martes, 31 de diciembre de 2024

1461.- Río Ancho -Paco de Lucía

 

Río Ancho, Paco de Lucía


    Paco de Lucía fue una figura clave en la evolución del flamenco moderno y en la expansión de sus fronteras al fusionarlo con otros géneros musicales, especialmente el jazz. Su importancia radica no solo en su virtuosismo como guitarrista, sino también en su espíritu innovador, que transformó la manera en que se percibe y se interpreta el flamenco a nivel global. Rompió con la tradición más purista del flamenco, incorporando elementos armónicos, rítmicos y melódicos del jazz, Permitieno que el flamenco, un género profundamente arraigado en la cultura española, se conectara con un público y unos músicos más amplios. Realizó colaboraciones con grnades músicos del ámbito del jazz. Uno de los momentos más emblemáticos de esta fusión fue su trabajo con artistas de jazz de renombre internacional, como John McLaughlin y Al Di Meola. Juntos, grabaron el famoso álbum Friday Night in San Francisco (1981), que se convirtió en un referente para la guitarra en general, fusionando el flamenco con el jazz y otras tradiciones musicales. Adoptó elementos característicos del jazz, como la improvisación, algo que no era común en el flamenco tradicional. Su capacidad para improvisar y dialogar musicalmente con otros guitarristas permitió que el flamenco adquiriera una dimensión más libre y contemporánea. También Introdujo nuevas progresiones de acordes y armonías inspiradas en el jazz, que enriquecieron la paleta sonora del flamenco. Todo esto hizo que Paco de Lucía se convirtiera en uno de los principales artífices del "nuevo flamenco", un subgénero que integra diversas influencias como el rock, la música clásica, y el jazz, haciéndolo más accesible para oyentes de distintas culturas.

Cuando Paco de Lucía hizo el innovador álbum Almoraima, tenía apenas 28 años. Ya consagrado como un talento prodigioso, aprovechó la oportunidad para ampliar las posibilidades de la música flamenca que tanto amaba. No fue tanto la incorporación del bajo y las congas (que ya había empleado antes) como su replanteamiento total de lo que constituía el flamenco. El tema que da título al álbum, que abre el álbum, enfatiza la influencia morisca, no sólo en la presencia del laúd, sino en su melodía, que toma prestado de los sonidos árabes. El disco, que abarca estilos como el flamenco o el jazz, fue publicado en 1976 bajo el sello discográfico Philips Records.

Incluida en este innovador trabajo se enuentra la canción Rio Ancho, que nos transporta el ritmo de la rumba a Brasil, fusionándolo con un aire tomado de la bossa nova, lo que lo hace aún más sinuoso y sensual. La canción es una pieza de guitarra flamenca española que combina influencias del flamenco y el Gypsy jazz (jazz gitano). La pieza está en la tonalidad de mi menor y progresa a la menor , re, sol, do y si7. Las interpretaciones originales de la canción tenían solos de flauta notables hacia el final de la pieza, que recordaban a la música gitana española clásica con trompetas.

lunes, 30 de diciembre de 2024

1460 - Bill Conti - Gonna fly now


1460 - Bill Conti - Gonna fly now

Gonna Fly Now”, compuesta por Bill Conti, es una de las piezas musicales más icónicas del cine, conocida por su asociación con la película Rocky (1976). Esta canción no solo se convirtió en el tema principal de la saga, sino también en un símbolo universal de superación y motivación.

La composición es un ejemplo brillante de cómo la música puede captar la esencia de una narrativa. Desde el primer segundo, los acordes orquestales se combinan con una percusión contundente que evoca un sentido de urgencia y determinación. La melodía principal, interpretada por una sección de metales prominente, es simple pero poderosa, fácilmente reconocible, y transmite una energía que inspira acción.

La letra, aunque breve, es significativa. Con frases como “Gonna fly now, flying high now”, se enfatiza la idea de alcanzar metas, superar obstáculos y elevarse por encima de los desafíos. Las voces del coro, mezcladas con los arreglos instrumentales, añaden una dimensión emocional que conecta profundamente con el oyente.

La estructura musical de “Gonna Fly Now” refleja el arco narrativo de un entrenamiento o una lucha por el éxito. Comienza de manera pausada y se construye gradualmente hacia un clímax vibrante, simulando la progresión del esfuerzo y la eventual victoria. Este diseño fue perfecto para acompañar las icónicas escenas de entrenamiento de Rocky Balboa, especialmente aquella en la que corre por las calles de Filadelfia y sube las escaleras del Museo de Arte de Filadelfia.

El impacto cultural de “Gonna Fly Now” es innegable. Más allá de su función en la película, se convirtió en un himno utilizado en contextos deportivos, eventos de motivación y cualquier situación que requiera un empuje de energía positiva. Su influencia también se extiende a la música cinematográfica, marcando un estándar para los temas de películas deportivas.

El éxito de la canción se reflejó en las listas de popularidad. Alcanzó el número uno en el Billboard Hot 100 en 1977, consolidándose como un clásico instantáneo. Además, el trabajo de Bill Conti en Rocky le valió un lugar destacado entre los compositores de cine, y su estilo ha sido imitado en innumerables ocasiones desde entonces.

Gonna Fly Now” es más que una canción; es un manifiesto de perseverancia y triunfo. Su combinación de arreglos instrumentales dinámicos, una letra esperanzadora y una ejecución impecable la convierten en una obra atemporal que sigue inspirando generaciones. Su relevancia trasciende décadas, recordándonos que, con esfuerzo y determinación, todos podemos "volar alto".

Daniel 
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domingo, 29 de diciembre de 2024

Rod Stewart - Foot Loose & Fancy Free (Mes Rod Stewart)

 



Si hay un artista con el que siempre me ha costado conectar fue Rod Stewart, y es que desde joven fui expuesto a algunos de sus hits, considerando que a mis padres le encantaban, muchos de los temas sueltos que le escuché eran bastante malos, y años después supe que pertenecían a su etapa más cuestionada, los discos post 1978, así que a la tarea encomendada de reseñar este Foot Loose & Fancy Free no llegue con mucha confianza aunque es uno de sus trabajos más celebrados y vendidos en los 70, más sabiendo que abre con “Hot Legs”, tema del que nunca fui tan fan, pero que al menos si le tenía tolerancia, ya que había cierto desplante en el vocalista coqueteando con ese riff clásico. A Rod algo le salió terriblemente mal entre 1971, cuando Stewart lanzó el clásico Every Picture Tells a Story, y 1977, cuando Foot Loose & Fancy Free llegó a las estanterías de discos. ¿Qué había sido del Rod Stewart que vagaba por los bosques de abedules blancos de la provincia de Saskatchewan, cantando con todo su corazón? Se había convertido en un periodista, vendió su alma por un dinero inmundo, Sin embargo hubo un cambio de timon, lo que me encontré fue una grata sorpresa, ya que el buen Rod experimenta con varios géneros y cuenta con unos aliados bastante potentes, creando algunas de las mejores canciones de su catálogo. El álbum ofrece un valor tremendo desde la perspectiva de los éxitos, ya que contiene algunos de los éxitos más grandes, adiós a Hollywood y todo eso... con una mirada borrosa y embelesada, Rod Stewart mira fijamente desde la portada de este álbum, con su traje blanco arrugado. Tras deshacerse de Britt, Stewart no ha conseguido librarse del todo de su aburrimiento en Los Ángeles, pero ha hecho un buen intento, con lo que parece ser un retorno deliberado a tiempos pasados. El libreto interior del álbum enfatiza la imagen de peleas borrachas (ahí está Rod, bebiendo a todo trago). Una de las claves del vigor del álbum puede ser la elección de los músicos -no los músicos de sesión de los dos lanzamientos anteriores- sino la banda que Stewart trajo consigo al local Western Springs de Nueva Zelanda a principios de 1977, la empatía entre Stewart y su banda le da a la música una base mucho más firme.

