Mostrando entradas con la etiqueta Blur. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Blur. Mostrar todas las entradas

miércoles, 29 de enero de 2025

The Magic Whip - La varita mágica del #MesBlur (Mes Blur)



"The Magic Whip" (2015), el octavo álbum de estudio de Blur, fue un inesperado regreso fruto de un repentino cambio de agenda en la breve gira en la que la banda, reunida de nuevo doce años después de "Think Tank" (en el que Graham Coxon ya había estado ausente), estaba llevando a cabo con la única intención de desempolvar viejos éxitos y sin nuevo material en mente. El grupo llegó a Tokyo para tocar en el festival Tokyo Rocks Music, pero el evento se canceló repentina e inexplicablemente, y los cuatro músicos se encontraron "atrapados" y con cinco días por delante hasta el siguiente concierto. Para distraerse y hacer algo útil con aquel tiempo, se encerraron en los Avon Studios de la ciudad para ensayar, improvisar y ver que salía de aquello. Y lo que salió, casi por arte de magia y como si hubieran agitado la varita de la inspiración y del título, fue un buen puñado de inacabadas pero prometedoras ideas y melodías, en bocetos de lo que podían ser hasta 15 canciones diferentes.

Damon Albarn no estaba seguro de si podrían publicar aquella música alguna vez, porque no había podido escribir allí las letras, y consideraba que la inspiración adecuada no le vendría igual estando en otra parte del mundo, así que dio por hecho que aquellas ideas acabarían para siempre en un cajón. Sin embargo, y mientras Albarn salía de gira para promocionar su disco en solitario "Everyday Robots" (2014), Graham Coxon retomó aquellas grabaciones de Hong Kong, y empezó a trabajar seriamente en aquellos bocetos con la ayuda de Stephen Street, productor de los discos míticos de la banda en los noventa. Cuando el material fue tomando cuerpo, Coxon invitó a Alex James y Dave Rowntree para perfeccionar las partes de bajo y batería, y con el trabajo casi terminado, le mostró los resultados a Albarn, que tras terminar su gira en solitario por Australia, se marchó a Hong Kong para escribir las letras.

Pese a la particularidad "local" de un disco gestado e inspirado en Japón, inevitablemente y por la cercanía temporal con su disco en solitario Everyday Robots (2014), las canciones de The Magic Whip comparten con aquel la temática y el sentimiento de alienación en un mundo sobrepoblado e impersonal, desde la perspectiva de un viajero distante que comparte sus vivencias con asombro y desesperación. Esa es la temática de canciones como "Lonesome Street", que abre el disco y para la que se rodó un video promocional en el que un japonés baila en soledad delante de un telón, hasta que hacia el final de la canción el telón cae y aparece una multitud de personas bailando con el la misma coreografía, en un impactante efecto visual y emocional, fruto del primer golpe asestado por la varita mágica de unos Blur que regresan en estado de gracia.

Le siguen "New World Towers" , un tema más pausado sobre la sensación que produce observar los letreros de neón de las junglas de rascacielos de las ciudades, que conceptual y musicalmente habría encajado como un guante en "Everyday Robots", y la más animada "Go out", el primero de los temas que desarrollaron en Japón, que explora el sentimiento de soledad y abandono del metafórico viajero en los bares nocturnos de la ciudad, y que musicalmente es un intento de sonar a los Blur pegadizos y ligeros de los noventa, pero que queda algo descafeinado.

La sombra de David Bowie, siempre presente en algún tema de los discos de Blur, es alargada en "Thought I was a Spaceman", con algún que otro escarceo electrónico y con Graham Coxon asumiendo el rol vocal. En un disco sobre la soledad y la alienación que paradójicamente experimenta un viajero al ver la sobrepoblación y la impersonalidad de los lugares que visita, la referencia / homenaje al astronauta de "Space Oddity" era seguramente obligada, pero resulta menos inspirada y brillante que el "Strange News from another Star" del disco Blur (1997) con el que comparte halo y temática. De la más o menos conseguida ensoñación nos saca con fuerza "I Broadcast", que obedece también a la pauta de incluir un tema más cercano al punk en cada uno de sus trabajos, aunque aquí el tono es más rebajado y melódico que en temas como "Bank Holiday", "Song 2" o "Crazy Beat" con los que podría tener cierto parentesco sonoro.

Las referencias al mundo oriental afloran en temas como "My Terracota Heart", "PyongYang" "Ghost Ship" (un barco fantasma que temáticamente podría haber atracado en la "Isla de Plástico" de Gorillaz), aterciopeladas baladas de suave instrumentación y gran belleza melódica, en contrapunto con la angustia de temas como "There are too many of us", la pieza central del disco en cuanto al concepto en el que este se basa, inspirada en la obra maestra de ciencia ficción "Fahrenheit 451" (1953) de Ray Bradbury, y en una reflexión de su protagonista: "Somos demasiados. Somos miles de millones y eso es demasiado. Nadie conoce a nadie". En mitad de esa angustia y desencanto, queda tiempo para la alegría y la esperanza en la amable y divertida "Ong Ong", y para la pausa y la reflexión de "Mirrorball", brillante tema de cierre que destaca por la elegante guitarra de Coxon, que la dota de la atmósfera más descaradamente japonesa del álbum.

"The Magic Whip" recibió grandes elogios por parte de la crítica musical en el momento de su lanzamiento, alabando la calidad de los temas de un disco que muchos ya no esperaban, aunque viéndolo en perspectiva y en comparación con el posterior y excelso álbum "The Ballad of Darren" (2023), en el que asumen su madurez y la aprovechan en el proceso creativo, hoy se noten más las costuras auto-paródicas de alguno de los temas de un disco creado en circunstancias inesperadas por un grupo de músicos que resultan más convincentes cuando miran al presente y no pretenden recrear el pasado. Es mejor aceptarse como lo que uno es, en lugar de pretender que una varita mágica te devuelva el brillo superfluo de antaño. Y, sin embargo, en algunos momentos de "The Magic Whip" el hechizo sigue hoy funcionando, haciéndonos sonreír sin darnos cuenta al escuchar sus mejores temas y sus guiños a otros tiempos. Es lo que tiene la magia, que consigue que, a veces, suceda lo inexplicable y lo inesperado, como una cancelación de un festival, que acabó devolviéndonos a los que nunca debieron irse. 

domingo, 26 de enero de 2025

Blur - Think Tank (Mes Blur)

 

Think Tank, Blur


     Think Tank es el séptimo álbum de estudio de la banda inglesa Blur. Fue grabado entre noviembre de 2011 y moviembre de 2002 bajo la producción de Ben Hiller, Norman Cock, William Orbit y del propio grupo, y publicado el 5 de mayo de 2003 por el sello discográfico parlophone Records. Continuando con las construcciones de estudio basadas en improvisaciones del álbum anterior del grupo, 13 (1999), el álbum se expandió en el uso de bucles rítmicos muestreados y sonidos electrónicos pesados y melancólicos. El disco también contiene influencias de la música de baileel hip hopel dubel jazz y la música africana. el disco supuso toda una experimentación sobre los crecientes intereses musicales de Damon Albarn.

