo yo el chico y ella mi ángel, quien me canta con su tierna y dulce voz, me volví inofensivo y vulnerable al escucharlo, con esas voces y piezas instrumentales de jazz.

El álbum empieza fuerte, con No Ordinary Love, pagaría por escucharla por primera vez, la canción realmente te intriga por lo que el álbum podría ofrecer más que este tema de soul suave con algunas de las mejores voces que jamás escucharás. La canción expresa el sentimiento de la artista sobre su relación actual y para mí se siente como si se estuviera arriesgando por completo y se enamorara profundamente. La canción se convirtió en el mayor éxito de Sade junto con las famosas Smooth operator , Hang on to your love y Paradise. La obra maestra de 7 minutos de duración que penetra tu mente y tu alma, si la escucho empiezo a sentirme fuera de este mundo, me hundo en esas aguas donde Sade nadó en el video, cada vez que la escucho, deseo que la canción nunca terminara. Es tan emotiva, tan íntima y etérea que mientras la escuchas, de alguna manera vives con esta canción en un vacío separado donde solo estás tú y tus sentimientos. Cada canción de este disco transmite un mensaje importante y relevante. La primera una dulce canción que habla de un amor único, natural e intenso que podemos sentir cuando estamos enamorados. Feel No Pain es irónicamente una canción para sentirse bien con un profundo mensaje detrás sobre la depresión, los malos tiempos económicos, la lucha por conseguir un trabajo, la procrastinación y la baja motivación. La vibra suave lo-fi de la misma puede hacer que ignores la letra y el profundo significado detrás de ella, una hermosa canción que habla del dolor que sentimos en diferentes momentos, como cuando despiden a una madre o un padre, el estribillo parece implorar a Dios por las personas que tienen una vida difícil y no quieren sonreír ante un trabajo estable. Un ejemplo típico de una canción relajante de medio tiempo de Sade que infunde ternura, paz y amor. La forma en que canta y particularmente su “whyy, whyy, whyy” es un placer tan grande para mis oídos, que mis ojos se cierran y mi mente comienza a imaginar cosas irreales. 

I Couldn't Love You More sirve como una continuación de No Ordinary Love, una secuela de la misma, con la artista romantizando su relación cada vez más y enamorándose más profundamente del que ella llama chico, una declaración de amor y devoción a su pareja. Sade expresa que, aunque el tiempo se agotara, no podría amar a su pareja más de lo que lo hace ahora. Insta a su pareja a acompañarla y ser su único amor, y declara que no querría acostarse ni amar con nadie más. Sade contempla que, incluso si todos en el mundo le dieran lo que quiere, no querría más de lo que tiene con su pareja, le pide que se quede tal como está, enfatizando que no podría amarlo más de lo que ya lo ama. El amor es un sentimiento muy hermoso, te lo dice ella misma. Like a Tattoo tiene un tono más oscuro, cuenta una historia real basada en la historia que le contó un desconocido que Sade conoció hace años una noche en un bar de Nueva York, en esa historia refleja su culpa y vergüenza por haber cometido un crimen de guerra. A lo largo de la canción, nos enteramos de que disparó y mató a un hombre que tenía las manos en alto en señal de rendición, un acto que también pudo haber presenciado una mujer importante en la vida de la víctima. Pero a pesar del atroz acto del soldado, la intensidad de su arrepentimiento solo es posible gracias a la empatía presente en su corazón: su amor por la humanidad. Al principio, no entendía el significado de la canción y no presté atención a los detalles, pero después de leer la letra y profundizar en ella, poco a poco me fue gustando, y puedo decir que es de mis favoritas. Una balada acústica, triste y conmovedora, compuesta, básicamente, por dos acordes. 