El comienzo es espectacular con “Hot Legs”, una potente pieza de rock 'n' roll inspirado en los Rolling Stones con el enorme sonido de batería de Appice al estilo John Bonham, un gran riff de guitarra y Stewart lamentando memorablemente “I love ya honey” al final de cada estribillo. Se adentra en el territorio más funky de los Stones en “You're Insane”, que está impulsada por un ritmo cargado de bajos (cortesía del coautor Chen). Me encanta el ritmo escalonado que sigue a la última línea de los estribillos: “This whole mad town thinks you're insane”. Una de las baladas mas queridas de su carrera se encuentra a continuación, “You're In My Heart (The Final Acclaim)” fue un éxito Top 5 en los EE. UU, este lento shuffle es una declaración de amor a su novia en ese momento (“Eres una rapsodia, una comedia, eres una sinfonía y una obra de teatro. Eres cada canción de amor jamás escrita pero cariño, ¿qué ves en mí?”), pero admite que “ha habido muchos amoríos y muchas veces he pensado en irme”. Hasta hace poco no había notado la similitud vocal con Steve Forbert, cuyo debut se lanzó al año siguiente. Cierra la cara A con "Born Loose", otro tema rockero con aires de los Stones que es innecesariamente largo y, en última instancia, olvidable, algo que no se puede decir de las otras 7 canciones.

Su versión de 7 minutos y medio de “You Keep Me Hangin' On” de The Supremes se inspiró en la antigua banda de Appice, Vanilla Fudge, que grabó una versión similar a una versión más lenta una década antes, no coincide del todo con esa grabación anterior, pero la voz de Stewart es fantástica, el arreglo es ajustado y rockero y hay un solo de dos guitarras delicioso, a continuación se adentra en el territorio del deep soul con una versión del éxito de R&B número uno de Luther Ingram de 1972, “(If Loving You Is Wrong) I Don't Want To Be Right”. Aparentemente, esta canción fue grabada por The Faces a principios de los 70, pero nunca se lanzó oficialmente, por lo que esta fue la oportunidad de Stewart de corregir ese error (sin juego de palabras). “You Got A Nerve” es una balada folk inquietante en la línea de Fairport Convention, que se destaca por un sonido similar al del sitar (quizás cortesía de un sitar real). Rod tiene un don para interpretar baladas lentas, podría hacer llorar a un gigante tuerto y extrañar a su madre. Esta canción tiene a Rod cantando una balada encantadora sobre decirle a una antigua ex amante que se pierda y se vaya a la mierda, simplemente encantador. En el cierre del álbum, “I Was Only Joking”, lo encuentra en modo narrador completo, con melodías impresionantes, un arreglo principalmente acústico (que se interrumpe con un solo de guitarra eléctrica de un minuto de duración en 3:45) y un coro enérgico con toques del folk que hizo que los éxitos anteriores “Maggie May” y “You Wear It Well” fueran tan entrañables.

En resumen, este es un muy buen álbum de Rod, y sus fans deberían estar encantados. Los oyentes ocasionales tal vez prefieran limitarse a sus grandes éxitos, ya que este álbum es desenfadado y elegante, pero no gratuito, un disco bastante versátil y que sorprenderá gratamente. Menos mal no hice caso a mis prejuicios para llegar al que quizás es uno de los mejores discos de Rod Stewart… Lo que me hace preguntar: ¿Qué pasó después?  Si hay una crítica sobre el álbum, es que las canciones son demasiado largas y duran unos cinco minutos en promedio. Habría sido mejor acortar un poco y luego agregar un par de canciones más divertidas.

1459 - George Harrison - Woman Don't cry for me


1459 - George Harrison - Woman Don't cry for me

"Woman Don’t You Cry For Me" es la canción que abre el álbum Thirty Three & 1/3 de George Harrison, lanzado en noviembre de 1976. Este tema marca un punto de inflexión en la carrera del ex-Beatle, pues combina sus raíces musicales con un enfoque renovado y más relajado, reflejo de la madurez artística que había alcanzado en ese momento.

Musicalmente, la canción es un híbrido entre funk, soul y rock, un estilo poco habitual para George Harrison, quien es más conocido por sus exploraciones en la música espiritual y sus influencias del folk. Desde los primeros compases, el riff de guitarra slide, una marca registrada de George, se destaca como el elemento central del tema. Acompañado de un groove sólido en el bajo y una percusión rítmica que invita al movimiento, la canción se siente alegre y despreocupada, contrastando con algunas de las composiciones más introspectivas de su discografía.

El origen de esta pieza tiene una historia curiosa: George Harrison escribió "Woman Don’t You Cry For Me" en 1969, mientras estaba de gira con Delaney & Bonnie. La inspiración le llegó cuando Delaney Bramlett le enseñó a tocar un riff de slide guitar, un estilo que Harrison no había explorado a profundidad hasta entonces. Aunque la canción estuvo guardada durante varios años, finalmente encontró su lugar en Thirty Three & 1/3, encajando perfectamente con el tono ligero y optimista del álbum.

En cuanto a la letra, "Woman Don’t You Cry For Me" es sencilla pero efectiva. En ella, George Harrison se dirige a una mujer, pidiéndole que no se aflija por él y que no se deje llevar por la tristeza. Aunque el mensaje puede parecer convencional, la interpretación vocal de Harrison le da una dimensión emocional sincera, mostrando su talento para conectar con el oyente de manera íntima.

La producción del tema es impecable, como es característico del álbum en el que aparece. George Harrison trabajó con un grupo de músicos talentosos, incluidos Billy Preston en los teclados y Willie Weeks en el bajo, quienes aportaron energía y sofisticación al arreglo.

"Woman Don’t You Cry For Me" es una de esas joyas escondidas en el catálogo de George Harrison, que merece más reconocimiento del que ha recibido. Representa su habilidad para diversificar su sonido y su pasión por experimentar con diferentes géneros, mientras conserva el corazón y la autenticidad que lo definieron como artista. Esta canción, aunque menos conocida, es una muestra brillante de la creatividad que George Harrison siguió desplegando después de la separación de The Beatles.

Daniel 
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sábado, 28 de diciembre de 2024

1458 - AC/DC - Problem Child

1458 - AC/DC - Problem Child

Problem Child” es una de las canciones emblemáticas de AC/DC, incluida en su álbum Dirty Deeds Done Dirt Cheap (1976). La banda australiana, liderada en aquel entonces por Bon Scott, entrega aquí una pieza que encapsula su energía desenfrenada y actitud rebelde, características que los consolidaron como una de las mayores potencias del rock.

Desde el primer acorde, “Problem Child” establece un tono crudo y agresivo, marcado por el característico riff de guitarra de Angus Young. La introducción tiene ese toque de rudeza que distingue a la banda, con un ritmo que te engancha y te prepara para el despliegue de pura adrenalina. Malcolm Young, en la guitarra rítmica, aporta una base sólida, mientras que Phil Rudd, con su batería precisa, complementa la atmósfera intensa.

La letra de la canción está impregnada de un espíritu rebelde y desobediente. Bon Scott se presenta como el “chico problema” que desafía a la autoridad y a las normas establecidas. Con frases como “I'm hot, and when I'm not, I'm cold as ice”, Scott encarna un personaje audaz y descarado, alguien que no teme a las consecuencias de su actitud. La interpretación vocal de Scott añade un toque irónico y provocador, como si estuviera disfrutando de su rol de “chico malo”.

Musicalmente, la canción es un ejemplo perfecto del estilo de AC/DC: una estructura sencilla, pero contundente, que prioriza la energía sobre la complejidad técnica. El riff principal, repetitivo pero efectivo, crea un ritmo que invita al headbanging. La sección del solo, a cargo de Angus Young, demuestra su habilidad para combinar velocidad y emotividad, aunque aquí opta por un enfoque más directo y menos elaborado, manteniéndose fiel al espíritu del tema.

Aunque “Problem Child” no alcanzó el mismo nivel de popularidad que otros clásicos como “Highway to Hell” o “Back in Black”, es una pieza esencial para entender la identidad de AC/DC. Representa su esencia más pura: rock simple, directo y sin pretensiones. La canción también refleja el carácter de la banda en sus inicios, cuando aún estaban consolidándose como una fuerza mundial del rock.

Problem Child” es una declaración de principios de AC/DC. Es un himno para los inadaptados, un grito de rebeldía que resonó con generaciones de fanáticos del rock. Aunque su enfoque lírico y musical puede parecer básico en comparación con obras más complejas, es precisamente esa simplicidad lo que la hace memorable. Con su actitud irreverente y energía sin límites, la canción se mantiene como un testimonio del espíritu indomable de la banda.

