lunes, 30 de junio de 2025

1642.- Rasputin - Boney M.



Aunque en los Estados Unidos pasaron sin pena ni gloria, Boney M fue un grupo muy popular en Europa y América Latina durante los años 70, quizás por ello a su música disco con historias en las letras se le llamó Eurodance. En 1974 el productor alemán Frank Farian grabó la canción “Baby Do You Wanna Bump?” que tuvo un éxito limitado en Holanda y Bélgica. La grabación la hizo bajo el pseudónimo de Boney M, nombre que sacó de un héroe televisivo de Australia. A raíz de que la canción tuvo una buena venta en esos países, la televisión holandesa y las discotecas demandaban la presencia de Boney M. fue entonces cuando Farian decidió formar una agrupación que le sirviera de soporte. Inicialmente, llamó a cuatro bailarines de color para que le acompañaran en el escenario, pero pronto tuvo que reacomodar la formación con cuatro vocalistas caribeños que trabajaban como cantantes de estudio en Alemania. Marcia Barrett y Liz Mitchell habían nacido en Jamaica, mientras que Bobby Farrell era nativo de Aruba y Mazie Williams de Montserrat. Mitchell se convirtió en la voz del grupo y en su sello distintivo. El grupo musical alcanzó unas grandes cuotas de popularidad, en mucha parte gracias a su cantante y bailarín Bobby Farrell, no sólo por cómo cantaba, con sus tonos graves, sino también por su forma de bailar y moverse mientras lo hacia, que gustaba mucho al público.

“Rasputin” se publicó en su exitoso álbum titulado “Nightflight To Venus”. La canción comienza con un ritmo acelerado y aplausos, y gradualmente se transforma en un riff de guitarra española a partir del minuto 00:08; que luego se transforma en la popular música riff rusa. El bajo es bastante potente y acompaña muy bien el ritmo. Al principio, puedes pensar que a la canción le falta pegada, por las voces de tono bajo y la melodía mediocre. Pero esa percepción tuya cambia, es el momento exacto en que vuelven a empezar los aplausos; pero esta vez, no hay música de fondo. Y luego el bajo es... eh... bueno, ¡diferente! encaja como anillo al dedo para una historia sobre un hombre tan malo, ¿eh? Si no te gusta el bajo, no te preocupes. Despues la canción consigue su ritmo impresionante y entonces finalmente sabes por qué la canción fue (y sigue siendo) un megaéxito de la música disco. Y eso es porque involuntariamente mueves los pies y chasqueas los dedos al ritmo de los ritmos, la canción tiene un ritmo INCREÍBLEMENTE rápido. Las chicas hacen un trabajo excepcional al mantener la canción unida; porque sin ellas, la canción nunca habría sido tan grande. La primera estrofa nos cuenta una pequeña introducción sobre Rasputín: cómo se veía, cómo era para las chicas ("Chicks", mejor dicho) de Rusia. La segunda estrofa comienza (tras un breve interludio instrumental) habla del tipo de encanto que había impuesto al pueblo ruso, incluyendo al zar y a la zarina. La letra de la canción es peculiar y extremadamente pegadiza, con el inicio del infame "Discurso de Rasputín", que nos cuenta cómo el pueblo (los hombres) en Rusia poco a poco empezó a recobrar la cordura y a exigir que se hiciera algo con respecto a Rasputín. La última estrofa, tiene la decisión de poner fin a la tiranía de Rasputín. Nos cuenta cómo unos hombres de alto rango le tendieron una trampa e intentaron envenenarlo con una alta dosis de cianuro. Pero el plan fracasó estrepitosamente, dejando a Rasputín tal como estaba. Pero esta gente no se dio por vencida. Le dispararon (más de) diez veces y finalmente lo declararon muerto. La canción termina con el eslogan siempre genial: "Oh, esos rusos". 


domingo, 29 de junio de 2025

Firepower - Mes Judas Priest

Firepower, Judas Priest




     En 2018, cuando muchos creían que las leyendas del heavy metal Judas Priest ya habían dado lo mejor de sí tras casi cinco décadas de carrera, la banda británica lanzó Firepower, su decimoctavo álbum de estudio. La banda se volvía a reafirmar como uno de los pilares fundamentales del género. Con una trayectoria que abarca desde los años setenta con grandes discos como Sad Wings of Destiny (1976) o British Steel (1980), pasando por sus altibajos en las décadas posteriores, nadie esperaba que Judas Priest, en su madurez, entregara un álbum tan feroz, potente y vibrante. Firepower era una declaración de intenciones: los veteranos del metal aún tenían mucho que decir, y lo hacían con una energía que avergonzaba a bandas mucho más jóvenes.

