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jueves, 7 de marzo de 2024

1162.- They Say I'm Different - Betty Davis

 

They Say I'm Different, Betty Davis


     Betty Davis, con apellido Marby de soltera, nace el 26 de julio de 1945 (aunque ella afirma que nació en 1944) en Durham, Carolina del Norte (Estados Unidos). Es en la granja de su abuela, en Reidsville, Carolina del Norte, donde empieza a escuchar a grandes músicos de blues como BB King, Jimmy Reed y Elmore James entre otros, lo que hace que se interese muy pronto por la música. A los 12 años de edad ya compone su primera canción, I'm Going to Bake That Cake of Love. Es a esa edad cuando se muda con su familia  Pittsburgh. Betty se marcha con 16 años de Pittsburgh y pone rumbo a Nueva York para vivir con su tía. Es en la ciudad neoyorkina donde se inscribe en el Fashion Institute of Technology, que es la parte de la Universidad Estatal de Nueva York que está enfocada en el arte, los negocios, el diseño y todo lo relacionado con la moda. Mientras cursa sus estudios, durante la década de los 60 se empapa de la cultura y la música folclórica de Greenwich VillageBetty trabaja como modelo, llegando a aparecer en revistas como Seventeen, Ebony y Glamour, y también frecuenta uno de los clubs de moda de la ciudad, The Cellar, un club frecuentado por una multitud artística y multirracial de modelos, estudiantes de diseño, actores y cantantes. En el Cellar solía pinchar discos y charlar con la gente. En su etapa en Nueva York conoce a varios músicos, haciendo gran amistad con Sly Stone y Jimi Hendrix. La influencia de la música de estos dos plantarán la semilla del estilo y la carrera musical de Betty. También hace amistad con el cantante y compositor de soul Lou Courtney, que será quien produzca su primer sencillo en 1963, The Cellar, inspirado en el local donde trabaja.


Mientras trabaja como modelo conoce al músico de jazz Miles Davis, quien es 19 años mayor que ella. Miles Davis se estaba separando en ese momento de su primera esposa, la bailarina Frances Davis, y estaba saliendo con la actriz Cicely TysonBety y Miles comienzan a salir a comienzos de 1968 y en septiembre de ese mismo año contraen matrimonio. En sólo un año, lo que dura su matrimonio, Betty influirá Miles tanto en cuestiones de moda como en tendencias de la música popular de la época, algo que el mismo músico reconocerá posteriormente en su autobiografía. Según MilesBetty le ayudó a plantar las semillas de sus futuras exploraciones musicales al presentarle al innovador del funk Sly Stone y a un psicodélico guitarrista llamado Jimi Hendrix. El matrimonio dura un año, Miles definía a Betty como "demasiado joven y salvaje", y la acusó de tener una aventura con Jimi HendrixBetty siempre lo negó y lo consideró una gran falta de respeto hacia ella y hacia su amigo Hendrix. La influencia de Betty en Miles fue un hecho, pues Miles se mantuvo en contacto con Hendrix, y los dos planeaban grabar algo juntos, pero la muerte de Hendrix lo impidió. Y la influencia de Sly Stone en Miles se puede ver reflejada en el álbum de MilesBitches Brew (1970), que marcaría el comienzo de la era del jazz fusión. Su primer gran logro de Betty lo consigue al escribir para los Chambers Brothers la canción Uptown (to Harlem) en 1967, y en 1968 comienza a colaborar con el trompetista, cantante y compositor sudafricano Hugh Masekela, con quien graba varias canciones para Columbia Records. Posteriormente Betty graba varias demos con Miles Davis y Teo Macero como productores, y son utilizadas por Miles Davis para intentar conseguir un contrato discográfico con Columbia Records y con Atlantic Records para Betty, pero ninguna de las dos discográficas muestra interés.

Finalizado su matrimonio con Miles DavisBetty se muda a Londres, alrededor de 1971, para trabajar como modelo, y también se dedica a escribir música. Un año después aproximadamente, regresa a Estados Unidos para grabar con Santana, pero al final graba sus propias canciones con un grupo e músicos de sesión de la Costa Oeste. Así, Betty graba su primer disco, donde todas las canciones son escritas y arregladas por ella, llamado Betty Davis en 1973, bajo el sello discográfico Just Sunshine. Con la misma fórmula y bajo el mismo sello discográfico graba y publica su segundo álbum de estudio en 1974, They Say I'm Different. dicho álbum es grabado en los Record Plant Studios bajo la producción de la propia artista, y publicado por el sello discográfico Just Sunshine Records. Estamos ante un álbum con melodías grandes y explosivas, con ritmos funk y con Davis mostrando todo su potencial musical sin tapujos.

La canicón que da título al disco, They Say I'm Different, es una potente y extravagante canción donde Betty Davis recuerda su infancia y se compara a sí misma con espíritus afines del pasado, una sucesión de leyendas del blues a las que tiene gran aprecio, y de las que se ha nutrido e influenciado: Bessie Smith, Chuck Berry, John Lee Hooker, Jimmy Reed, Big Mama Thornton, Son House o Robert Johnson. La canción es un fiel reflejo de la audacia y la independencia de Betty Davis, desafiando las convenciones sociales y de género de la época. Su estilo único y su energía cruda y explosiva, que aplicó en canciones como esta, influyeron en muchos músicos posteriores, convirtiéndola en una figura de culto en la historia de la música.

viernes, 5 de enero de 2024

El disco de la semana 359: Head Hunters - Herbie Hancock

 

Head Hunters, Herbie Hancock


     En la recomendación de esta semana traemos, Head Hunters, álbum de Herbie Hancock que se ha convertido en un hito en la historia del jazz fusión. Este disco desafió los límites del género al combinar el jazz con elementos funk y rock e incluso ritmos africanos, atrayendo a audiencias más amplias. Hancock creó pasajes sonoros innovadores, destacando su habilidad y creatividad para fusionar ritmos pegajosos con improvisaciones brillantes. Estamos ante un álbum que redefinió el jazz e influyó en la música contemporánea, dejando un legado que a día de hoy perdura en la escena musical. Se convirtió en el álbum de jazz más vendido de todos los tiempos hasta que fue superado por Breezin' de George Benson en 1976.