Las sesiones de grabación comenzaron en noviembre de 2001, teniendo lugar en Londres, Marruecos y Devon (Inglaterra), y terminaron un año después. El productor principal del álbum fue Ben Hillier, y contó con la producción adicional de Norman Cook (Fatboy Slim) y William Orbit. Al comienzo de las sesiones, el guitarrista Graham Coxon había estado en rehabilitación por alcoholismo, por lo que no estuvo presente. Inicialmente sin saber cuánto tiempo Coxon estaría en rehabilitación, Albarn, James y Rowntree decidieron comenzar a trabajar en el estudio sin Coxon. Después de reincorporarse, las relaciones entre Coxon y los otros miembros se volvieron tensas, lo que provocó que Coxon abandonara la banda, dejando poco de su presencia en el álbum terminado. Think Tank está considerado como un álbum conceptual suelto. Albarn eraun declarado un pacifista, y se había pronunciado en contra de la invasión de Afganistán y, después de que las naciones occidentales amenazaran con invadir Irak, participó en las protestas generalizadas contra la guerraLos temas antibelicistas son recurrentes en el álbum, así como en las obras de arte asociadas y los videos promocionales.



Aunque Blur había estado asociado con el movimiento 
britpop, habían experimentado con diferentes estilos musicales más recientemente, comenzando con Blur (1997) que había sido influenciado por bandas de indie rock bajo la sugerencia del guitarrista Graham Coxon. Desde mediados hasta finales de la década de 1990, los miembros de Blur habían estado trabajando en otros proyectos, además de Blur: Albarn había co-creado Gorillaz, una banda virtual, en 1998 con el artista de cómics Jamie Hewlett, a quien Albarn había conocido a través de Coxon. El debut de Gorillaz en 2001 fue un éxito financiero y recibió elogios de la crítica. Coxon había comenzado una carrera en solitario y a partir de 2001 había lanzado tres álbumes en solitario. Los diferentes intereses musicales de los miembros habían alienado a algunos de los miembros de la banda,  y Coxon junto con Alex James y Dave Rowntree, estaban ansiosos por un nuevo álbum, mientras que Albarn se mostraba más reacio.

Las sesiones de grabación para Think Tank comenzaron en noviembre de 2001 en el estudio de grabación de Albarn en Londres. Albarn, James y Rowntree habían acudido al estudio junto con Ben Hillier, quien explicó que al principio hubo cierta tensión entre los miembros del grupo. Coxon había estado luchando contra el alcoholismo y la depresión, y no pudo asistir a la sesión de grabación inicial debido a que estaba en rehabilitación. A pesar de la ausencia de Coxon, el resto de la banda decidió comenzar a grabar sin él. Estaba claro que durante la partida de Coxon, el sonido y la dirección musical no eran del gusto de Coxon, y ya no tenía un lugar justificable en la banda. Además, los profesionales de la salud le aconsejaron a Coxon que evitara salir de gira, lo que naturalmente lo dejaría en una posición más vulnerable mentalmente. Esto no fue bien recibido ni por la banda ni por su sello discográfico, debido a que las giras eran una parte importante de la promoción y venta de un disco.

A pesar de que Albarn declaró que originalmente quería volver a su sonido más comercial, Think Tank fue todo lo contraro, un álbum basado en el uso de bucles rítmicos muestreados y sonidos electrónicos pesados y melancólicos. Casi en su totalidad escrito por AlbarnThink Tank puso más énfasis en coros exuberantes, guitarra acústica simple, batería, bajo y una variedad de otros instrumentos. Think Tank estáconsiderado por la crítica como un álbum conceptual suelto. Albarn declaraba que era un álbum sobre "el amor y la política", afirmando que "obligaría a las personas a valorar lo que tienen. Y eso, con suerte, pagará dividendos y ayudará a cambiar el mundo a un lugar mejor. Ojalá. Toca la madera". Albarn también declaró que el álbum trataba sobre "qué se supone que debes hacer como artista aparte de expresar lo que sucede a tu alrededor". 



En cuanto al contenido del disco, vamos a encontrar temas como Ambulance, l
a canción que abre el álbum. comienza con un complejo ritmo de batería poco convencional que casi colapsa sobre sí mismo. A medida que un bajo bajo atronador entra en escena todo crece lentamente. La percusión africana distintiva se incorpora pausadamente al armónico del bajo, y entra entra la voz principal de Albarn En una entrevista de radio, Albarn habló sobre la composición de la canción, diciendo: "Trato de hacer muchas cosas una vez que tengo la melodía y la estructura de acordes. Trato de cantarla de una sola vez sin pensar demasiado en ella. Sale como una especie de canción parcialmente formada y a veces tienes suerte y sale casi perfecta y a veces es simplemente un desastre". Afirmó que se trataba de un caso de lo primero. James dijo que "Ambulance" fue "la primera canción que pensé, bueno, esto es Blur de nuevo. Como si estuviera en el lugar correcto otra vez. Supongo que las letras tienen algo que ver con eso, ya sabes, no tener nada que temer"; Out of time, definida como conmovedoramente encantadora, inteta capturar la esencia de una mezcla de sensaciones de belleza y temor. Dominan la voz sin adulterar de Albarn y la batería constante y simplista, y en el centro de la pista, un grupo de cuerda andaluz asoma la cabeza, al igual que una pandereta; Crazy beat, canción que según Albarn "comenzó de una manera muy diferente. Lo más cercano con lo que podría compararlo es con una versión realmente mala de Daft Punk. Así que nos cansamos de él y luego pusimos esa línea de guitarra descendente sobre él para darle un poco de golpe"... "Tenía una especie de voz loca como un vocoder, y la melodía estaba sobre una especie de ritmo realmente escurridizo y solo esta guitarra semitonal casi descendente. La melodía funcionó sobre ella y fue increíble porque no debería haber funcionado, otro pequeño momento mágico para nosotros"; Good song según Albarn  "Originalmente se llamaba 'De La Soul' en nuestra enorme lista de canciones, ideas a medio terminar. Se llamaba 'De La Soul', ya sabes, hasta el final. Y siempre pensé que era una buena canción y la llamé 'Good Song'. Me encanta eso, me encanta el tipo de intimidad y creo que todo el mundo jugó con delicadeza en ello, las melodías. Era una buena melodía"; On the way to the club fue descrita por Albarn como "una canción de resaca que escribimos de vez en cuando". Albarn también dijo que "definitivamente tiene un sonido muy personal. Alguien dijo que es una especie de Screamadelica revivida. Sí, es el tipo de buenas intenciones de las que participas en el jolgorio y luego la realidad de la misma"; Brothers and Sisters fue una de las últimas adiciones al álbum. según Albarn, la canción trataba sobre las drogas: "trataba demasiado abiertamente de una sola cosa. Era demasiado drogadicto, en cierto modo, lo cual es un poco extraño, porque la canción trata sobre las drogas, así que creo que nos esforzamos un poco más con ella y le dimos mucho más espacio, contrarrestado por la lista, y la lista estaba inspirada en la vida de JFK y su necesidad de tener 28 drogas todos los días de su presidencia solo para mantenerlo funcionando"; según Albarn, Caravan es "un tipo de canción que podrías tocar en cualquier lugar. Y quiero decir, recuerdo que lo terminamos y cuando todos se fueron a Londres, fui a Mali por un par de días porque Honest Jon todavía estaba trabajando con músicos y esas cosas. Estaba sentado en un bosque de mangos con un pavo salvaje y tenía un pequeño reproductor de CD y lo puse allí. Fue agradable ver a todo el mundo sentado colocándose. Fue bonito, porque la guitarra está muy, muy inspirada en Afel; una gran tradición maliense de guitarra de blues". Sweet Song, que estaba inspirada en Coxon

Podemos encontrar una pista oculta, "Me, White Noise" justo antes de la pista 1 en algunas copias de CD. La canción cuenta con la colaboración de Phil Daniels, quien apareció anteriormente en Parklife, en la voz. Es también una de las pocas canciones de Blur que contiene un improperio. El estuche del álbum contenía un logotipo de Aviso para Padres en algunas regiones, debido a que Brothers and sisters contenía muchas referencias a medicamentos.  