Daniel 
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viernes, 27 de diciembre de 2024

Disco de la semana 410: Asfalto - Asfalto

 

Asfalto


     Asfalto fue una importante banda de rock progresivo formada a principios de los años 70. Está considerado como uno de los fundadores del rock español, pero siempre han tenido más éxito fuera que dentro de las fronteras del país, cosechando numerosos seguidores en Alemania, Suiza, Puerto Rico y Sudamérica entre otros. La historia de la banda comienza en Madrid cuando el grupo Tickets cambia su nombre por el de Asfalto en 1972. La formación original estaba compuesta por José Luis Jiménez (bajo y voz), Mario del Olmo (guitarra y voz) y Pancho Company (batería y voz), siendo esta formación la que publicó un par de singles en 1972 para el sello discográfico Acción con escasa repercusión. Posteriormente entran en la banda Félix García como nuevo batería y Armando de Castro (futuro Coz y Barón Rojo) como segundo guitarra. En 1974, Julio Castejón (guitarra y voz), Enrique Cajide (batería) y Lele Laina (guitarra y voz) se unen a José Luis Jiménez en lo que se puede considerar la primera formación oficial de Asfalto. En 1976 realizan un homenaje a The Beatles,​ grabando diferentes canciones del combo inglés y que se editan en formato cassette.

Ya en 1977, el grupo ficha por Chapa Discos, una nueva marca de la compañía discográfica Zafiro que es dirigida por Vicente Romero "Mariscal". En 1978 ve la luz su primer álbum bajo el título de Asfalto, un trabajo que, por motivos de producción y discrepancias musicales, deja insatisfechos a todos sus componentes. Aun así, el disco nos acabará regalando clásicos como Capitán Trueno,​ Días de escuelaSer urbano o Rocinante. Jiménez y Laina deciden abandonar el proyecto para fundar Topo. Según Castejón, el motivo de la ruptura fue que Jiménez y Laina querían meter en el grupo a Terry Barrios (amigo de la infancia de Lele Laina) en lugar de Cajide. Castejón se negó, lo que llevó a la disolución del grupo. Entonces Mariscal Romero les dijo que Asfalto estaba inaugurando el sello discográfico Chapa y que, si se disolvían antes del lanzamiento del primer álbum, el sello se iba al garete, por lo que Castejón decidió seguir con el nombre Asfalto, invitando a Jorge García Banegas (teclados) y José Ramón Pérez "Guny" (bajo) a unirse al grupo.​ Esto traerá consigo un periodo de estabilidad y creatividad, que a la postre situará a Asfalto en lo más alto de la escena roquera española durante los años venideros.

El álbum Asfalto se convertirá uno de los discos más emblemáticos del rock progresivo y de la escena musical de la España post-franquista. Con un sonido que fusiona el rock sinfónico, el hard rock y el rock progresivo, el grupo marcó una etapa crucial en el desarrollo de la música rock en España. Este trabajo no solo presentó a la banda como una propuesta sonora novedosa, sino que también ofreció una serie de letras profundas y reflexivas sobre la vida, la política y las tensiones sociales del momento.



Comienza el disco con Ya está bien, que refleja de manera explícita el descontento de la gente y denuncia tanto la opresión de los años de dictadura como las promesas incumplidas de la nueva democracia. la paciencia de la gente ha llegado a su límite, y esta situación de desencanto era compartida por muchos jóvenes que, aunque ya habían vivido el fin del régimen franquista, continuaban enfrentándose a una sociedad que aún cargaba con muchas de las estructuras y mentalidades del pasado. La canción se convierte en una especie de grito de rebelión ante la situación política y social de la España post-franquista, un grito de frustración ante la falta de cambios reales en la vida cotidiana. El tema combina un estilo de rock directo, con un fuerte protagonismo de las guitarras eléctricas y la batería, con una estructura más cercana al rock progresivo. Esta mezcla de géneros se convierte en un reflejo sonoro de la dualidad de la canción: por un lado, el deseo de un cambio radical y directo, y por otro, la influencia de la tradición musical progresiva que caracteriza a la banda. Capitán Trueno. Al igual que el héroe del cómic, muchas personas esperaban cambios significativos en el país, tras la muerte de Franco, pero pronto se dieron cuenta de que esos cambios no ocurrirían de la manera tan rápida y efectiva como se había soñado. La frustración ante las limitaciones del sistema democrático que se estaba construyendo es un tema recurrente en muchas de las canciones de la banda, y esta no es una excepción. La figura del héroe que no puede cambiar el mundo puede verse como un reflejo de cómo, a pesar del cambio político, las estructuras de poder, la corrupción y la injusticia seguían muy presentes en la sociedad española. El idealismo y la esperanza en un cambio profundo chocaban constantemente con la realidad de un sistema que parecía estar diseñado para que las cosas no cambiaran sustancialmente. Estamos ante una canción que, más allá de su referencia al famoso personaje de cómic, se convierte en una alegoría de la frustración de toda una generación frente a la incapacidad de los ideales de transformar la realidad. Ser Urbano refleja la desconexión y alienación que puede generar la vida en una ciudad. En ella se habla de cómo el individuo se ve absorbido por el ritmo frenético de la ciudad, perdiendo su identidad en el proceso. La canción plantea una reflexión sobre el cambio que experimentan las personas al adaptarse a un entorno urbano, con sus luces, ruido y caos. El tema también puede interpretarse como una crítica a la vida moderna, llena de consumismo, superficialidad y falta de autenticidad. La ciudad, en este caso, no es un lugar que fomente el crecimiento personal, sino más bien un espacio donde el ser humano se ve arrastrado por las exigencias sociales, perdiendo su capacidad de introspección y su conexión con lo esencial. Musicalmente, la canción transcurre con una mezcla de elementos del rock progresivo y el hard rock, y las guitarras eléctricas y el ritmo enérgico le otorgan un toque de contundencia. Días de escuela es una canción nostálgica que refleja los recuerdos de la infancia y la etapa escolar. La letra de la canción habla de la mirada retrospectiva sobre los años de escuela, un período que, aunque en su momento pudo haber sido percibido como difícil o aburrido, con el paso del tiempo se convierte en un recuerdo cargado de sentimientos y reflexiones sobre el paso del tiempo y la pérdida de la inocencia. El grupo logra capturar el contraste entre la visión que se tiene de la escuela cuando se es niño —un lugar de reglas, disciplina y muchas veces de frustración— y cómo, al mirar atrás, esos mismos días se ven desde una perspectiva diferente, más suave y cargada de nostalgia. Es una reflexión sobre el proceso de maduración, el enfrentamiento con las responsabilidades y el alejamiento de un mundo más sencillo y libre. Todos los días, la canción que cierra la cara A, aborda una profunda reflexión sobre la rutina diaria y la monotonía de la vida cotidiana. La letra aborda el sentimiento de estar atrapado en un ciclo repetitivo, donde los días se convierten en una sucesión de acciones vacías y sin un propósito claro, nos describe la sensación de vivir una vida que, en su repetición constante, pierde significado. Los versos reflejan cómo, a pesar de los esfuerzos por escapar o encontrar algo que le dé sentido a la existencia, la vida cotidiana sigue siendo la misma, llena de obstáculos y de conformismo. Este sentimiento de alienación y de desconexión con lo que se desea o se sueña es un tema común en el rock, pero Asfalto lo aborda con una sensibilidad particular, utilizando una letra clara pero cargada de emociones.