Judas Priest, formado en Birmingham, Inglaterra, en 1969, es una de las bandas que definió el sonido y la estética del heavy metal. Con álbumes como Screaming for Vengeance (1982) y Painkiller (1990), la banda no solo consolidó su estatus, sino que ayudó a forjar el género tal como lo conocemos. Sin embargo, el siglo XXI trajo desafíos. Tras la salida del vocalista Rob Halford en 1992 y su regreso en 2003, la banda experimentó con discos como Nostradamus (2008), un álbum conceptual ambicioso que no acabó de enganchar, y Redeemer of Souls (2014), que, aunque sólido, no logró atraer a los fans como sus clásicos. La salida del guitarrista fundador K.K. Downing en 2011 y el diagnóstico de Parkinson de Glenn Tipton en 2008, anunciado públicamente en 2018, añadieron incertidumbre al futuro de la banda. Muchos asumieron que Judas Priest estaba en el ocaso de su carrera, destinada a vivir de giras nostálgicas y de su legado.
Firepower llegó como una sorpresa, como un patada en el estómago a aquellos que los daban musicalmente por muertos. Anunciado en 2016 por el guitarrista Richie Faulkner, quien reemplazó a Downing, el álbum comenzó a gestarse en un momento en que la banda buscaba redescubrir su esencia. Faulkner, junto a Rob Halford, Glenn Tipton, el bajista Ian Hill y el baterista Scott Travis, se propuso crear un disco que no solo honrara el pasado de Judas Priest, sino que también demostrara su relevancia en el panorama del metal moderno. La elección de los productores Tom Allom, quien no trabajaba con la banda desde Ram It Down (1988), y Andy Sneap, conocido por su trabajo con bandas contemporáneas como Accept y Testament, fue un hábil movimiento estratégico que fusionó el sonido clásico de la banda con una producción más moderna.


La grabación de Firepower tuvo lugar entre marzo y junio de 2017 en los Backstage Studios de Ripley, Derbyshire. El proceso fue descrito por Faulkner como "libre y relajado", con ideas que fluían naturalmente entre los miembros de la banda. A diferencia de Redeemer of Souls (2014), que tenía un enfoque más crudo y directo, Firepower buscó reinventar los momentos clásicos de Judas Priest, rememorando discos como British Steel, Screaming for Vengeance y Painkiller, pero sin caer en la mera nostalgia. Halford explicó que el título del álbum reflejaba "el fuego y la potencia de la música heavy metal". La colaboración entre los productores Allom y Sneap resultó ser un acierto. Allom aportó la experiencia de los años dorados de la banda, mientras que Sneap añadió un brillo moderno, con un sonido "nítido, limpio y feroz". Esta combinación dio como resultado un álbum con guitarras afiladas, una base rítmica contundente y la voz de Halford adaptada inteligentemente a su edad, utilizando un registro más grave pero igualmente poderoso. Faulkner destacó que el proceso fue un "momento de bombilla", donde dos productores con enfoques diferentes lograron una sinergia perfecta, evitando choques de egos y creando un sonido que capturaba la esencia de Judas Priest mientras se sentía fresco y potente.