Think Tank es un álbum donde la experimentación hizo que Blur no sonara como Blur Está bien no sonar como uno mismo, es más, si algo tiene bueno el grupo es que su sonido ha sido evolutivo, si no más, desde The Great Escape, otra cosa es que no suene a nada. Tengo la sensación de que este disco nace fruto de una banda atrapada en medio de una idea inacabada. Albarn tenía una idea basada en sonidos electrónicos, y necesitaba a su lado a alguien como Coxon para acabar de darle forma. El problema es que Coxon ya no estaba y el resultado, para mí, es un álbum donde las canciones se suceden como si no tuvieran a dónde ir, y durante toda la ecucha el disco suena con repetitivos samples atrapados en un bucle sin fin.

miércoles, 22 de enero de 2025

Blur- 13 (Mes Blur)

 


Se han lanzado muchas críticas a este álbum y, en la mayoría de los casos, puedo entender exactamente de dónde vienen los insultos y las críticas: es pretencioso, turbio, confuso y deprimente ... y todas las demás cosas que se han dicho sobre él, sí, sí, sí, pero cuando estás un poco confundido y deprimido, ¿quién quiere estar cerca de un idiota incesantemente alegre que te dice que te animes? Buscamos el consuelo de los demás en nuestro dolor y nos deleitamos en nuestra propia angustia existencial hasta que nos sentimos bien y estamos listos para salir de ella. Me resulta difícil explicar por qué este álbum es mi elección como el mejor de todos los de Blur, no es exactamente pop, a pesar de algunas maravillas absolutas en ese aspecto, no tiene el tipo de eclecticismo arriesgado que marcó los dos LP anteriores de Blur ni el sabor irónicamente observacional de los Kinks de los años 90 que me atrajo de la banda en primer lugar. De hecho, es un poco desordenado en cuanto a tono, revoloteando entre canciones simples y melancólicas y rockeras completas sin importarle cómo suenan juntas y agregando un montón de interludios aún más inconexos. Además de eso, es un álbum que nada contracorriente durante aproximadamente la mitad de su duracion, y generalmente desconfío de ese tipo de cosas. Así que sí, acabo de pasar un párrafo siendo vagamente insultante hacia un álbum que estoy a punto de elogiar como uno de los mejores lanzamientos de su década. ¿Cómo es posible que un álbum con defectos tan obvios, que siempre repito de una forma u otra en otros contextos, vuelva a ser un álbum tan bueno en general?

 

Empezamos con Tender, una dulce y genuina canción sobre el amor, pero triste en el fondo de ese poderoso e icónico estribillo; “Oh my baby, oh why, oh why”, canta Graham, quien soñó con esa parte de la canción. La canción está totalmente dedicada a la exnovia de nuestro cantante, Damon, quien lo dejó recientemente y nos canta con amargura y arrepentimiento sobre esa situación que lo transformó para siempre como persona. Después de “13”, tenemos un Blur más maduro, sobrio y quizás electrónico, y con un legado que no necesita expandirse más, porque parece que al final de este álbum, lo han dicho todo. El chelo y las otras voces, la instrumentalización, todo en esta canción es hermoso, dulce, tierno, como el nombre de esta lo indica. Es probablemente una de las canciones sobre el amor más hermosas que existen, y si alguien pudiera describir esta canción con una sola palabra, sería “épica”. "Oh, Señor, tengo que encontrar / a alguien que pueda curar mi mente" en medio de esta simple, repetitiva y cálida canción gospel, especialmente con el estribillo, que debo haberme repetido a mí mismo miles de veces durante esos años: "Vamos, vamos, vamos / Superarlo / Vamos, vamos, vamos / El amor es lo mejor que tenemos / Estoy esperando que llegue ese sentimiento". A continuación llega Bugman, muy ruidosa, con guitarras que tenían un sonido muy sucio, casi suenan como aspiradoras, la letra es confusa, tal vez se pueda relacionar con el aislamiento y la tristeza que Damon estaba sufriendo de manera abstracta. Suena como si estuviéramos en una guerra, una guerra interna sobre lo que es bueno y lo que es malo. Después, el famoso hit Coffee and TV, que ha aparecido en varias películas, series y demás. Graham canta en esta canción como una bandera blanca ondeando ante los ojos de la prensa, porque trata sobre alguien que está cansado del Londres ruidoso y escandaloso, que no para de pedir explicaciones y hacer preguntas que obviamente, no quiere dar respuestas. Solo quiere un poco de descanso. Hay algo en las partes del principio y el final de esta canción que me atrapa cada vez que la escucho.  En Swamp Song, Graham vuelve a cantar, habla de la desesperación por querer sentirse bien de nuevo, de querer salir adelante y superar su situación, pero la desesperación nunca es buena y casi siempre te hace caer de nuevo al punto de partida. Más adelante, este álbum nos habla de la paciencia, que probablemente será tu mejor amiga hasta el día de tu muerte. El ambiente es difuso y la canción está fuertemente impulsada por la guitarra, y hay varias pistas de guitarra superpuestas allí, probablemente de manera experimental. Los tonos pop están, en su mayor parte, envueltos en la rareza de los sonidos de guitarra en otros lugares. 1992 es solo tristeza, una canción realmente profunda con algunas pistas bastante directas sobre esa relación explosiva que Damon tenía con la efusiva Justine Frischmann de Elastica, las guitarras en esta canción y los efectos de viento son únicos, casi perfectos, y crean una atmósfera de tristeza y desesperación irremediablemente realista; incluso te sientes parte de la ruptura que inspiró todo el álbum. Tiene paisajes sonoros muy buenos y efectos muy, muy dulces, elambiente está bien logrado, pero da la sensación de que se alarga demasiado.

 

BLUREMI llega para romper con esa atmósfera, con unos riffs punk y una melodía muy rápida, es confusa, y con esta canción te das cuenta de que este es un álbum realmente melancólico, que describe perfectamente las fases por las que pasamos cuando sufrimos una ruptura amorosa. Simple y agresiva, nos recuerda lo increíbles que son Blur cuando se dejan llevar, trayendo recuerdos tanto de "Popscene", su sencillo revolucionario, como del clásico "Song 2", comienza con un "spee-spee-duh-dee-duh-da-blah-blah" aleatorio y da paso a los riffs habituales de himno de rock que Graham adora usar. La mezcla de sonidos electrónicos y el ritmo rápido de la canción es un buen cambio considerando las dos canciones anteriores, y los sonidos experimentales finalmente... ¡tienen más sentido! Battle es la canción más desafiante del álbum, con casi 8 minutos de sonidos minimalistas, interrumpidos únicamente por el canto repetido de la única letra de la canción, "Battle, battle, battle, battle". Es larga, pero tiene suficiente variedad para no extenderse demasiado, y su ubicación justo en el medio del álbum ayuda a que no aburra al oyente demasiado pronto o parezca anticlimática cerca del final. Una buena compañía cuando estás tratando de luchar contra la depresión y actuar como si nada hubiera pasado,  una canción complicada pero hermosa como las demás, todo el álbum tiene diferentes tipos de belleza, y el desafío es descubrirlos. Mellow Song es probablemente la tercera canción más triste de este álbum, parece un sueño, un sueño donde estás perdido y no tienes nada más que a ti mismo y tu corazón roto, estás buscando ayuda, pero solo recibes silencio y más dudas. Tiene una melodía muy profunda, dulce, pero triste del todo, es como tierna, pero el personaje no tiene esperanza sobre la situación. La letra parece escrita por una persona que se volvió loca, sin esperanzas y con ganas de salir adelante; podríamos decir que habla de darse por vencido y sentirse perdido en un lugar donde nunca se puede encontrar el camino a casa. Trailer park tiene un ritmo más operístico, más electrónico, con algunos sintetizadores de fondo que lo ayudan, lo cual es un cambio agradable, pero el final parece un poco fuera de lugar, ya que es como un nuevo camino y luego desaparece de repente.