La siguiente canción, Kiss of Life mezcla toda esta atmósfera triste, es muy cálida, melódica y primaveral, incluso alegre de alguna manera. Todas las asociaciones se dan con el comienzo de la primavera, cuando los pájaros cantan, la nieve se derrite y las primeras flores aparecen bajo el sol brillante. Esta canción captura esos preciosos sentimientos de una relación, la intensidad y el amor que se siente en cada verso. Es tan humano y natural. Lo que escuchas es como se escucha a una mujer realmente enamorada, y con esos matices de jazz, hermano, déjame sola en el sistema solar, quiero llorar. Cherish the day es indiscutiblemente un tesoro de Sade, tan atmosférica, tan llena de desesperación y soledad. Una canción de amor más, suave y conmovedora, para su colección definitiva y aunque el 99% de su material son canciones de amor conmovedoras, está por encima de todas las demas. Me encantan particularmente los sintetizadores de fondo, esto es exactamente lo que hace que la canción sea tan buena, al escucharla, uno puede sentirla volar hacia el cielo. Algo similar se muestra en el video de la canción. Ella, de pie en la cima de un rascacielos, en blanco y negro, con el aspecto de una diosa. Me encanta Pearls, quizás es la más significativa del álbum. Trata sobre la lucha de las personas nacidas en lugares donde es difícil vivir, poniendo como ejemplo a una mujer de Somalia que lucha por ganarse la vida para ella y su hija. Una voz increíble, especialmente cuando Sade grita “¡Aleluya!”. Además, en el estribillo, “the stone in my heart” refleja la empatía que Sade siente por personas como ella. Bullet Proof Soul es el final de la historia de amor que se extiende a lo largo del álbum. Tras ser abandonada por su amado y no ser correspondida, sigue adelante con más fuerza que nunca, describiendo que llegó como un “cordero” y que “tiene la intención de partir como un león”. El increíble saxofón, la voz y la letra de esta canción la convierten en una pieza destacada del LP. Sade explora las profundidades del amor y el dolor que a menudo lo acompaña, la letra incide en una relación donde el amor profundo y verdadero no fue suficiente para mantener la unión, resaltando la decepción y el desamor. Sade usa metáforas relacionadas con la violencia y la protección para expresar la intensidad de los sentimientos involucrados y la necesidad de fortaleza emocional ante el desamor. El outro instrumental Mermaid, es una gran canción soul de piano y saxofón, nos deja pensando en las historias que hemos escuchado a lo largo del álbum, como el outro de una serie de televisión, se siente frío y distante, no sé cómo describirlo, es increíble.

Disfrutar de este maravilloso disco te transporta a sensaciones muy placenteras. Se puede sentir una asombrosa transformación de estados de ánimo: notas de tristeza, seguidas de un elegante coro, transmiten una gran emoción. Literalmente te reconforta. Supongo que eso es lo que se suele llamar "música soul", quizá no puramente soul en términos musicales, sino desde el punto de vista de las emociones que se pueden experimentar. Sade es una artista única con una personalidad única y una voz excepcional. Cada disco de ella es genial. Quizás "Love Deluxe" sea demasiado bueno, demasiado hermoso, demasiado profundo, demasiado íntimo. Todo lo que uno puede sentir estando enamorado se encuentra aquí, transformado en música. Unas palabras sobre la música en sí: el disco es una maravillosa mezcla de pop, soul y jazz, donde cada sonido encaja con otro como un rompecabezas. Los arreglos son geniales: líneas de guitarra increíbles, sintetizadores atmosféricos y ese saxofón que te deja sin aliento. Sin contar las voces y el ritmo sensual y bailable. Este álbum es perfecto para escuchar en invierno en un ambiente hogareño con una botella de vino y tu novia/mujer, porque es tan romántico y elevado que me faltan las palabras para describir esta sensación. Siendo sincero, no hay tantos discos que se te queden grabados en la cabeza como este. ¿Por qué? Es muy sencillo. Cualquiera sabe tocar la guitarra, pero pocos pueden presentar una canción de tal manera que luego pienses en ella todo el tiempo y la guardes en la cabeza como si fuera un milagro. Espero que me entiendas. Todo gracias a su talento. El talento de una chica nigeriana para cantar.