El disco arranca con el tema homónimo, Firepower, toda
 una explosión de energía y considerado uno de los más rápidos de la banda. Richie Faulkner lo describió como  la canción más rápida del grupo "Sobre todo en cuanto a la percusión. Un amigo me dijo que suena como 'Painkiller', pero más rápido. Así que no se me ocurre otra canción más rápida que ' Painkiller '. Así que si defines 'pesado' en términos de velocidad, es una canción bastante pesada, bastante intensa" Y esto es debido a la brutal pegada de batería de Scott Travis, superando incluso a Painkiller en velocidad, a los riffs de las guitarras de Tipton y Faulkner, con uno solos incendiarios y la contundente voz de Halford. Logran fusionar el sonido clásico del grupo con una producción moderna  a cargo de Tom Allom y Andy SneapHay quien comparó este tema con un cruce entre Painkiller y Resurrection (de la carrera solista de Halford), destacando su estructura potente y agresiva pero melódica. Fue lanzada como sencillo en Alemania, acompañada de una versión en vivo de Breaking the Law de Wacken 2015. Lightning Strike fue el primer sencillo del álbum, acompañado de un videoclip. Alcanzó el puesto 21 en la lista de Mainstream Rock Tracks de EE. UU. La canción equilibra el estilo ochentero del grupo con un toque moderno. Halford combina su característico grito agudo con un registro más grave, inteligentemente adaptado a su edad. La canción se convirtió en un pilar en los conciertos. Sobre la letra Halford comentaba"Se trata de cómo reaccionas ante la confrontación. No dejes que estas cosas te derroten. El rayo impacta porque es la luz que te saca de la oscuridad". Evil Never Dies es un tema oscuro y pesado, uno de los temas más potentes del álbum. Faulkner lo mencionó como uno de sus favoritos por su intensidad. Su estructura recuerda los momentos más pesados de Painkiller, con un toque de thrash metal. Líricamente, Halford aborda temas como la resiliencia y el desafío. Never the Heroes es un medio tiempo con un mensaje conmovedor, rinde homenaje a los soldados de la Primera Guerra Mundial. trata sobre quienes buscan la paz a través de la guerra, sobre los hombres y mujeres valientes que entran en la guerra; nunca entrenados para ser héroes, pero que se vuelven heroicos gracias a sus acciones y sacrificios, cumpliendo con su deber por su pueblo y su país. Junto con la canción se lanzó un vídeo. Su ritmo pausado la asemeja a baladas épicas como Beyond the Realms of DeathNecromancer, con un toque oscuro y teatral, se sumerge en imágenes de horror con un ritmo galopante y una atmósfera inquietante, muy lograda por la base rítmica de Ian Hill y Scott Travis y los riffs marca de la casa de Tipton y Faulkner. La producción logra que nos recuerde por momentos a canciones como The Sentinel. Cierra la cara A Children of the Sun, con un sonido más retro y pesado. Contiene influencias de Black SabbathSus pesados riffs y ese ritmo pausado evocan el Hand of Doom de Sabbath. La interpretación vocal de Halford es brillante, melódica y controlada, contribuyendo a construir esa atmósfera. 