Caramel es la jodida obra maestra de este álbum, y quizás de Blur en general. Empezamos con una guitarra triste, profunda y tierna, poco a poco otros instrumentos hacen su aparición en esta obra de arte, últimamente dejan de lado las guitarras. La voz empieza a cantar con una línea impresionante pero depresiva que lo dice todo; "I've gotta get over", esta es la fase en la que te sientes tan triste al punto que no puedes levantarte de tu cama y hacer tu vida normal porque te sientes realmente desolado por todo; tu energía se agota. Te entregas y sucumbes a los recuerdos de ese pasado cruel, recordando con una dulzura sangrienta a esa persona que no supiste amar de la manera correcta. Es una canción dulce, como un caramelo pero de nuevo caótica en el estribillo (en el que no sabes exactamente lo que dice, salvo cuando Damon empieza a decir "love, love, love", de una forma tan angustiosa que te genera un nudo en la garganta), esta canción es tan desesperante como hermosa, porque explica a la perfección la angustia que sientes cuando gritas pidiendo ayuda y lo único que recibes es nada. Es perfecta. Trimm Trabb es otra de esas canciones impulsadas por la guitarra, pero comienza de manera normal... probablemente solo la continuación de lo que ha estado sucediendo hasta este momento, y luego comienza una canción muy agradable, otra obra maestra, sobre el arrepentimiento y la necesidad de querer volver al pasado y corregir todo lo que hiciste mal, pero también sobre querer dejar que todo fluya y resignarse a luchar contra la soledad. 
Otro de los clímax lo pone No Distance Left to Run, la segunda oda de Albarn al amor perdido que crea de manera muy efectiva un efecto que podría considerarse es cierre del álbum. Al igual que "Tender", la canción está profundamente arraigada en la tristeza, ayudada nuevamente por una voz hermosamente emotiva de Albarn, posiblemente su mejor versión. Pero donde "Tender" resulta deprimente por sus ideas de obligarse a uno mismo a no estar triste por perder el amor, No Distance Left To Run resulta esperanzadora, como si su protagonista hubiera seguido adelante, pero de una manera natural, dándose cuenta de que todo ese deseo de permanecer junto a su amor no puede hacer que "quiera suicidarse". Con su instrumentación sobria, solo la voz de Albarn y los estilos de guitarra blues de Coxon, considerablemente más básicos y anticuados que la locura que brota de sus dedos durante los 60 minutos anteriores. Es también una declaración musical de la banda, como si con cada dirección que han tomado en el álbum, realmente no les queda nada por hacer. Damon no se ha visto derrotado en absoluto por la depresión, pero acepta que todo con esa persona se ha acabado, como un adiós, un adiós desolador. Finalmente, Optigan 1 cierra el álbum, una vez más usando sintetizadores, tambores suaves que siguen de fondo y una campana que repica de fondo. Y el álbum termina.

 

Es un disco muy misterioso, con infinidad de facetas que uno tiene que ir descubriendo poco a poco. Muy cambiante, con letras a veces muy minimalistas pero en otras ocasiones, demasiado profundas y tristes del todo. Es precioso; probablemente uno de los discos más puros y bellos de toda la historia de la música. 13 habla de pérdida, resignación, depresión y de querer salir adelante. Éste demuestra que Damon es un ser humano con sentimientos, que decidió canalizar su dolor en el arte más bello que jamás hayamos conocido; la música. Es emotivo como la mierda, un disco que todos deberíamos escuchar al menos una vez.

domingo, 19 de enero de 2025

"Blur", el disco con el que dieron portazo al "Britpop" (Mes Blur)



Tras la forzada guerra mediática con Oasis, alimentada y exagerada por las discográficas tras la publicación de "(What's the Story) Morning Glory?" (1995) de los de Manchester y "The Great Escape" (1995) de Blur, estos últimos no estaban por la labor de seguir alimentando aquella maquinaria de marketing hasta quedar estancados en un estilo y una tendencia que habían tenido su momento de esplendor en la primera mitad de los noventa, pero que no daban mucho más de sí. A pesar de haber entregado el mejor disco del género ("Parklife", 1994), las superiores ventas de sus rivales les situaron a nivel mediático como los perdedores de aquella ficticia batalla, y era el momento de un cambio, y como hemos visto posteriormente en las carreras tanto de Damon Albarn como de Graham Coxon, lejos de suponer una dificultad o un contratiempo, ambos se han movido como peces en el agua a la hora de virar el rumbo y hacer cosas diferentes, entregando grandes obras que se alejaban de lo que habían hecho anteriormente.

"Blur" (1997), el quinto álbum de estudio de la banda, fue el segundo de esos cambios drásticos de timón, tras la ruptura que "Modern Life is Rubbish" (1993) supuso respecto al más bien insulso debut de "Leisure" (1991), y para la carrera de Albarn y compañía fue sin duda el más relevante, pues entregaron un disco a la altura de su glorioso "Parklife" pero, al mismo tiempo, totalmente innovador y diferente. Publicado el 10 de febrero de 1997, y fuertemente influenciado por la creciente corriente del rock alternativo estadounidense, y más en concreto del noise rock de bandas como Pavement o Sonic Youth, supuso también un cambio en la manera en la que Damon Albarn enfocó las letras de las canciones, alejándose de las descripciones irónicas de personajes ficticios, y explorando en su lugar terrenos más personales e introspectivos. Por último, y no menos importante, el objetivo dejó de ser encontrar la fórmula mágica que les permitiera facturar grandes hits, y paradójicamente, encontraron el éxito en el camino que tomaron para alejarse de la presión que les suponía.

Un buen ejemplo de ello son las dos canciones con las que comienza "Blur". Ya en "Beetlebum", elegida como single de lanzamiento, encontramos una gran ruptura respecto a los esquemas de canciones anteriores, y es sin duda el mejor single de Blur en varios años. Grabada en parte en Rejkiavik (Islandia), en un ambiente más relajado y una convivencia más tranquila, "Beetlebum" rezuma esa reflexión interna y esa madurez en la construcción de los riffs y las melodías, y en unas letras más crípticas sobre temas más oscuros como la adicción a la heroína. Son claras las influencias de los Beatles (más allá de la referencia en el título), en especial del sonido del "White Album" (1968).


¿Es "Beetlebum" la mejor canción del disco? Probablemente, pero es difícil asegurarlo en un disco tan bueno, y más si a continuación suena "Song 2", segundo single del disco, y el mejor ejemplo de como facturar un hit sin buscarlo, alejándose aún más del estilo que les hizo famosos. En "Song 2" todo parece hecho sin un objetivo claro, desde el desdén en la elección del título, o el ritmo que surgió trasteando con la guitarra y que no sabían bien que hacer con él, y pasando por la letra críptica e inconexa y cantada casi con desgana, pero entonces llega el grito de rabia y el feroz estribillo punk, en mitad de una descarga de guitarras y bajo saturados, y la magia se despliega sin mayor explicación posible en una canción mítica e irrepetible que ya es todo un himno de punk rock salvaje y urgente.