 

P.D.- Se sabe que Sade conoció a un hombre durante su gira por España, que pareció cambiarle la vida. Pero rompieron tiempo después, dejando una profunda huella en sus corazones. Nadie dudaría, y yo mismo estoy convencido, de que este hecho definitivamente se reflejó en sus canciones. ¿Cómo no? El amor es tan fuerte como para cambiar la vida de las personas y manipularlas de cualquier manera posible. ¿Y qué tan fuerte debe ser para inspirar a alguien a crear música tan emotiva?


viernes, 18 de abril de 2025

Disco de la semana 426: Cave World - The Viagra Boys



Cave World ("Mundo Caverna") es el tercer álbum de estudio de la banda sueca de post-punk Viagra Boys, publicado en 2022 y escrito principalmente durante el confinamiento del COVID-19, lo que influyó en el contenido de las letras del disco, que en varias ocasiones hacen referencia de manera satírica a las teorías "conspiranoicas" sobre la desinformación y la desconfianza respecto a las vacunas, pero más allá de esa lógica conexión con el momento particular en el que se gestaron las canciones del disco, la alocada temática de Cave World va mucho más allá, remontando su crítica social hasta incluso la era paleolítica y el origen del ser humano, representado por los hombres de las cavernas.

Musicalmente, Cave World es una poderosa mezcla de estilos musicales en la que predominan el punk y el post-punk, pero en la que hay espacio también para el krautrock, la new wave, la electrónica y el techno (especialmente en los tres breves interludios instrumentales del disco: "Cave Hole", "Globe Earth" y "Human Error", a cargo del productor DJ Haydn. Todo comienza a explotar con Baby Criminal, un arranque de energía arrolladora y acelerado ritmo, con una actitud de lo más "hooliganesca" en la voz de Sebastian Murphy, que recuerda a algunos temas de los mejores Grinderman.

Tras "Cave Hole", el primero de los breves interludios instrumentales, y pieza de sonido oscuro y atmósfera inquietante que nos traslada al mundo primitivo y a la caverna de Platón, el concepto del disco se convierte en brillante single en "Troglodyte", un tema de aroma punk e instrumentación electrónica que recuerda y homenajea a los mismísimos Devo, que profundiza en el conspiracionismo y la paranoia mientras los sintetizadores y elementos electrónicos crean una atmósfera única.

Sin tiempo para la pausa, en "Punk Rock Loser" escupen un nuevo hit, en esta ocasión inspirándose en la música y la actitud punk de Iggy Pop, en una canción de base rítmica poderosa, en la que el bajo domina y destaca magistralmente. No menos impactante es "The Cognitive Trade-Off Hypothesis", probablemente el tema más arriesgado del disco, con su peculiar falsete y su sólido sonido post-punk.

Tras este brillante tramo de pelotazos post-punk, el segundo de los temas instrumentales ("Globe Earth") abre un tramo marcado por el ritmo techno pesado e hipnótico de "Ain't no Thief", plagado de sintetizadores y de influencias de Sleaford Mods, cuyo vocalista Jason Williamson aparece como invitado especial en "Big Boy", una curiosa mezcla de hip hop con toques de enloquecido blues, en cuya letra satirizan la fragilidad de la autoestima masculina, antes de cerrar este tramo más electrónico con la inspirada ADD, canción de aparente minimalismo sonoro pero de adictivo ritmo al más puro estilo Gorillaz, y una humorística reflexión sobre la hiperactividad y la distracción en la era moderna en las letras.

El tercer tema instrumental ("Human Error") actúa como breve preámbulo al potente cierre punk del disco con "Return to Monke", una pieza intensa y enfermiza que combina la rabia del punk con abrasivos saxos. En la letra abogan por el regreso a una versión más primitiva de la humanidad, renunciando a los peligros de la evolución y a la amenaza de la tecnología moderna, cerrando de manera brillante un disco que termina como empezó, con las espadas punk en alto y toda la intensidad necesaria para ponerle un broche de oro a una obra grande, que por el momento es el mejor disco de unos Viagra Boys en estado de gracia troglodita y cavernaria.

viernes, 11 de abril de 2025

Disco de la semana 425: Argus - Wishbone Ash

 

Argus, Wishbone Ash


     Para la recomendación de esta semana traemos bajo el brazo un álbum considerado considerado el punto culminante en la carrera de la banda británica Wishbone Ash: Argus, el cual presenta una mezcla perfecta de hard rock, folk y rock progresivo, con complejas estructuras y unas armonías, tanto vocales como con las guitarras, impresionantes. Las twin guitars, o guitarras dobles, de Andy Powell y Ted Turner es una de las características más destacadas del disco, y la interpretación de ambos en este trabajo es sencillamente maravilloso.