Comienza la cara B con Quiero irme / La huída, otra gran
 reflexión, en este caso sobre el deseo de escapar, de huir de una realidad opresiva y desalentadora. Es un tema que toca la sensación de estar atrapado en un entorno del cual se quiere escapar, ya sea por las presiones sociales, la rutina o la insatisfacción con la vida en general. La canción transmite una fuerte carga emocional de angustia y desesperación, pero también una necesidad de libertad y de encontrar algo que le dé sentido a la existencia. Podemos entender la canción como una metáfora de la búsqueda de un cambio radical, de un nuevo comienzo. La letra expresa ese deseo de liberación, de romper con lo establecido para encontrar una identidad propia, sin las ataduras que impone la vida cotidiana. Este sentimiento de querer escapar es algo común en muchas composiciones de Asfalto, que a menudo abordan temas como la alienación, la insatisfacción con el sistema y el anhelo de libertad personal. Rocinante, canción cargada de poesía y simbolismo, es una referencia clara al caballo de Don Quijote, Rocinante, y utiliza esta figura para explorar temas como la libertad, los sueños y el anhelo de trascender la realidad cotidiana. La banda nos habla de la búsqueda de horizontes más amplios y de la lucha contra las limitaciones de la vida mundana. Rocinante, en este caso es un símbolo y representa un escape hacia un ideal quijotesco, un mundo donde los sueños y las aspiraciones tienen cabida, aunque sean inalcanzables o utópicos. La isla del amor está impregnada de lirismo y sensibilidad. Habla de un lugar idealizado, una isla metafórica donde el amor es el único refugio frente a las dificultades y la dureza del mundo real. La canción destaca por su melodía envolvente, marcada por el uso de guitarras suaves, teclados atmosféricos y una base rítmica que aporta profundidad emocional. El último tema del álbum es El emigrante, una conmovedora canción que aborda la experiencia del desarraigo y las dificultades enfrentadas por quienes se ven obligados a abandonar su hogar en busca de un futuro mejor. Es la historia de muchos que tuvieron que dejar su tierra natal debido a las circunstancias adversas, ya fueran económicas, políticas o sociales. Habla de la soledad, el sacrificio y la nostalgia que acompañaron a quienes se vieron empujados a buscar nuevas oportunidades lejos de su hogar. Es un retrato honesto y empático de una realidad muy presente en España y en muchos países durante los años 70.

Estamos ante un álbum muy importante para el rock español por varios motivos: Asfalto fue una de las primeras bandas en incorporar elementos del rock progresivo y sinfónico al panorama musical español. En los años 70, este estilo aún era un terreno relativamente nuevo en el país, y la banda contribuyó a desarrollarlo con letras poéticas, temáticas sociales y arreglos complejos; Su música emergió durante la Transición, el período de cambio político tras la dictadura de Franco. Las letras de Asfalto reflejaban los sentimientos y preocupaciones de una generación que buscaba libertad, justicia y un nuevo comienzo; y tuvieron un papel determinante en la fundación del sello discográfico Chapa Discos, dirigido por Vicente Romero, ayudando además a consolidar un movimiento de rock español que incluyó a otras bandas emblemáticas como Leño o Topo entre otras. Este sello fue crucial para el desarrollo del rock urbano en España.

1457 - AC/DC - Ain't no fun

1457 - AC/DC - Ain't no fun

La canción "Ain't No Fun (Waiting 'Round to Be a Millionaire)" es una de las joyas ocultas del álbum "Dirty Deeds Done Dirt Cheap" (1976), una obra que encapsula el humor irreverente y el espíritu rebelde de AC/DC en sus primeros años. Escrita por Bon Scott, Angus Young y Malcolm Young, esta pieza destaca no solo por su estructura inusual, sino también por su tono desenfadado y sarcástico.

La temática de la canción gira en torno a las frustraciones y aspiraciones de alguien que sueña con convertirse en millonario, pero que se enfrenta a las limitaciones de la vida cotidiana. Bon Scott, con su característico estilo narrativo, convierte este tema aparentemente mundano en una historia cargada de humor negro y realismo crudo. Desde los primeros versos, Scott pinta una imagen de su vida antes de la fama, llena de dificultades económicas y sueños de grandeza, relatando con ironía las desventuras que enfrenta mientras espera su momento de gloria.

Musicalmente, "Ain't No Fun" es una canción de larga duración, con un tempo relajado que contrasta con el tono energético típico de la banda. Este enfoque permite que los riffs de guitarra de Angus y Malcolm Young brillen en su simplicidad, creando una base sólida y pegadiza que da espacio a la narrativa de Scott. La línea de bajo de Mark Evans y la batería de Phil Rudd aportan un ritmo constante que refuerza la sensación de monotonía y espera reflejada en la letra.

La composición también destaca por su estructura dinámica. En lugar de recurrir a un formato tradicional, AC/DC opta por un enfoque más libre, con pausas y momentos en los que la música acompaña las reflexiones sarcásticas de Scott. Esto le da un carácter casi teatral a la canción, como si estuviera compartiendo una historia personal en un bar lleno de humo.

"Ain't No Fun" no es uno de los éxitos más conocidos de la banda, pero tiene un lugar especial entre los fans más devotos. Es un ejemplo perfecto de cómo AC/DC utiliza el humor y la honestidad para conectar con su audiencia, demostrando que incluso en sus canciones menos comerciales, mantienen su autenticidad y su espíritu inquebrantable.

Esta pieza es una mezcla de introspección y diversión cruda, y aunque su duración y estilo pueden no ser para todos, es una representación brillante del talento narrativo de Bon Scott y del enfoque musical único de AC/DC en los años 70.

Daniel 
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jueves, 26 de diciembre de 2024

1456.- Big Balls - AC/DC



Hay algo de la era de Bon Scott que me gusta, tenía sentido del humor, pero también era un muy buen compositor y su voz era muy diferente. Esta canción juega con las palabras con una connotación sexual, es claramente una canción juvenil, pero lo digo en el mejor sentido. La forma en que la canta la elegante voz de Scott... esta obra maestra fue escrita por Bon Scott, Malcolm y Angus Young. Las insinuaciones sexuales no son nada nuevo en el rock and roll, con canciones como My Ding-a-Ling de Chuck Berry (que me recuerda el espíritu de esta canción) y Great Balls of Fire de Jerry Lee Lewis. Esta canción estaba en su álbum Dirty Deeds Done Dirt Cheap que solo se lanzó en Europa y Australia en 1976. A Atlantic Records no le gustaron las voces ni la producción del álbum, por lo que en un principio lo rechazaron, pero terminaron lanzándolo en Estados Unidos cinco años después. El álbum finalmente se lanzó en 1981 en Estados Unidos y Canadá después de la muerte de Bon Scott. El nombre del álbum y la canción principal se basaban en una referencia a un dibujo animado llamado Beany and Cecil , que Angus veía cuando era niño. Uno de los personajes, “Dishonest John”, llevaba una tarjeta de visita que decía “Tratos sucios a muy bajo precio. Días festivos, domingos y tarifas especiales”. El álbum ha sido certificado seis veces platino en Estados Unidos por ventas de más de seis millones de copias. Es el quinto disco de AC/DC con mayores ventas, detrás de Back in Black, Highway To Hell, Black Ice y The Razor's Edge. 


Para Angus, “Big Balls es la otra canción de ese disco que se me quedó grabada en la memoria. Era solo una broma, un poco de diversión. Necesitábamos rellenar el álbum, alguien se le ocurrió una rumba o un tango y Bon comenzó a escribir esas palabras tan divertidas. A Bon le encantaban las insinuaciones y estaba obsesionado con sus pelotas”. El título es un juego de palabras sexual, la letra describe un cóctel, pero obviamente tiene un doble significado. AC/DC se toma la música mucho más en serio que las letras de la mayoría de sus canciones, a menudo recitan letras humorísticas para que no los tomen demasiado en serio. Chuck Berry es una gran influencia en su estilo lírico, escribió muchas canciones con letras muy sugerentes, pero las presentó de una manera cómica para que no parecieran ofensivas como la anteriormente mencionada My Ding-a-Ling. Una curiosidad es que las emisoras de radio a veces pasan la canción junto con "Rocker" porque está justo después de esta en el álbum y la canción comienza inmediatamente. Los DJ de radio simplemente dejan que suene la siguiente canción ya que ambas son cortas. Creo que esta canción se lleva el premio a la canción más sucia del álbum, me encanta el tono de su voz, cuando dice "el regalo de Dios para el salón de baile..." la forma en que la canta intenta sonar elegante, eso es lo que la hace tan graciosa, la cantan con tanta clase, mientras cantan sobre cosas pervertidas con ese canto de fondotan mitico"WE GOT BIG BALLS, WE GOT BIG BALLS"


miércoles, 25 de diciembre de 2024

Rod Stewart - A Night on the Town (Mes Rod Stewart)



Dentro del #MesRodStewart en 7dias7notas.net le llega el turno a "A Night on the Town", el que fuera séptimo álbum de estudio de Rod Stewart, lanzado en 1976. Y aunque estoy de acuerdo con el dicho de "No hay que juzgar un libro (o en este caso un disco) por su portada", la verdad es que la cosa ya apuntaba maneras desde la cubierta del disco, que reproduce una pintura de Pierre-Auguste Renoir, en la que insertaron a Rod Stewart en el centro del cuadro, ataviado con un traje de época. No se me ocurre mejor portada para un disco que combina canciones de rock clásico y elegantes baladas, y que fue el último álbum de Stewart en alcanzar el número 1 de las listas de ventas hasta el más reciente "Time" de 2013.