Tras esta potente descarga inicial, el ritmo se vuelve más pausado e introspectivo en "Country Sad Ballad Man", una balada psicodélica y de aire Lo-Fi que comienza de manera rugosa y acústica y va creciendo de manera perezosa a nivel melódico, para explotar en distorsión sonora en el último tramo. Quizá no tuviera los ingredientes para convertirse en un single, pero es una más que destacable rareza y otro de los pilares de la demonstración del cambio en el que estaban inmersos. Funciona además como tregua antes de la llegada de "M.O.R." ("Middle of the Road"), el cuarto single que se extrajo de "Blur", un tema ´muy influenciado por la música de David Bowie, del que toma prestadas progresiones de acordes de "Boys Keep Swinging" y "Fantastic Voyage".

El tercer single fue "On Your Own", tema inspirado en The Kinks, la música de Beck y en los ritmos de hip hop de los años 80. Para recrearla, utilizaron una caja de ritmos antigua y, además de las inevitables guitarras distorsionadas que dan peso a todo el disco, recurrieron al uso de sintetizadores. Otro tema brillante, y solo estamos llegando a la mitad del álbum, marcada por el interludio de la extraña "Theme from Retro", un curioso ejercicio de trip-hop y música espacial que parece sacado de una banda sonora de película de serie B. A veces, y desde un punto de vista de "pop rock académico" siento la tentación de etiquetarla como uno de los pocos temas prescindibles del disco, pero la verdad es que, a su manera, aporta una atmósfera experimental que es también uno de los puntos fuertes de "Blur". La rareza y complejidad de este tema contrasta con la brillante modestia de "You're So Great", compuesta e interpretada por Graham Coxon, una exquisita balada Lo-Fi que nuevamente parece grabada con desgana o escasos medios, pero que es una absoluta e irrepetible obra maestra en su aparente sencillez y en la profunda emoción que despierta su escucha.

"Death of a Party", ahora de nuevo popularizada por su aparición en la película de 2024 "All of us strangers" (titulada "Desconocidos" en España y "Todos somos extraños" en Latinoamérica) es una profunda reflexión sobre la muerte debido a enfermedades de transmisión sexual, y otro de los puntos álgidos de un disco plagado de momentos relevantes. Una maravilla sonora que se acerca mucho a lo que años después Damon Albarn plantearía con Gorillaz, aunque más introspectiva y melancólica. Es curiosa la conexión con el tipo de música que haría en el futuro con su banda paralela virtual, y más si tenemos en cuenta que se trata de una canción antigua que ya le rondaba la cabeza en los tiempos de "Leisure" (1991) y que no cristalizó hasta su grabación final para "Blur". Lástima que tras semejante temazo, el nivel baje puntualmente en "Chinese Bombs", un intento de repetir la fórmula de "Song 2" o de las canciones de corte punk que siempre encontraban su hueco en discos anteriores, que resulta demasiado acelerada y atropellada.

"I'm Just a Killer for Your Love" aporta algo más por su, de nuevo, cadencia lastimosa y dejadez en la voz de Damon Albarn, en contraste con la distorsión y el ritmo de la guitarra de Graham y del resto de instrumentos, y como "Theme from Retro" ayuda a crear la curiosa atmósfera del disco, justo antes de que con la balada "Look Inside America" ofrezcan un inesperado e irónico guiño al britpop de anteriores discos, en los que su estructura y sus arreglos de cuerdas habrían encajado como un guante, pero en la que ahora apuntan hacia el Nuevo Continente en lugar de ensalzar a la Inglaterra que se filtraba a borbotones en los surcos de discos como "Modern Life is Rubbish" o "Parklife".

Y aún hay más, porque "Strange News from Another Star" (título tomado del libro de Hermann Hesse) es un nuevo homenaje a David Bowie, y podría decirse que por temática y sonido, y salvando las distancias, es el "Space Oddity" de Blur, y "Moving On" es un temazo de pop rock en el que deberían haber confiado mucho más y haberlo sacado como un quinto single. No terminaron de verlo claro, al igual que tampoco terminaron de darle el honor de cerrar en todo lo alto el disco, porque finalmente incorporaron al cierre los ocho largos minutos de "Essex Dogs", un tema que en origen era una especie de poema que recitaron en un concierto en el Royal Albert Hall en julio de 1996, para cuya versión de estudio completaron con una gran variedad de extraños sonidos y con guitarras tan caóticas y distorsionadas que por momentos parecen aterradores motores de maquinaria pesada, poniendo cierre y broche a la particular y por momentos inquietante atmósfera vanguardista y oscura de un disco que fue una auténtica ruptura con todo lo que la banda había hecho anteriormente.

Ese cambio fue tan drástico, y a la vez tan premeditado y deseado, que los trucos y guiños de la banda van más allá incluso de la música, y en la portada nos encontramos una imagen borrosa de un paciente en una camilla, siendo trasladado de urgencia por los pasillos de un hospital. Es inevitable pensar que ese paciente eran los propios Blur, en situación crítica tras varios discos bajo la presión de las ventas y de llevar a cuestas el San Benito del britpop y la rivalidad con Oasis. La imagen es turbia e inquietante, pero al mismo tiempo alentadora, por los colores anaranjados de la portada, que transmiten positividad y esperanza. Y no es casual que el disco se llame precisamente "Blur" a secas. Al contrario, parece toda una declaración de intenciones, como si quisieran reivindicarse a través de aquella nueva música, libres de etiquetas y estilos anteriores, pero sin perder por ello su identidad y su lugar privilegiado en la música de los noventa y de las décadas posteriores.

domingo, 12 de enero de 2025

Parklife - Blur (Mes Blur)


Hablar de Parklife sólo en términos de “britpop”, un término polémico e infamemente elusivo, es quedarse corto. Estamos ante un álbum pop que trasciende las restricciones de esos subgéneros mal definidos, tomemos como ejemplo los dos singles más exitosos del álbum: Girls and Boys y la canción principal Parklife están tan profundamente arraigadas en la cultura actual que es difícil dar un paso atrás y darse cuenta de lo inusuales que son en el contexto de su época. Girls and Boys es una canción indie/disco calculadamente desagradable pero irresistiblemente pegadiza de una época en la que esas cosas empezaban a pasar de moda, mientras que Parklife tiene un destacado estribillo para cantar a coro que se convirtió en un modelo tan común para los imitadores del britpop que es fácil olvidar que es un single exitoso con versos hablados (cortesía del actor Phil Daniels, que interpreta a la perfección el papel de narrador cockney que a Damon le había costado convencer). Girls and Boys y Parklife, rápidamente descartadas como tema 1 y 4 respectivamente, no eclipsan en absoluto el resto del disco. De hecho, dado que Girls and Boys suena más como una fanfarria anómala, el prólogo de los británicos en el extranjero antes de que nos estrellemos de nuevo en Londres en todo su esplendor en Technicolor, es una de las últimas canciones que se me ocurre nombrar si alguien me pregunta qué canciones hay en Parklife. El más típico Parklife es, por supuesto, uno de los primeros, pero esto tiene más que ver con el hecho de que comparte su nombre con su álbum original, el único tema principal que Blur grabó.