El álbum es grabado, entre enero y marzo de 1972, en los De Lane Lea Studios de Londres, bajo la produccin del productor inglés Derek Lawrence, y publicado el 28 de abril de 1972. Fue uno de sus trabajos más exitosos, llegando a alcanzar el puesto número 3 en las listas de ventas del Reino Unido. Aunque el disco no fue concebido como un álbum conceptual, se inspiró en la mitología griega, y combina rock progresivo, folk y hard rock. Otro de su puntos fuertes es su evolución en las guitarras, pues dieron un gran paso en la evolución de la armonización de las guitarras solistas, algo que ya hacían también Allman Brothers band, y que posteriormente adoptarían bandas como Thin Lizzy, Judas Priest o Iron Maiden ntre otras muchas bandas. Si bien el productor de sonido fue Derek Lawrence, el ingeniero de sonido fue el gran Martin Birch

La portada del álbum fue diseñada por Storm Thorgerson y Aubrey "Po" Powell, de la famosa empresa que se dedicaba a hacer portadas Hipgnosis. dicha portada presenta a un guerrero contemplando un paisaje en las Gargantas del Verdon, en la provenza francesa.  El traje del guerrero se inspiró en el vestuario de la película "Los demonios" de Ken Russell (1971) . Thorgerson y Powell pretendían que el guerrero empuñara una espada además de una lanza, y habían alquilado la espada utilizada en la película "Macbeth" de Roman Polanski , también de 1971. Sin embargo, mientras seleccionaban la ubicación para la sesión, les robaron la espada, por lo que las fotografías se tomaron sin ella. La persona vestida como el guerrero era un asistente de Hipgnosis, Bruce AtkinsSe rumorea que el guerrero de la portada fue la principal inspiración para el diseño del personaje de Darth Vader en "Star Wars"Andy Powell reconoció este rumor, aunque él mismo nunca confirmó su veracidad. Esta portada también hizo que Jimmy Page, de Led Zeppelin, contactara con Hipgnosis y les pidiera que diseñaran la portada de su álbum de 1973, "Houses of the Holy".

La edición original de Argus consta de siete canciones, todas compuestas por la banda y con las letras escritas principalmente por el bajista y vocalista principal de la banda, Martin Turner. Comienza el álbum con Time Was, con una introducción acústica suave y melancólica, liderada por las guitarras de Andy Powell y Ted Turner. A medida que avanza, evoluciona hacia un segmento más eléctrico y enérgico. Las armonías vocales y los solos de guitarra destacan y marcan el estilo característico de "guitarras gemelas". La letra, que contiene un aire nostálgico, reflexiona sobre el paso del tiempo, la pérdida de la juventud y la fugacidad de la vida. Le sigue Sometime World, un introspectivo tema que aborda reflexiones sobre escapar de estecaótico y decepcionante mundo. Ojo al sólo de guitarra de Andy Powell aquí, para enmarcar. Le sigue uno de los grandes éxitos del grupo, Blowin' Free, que trata sobre Annalena Nordstrom, la novia sueca del bajista Martin Turner de su anterior época con el grupo Empty Vessels. Andy Powell afirmaba que la canción fue una de las pimeras que escriberon, más concretamente en 1971 en el Whisky A Go-Go de Sunset. Sobre como se le ocurrió el riff de guitarra a Powell, éste afirmó: "Estábamos de gira con The Who y me gustaron algunas de las progresiones de acordes que estaba haciendo Pete Townshend, así que todo lo que hice fue tomar algunas de sus ideas que se le ocurrieron y acelerarlas". Las armonías entre Martin Turner y Andy Powell brillan aquí, y el doble solo de guitarra es un ejemplo perfecto del estilo que influiría a bandas como Iron Maiden y Thin Lizzy. 