La cara A de "A Night on the Town" está dedicada a los temas más suaves y melódicos, pero comienza con fuerza con el hit "Tonight's the Night (Gonna Be Alright)", una de las canciones más famosas de Rod Stewart, y un tema que no estuvo exento de cierta polémica por su contenido sexual, especialmente en la frase: "Vamos, ángel, mi corazón está en llamas, no niegues el deseo de tu hombre, serías muy tonta si detuvieras esta marea, despliega tus alas y déjame entrar", censurada por algunas emisoras de radio. La canción fue prohibida por la BBC e incluso generó una protesta pública del célebre reverendo Jesse Jackson por su letra y los más que sugerentes susurros femeninos, a cargo de Britt Ekland, novia de Stewart en ese momento, que también aportó una parte vocal recitada en francés.

Rod Stewart se inspiró para la composición en el éxito del grupo America "Today's the Day". Al escucharla un día que Dan Peek (America) y Rod Stewart estaban tocando juntos en el estudio, Peek tocó la canción que había compuesto y Stewart comentó que le acababa de dar una idea para una canción nueva. Stewart se basó en esa idea y cambió el día por la noche, un momento mucho más interesante para ciertas cosas. "Tonight's the Night" se convirtió en un gran éxito comercial en la carrera de Rod Stewart, alcanzando por segunda vez el top del Billboard Hot 100 estadounidense y manteniéndose en lo más alto durante ocho semanas consecutivas, un récord personal que no volvió a repetir con ninguna otra de sus canciones. 

Le sigue a la zaga y en el orden del disco la delicada "The First Cut Is the Deepest", una acertada versión de un tema de Cat Stevens de 1967, que en la voz de Stewart fue también un gran éxito, manteniéndose en el puesto nº 1 del UK Singles Chart durante cuatro semanas, y alcanzando el puesto nº 21 del Billboard Hot 100 estadounidense. Desde entonces, "The First Cut Is the Deepest" se ha convertido en una de las canciones más emblemáticas de la carrera de Rod Stewart. La letra describe las dudas del protagonista sobre si será capaz de volver a enamorarse, después de haber perdido su primer amor, teniendo en cuenta que "El primer corte es el más profundo", refiriéndose metafóricamente a la herida que la primera decepción amorosa deja para siempre en el corazón.

Tras una correcta "Fool for You", firmada por el propio Rod Stewart, la tercera joya de la cara A y del disco es "The Killing of Georgie", con una contundente y melancólica letra que narra la historia de un amigo gay que es expulsado por su familia y se convierte en la sensación de la vida nocturna de Nueva York, pero cuyo destino le depara una violenta muerte a manos de unos pandilleros de New Jersey, durante un intento de robo.

La cara B es la parte rockera del disco, con momentos relevantes como "The Balltrap", firmada por Stewart y con un rock cercano a The Faces y The Rolling Stones, la más melódica "Pretty Flamingo", escrita por Mark Barkan y la rítmica e intensa "Big Bayou" firmada por Gib Guilbeau, en la que destaca de nuevo un ritmo de guitarras muy stoniano y una abrasiva sección de metales. No menos influenciada por sus Satánicas Majestades es "The Wild Side of Life", en la que destacan sobremanera las guitarras y los ritmos estilo Stones, combinados con violines y con la certera y potente voz de Rod Stewart en su mejor momento.

El disco cierra con "Trade Winds", el único momento de calma de la segunda cara, una pieza melancólica y taciturna de piano, teclado y saxofón, con Rod Stewart cantando en el estilo pausado y con aire crooner que tanto explotaría en décadas posteriores de menor brillo e inspiración. Pero esa época estaba aún por llegar, y aquí no solo no desentona sino que queda como curioso e inspirado final, en contrapunto con la intensidad del resto de canciones de la segunda mitad de un disco que, como ya hemos comentado, es uno de sus grandes trabajos, y tiene por derecho propio su lugar en la revisión del #MesRodStewart en 7dias7notas.net

1455.- Dirty Deeds Done Dirt Cheap - AC/DC


Pocas canciones pueden capturar verdaderamente la esencia del rock 'n' roll como Dirty Deeds Done Dirt Cheap de AC/DC, publicada en 1976, este himno es una muestra perfecta de la actitud sin complejos de la banda, sus riffs enérgicos y su energía sin filtros, todo ello envuelto en tres minutos de glorioso caos rockero. La canción se ha ganado un lugar atemporal en la historia del rock, con un encanto áspero que todavía resuena casi medio siglo después. Desde el primer acorde potente, Dirty Deeds Done Dirt Cheap te atrapa. El riff inicial es inmediatamente contagioso: una de esas líneas de guitarra icónicas y sin sentido que te hacen querer subir el volumen y salir a la carretera. Tiene una cualidad primaria y sin pulir, una simplicidad reducida a lo esencial. AC/DC demuestra que no se necesitan solos elaborados ni melodías intrincadas para hacer que la gente se mueva; a veces, un riff sencillo inspirado en el blues es todo lo que se necesita. Una parte importante de lo que hace que Dirty Deeds haya permanecido a través de los años es la interacción entre los hermanos Young. La guitarra rítmica de Malcolm es la columna vertebral, proporcionando una potencia constante y cruda que fundamenta la canción, sus acordes gruesos y con un ritmo descendente le dan a Angus la libertad de tejer su propia marca de guitarra principal de alta energía y abrasadora sobre los agudos. Juntos, crean una tensión dinámica que es a la vez estimulante y perfectamente equilibrada. El ritmo reservado pero dominante de Malcolm le permite a Angus dar rienda suelta a sus riffs, lo que da como resultado una química musical que es el corazón del sonido de AC/DC.

Más allá del adictivo trabajo de guitarra, las letras cuentan una historia que captura el espíritu travieso y rebelde de AC/DC. En Dirty Deeds , Bon Scott canta sobre un "solucionador de problemas" clandestino que se ofrece a encargarse de tus problemas, con métodos que son, digamos, poco convencionales. Con líneas como "Zapatos de hormigón, cianuro, TNT", la voz áspera de Scott da vida a este personaje de "pistolero a sueldo". La narrativa es irónica, oscuramente humorística y casi caricaturesca, pero resuena. No es de extrañar que los fans todavía se encuentren sonriendo ante la audacia de las letras, deleitándose con el ambiente descarado y rudo.
Un ingrediente musical que añade una capa extra de actitud a Dirty Deeds es el uso del "tritono del diablo" (también conocido como intervalo de quinta disminuida o quinta bemol). Históricamente, este intervalo tiene una asociación siniestra: incluso fue prohibido en cierta música religiosa hace siglos por su cualidad "diabólica". Cuando AC/DC incorpora el tritono, le da a la canción un toque siniestro y rebelde que amplifica su tono oscuro y travieso. El tritono crea la disonancia justa para hacer que el oyente se sienta un poco nervioso, agregando un toque de peligro que se siente tan bien para una canción que trata sobre el inframundo.


martes, 24 de diciembre de 2024

1454.- El jardin prohibido - Sandro Giacobbe

Sandro Giacobbe proviene de una familia modesta genovesa. Siendo adolescente, abandonó sus estudios por la música, y formó junto a unos amigos su primera banda: Giacobbe & Le Allucinazioni, con los que comienza a tocar por la región de Liguria. En 1971 consigue un contrato discográfico con Dischi Ricordi y publica un par de singles de presentación bajo el nombre de Giacobbe, con los que pone de manifiesto su personalidad como cantautor melódico-romántico. Estos primeros trabajos no tuvieron mucha repercusión y pronto cambia de sello discográfico.