Abre la cara B Guardians, con unas guitarras atmosféricas y toques orquestales. Es un breve instrumental que sirve como introducción a Rising From Ruins, uno de los temas más épicos del álbum. Estamos ante una canción majestuosa con un potente riff y una sección central brutal. Coescrita por Faulkner, Tipton y Halford, con una narrativa épica, tiene un trabajo de guitarras muy dinámico que combina con la sólida base rítmica de Hill y Travis, y unos coros que potencian el impacto del tema. Flame Thrower es uno de los momentos más flojos del álbum, sin embargo, curiosmente, es un tema que funciona muy bien en vivo. Se podría decir que sin ser malo, no llega al nivel sobresaliente del disco. Spectre; nos encontramos con otro tema con influencias de Black Sabbath con ese pesado ritmo, sonido retro y una atmósfera muy densa. En cuanto a la letra, explora temas oscuros. Traitors Gate tiene un pesado ritmo y un sonido clásico que hizo que rápidamente fuera acogido como uno de los favoritos del álbum por los fans. Estamos ante un tema hecho para el directo, donde gana muchísimos enteros. Aquí brillan sobremanera los solos de Tipton y Faulkner. No Surrender es un optimista tema que contiene un estribillo perfecto para cantar en los conciertos. La interpretación vocal de Halford está muy bien acompañada por el empuje de las guitarras y la batería. Una gran parte de la crítica consideró este tema como uno de los mejores del grupo en décadas, destacando la contribución de Faulkner en la composición, y lamentaban que no se hubiera lanzado como sencillo. Lone Wolf es junto con Children of the Sun y Spectre, la última canción del álbum que tiene influencias de Black Sabbath. Halford está especialmente sobresaliente en la interpretación de este tema, mostrando su maestría vocal. Cierra el disco Sea of Red, una poderosa balada que conmemora el centenario del fin de la Primera Guerra MundialTras la extensa perturbación del terreno causada por los combates de la Primera Guerra Mundial, un mar de amapolas rojas brillantes floreció entre las trincheras y las tierras de nadie del Frente Occidental. Desde entonces, se han vuelto comunes en los países occidentales durante y antes del Día del Recuerdo cada año, como símbolo de conmemoración inspirado en el poema de John McCrae "In Flanders Fields". Faulkner recordaba el día que Halford llegó al estudio con la letra de la canción: "Ya teníamos la música prácticamente lista... Rob entró y cantó este ppoema, y recuerdo que me pareció increíble. Me puso la piel de gallina. Podías ver la película en la mente. Era muy emotiva, sobre el recuerdo y sobre las personas que dieon su vida. Fue un sentimiento conmovedor escucharlo por primera vez". La canción contiene unos arreglos corales magníficos, no en vano, está considerada como una de las favoritas del guitarrista FaulknerLa sentida interpretación de Halford da ese toque emocional a un tema que supone el cierre perfecto para el disco.



Tras su lanzamiento el 9 de marzo de 2018, 
Firepower recibió una acogida abrumadoramente positiva. La crítica especializada destacaba su "diversidad lírica", afirmando también que Judas Priest aún poseía "el rigor musical, el talento para el espectáculo y la fuerza que hacen que otras bandas se inclinen ante ellos". Pero no se quedaban ahí, iban más allá señalando que el álbum podía "estar a la altura de British Steel y Screaming for Vengeance sin sentir vergüenza". La calidad general del álbum era alta, con Halford y la dupla de guitarras Tipton/Faulkner brillando con intensidad en un álbum muy consistente que entremezcla
 heavy metal tradicional con influencias de power y thrash metal. Sin embargo, no estuvo exento de críticas: algunos señalaron que las 14 canciones hacían el álbum algo extenso, y que recortar un par de temas podría haberlo hecho más compacto. Comercialmente Firepower fue un éxito. Debutó en el puesto número 5 en el Billboard 200 de Estados Unidos, vendiendo 49,000 copias en su primera semana, el mejor resultado de la banda en ese mercado. En el Reino Unido, también alcanzó el puesto 5, su primera entrada en el top diez desde British Steel. La gira Firepower Tour, con Andy Sneap sustituyendo a Tipton, fue un éxito, con presentaciones en Norteamérica y Europa que demostraron que la banda seguía siendo una fuerza en vivo. 

Firepower es, sin duda, uno de los trabajos más fuertes de Judas Priest desde Painkiller. Halford y compañía eran capaces de reinventarse y demostrar que los "Dioses del Metal" aún tenían cuerda para rato, demostrando que aún podían ofrecer música de calidad y poderosa. La combinación de la experiencia de Halford, Tipton e Hill, la energía de Faulkner y Travis, y la producción de Allom y Sneap creó un álbum que fusionaba el metal tradicional con influencias modernas, manteniendo la coherencia del álbum, lo que hizo que fuera capaz de enganchar tanto a los fans de toda la vida como a la nueva generación de metaleros.

1641 - The Rolling Stones - Far away eyes

1641 - The Rolling Stones - Far away eyes

Far Away Eyes es una canción de The Rolling Stones incluida en su álbum Some Girls (1978), un disco que marcó un renacimiento creativo para la banda, mezclando rock, punk, country y disco. Esta canción en particular destaca por su estilo country humorístico y su narrativa pintoresca, mostrando una faceta más ligera y satírica de Mick Jagger y compañía.  
  