La cara B abre con The King Will Come. Martin Turner se inspiró para esta canción investigando y estudiando la Biblia. Trata sobre la idea cristiana de que, cuando el mundo se acabe, quienes crean se salvarán. En una entrevista Powell explicaba: "LA gente se identifica mucho con esta canción. No puedo decir que seamos una banda praticularmente cristiana, pero hay una sensación en ella, de que es un sentimiento, un sentimiento universal. Es bastante fuerte para la época de la que proviene. Y a todos les encanta la introducción; sencillamente pone a todo el mundo de buen humor". Leaf and Stream es una tranquila y delicada balada escrita por el baterista Steve Upton. La canción tiene un enfoque más folk con unas armoníasmuy suaves, lo que nos da un respiro frente a los temas más intensos del álbum. Las letras parecen hablarnos de la simplicidad y la belleza del mundo natural. Warrior es una de las piezas con una aire épico y mitológico. Con un aire sombrío y marcial, las guitarras son capaces de crear una sensación de conflicto y lucha, y la voz de Turner nos transite poder y fuerza por un lado, y vulnerabiilidad por otro lado. La canción está considerada como parte de la trilogía implícita del lado B del disco, junto con "The King Will Come" y Throw Down the Sword", aunque la banda nunca confirmó que este álbum fuera conceptual. Cierra la cara B, y por tanto este álbum, Throw Down the Sword, que tiene una letra que habla sobre las consecuencias de una sangrienta batalla. Colabora en los teclados en esa canción John Tout, que fue teclista de la banda de rock progresivo Renaissance durante la década de los años 70. La canción, como buen cierre, es un mensaje de redención, un canto a la paz, de dejar artrá la violencia y dejar sanar las heridas.

Wishbone Ash incursionó de manera muy notable en las principales corrientes del rock británico de principios de los años 70, pero al contrario que otras bandas como Yes, Pink Floyd, Led Zeppelin o Ten Years After, que se forjaron un arcado sello de identidad, nunca se decidió por un estilo o corriente concreta. En Argus la banda utilizó una amalgama única de todos esos estilos para crear su propio sonido. Esto sumado a los arreglos, con sus dos guitarristas principales y los espacios abiertos para improvisar, hace que el álbum destaque sobremanera, siendo el trabajo que mejor ha sido capaz de expresar la compleja visión del grupo. Y para terminar, no quiero dejar pasar una frase del bajista y fundador de Iron Maiden, Steve Harris, que para mí expresa claramente la importancia que ha tenido Wishbone Ash en el mundo de la música: "Creo que si alguien quiere entender los primeros trabajos de Maiden, en particular las guitarras de armonía, todo lo que tiene que hacer es escuchar el álbum Argus de Wishbone Ash ".

viernes, 4 de abril de 2025

Disco de la semana 424.- Sound of Silver - LCD Soundsystem

 


Sound of Silver es un LP que muchos declaran como el mejor de la carrera de LCD Soundsystems, es un paso esencial para el grupo, no solo porque ayudó a solidificar su importancia con canciones escritas conscientemente agudas como New York, I Love You But You're Bringing Me Down, sino también por el territorio que pisa en el género de la música dance. Es atrevido, pero aún sigue siendo bailable, maravilloso y agradable a los sentidos, un rasgo que se trasladó bien de su primer disco y algo que ha mejorado enormemente en este proyecto. James Murphy tiene una relación realmente interesante con Nueva York, algo que se aprecia plenamente en este álbum. Por un lado, la ama, ha pasado toda su vida como artista profesional en esta ciudad y se enorgullece de ella, pero no ignora sus problemas, es muy consciente de los defectos de la Gran Manzana y los aborda con ingeniosos golpes a lo largo del álbum. Además de sus opiniones personales sobre la ciudad, la influencia de su escena musical ha inspirado la mayoría de los sonidos de este disco, es una mezcla de Talking Heads, excéntricos y complejos, una televisión sinuosa y emotiva, y el ingenio sardónico de Velvet Underground, además su sonido también está fuertemente influenciado por las obras de David Bowie, Kraftwerk y Can, llevando su música a tener lo que en el papel suena como un desastre, pero en la ejecución es la mejor fusión de punk y música de baile que he escuchado jamás. Cada canción de Sound of Silver es una sólida mezcla de instrumentación orgánica e inorgánica. Toda la instrumentación orgánica, la batería, la guitarra y la percusión, es nítida y contundente, en contraste con la estructura sintética que sustenta este álbum. El uso que Murphy y compañía hacen de sintetizadores graves y groove en temas como Someone Great y Get Innocuous! es magistral, creando así algunos de los temas más pegadizos de toda su carrera. Sin embargo, algunos de los mejores temas serían aquellos que utilizan estos dos elementos instrumentales con igual excelencia, como All My Friends, Us V Them, North American Scum y Watch the Tapes. A pesar de que Sound of Silver revela una clara evolución, el álbum aún conserva la irónica arrogancia y los diálogos ingeniosos del debut. El proyecto se lanzó con "North American Scum", una diatriba paranoica sobre el antiimperialismo y un reconocimiento poco entusiasta de su validez, todo con el telón de fondo de unas swashes dance brutales. Lo que convierte a este álbum en un auténtico clásico es la sutil forma en que sumerge al oyente en la escena antes de desatar inesperadamente una avalancha emocional. La canción principal inserta un estribillo repetido, bastante embarazoso, en una obra bailable de hermosa factura, en la que es evidente que el Sr. Murphy ha encontrado nuevos trucos bajo la manga, envolviendo el ritmo en capas cada vez más intrincadas, rematando todo con una fantasía flotante de xilófono para un momento de puro éxtasis.