En 1973 fima contrato con CBS, compañía que se interesa sobre todo en su potencial como compositor. Algunas de sus canciones se hicieron famosas en la voz de otros cantantes, caso del éxito «La vita è una gran cosa», interpretada por Johnny Dorelli. A finales del año publica su primer álbum como solista, disco que contiene la canción «Signora mia», que tras presentarla en el Festivalbar ’74, se convierte en todo un éxito en Italia. Gianni Nazzaro, por su parte, apoya el lanzamiento de Sandro, haciendo suyas algunas composiciones del genovés, caso de «Piccola mia piccola», «Signora, addio», «Questo sì che è amore» o «Era o non era», que se convierten en éxitos de ventas en 1974.El gran la confirmación definitiva de Sandro como cantautor de grandes temas de amor será 1975, primero con «Il giardino proibito», que se convierte en uno de los grandes éxitos del año, y luego con «Io prigioniero», canción con la que gana la Gondola d’Oro en la «Mostra Internazionale di Musica» de Venecia. En 1976, el año de su gran éxito, Sandro obtuvo el tercer puesto en el Festival de San Remo con "Gli occhi di tua madre". Sus canciones escalaron posiciones en las listas hasta que "Sarà la nostalgia" en 1982 se convirtió en uno de los éxitos más aclamados del año. En 1983, participó en San Remo y nuevamente en 1990, con la canción "Io vorrei". Sandro continuó realizando giras y lanzando canciones populares y canciones de esperanza durante los años 90 y 2000, incluidas colaboraciones con su compañera Marina Peroni.

El jardín prohibido obtuvo un éxito arrollador tanto en la península transalpina como en el mundo latino, ya que de inmediato se realizó una versión en castellano. Una canción un tanto triste y cruel, en el que el protagonista le cuenta a su amada que le ha sido infiel con su mejor amiga pero que en todo momento ha estado pensando en ella. Si esto no es suficientemente cruel, el famoso estribillo de «lo siento mucho, la vida es así, no la he inventado yo» lo remata. Aprovechando el auge que por aquella época protagonizó la música romántica azzurra, Giacobbe dio en el clavo con una composición creada junto a los letristas Daniele Pace y Oscar Avogadro. Pocos que vivieron aquellos tiempos la habrán olvidado. De hecho, la obra fue interpretada en más de diez idiomas. La presencia de ‘El jardín prohibido’ era obligada en los tocadiscos que giraban a 45 revoluciones por minuto y se convirtió en banda sonora de aquellas fiestas que se extendieron por toda España recién muerto Franco. Su letra es todo un manual de excusas para justificar una infidelidad con la mejor amiga de su pareja, a lo largo de poco más de cuatro minutos se extiende todo un pliego de descargos con un toque machista. La culpa era de la otra, autora de la tentación, el hombre es también una víctima, como Adán. Las referencias bíblicas tampoco faltan, se habla del fruto prohibido y el objetivo, como en cualquier religión, siempre es la búsqueda del perdón. Sandro Giacobbe, que combinaba belleza masculina, una voz rasgada y una forma de cantar romántica, seguro que logró muchas indulgencias.


lunes, 23 de diciembre de 2024

1453.- Night Moves - Bob Seger

 


"Night Moves" ("Movimientos nocturnos") fue el single principal del álbum "Night Moves" (1976), el noveno disco publicado por el cantante y compositor estadounidense Bob Seger. El éxito de esta canción hizo que Seger pasara de ser un artista popular y conocido a nivel regional a tener repercusión a lo largo y ancho de los Estados Unidos y Canadá.

La letra de la canción es bastante autobiográfica, y está basada en una experiencia amorosa de la adolescencia, cuando en una fiesta en el campo de una granja de las afueras conoció a una chica italiana cuyo novio estaba ausente por haberse alistado en el ejército. Desde ese día, empezaron a salir ocasionalmente, y Seger compuso varias canciones para impresionarla, pero el novio regresó y la chica acabó casándose con él, rompiendo el corazón del joven Bob Seger, que volcó buena parte de sus sentimientos en la composición de "Night Moves".

Seger se inspiró además en la película American Grafiti (1973), cuando al salir del cine pensó: "Yo también tengo una historia que contar". Escribió buena parte de la letra en un restaurante de Ann Arbor, intentando recrear la estética sesentera de la película en el entorno y en la composición, y tomo como referencia el "Jungleland" de Bruce Springsteen para incluir dos puentes en "Night Moves", un exquisito medio tiempo de guitarra acústica, aderezado con buenas dosis de órgano, piano, guitarra eléctrica y coros femeninos, y una melancólica historia sobre los "movimientos nocturnos" con un amor del pasado en un viejo Chevy del 60, en la intimidad de un oscuro maizal.

domingo, 22 de diciembre de 2024

Rod Stewart - Atlantic Crossing (Mes Rod Stewart)

 

Cuando miro los primeros discos en solitario de Stewart, siempre me da miedo pensar que quizás este sea el que logre abandonar su sonido inicial para dedicarse a la búsqueda de dinero de su carrera posterior. Pero la verdad nunca es tan sencilla, así que me encuentro escuchando un disco que logra sonar lo suficientemente parecido a su sonido inicial como para no dejarlo, pero que también tiene suficientes signos de desastre inminente como para pregutarme ¿Es Rod Stewart? Con la separación de Faces y su último álbum grabado en el Reino Unido, "Smiler", un fracaso comercial y crítico, Rod hizo como el título del álbum y grabó este álbum en Memphis bajo la dirección de Tom Dowd, el hombre detrás del exitoso álbum de regreso de Eric Clapton, "461 Ocean Boulevard". Así que con una nueva banda de músicos de sesión flotantes y un sonido menos desvencijado y estridente a sus espaldas, Stewart se propuso impulsar su carrera con un sonido más amigable con el AOR y hay que decir que, en general, lo encontró. Curiosamente, el disco tuvo mucho más éxito en Gran Bretaña que en Estados Unidos, ayudado por el éxito masivo Sailing que no llego ni al top 40 de Billboard.

El primer desastre es cuando Stewart llama a un lado "Fast Side" (lado rápido) pero incluye una balada. Tal vez mis oídos me traicionen, pero al menos una canción del "Slow Side" (lado lento) es más rápida que una canción del "Fast Side" (lado rápido). Y es que lo que no ayuda es que las baladas suenan considerablemente más pulidas, aunque el conjunto es definitivamente más pulcro que sus discos anteriores. Y aunque todo está más pulido, las pistas de rock al menos pueden darte la impresión de que no ha cambiado mucho, es fácil escucharlas y dejar que la voz de Stewart te distraiga de cómo todo está más unido, menos crudo. Pero una vez que empiezan las baladas (y son versiones, por cierto), te das cuenta de que las cosas realmente han cambiado, que las cosas se han limpiado demasiado. ¿No habríamos preferido todos escuchar un álbum grabado con los MG (que hacen una aparición) que con los músicos de sesión por los que los reemplazó? Yo sé que lo habría hecho. El simbolismo de la portada era claro; Stewart tiene un pie en el Nuevo Mundo, pero está mirando hacia atrás, al Viejo País, y lo que es más importante, tiene un pie todavía en suelo británico. Es cierto que no podría haberse quedado con una fórmula que había durado más de lo que era bienvenido

 

Este album parece el comienzo de una nueva etapa en su carrera, en la que quería mantener la fama que ganó tocando música rock de verdad, yendo a donde el dinero lo llevara. Dicho esto, sigue siendo un disco aceptable, especialmente la primera cara, le penaliza que adolece de una canción rock cerca del sobresaliente. “Three Time Loser", toma impulso, no puedes evitar preguntarte si Rod quiere tener su pastel y comérselo. Otra historia de perros peludos al estilo de Jack el muchacho (o Rod el Mod) (esta vez sobre enfermedades venéreas). El oyente casual no tarda mucho en darse cuenta de las disparidades: el acompañamiento musical es un poco demasiado limpio, los coristas demasiado eficientes, el solista de saxo tenor demasiado suave y, sobre todo, Rod, un poco demasiado desesperado por impresionar con sus gritos, haciendo todo lo posible por convencernos de que sigue siendo el mismo Rod Stewart de pub rockero a pesar de saber que las reglas del juego han cambiado. El problema es, en realidad, bastante simple: obviamente está tratando de encontrar su lugar en un nuevo entorno y, aunque los músicos están evidentemente más que dispuestos a ayudarlo con este material, él y ellos no hablan exactamente el mismo idioma, por lo que existe un problema de incompatibilidad estética. Las aventuras de una noche en el tibio reggae-funk de "Alright For An Hour" y emborracharse en la más atrevida "Stone Cold Sober", a todo lo cual contribuye el hecho de que es coautora de Steve a Cropper. En cuanto a "All In The Name Of Rock And Roll", una canción menor sobre la búsqueda de una banda de rock and roll que su anterior, suena tanto como "Bitch" de los Stones de "Sticky Fingers" que en realidad debería llamarse "Son of a Bitch".