La canción está impregnada de un sonido country tradicional, con guitarras acústicas, un steel guitar que evoca el campo, y un ritmo relajado que contrasta con el rock más agresivo del álbum. Keith Richards y Ron Wood aportan un acompañamiento cálido, mientras que la voz de Jagger, con su acento exageradamente sureño, añade un toque cómico y caricaturesco. La melodía es simple pero efectiva, con un estribillo pegajoso que hace que la canción sea memorable.  

La letra de Far Away Eyes es una de las más humorísticas de los Stones. Jagger canta sobre un hombre solitario que conduce por California, escuchando estaciones de radio religiosas y country mientras busca consuelo en mujeres con "ojos distantes" (far away eyes). La canción está llena de ironía y sarcasmo, especialmente en líneas como:  

"I was driving home early Sunday morning through Bakersfield  
Listening to gospel music on the colored radio station" 

Jagger retrata a un predicador televisivo que promete milagros a cambio de dinero, y luego a una chica rural que solo quiere diversión. La crítica a la hipocresía religiosa y los estereotipos sureños está presente, pero de una manera tan exagerada que resulta más divertida que ácida.  

Aunque Far Away Eyes no fue un sencillo destacado como Miss You o Beast of Burden, se convirtió en una favorita de los fanáticos por su peculiar encanto. Muestra la versatilidad de los Stones para adoptar géneros sin perder su esencia. Además, refleja la fascinación de Jagger por la cultura estadounidense, especialmente su lado más excéntrico y rural.  

En conciertos, la canción ha aparecido esporádicamente, siempre recibida con entusiasmo por su tonelada desenfadado. No es una pieza profunda ni revolucionaria en su discografía, pero sí una muestra de su capacidad para contar historias con humor y estilo.  

Far Away Eyes es una joya escondida en Some Girls, una canción que demuestra que los Rolling Stones no siempre necesitan ser oscuros o transgresores para brillar. Con su mezcla de country, sarcasmo y una interpretación vocal llena de personalidad, la canción es un respiro divertido en un álbum dominado por ritmos más urbanos. No es su obra maestra, pero sí una prueba más de por qué los Stones son tan duraderos: saben reírse de sí mismos y del mundo que retratan.  

Daniel 
Instagram storyboy 

sábado, 28 de junio de 2025

1640 - The Rolling Stones - Some Girls

1640 - The Rolling Stones - Some Girls

Some Girls, lanzado en 1978, es uno de los discos más vibrantes y controvertidos de The Rolling Stones. En un momento en que la banda necesitaba reinventarse ante el auge del punk y la discomusic, este álbum demostró su capacidad para adaptarse sin perder su esencia. Con un sonido crudo, directo y cargado de actitud, Some Girls combina rock, country, blues e incluso toques de disco, creando un trabajo fresco y atemporal.  

Grabado entre 1977 y 1978 en París, Some Girls llegó en un período turbulento para los Stones. La banda enfrentaba críticas por su exceso de lujo y decadencia, mientras nuevos géneros como el punk (con bandas como Sex Pistols y The Clash) desafiaban el reinado del rock clásico. Sin embargo, en lugar de ignorar estas influencias, Mick Jagger y Keith Richards las absorbieron, dando como resultado un sonido más agresivo y energético. La producción, a cargo de Jagger y Richards, es más minimalista que en trabajos anteriores, lo que le da un aire inmediato y visceral.  

El álbum abre con "Miss You", un éxito masivo que fusiona el rock con el groove disco. Aunque algunos puristas criticaron este acercamiento, la canción demostró la versatilidad de los Stones, con su ritmo contagioso y el saxofón de Sonny Rollins.  

"Beast of Burden" es otra joya, una balada soul-rock con una melodía irresistible y una letra que oscila entre lo vulnerable y lo arrogante. La guitarra de Richards y Ronnie Wood (en su primer álbum completo con la banda) brilla con un tono cálido y emotivo.  

En contraste, "Shattered" captura el caos de Nueva York en los 70, con un riff frenético y letras cínicas ("Life is just a cocktail party on the street"). Es una de las canciones más punk de los Stones, mostrando su lado más descarado.  