El otro single de Parklife, la balada romántica To the End, es un maravilloso momento de grandeza orquestal que aporta un glamour europeo al álbum. El estribillo coral, cantado en francés por la invitada Laetitia Sadier de Stereolab, recuerda al éxito de Serge Gainsborough y Jane Birkin, Je t'aime, y consolida aún más esas influencias omnipresentes de los años 60 que llegaron a caracterizar a la mayoría del britpop. Pero para mí, queda eclipsado por otras dos baladas: la fantástica Badhead una de las canciones más bonitas de Parklife que tiene que ver con el letargo que suele acompañar a una ruptura. Damon Albarn ha afirmado que la canción trataba sobre las resacas, pero creo que estaba siendo un poco descarado cuando dijo eso. El narrador compara la experiencia con una “mala cabeza por la mañana”, pero las líneas anteriores tratan sobre no mantenerse en contacto y sentir lástima por uno mismo: una resaca emocional y la adorada This is a Low, en particular, alcanzó un nivel de popularidad similar al de los singles. La penúltima canción grabada para el álbum, This is a Low, languideció durante mucho tiempo como instrumental mientras Damon luchaba por encontrarle una letra. La banda sabía que la pista musicalmente era muy buena y presionó a Damon, quien, en el último momento, recurrió a un pañuelo con las previsiones de navegación que Alex James le había comprado por Navidad. La desesperación engendró la genialidad, ya que la letra que se le ocurrió a Damon proporcionó la conclusión perfecta para Parklife, alejándose del centro de la ciudad para ofrecer una vista omnisciente y a vista de pájaro de las Islas Británicas. Es impensable que This is a Low casi nunca llegara al álbum. Aunque esas baladas son los momentos en los que Parklife se eleva más, los momentos en los que la banda se deshace en elogios son igual de importantes. Ambas se encuentran orgullosamente entre las mejores canciones que Blur haya escrito jamás, lo que da más credibilidad a mi afirmación de que la clave de la brillantez del catálogo de Blur está en las baladas. El frenesí punk de menos de dos minutos de Bank Holiday es el reflejo perfecto de la confusión frenética en la que pasan esos días libres adicionales, mientras que Jubilee presenta la pesadilla de ser un adolescente desde un punto de vista alejado y ambiguo, gritando juicios sobre vestirse incorrectamente y no hablar con las chicas como tema principal. 

Quizás la parte más subestimada de Parklife llega al principio de su segunda cara con el doble golpe del dúo New Wavey: London Loves y Trouble in the Message Centre, dos canciones fuertes que a menudo se pasan por alto únicamente por la poderosa compañía que las acompaña. London Loves, donde el poder destructivo, creativo y cinético de la gran ciudad se desarrolla en un retrato deliberadamente estereotipado de un hombre que prospera gracias a su energía. Se describe a la ciudad como una ciudad que ama el misterio de un coche que va a toda velocidad (la emoción del peligro), la forma en que la gente se desmorona (el ciclo destructivo), el misterio de un corazón acelerado (atrapado en un bucle de sensibilidad agudizada) y la forma en que simplemente no tenemos ninguna oportunidad (aquellos que se convierten en polvo por la naturaleza aleatoria del capitalismo). El ritmo es disco-sexy, pero la riqueza del arreglo viene en forma de la guitarra de Graham Coxon, con ráfagas de disonancia equilibradas por una distorsión intensa. Trouble in the Message Centre, es una especie de diálogo entre el cerebro y un siervo aparentemente sin alma, entumecido por las drogas o el letargo moderno cuyos “pensamientos simplemente se están desvaneciendo” (según el cerebro, quién debería saberlo). Aunque la letra podría haber sido más nítida y menos opaca, es uno de los dos mejores temas de rock del álbum, con Coxon, James y Dave Rowntree impulsándolos a toda potencia. Tracy Jacks es uno de esos momentos en los que te encanta o lo odias. Sin embargo, incluso ahora, todavía no estoy seguro de qué postura tomar. Quizás lo amo y lo odio. El canto de Tracy Jacks con acento cockney está demasiado acentuado en una canción que aparentemente describe una crisis de mediana edad. End Of A Century se muestra más tranquilo, es la nueva fase de la banda, el descarado encanto británico interpretado con un poco de arrepentimiento por parte de Graham Coxon y compañía. Aun así, suena bien y pegadizo. El eco de Graham Coxon en Clover Over Dover es magnifico, me encanta cuando él aporta su granito de arena a las voces. La letra es increíblemente profunda, habla de saltar por encima de los acantilados blancos de Dover y acabar con todo. La razón de esto es que la persona en cuestión está perdidamente enamorada de alguien, pero esa persona no parece darse cuenta. Es algo que creo que todos sentimos en algún momento de nuestra vida y Damon lo resume perfectamente. Es obvio que este chico está, con suerte, enamorado lo suficiente como para dejar que esta chica lo empuje (tal vez una metáfora para decir que puede tratarlo tan mal como quiera mientras esté con él). Este chico haría cualquier cosa para estar con ella y vale la pena saltar por encima incluso si tuviera un momento con ella.

Hay cosas que se podrían discutir sobre Parklife. Con la arrogancia del oyente medio que cree que podría secuenciar mejor un álbum, yo habría quitado el tema de cierre Lot 105 y habría movido el otro instrumental, The Debt Collector, a su posición culminante. Aunque muchos lamentan el hecho de que Parklife no termina con la nota dramática de This is a Low, creo que añadir una coda estaba más en consonancia con la atmósfera del álbum y te deja con una mayor impresión general de lo que acabas de experimentar. Lot 105, sin embargo, es una nota final demasiado trivial, mientras que el impresionante vals de The Debt Collector habría proporcionado una conclusión más elegante. Además, moverla erradicaría la ligera calma que surge de su emparejamiento a mitad del álbum con la curiosidad de Alex James Far Out, que parece demasiado peculiar a la vez. Existe la tentación de eliminar Far Out por completo, pero la excelente forma en que se conecta con la apertura de To the End hace que valga la pena mantenerlo. Magic America es un tema alegre que nos trae recuerdos de turistas de todo el mundo que acudían en masa a San Francisco para ver los tranvías, el puente Golden Gate (esperemos que no para suicidarse), la calle más torcida del mundo y… los centros comerciales estadounidenses. Aunque nuestros visitantes eran en su mayoría irlandeses y franceses, se comportaron más o menos como el personaje Bill Barrett de esta canción, fascinado por las maravillas materiales de Estados Unidos, la plétora de opciones televisivas (únicas en la época) y las porciones increíblemente grandes a precios sorprendentemente bajos que se servían en los patios de comidas y en las cadenas de restaurantes. Para Bill y muchos otros, Estados Unidos era un lugar mágico en el que uno podía escapar de las limitadas opciones que ofrecían los conservadores de la época.