 

El tema inicial, Get Innocuous! se empapa de The Robots de Kraftwerk en metal líquido durante unos buenos minutos antes de asestar un desgarrador golpe de paranoia con una voz inquietante, casi indescifrable, sobre los horrores de aferrarse a una vida normal. El tema es puro fuego con su inspirada mezcla de percusión electrónica y orgánica, y cuando la vocalista invitada me arrastra a su rítmico canto "You-can-normalize, don't it make you feel alive", pierdo toda sensibilidad. Su ímpetu es tan abrumador que una nota de cuerda, lentamente deformada y escalofriantemente tensa, que da inicio a la canción, se desbarata por completo en un momento de caos pasmoso. Time to Get Away por su parte, resopla y gruñe al ritmo de un ritmo descarado que serpentea hacia una utopía de sintetizadores distorsionados, con salvajes aullidos principescos, es Murphy en modo cool disfrutando de un buen cencerro, a la vez funky e irremediablemente blanco pero orgulloso de ser ambas cosas, las partes 'hoo hoo hoo' son quizás un poco exageradas por su parte, pero siguen siendo algo icónicas de todos modos. North American Scum es unasátira electrizante que no sabe exactamente qué está satirizando pero apropiadamente no le importa, porque, verás, es transparentemente música para cantar y/o citar mientras estás borracho. Trata menos sobre los norteamericanos de verdad y más sobre un tipo que pensó que sería divertido escribir una canción sobre ellos, pero eso trivializaría injustamente el humor de la canción. Y bueno, cualquiera que haya intentado vivir en otro lugar que no sea el Bronx, Queens y (uf) Weehawken puede identificarse con el grito de Murphy: "¡Nueva York es lo mejor si consigues que alguien pague el alquiler!". De hecho, al diablo con eso; cualquiera puede identificarse con un verso así. Porque somos humanos, y todos nos hemos sentido como James Murphy alguna vez, aunque no queramos admitirlo. O bueno, si es una afirmación un poco exagerada, al menos, todos hemos sentido algo de autodesprecio alguna vez. 

La brutalmente honesta Someone Great captura los sentimientos asociados con la pérdida de un ser querido. Es indietrónica clásica en su forma más genuinamente ligera y elegante, quizás al principio parezca desfasada par
a esta banda, pero finalmente se revela como una melodía notablemente conmovedora, manteniéndose contenida incluso cuando uno esperaría que subiera de volumen en cualquier momento. Piensa en las cosas que crean ese ritmo: un pad de sintetizador brillante que aparece y desaparece gradualmente, un pulso de bombo esquelético, chispas de descargas eléctricas en el fondo, apenas ocho notas de sintetizador de bajo y un sintetizador chiptune brillante que parece extrañamente contenido... como si fuera triste.Un músico menos experimentado probablemente habría intentado extraer una melodía diferente del glockenspiel, pero Murphy, acertadamente, permite que solo duplique su voz, porque (1) el contraste tímbrico es lo que hace que la mezcla sea tan intrigante, y (2) demasiada melodía parecería demasiado caótica e irreal. Murphy no es un hombre sentimental, así que las palabras pueden resultar a veces extrañas, pero entre líneas hay una honestidad brutal: «A decir verdad, lo vi venir», «La voz del otro lado», «Lo peor es el buen tiempo», «Y sigue viniendo... hasta que se detiene». De nuevo, unidireccional, como el mejor minimalismo. Pero ahora es un réquiem melancólico. Perverso, ¿verdad?