El lado B incluye "Far Away Eyes", un divertido tributo al country con Jagger imitando un acento sureño, y "Before They Make Me Run", una poderosa canción de Richards que refleja sus luchas personales con las drogas.  

El álbum no estuvo exento de controversia. La portada original, que mostraba a los Stones con imágenes de mujeres famosas en un diseño similar a un anuncio de revista, fue censurada por problemas de derechos. Además, algunas letras (como las de Some Girls) fueron criticadas por su contenido machista, algo que Jagger luego atribuyó a la sátira.  

A pesar de esto, Some Girls fue un éxito comercial y crítico, convirtiéndose en el álbum más vendido de los Stones en EE.UU. Su influencia es innegable: bandas posteriores, desde los Guns N’ Roses hasta los Arctic Monkeys, han citado este disco como inspiración.  

Some Girls es un álbum audaz, diverso y lleno de energía. Los Stones lograron capturar el espíritu de su época sin sonar impostados, demostrando por qué siguen siendo una de las bandas más grandes de la historia. Más de cuatro décadas después, su frescura y actitud siguen intactas, confirmando que, cuando se trata de reinventarse, pocos lo hacen mejor que los Stones.  

Daniel
Instagram storyboy 

viernes, 27 de junio de 2025

1639.- Miss You - The Rolling stones

 

Miss You, The Rolling Stones


     Publicada en 1978, Miss You marcó un punto de inflexión en la carrera de The Rolling Stones al fusionar su característico rock con ritmos de la emergente música disco, género que ya dominaba en la época. Incluida en el álbum Some Girls, se convirtió en uno de sus mayores éxitos, demostrando la versatilidad de la banda para adaptarse a las tendencias e la época sin perder su esencia. 

Miss You nació en un contexto de cambio cultural y personal para los Stones. A finales de los años 70, el punk y el disco dominaban la escena musical, y la banda, liderada por Mick Jagger y Keith Richards, buscaba revitalizarse tras un período de tensiones internas y críticas mixtas a discos como Black and Blue (1976). La canción surgió ddeuna serie de sesiones de jam en las que JaggerRonnie Wood experimentaban con ritmos bailables. Jagger, fascinado por la fiebre disco de Nueva York, se inspiró en noches en clubes como Studio 54, aunque siempre negó que Miss You fuera un intento descarado de subirse al carro del género.

La melancólica letra, escrita principalmente por Jagger, habla de un hombre que extraña a su amante, pero lo hace con un tono desenfadado y seductor, típico del frontman. Algunos especulan que la canción aludía a su relación con Bianca Jagger, de quien se estaba separando, aunque Mick nunca lo confirmó. Keith Richards, en la biografía oficial de la banda, señaló que la base de la canción era un riff que él y Charlie Watts habían desarrollado, al que Jagger añadió su visión disco.
Grabada entre octubre de 1977 y marzo de 1978 en los estudios Pathé Marconi de París, fue producida por The Glimmer Twins (el seudónimo de Jagger y Richards), y la banda contó con músicos de sesión, como el tecladista Ian McLagan y el saxofonista Mel Collins, cuyo solo añadió un toque soul. El bajista Bill Wyman destacó en la canción con una línea de bajo funky que se convirtió en uno de los elementos más reconocibles. El trabajo de producción fue realmente brillante, con un equilibrio perfecto entre la crudeza del rock y la pulcritud del disco. Charlie Watts era reticente al principio a los ritmos disco, pero acabó entregando una batería sólida que, junto al groove de Wyman, dio a Miss You la base perfecta para eldesarrollo del tema. La versión extendida de 12 pulgadas, con una duración de 8:36 minutos, lanzada como sencillo, enfatizó aún más su carácter bailable y encantó a los DJs de la época.
La canción se lanzó como sencillo principal de Some Girls en mayo de 1978 y rápidamente escaló en las listas de ventas. Alcanzó el número 1 en el Billboard Hot 100 de Estados Unidos y el número 3 en el Reino Unido. El éxito comercial sorprendió a algunos puristas del rock, que acusaron a los Stones de “venderse” al disco, y sin embargo, se convirtió en uno de sus puntos álgidos en la gira qe el grupo realizó en 1978.