En 1990, un Damon engreído y juvenil le había dicho a la prensa: “Cuando salga nuestro tercer álbum, nuestro lugar como la banda inglesa por excelencia de los 90 estará asegurado. Esa es una simple declaración de hechos. Tengo la intención de escribirlo en 1994”. Aunque este es el tipo de declaración arrogante y desagradable que pronto se asociaría más fácilmente con los hermanos Gallagher, la predicción de Damon se hizo realidad. El audaz salto estilístico que habían dado con Modern Life is Rubbish había dado sus frutos y, aunque el jefe de Food Records, Dave Balfe, siguió desaconsejándolo durante la grabación de Parklife, el disco se convirtió en un momento histórico de los 90. La parte complicada ahora era qué hacer a partir de ahí. Parklife de Blur, es tantas cosas, tiene tanto que dar, y realmente no es solo un asunto alegre y animado, aunque la apertura te hace pensar que este álbum se dirige en esta dirección, con todo el trabajo invertido en él, este álbum es asombrosamente fluido, un álbum para seguir y continuar... y que bien vale tu tiempo, diverso, atractivo y escalofriante y emocionante y a la deriva y... bueno, todo en uno... aunque no tan ecléctico ni tan desafiante y sorprendente como Different Class de PULP. Sin embargo, la pregunta es: ¿es mejor pop? bueno, esa es una pregunta difícil, pocos álbumes son tan logrados como Different Class. 

No hace falta decir que Parklife sigue siendo un álbum cálido y de fácil acceso, al mismo tiempo que es fácil de acceder, también es muy reflexivo y muy gratificante, rico en patetismo social y melodía bien trabajada, un lujo poco común. Sí, también tiene el entusiasmo y algo de entusiasmo excesivo, cuando lo deseas. No puedo criticar este álbum, y nadie debería hacerlo, es fácil de disfrutar y es atemporal. Parklife es un disco absolutamente bueno desde todos los ángulos o al menos desde casi todos los ángulos, es difícil hacer un álbum como Parklife. En otro orden de cosas, déjenme decirles que, si les gusta Parklife, no se pierdan el mencionado álbum Different Class de Pulp. Cuando era más joven, recordaba vagamente solo algunos sencillos de ese álbum, pero, como Parklife, es más que solo sencillos pegadizos. Simplemente desearía haberlo escuchado antes, pero bueno, eso es lo que pasa con muchos álbumes bien trabajados, no puedes entenderlo todo de una vez en un instante, de esta manera, Parklife de Blur es un poco similar a la obra maestra de PULP, denle tiempo.

 

miércoles, 8 de enero de 2025

Modern Life Is Rubbish - Blur (Mes Blur)

 

Modern Life Is Rubbish, Blur


      Todavía andaba enfrascado dentro de la maquinaria de las grandes ligas del britpop Blur cuando publicó Modern Life is Rubbish, su segundo álbum de estudio. Dicho trabajo fue grabado entre octubre de 1991 y marzo de 1993, bajo la producción del propio grupo, y de John Smith, Steve Lovell y Stephen Street, y publicado el 10 de mayo de 1993 bajo el sello discográfico Food Records en Reino Unido, y de SBK Records en Estados Unidos. . Aunque su álbum debut Leisure (1991) había sido un éxito comercial, Blur produjo una severa reacción de los medios poco después de su lanzamiento y cayó en desgracia del público. Después de que el grupo regresara de una gira infructuosa por los Estados Unidos, las actuaciones en vivo mal recibidas y la creciente popularidad de la banda rival Suede disminuyeron aún más el estatus del grupo en el Reino Unido.



El álbum debut 
de Blur, Leisure (1991),
 fue un disco que llegó al Top 10 del Reino Unido, Sin embargo, el efecto del álbum pronto comenzó a desvanecerse, y el grupo fue rápidamente expuesto como falsos saltadores de tendencias, recibiendo la ira y la reacción violenta de las escena musical de Manchester. Además, tras la pérdida del favor del público, el grupo descubrió que tenía una deuda de 60.000 libras, principalmente debido a la mala gestión. Blur contrató a un nuevo manager, Chris Morrison, y para recuperar las pérdidas, su sello discográfico Food los envió a los Estados Unidos como parte de la gira Rollercoaster Para coincidir con el inicio de la gira, el grupo lanzó el sencillo Popscene. El nuevo lanzamiento mostró un cambio significativo en la dirección musical, ya que Blur cambió su sonido derivado del género shoegaze (subgénero de indie y rock alternativo caracterizado por su mezcla etérea de voces oscurecidas, distorsión de guitarra y efectos, retroalimentación y volumen abrumador) por uno influenciado por el pop de guitarra británico de los años 60. Sin embargo, el sencillo no logró entrar en el top 30 del Reino Unido, lo que disminuyó aún más el perfil del grupo en las islas británicas. 

Por si esto no fuera poco, la gira de 44 fechas por los Estados Unidos fue un completo desastre. Consternado por la fascinación del público estadounidense con el grunge y la respuesta mediocre a su música, el grupo bebía con frecuencia y los miembros a menudo se peleaban a puñetazos entre ellos. Empezó a surgir la nostalgia, así por ejemplo, el líder Damon Albarn,  comenzó a extrañar cosas realmente simples sobre su Inglaterra, y escuchó una cinta del grupo pop inglés The Kinks durante la gira. Más tarde declaró que el único recuerdo agradable que tenía de la gira fue el tiempo que pasó escuchando el sencillo de 1967 de los Kinks  "Waterloo Sunset" A su regreso a Inglaterra, el grupo descubrió que la atención de la prensa musical se había desplazado hacia Suede. Esto disgusto mucho al grupo, pues consideraba que cada disco que Suede vendía era una "afrenta a la decencia humana"Después de muchos shows en vivo dando una imagen poco más que pobre, ya que los miembros de Blur a menudo actuaban borrachos (en particular uno en un concierto de 1992 que incluyó una actuación bien recibida de Suede en el mismo cartel), no era de extrañar que el sello discográfico Food Records se planteara la posibilidad de prescindir de ellos.


Ante la amenaza de ser despedidos por Food Records, para su siguiente álbum Blur se sometió a un cambio de imagen impulsado por el líder Damon Albarn. La banda incorporó influencias de grupos tradicionales de pop de guitarra británicos como The Kinks y Small Faces, y el sonido resultante fue melódico y producido de manera exuberante, con instrumentos de viento, de madera y coros. Las letras de Albarn en Modern Life Is Rubbish utilizan un hilarante humor para investigar los sueños, las tradiciones y los prejuicios de la Inglaterra suburbana. Damon Albarn, en una entrevista con Mojo en 2000 , dijo que "Suede y América alimentaron mi deseo de demostrarle a todos que Blur valía la pena... No había nada más importante en mi vida"Sintió que la popularidad que la música grunge estadounidense disfrutaba en Gran Bretaña en ese momento pronto se desvanecería, y argumentó que Blur encarnaría un renacimiento del pop británico clásico en su próximo álbum. El dueño de Food Records, David Balfe , no estaba tan de acuerdo y discutió con Albarn sobre el cambio propuesto en la imagen de Blur. Al final Balfe, todavía escéptico, acabó cediendo, y Food le dio cautelosamente el visto bueno a Blur para trabajar en su segundo álbum con un productor elegido por Albarnel líder de XTCAndy Partridge. Partridge dijo que no estaba satisfecho con las canciones, pero que aceptó porque Blur le  gustaba musicalmente, además de "por las razones equivocadas, los halagos y el dinero"

Blur comenzó a trabajar en el álbum con Partridge en The Church, el estudio situado en Crouch End propiedad de David A. Stewart. Sin embargo, las sesiones terminaron prematuramente. El bajista Alex James describió las sesiones como un "desastre"; agregando además que "mientras se juntaba todo, todas eran buenas partes, pero simplemente no era ... sexy". Partridge recordaba: "Me sentí bastante paternal y creo que hice un trabajo excelente. Hicieron que Dave Balfe escuchara algunas mezclas y él se movía por ahí diciendo, 'Esto es fantástico, tú eres George Martin y ellos son The Beatles'. Al día siguiente decía, 'Francamente, Andy, esto es una mierda'"La banda grabó con éxito cuatro canciones, pero se mostraron cautelosos sobre trabajar en las mismas condiciones nuevamente. Las pistas producidas por Partridge fueron abandonadas; tres de ellas se incluyeron más tarde en el box set de 2012 Blur 21.