 

Un frenético loop de piano impulsa la arrolladora All My Friends, la pieza central del álbum, que transporta al oyente a través de los vericuetos de la vida. Incluso me cuesta escribir sobre ello, porque he considerado esta canción como una de mis canciones más queridas a lo largo de los años, y honestamente no puedo pensar en ninguna otra canción que suene como ella y al mismo tiempo intente llegar tan lejos . ¿Cómo no podría ser una canción perfecta? ¿No es un conjunto de estética puramente destilada cuyo objetivo es provocar pánico existencial? No lleva ni ocho minutos hacerlo, aunque dada la paciencia que parece mostrar en la forma en que se construye, parece que crear ese gran muro de sonido necesitaría doce o quince minutos. El puente a los cinco minutos es conmovedor, es el momento en que la batería empieza a moverse erráticamente, a tambalearse aquí y allá, como si la forma de caminar se hubiera visto afectada por una fuerza puramente psicológica. La instrumentación se construye lentamente con una línea de bajo melódica que enorgullecería a New Order y una percusión estelar que evoca la magia de "Teenage Wildlife" de Bowie, antes de preparar el terreno para esta sentida historia sobre el dolor de la vejez. La historia comienza con una inocente nostalgia, pero gradualmente evoluciona hacia una concesión frenética de lo rápido que se nos escapa la vida. Se proyecta una amplia gama emocional, con saludables dosis de alegría, abatimiento, desesperación, desafío, majestuosidad, reminiscencias cautivadoras y autodesprecio que se agitan en el caldero. Cinco años dedicados a seguir con el plan se reflejan en otros cinco más para reconectar con amigos, que rápidamente se convierten en diez años de abandono "tan rápido como puedas" y una crisis de la mediana edad que propicia un viaje de tres meses a Francia. Cada letra aquí es un éxito, concisa y visceral como los agudos lamentos de la guitarra que intensifican la atmósfera. No hay catarsis, y las exasperadas súplicas de "si pudiera ver a todos mis amigos esta noche" quedan sin resolver mientras la percusión locomotora se detiene lentamente. Y ese, amigos míos, es un momento que se puede describir mejor con la visión de mi mandíbula abierta que con cualquier palabra que pudiera emanar de él. ¡Guau!. ) Us v Them, ocho minutos de ritmo al estilo Talking Heads con un cencerro saludable que va ganando impulso progresivamente y pasando por tres o cuatro ganchos diferentes en el proceso, todos pasando de sólidos a absolutamente maravillosos. Watch the Tapes es otro divertido corte dance-punk con una buena línea de bajo, que quizás no habría mantenido el interés si hubiera sido más largo, pero afortunadamente sigue siendo el tema más corto del álbum y New York, I Love You but You're Bringing Me Down es la única canción "rock" del álbum, una nana con aires de vals y preocupación dedicada al pequeño pueblo natal de Murphy ("sigues siendo la única piscina donde me ahogaría con gusto") que se vuelve un poco demasiado desordenada para su propio bien hacia el clímax, pero funciona como una parada final bastante melancólica. Mientras se revuelca en sus críticas con una vulnerabilidad vocal cautivadora, es evidente que ama la ciudad, ya que "sigue siendo el único estanque donde [él] se ahogaría felizmente". A medida que la desesperación crece en su voz, también lo hace el fondo instrumental, que culmina en un solo de guitarra abrasador que estalla con frustración y termina el álbum de manera épica: un momento de vigorización que te golpea el pecho, por así decirlo.


 

A medida que he envejecido, he descubierto que es mucho más difícil que la música nueva galvanice mis emociones hasta un punto de fiebre incontrolable. Por eso, ahora, a mis 52 años, aprecio mucho más esos momentos. A los críticos generalmente se les enseña a esforzarse por ofrecer una valoración imparcial, pero que me aspen si no me deleita hasta la médula que un álbum pueda generar tal renacimiento de fanatismo adolescente, ciego y desmesurado, que me vuelve irremediablemente incapaz de mostrar un atisbo de objetividad. «El sonido de la plata me habla, te hace sentir como un adolescente. Hasta que recuerdas los sentimientos de un adolescente emocional de verdad». Lo siento, James, no hace falta que lo pienses dos veces.