De las baladas, "Drift Away" debe clasificarse como una de sus versiones más inútiles, el original de Dobie Gray era casi por definición un disco del período de Watergate, una reflexión de un sobreviviente sobre lo que lo había llevado a este estado de aceptación resignada en primer lugar. Fatalmente, Stewart sustituye el "free" en el estribillo de "Give me the beat, boys, to free my soul" por un segundo "soothe" y simplemente no tiene peso emocional; lo mismo puede decirse de las líneas de guitarra puntillistas y francamente demasiado recargadas de Steve Cropper: nuevamente, parece querer convertir la canción en reggae, y los wah-wahs sobrecargados con micrófonos en los estribillos son innecesarios. "It's Not The Spotlight" y "Still Love You" intentan de manera poco convincente reintroducir la mandolina en su sonido que tanto caracterizó a sus éxitos anteriores. Su famosa versión de “I Don't Want To Talk About It” de Danny Whitton sacó a relucir una sensibilidad y compasión en su interpretación que habían estado ausentes en su obra durante algún tiempo. El original de Crazy Horse de 1971 se desmorona mientras se está interpretando; si no lo hubiera sabido mejor, lo habría tomado por una de esas pruebas de lo-fi de Lou Barlow con Sebadoh en los primeros álbumes de Dinosaur Jr. Pero aquí, Stewart no se deja apurar por las guitarras o el bajo, ni por las cuerdas de Arif Mardin, todos parecen estar conversando con él, o en todo caso escuchándolo.

Eso solo deja los dos lanzamientos originales de sencillos, ¿cómo se sostiene “Sailing” de Stewart? Lena se aventuró a opinar que la canción era una especie de compromiso entre “Sail Away” de Randy Newman y “Na Na Hey Hey Kiss Him Goodbye” de Steam, noto la participación de Steve Cropper y el tema general del agua y la etiquetaría como el reverso de “Dock Of The Bay”: no se trata de un viaje sin rumbo; Stewart suena vulnerable a veces, pero sabe exactamente a dónde va y cómo llegar allí. Suena arrepentido –como sólo él podría hacerlo– porque sabe que está dejando toda una vida, toda una historia, detrás de él. Pero, como sucede con tantos sencillos de rock “clásicos”, “Sailing” tiene mucho más sentido en su contexto original; las cuerdas de Mardin se hinchan a medida que Stewart se aleja hacia el atardecer, hacia la oscuridad; el cantante está diciendo su verdadero adiós a “nosotros” siempre y cuando pueda recordar quiénes se supone que somos “nosotros”. Así, el espacio vacío y oscuro representa lo desconocido, y Atlantic Crossing , aunque irregular a la hora de encontrar sus objetivos, merece más que la historia que posiblemente se dio a sí misma, tan lista como el modesto juego de palabras latente en su título. Y el segundo una versión centelleante y lenta del clásico de Motown "This Old Heart Of Mine", aunque años después lo llevaría a la velocidad original junto con el cantante original Ronald Isley. También es digno de mención el tema que, de alguna manera, nunca llegó a la selección final de las sesiones, una magnífica y sobria interpretación de "To Love Somebody" con la formación original de los MG de una canción que los Bee Gees escribieron irónicamente pensando en Otis Redding. Lamentablemente, el baterista metronómico Al Jackson murió poco después de que se grabara el tema, la última vez que el gran grupo de estudio grabó junto y fue un canto del cisne muy apropiado.

 

"Atlantic Crossing" es un buen álbum, no un gran álbum, irregularmente inconsistente como tantos de sus álbumes, pero con una producción intuitiva y comprensiva de Tom Dowd, ayudó a allanar el camino para el éxito y el exceso futuros, muchos de los cuales son inferiores a lo que logró aquí. En definitiva, este disco es fácilmente recomendable para los adictos a Rod Stewart. Pero los fans en general deberían comprar primero todos los álbumes anteriores (así como los álbumes de Faces). Después, procedan con cautela. Atlantic Crossing no se merece este tratamiento suntuoso, pero sin duda intenta que los fans aprovechen al máximo su dinero. El sonido remasterizado es potente y las notas del álbum son extensas.

1452.- Fernando - ABBA

 

“Fernando” es una de las canciones más exitosas jamás escritas. La composición y la interpretación de ABBA son tan poderosas, y el personaje de Fernando es tan adorable, que la canción parece existir fuera de la edad y el tiempo. ¿Por qué algunas canciones llegan a un lugar de trascendencia como este? Canciones como “Yesterday”, “Like a Rolling Stone” o “Smells Like Teen Spirit” son más que simples éxitos comerciales. Tocan el alma de lo que significa ser humano. Y el corazón mismo de esa alma es la libertad. “Fernando” es una celebración de la lucha por la libertad. Piense en la sensación de ser liberado de las restricciones. Es una exaltación que comparten millones de personas de diferentes países y períodos de tiempo. Una sed compartida de libertad, ese es el sonido de “Fernando”. La composición e interpretación de “Fernando” por parte de ABBA es el sonido de la exultación. Es uno de los grandes momentos de la historia de la música pop.

La canción cuenta la historia de dos veteranos luchadores por la libertad de la Revolución Mexicana que recuerdan su lucha por la independencia. “Fernando” comienza con una escena que representa el momento en que los dos revolucionarios entran en batalla. A medida que el sonido de la guerra se acerca, la valentía de Fernando ayuda a los dos rebeldes a superar el miedo a morir. Un vívido retrato de estrellas brillantes contra el sonido de cañones y disparos muestra a los dos revolucionarios confirmándose mutuamente que la causa de la libertad es justa. Se lanzan a la lucha sin remordimientos. Mirando hacia atrás, lo volverían a hacer todo de nuevo. Ya anciano, le preguntan a Fernando si todavía puede oír el sonido de los tambores. Aunque la pelea fue hace mucho tiempo, su compañero recuerda la mirada de orgullo en los ojos de Fernando.

 

 “Fernando” fue escrita por los miembros de ABBA Benny Andersson y Björn Ulvaeus. Ulvaeus dijo que la canción se le ocurrió mientras estaba acostado bajo las estrellas en una noche de verano. Imaginó a dos revolucionarios, heridos y ancianos, recordando su lucha por la independencia. “Fernando” fue un sencillo número 1 en 13 países y alcanzó el puesto número 13 en el Billboard Hot 100 de EE. UU. “Fernando” se convirtió en la primera de dos canciones de ABBA en alcanzar el número 1 en la lista Adult Contemporary de Billboard ; se le unió “The Winner Takes It All” en 1980.

sábado, 21 de diciembre de 2024

1451 - ABBA - Dancing Queen


1451 - ABBA - Dancing Queen

“Dancing Queen” es, sin lugar a dudas, una de las canciones más icónicas de la música pop. Lanzada en 1976 como parte del álbum Arrival, la banda sueca ABBA logró con esta pieza capturar la esencia de una época y cimentar su legado en la historia musical. Escrita por Benny Andersson, Björn Ulvaeus y su colaborador Stig Anderson, esta canción es una obra maestra que combina elementos de pop y disco, fusionados con una melodía cautivadora y una emotiva interpretación vocal.

Desde los primeros acordes en el piano, “Dancing Queen” transporta al oyente a una pista de baile llena de luces y energía. La introducción, con su distintivo arpegio, marca el tono de una melodía que es tanto nostálgica como vibrante. La producción es impecable: cada instrumento —desde los teclados hasta la batería— aporta su propio matiz, creando una atmósfera rica y envolvente.

El núcleo de la canción es su letra, que narra la experiencia de una joven viviendo un momento efímero pero inolvidable en la pista de baile. Líneas como "You are the Dancing Queen, young and sweet, only seventeen" evocan imágenes de juventud, libertad y alegría. Esta conexión emocional es quizás la clave de su éxito: logra resonar en cualquier persona que alguna vez haya sentido la magia de perderse en la música.