El trabajo en el álbum se reanudó debido a un encuentro casual con el productor 
Stephen Street, quien había trabajado previamente con la banda en su sencillo de 1991 "There's No Other Way". Con Street ahora produciendo el álbum, Blur grabó una mezcla de material que abarcaba tanto el período inmediatamente posterior al lanzamiento de Leisure como su gira de 1992. Si bien los miembros de la banda estaban satisfechos con los resultados de la sesión de grabación, el jefazo de Food  RecordsBalfe, después de escuchar las canciones, le dijo a la banda que estaban cometiendo un suicidio artístico. Aunque abatido por su respuesta, Blur le dio a Food el álbum completo en diciembre de 1992. El sello rechazó el álbum y le dio instrucciones a la banda para grabar más sencillos potenciales. Albarn cumplió, y el día de Navidad escribió la canción "For Tomorrow" Aunque esta canción calmó las preocupaciones de Food, el sello estadounidense de Blur, SBK Records, el otro sello discográfico con intereses en el otro lado del charco, expresó su descontento al escuchar las cintas terminadas del álbum. Para apaciguar a SBK, la banda grabó "Chemical World", pensando que aplacaría al sello discográfico y aumentaría el atractivo estadounidense del disco. Sin embargo, SBK  instó al grupo a volver a grabar el álbum con el productor estadounidense Butch Vig, quien era popular en aquel momento por su trabajo con Nirvana. Lógicamente Albarn y compañía se negaron. En este difícil contexto nació Modern Life Is Rubbish, obteniendo un moderado éxito en las listas de éxitos del Reino Unido; el álbum alcanzó el puesto número 15, mientras que los sencillos extraídos del álbum se posicionaron en el Top 30. El álbum rejuveneció la suerte del grupo después de su caída posterior a LeisureModern Life Is Rubbish acabó siendo considerado como uno de los lanzamientos que definen la escena del britpop, y sus siguientes álbumes que encabezaron las listas de éxitosParklife y The Great Escape, vieron a Blur emerger como uno de los principales grupos de la escena britpop de Gran Bretaña.


El título del álbum deriva de un grafiti pintado con plantilla a lo largo de Bayswater Road en Londres, creado por un grupo anarquista. Para Albarn, la frase reflejaba la "basura" del pasado que se acumulaba con el tiempo, sofocando la creatividad. Albarn pensaba que era "el comentario más significativo sobre la cultura popular desde ' Anarchy in the UK '". Debido a la difícil relación de Blur con Estados Unidos en ese momento, el título provisional del álbum fue Britain Versus America. La pintura de la locomotora de vapor Mallard en la portada del álbum era una imagen de archivo que se obtuvo de una biblioteca de fotos en Halifax. La pintura "evocaba la sensación de la Gran Bretaña de antes de la guerra de un colegial de Just William "Dentro del embalaje del álbum había un óleo sobre lienzo de la banda vestidos como skinheads en un tren subterráneo. Las hojas de letras del álbum también presentaban las progresiones de acordes de las canciones, escritas a mano por el guitarrista Graham Coxon. Mientras que Albarn explicaba que era un intento de hacer saber a la gente que, por anticuado que parezca, escribimos canciones",  la revista Total Guitar creía que era por otro motivo, la inclusión de los acordes eran debidos al "entusiasmo de Coxon por desmitificar la forma de tocar la guitarra".

El álbum era una respuesta al predominio del grunge en el Reino Unido y a su propio perfil decreciente en su tierra natal, y también una respuesta a la repentina popularidad de Suede. Blur se reinventó con este segundo álbum, Modern Life Is Rubbish, abandonando las influencias shoegazing y baggy (género de baile alternativo británico popular a finales de la década de 1980 y principios de la de 1990 y generalmente asociado con la escena del norte del Reino Unido. En este estilo, las bandas de rock alternativo se inspiran en la psicodelia y en la música de baile) que dominaron Leisure, y apostando por un pop más tradicional. A primera vista, este disco puede parecer un homenaje a los Kinks, David Bowie , los Beatles y Syd Barrett, pero no es una reafirmación, es una revitalización. Blur utiliza el pop de guitarra británico desde los Beatles hasta My Bloody Valentine como base, tejiendo historias de desesperación contemporánea. La guitarra de Graham Coxon abre cada canción, ya sea con líneas melódicas impredecibles o con capas de efectos translúcidos e hipnóticos, proporcionando a Albarn un fondo vibrante para sus sátiras sociales y sus comentarios mordaces. 




C
asi todas las canciones están cuidadosamente construidas, comenzando por For tomorrow, una oda a Londres y la vida cotidiana. Esta canción surgió en respuesta a la presión del sello para tener un sencillo exitoso. Destaca por su ambiente melancólico y su referencia al Primrose Hill, un parque icónico en la capital británica. Continúa con Advert, que habla sobre el consumismo desenfrenado y la influencia de la publicidad en la sociedad moderna. Musicalmente, tiene un ritmo frenético que refuerza su mensaje satírico. Colin Zeal es un retrato de un hombre promedio obsesionado con la conformidad y la autoimagen. La canción mezcla ironía con un ritmo pesado y repetitivo. Turno para Preassure on Julian, tema más experimental que combina guitarras distorsionadas y letras crípticas. Se cree que hace referencia a Julian Cope, una figura excéntrica en la escena musical británica. Star Shaped es toda una crítica a la rutina laboral y a la falta de autenticidad en las ambiciones modernas. Musicalmente, es alegre, pero las letras tienen un tono sarcástico. Blue Jeans es una de las canciones más suaves del álbum, con un aire nostálgico. Trata sobre la simplicidad de los momentos cotidianos y la alienación. Cierra la cara A Chemical World, que habla sobre la monotonía y los problemas sociales en la Inglaterra de clase media. Tiene una melodía pegadiza y un tono un tanto sombrío.

Turno para la cara B, que abre con Sunday Sunday, con una mirada satírica a las tradiciones británicas de los domingos, como los asados familiares y las caminatas por el parque. Es una de las canciones más enérgicas del álbum. pasamos a la oscura y atmosférica Oily Water, que aborda temas como la contaminación y la deshumanización. Tiene un sonido más cercano al grunge, y nos recuerda algo a su álbum anterior. Miss America, canción lenta y minimalista que mezcla melancolía con observaciones sobre la cultura estadounidense. Villa Rosie trata sobre una experiencia en un club nocturno. Su sonido es alegre, pero hay un trasfondo de caos en las letras. Coping nos invita a lidiar con la presión y la ansiedad. Es una de las canciones más directas y optimistas del álbum. Turn It Up, con una energía despreocupada, es una de las canciones menos complejas del álbum. Habla de la necesidad de escapar de los problemas cotidianos. Resigned, la canción que cierra el álbum, retoma la nostalgia y la oscuridad para actuar como gran cierre del disco, aunque aún haya espacio para la anecdótica Commercial Break, tan breve como peculiar, y que sirve como comentario final sobre el consumismo y la superficialidad de la vida moderna, que hacen de ella una auténtica basura, tal y como reflejaba la popular pintada con la que empezó el concepto de todo el disco.