La interpretación vocal de Agnetha Fältskog y Anni-Frid Lyngstad es otro de los puntos destacados. Sus armonías son cristalinas, y logran transmitir tanto la euforia de la danza como la melancolía inherente al paso del tiempo. La forma en que las voces se entrelazan con la instrumentación demuestra la habilidad del grupo para crear canciones atemporales.

El éxito de “Dancing Queen” fue inmediato y masivo. Alcanzó el número uno en numerosos países, incluidos Estados Unidos, Reino Unido y Australia. Su popularidad no se ha desvanecido con el tiempo; sigue siendo un himno en fiestas, bodas y eventos de toda índole. La canción también ha tenido un impacto cultural significativo, siendo versionada, incluida en películas y utilizada en musicales como Mamma Mia!.

Dancing Queen” es mucho más que una canción; es un símbolo de alegría, energía y la capacidad de la música para conectar generaciones. Es un recordatorio de que, al menos por unos minutos, todos podemos ser reyes o reinas en la pista de baile. Sin importar cuántos años pasen, esta joya de ABBA continuará brillando con la misma intensidad que el día de su lanzamiento.

Daniel 
Instagram storyboy 

viernes, 20 de diciembre de 2024

Disco de la semana 409: Clutching at Straws - Marillion

 

Clutching a Straws, Marillion


   Marillion, la banda de rock británica, formada en Aylesbury , Buckinghamshire, en 1979, ha atraído a un gran número de seguidores gracias a su mezcla evolutiva de rock progresivo con elementos de neorromanticismo y crítica social. Marillion se convirtió en el grupo de neo-prog más exitoso de la década de los años 80. Surgidos de la escena musical post-punk en Gran Bretaña, actuaron como un puente entre los estilos de punk rock y rock progresivo clásico, y sus letras articuladas y a menudo conmovedoras fueron, hasta su álbum Clutching at Straws (1987), escritas por Fish, quien poco después de este disco se fue para seguir una carrera en solitario. Precisamente nos vamos a centrar en este álbum, Clutching at Straws, cuyo título es una expresión que se utiliza ocasionalmente para describir intentos o soluciones que abordan problemas reales de forma insuficiente o simbólica en lugar de sus causas reales. Cada canción cuenta una historia única con su propio conjunto de imágenes.

Clutching at Straws fue grabado en los Westside Studios de Londres, bajo la producción de Chris Kimsey, y publicado el 22 de junio de 1987 por el sello discográfico EMI Records. Supuso el cuarto álbum de estudio de la banda, fue el último álbum con el cantante Fish , quien dejó la banda en 1988, y es un álbum conceptual . Aunque no alcanzó las ventas de su predecesor, el álbum número uno Misplaced Childhood(1985), permaneció 15 semanas en la lista de álbumes del Reino Unido (la permanencia en la lista más corta de cualquiera de los primeros cuatro álbumes de estudio de Marillion), y fue un éxito comercial inmediato, convirtiéndose en el segundo álbum de Marillion con mayor éxito en las listas al ingresar en la lista en el número dos.



La portada y la contraportada del álbum describen la inspiración de Fish para las letras del álbum, así como algunos de sus héroes. Hay alusiones a ellos a lo largo del álbum. El escenario es un pub británico (el Bakers Arms en 
Colchester ), y las personas representadas son las siguientes: En el frente, de izquierda a derecha: Robert Burns , Dylan Thomas , Truman Capote y Lenny Bruce; y en la parte posterior, de izquierda a derecha: John LennonJames Dean y Jack KerouacEl artista artífice de la portada, Mark Wilkinson, expresó su decepción con la portada, que pretendía que fuera más detallada y presentara más personajes, pero se apresuró debido a que se adelantó la fecha de lanzamiento del álbum: "Fue una tortura hacerlo. Especialmente porque recibía llamadas casi todos los días de EMI o John (el manager John Arnison) diciéndome que si no cumplía con ese plazo, se perdería el tiempo disponible y la simbiosis gira/álbum estaría en peligro. De alguna manera lo hice, ¡aferrándome al sueño! EMI se sintió aliviada. Fish parecía estar bien. El resto de la banda no se conmovió mucho, era muy diferente a las portadas anteriores. ¡Estaba muy decepcionado! Me encantó este álbum, todavía me encanta. Fue una especie de cumbre en lo que a mí respecta. Probablemente mi favorito de ellos. ¡Y me sentí engañado! No era la portada que había imaginado. No se ganan todas, créeme!" 

En cuanto al concepto del álbum, gira en torno al personaje de Torch (supuestamente un descendiente del bufón de las portadas de álbumes anteriores), quien es un hombre de 29 años desempleado cuya vida es un desastre. Busca consuelo principalmente en el alcohol para adormecerse. Intenta, pero no lo consigue, olvidar lo que se le viene encima: un matrimonio fallido, ser un padre irresponsable y su falta de éxito comercial como cantante de una banda. Mientras se emborracha, también escribe sobre su entorno y sus lamentos. Como Torch no tiene otra salida real a su disposición, acaba en bares, habitaciones de hotel y en la carretera, gritando y borracho, por lo que se le describe como alguien sin redención ni esperanza. A través de las letras, Fish explora con crudeza y honestidad sus propias experiencias y luchas, lo que otorga al disco una profundidad emocional excepcional. Cada canción se entrelaza para formar una narrativa coherente, sombría, humana y cautivadora. 

El álbum abre con Hotel Hobbies, un tema que sumerge al oyente en los excesos y el vacío emocional del estilo de vida de Torch, un poeta y artista que intenta encontrar sentido en su vida mientras lidia con la autodestrucción. Este hilo continúa en Warm Wet Circles y That Time of the Night, piezas cargadas de melancolía y desesperación que revelan la creciente desconexión del protagonista con su entorno y consigo mismo. Just for the Record contiene una mezcla de ironía y honestidad, Torch reconoce su problema con la bebida, pero también justifica su dependencia. Tiene un tono más ligero a pesar de la gravedad del tema. White Russian cierra la cara A, una crítica política y social, con referencias al antisemitismo y la intolerancia en Europa. Fish utiliza a Torch como una voz para expresar su preocupación por los problemas mundiales.



El segundo acto del álbum se desarrolla con 
Incommunicado, que describe los obstáculos del negocio y cómo las presiones en la vida real ejercidas por el sello estadounidense de la bandalos aplastaban desde afuera para que tuvieran éxito o serían abandonados por la compañía a su suerte, lo que le acabó sucediendo al grupo de todos modos unos años después. Torch Song es una reflexión íntima y melancólica sobre la relación de Torch con el alcohol. Se desarrolla como una conversación entre Torch y un médico. Slainte Mhath es simple y elegante, y va aumentando hasta llegar a un crescendo dramático. Toma su nombre de un brindis gaélico que significa "buena salud". La canción es un llamado a la autenticidad y una crítica al materialismo, abordando también la lucha de la clase trabajadora. Sugar Mice se convirtió en uno de los mejores sencillos comerciales del grupo. Estamo ante una balada emotiva donde Torch enfrenta su culpa y la destrucción de sus relaciones personales debido a su adicción. con The Last Straw llega el clímax emocional del álbum, donde Torch enfrenta la gravedad de su situación. Es una llamada al cambio, aunque el final queda abierto, dejando incertidumbre sobre si Torch logra redimirse. Aunque el disco cierra con la anécdotica pista, de ocho segundos de duración, pegada al tema anterior, Happy Ending, que contiene la voz de Fish y una misteriosa risa final.

La música de Clutching at Straws es rica y brillante, con las guitarras de Steve Rothery tejiendo melodías conmovedoras que complementan las atmósferas creadas por los teclados de Mark KellyIan Mosley en la batería y Pete Trewavas en el bajo. Todos, en conjunto, ofrecen una base rítmica sólida y dinámica que mantiene el balance entre la intensidad lírica y la complejidad instrumental. Lo notable de Clutching at Straws no es solo su narrativa oscura, sino cómo logra combinarla con una producción musical impecable. Aunque el álbum es profundamente personal, los temas de alienación y autodescubrimiento podrían ser aplicables con total naturalidad al mundo real.