Head Hunters, el duodécimo álbum de estudio de Hancock, reputado pianista, teclista y compositor, fue grabado bajo la producción de David Rubinson y el propio músico, y publicado en septiembre de 1973 por el sello discográfico Columbia Records. La imagen de la portada del disco, diseñada por Victor Moscoso, muestra a Hancock usando una basada en la máscara africana kple kple dela tribu Baoulé de Costa de Marfil y los desmagnetizadores de cabezales de cinta usados en las grabadoras de cinta de carrete de la época. Ubicados en el sentido de las agujas del reloj alrededor de Hancok desde la parte inferior izquierda están Mason, Jackson, Maupin y Summer, su grupo llamado The Headhunters



Para este nuevo álbum, Hancock reunió una nueva banda, The Headhunters, de la cual únicamente el músico Bennie Maupin había sido miembro del sexteto Mwandishi, que había grabado con el músico anteriormente. Hancock manejó todas las partes de sintetizador él mismo y decidió no usar la guitarra para grabar, prefiriendo usar el clavinet, que se convertirá en unos de los sonidos característicos del disco. Esta nueva banda de apoyo, además de a Bennie Maupin, presentaba una sección rítmica compuesta por Paul Jackson (bajo) y Harvey Mason (batería). Hancok concibió un trabjo con un sonido relajante y un aire muy funky que lo hizo atractivo para un público más amplio, consiguiendo combinar oyentes procedentes del jazz y del R&B. 

El álbum fue mezclado para sonido cuadrafónico en 1974. Columbia Records lanzó esta mezcla en un disco LP en formato de matriz estéreo cuadrafónica y cinta de 8 pistas. Las mezclas cuadrafónicas presentan elementos que no se escuchan en la versión estéreo, incluida una melodía de teclado adicional al comienzo del tema Sly. Las versiones con sonido envolvente del álbum han sido lanzadas varias veces en formato Super Audio CD y utilizan una transferencia digital de mezcla cuádruple original de cuatro canales reutilizada en sonido envolvente 5. 1. 



Lanzado en 1973, este disco marcó un punto de inflexión en la carrera de Hancock, que había dado un giro a su sonido fusionando el jazz con elementos de funk, rock y ritmos africanos, creando una amalgama sonora única. Consta de cuatro innovadoras pistas, siendo Chameleon la de apertura, que tiene una famosa línea de bajo interpretada por Hancock en un sintetizador. Su cautivador groove funk, impulsado por un bajo profundo y una percusión contagiosa, se convirtió en un himno al instante. Hancok y The Headhunters consiguen un equilibrio entre la base rítmica y la libertad creativa de la improvisación; le sigue Watermelon Man, la única que no fue escrita para el disco, pues era un éxito de hard bop de Hancock que apareció en su primer álbum, Takin' Off  (1962). El tema fue reelaborado por Hancock y Mason para este disco, con la colaboración del músico Bill Summers soplando en una botella de cerveza imitando una flauta hindewho, utilizada por los pigmeos mbuti de Zaire. La pista también presenta el uso de percusión africana. Hancock reinventó este clásico de los años 60 para darle un aire completamente diferente, fusionando funk y ritmos afrocaribeños; Sly es un tema dedicado a Sly Stone, líder de la banda de funky Sly and the Family Stone. Hancok vuelve a mostrar su gran creatividad en un tema que captura la esencia del funk con unos ritmos enérgicos y unos sólos de instrumentos que nos sacan de nuestra zona de comfort; Vein Melter es el tema que cierra este trabajo, una pieza de combustión lenta que lleva al oyente a un viaje hipnótico, con un ritmo y unas armonía que van fluyendo y dejando una sensación agradable y perdurable.

Head Hunters no solo revolucionó el jazz fusionando géneros, también desafió las expectativas del público, rompiendo barreras y atrayendo tanto a los aficonados al jazz como a otros oyentes que buscaban nuevos sonidos. Este álbum continúa siendo un faro de inspiración para músicos de diversas generaciones y sigue siendo una referencia crucial en la evolución del jazz y la música contemporánea. Estamos ante un disco de los más influyentes e innovadores de todos los tiempos donde donde Hancock cambió la percepción del jazz expandiendo los horizontes musicales del género. 

miércoles, 27 de septiembre de 2023

Funkadelic - The Electric Spanking of War Babies (Mes Funkadelic)

El artista del mes Funkadelic y su álbum The Electric Spanking of War Babies #mesFunkadelic

El álbum "The Electric Spanking of War Babies" de Funkadelic es un fascinante capítulo en la trayectoria de la banda, marcando su regreso a la escena musical en 1981 con una mezcla única de funk, rock y elementos electrónicos. Con su distintiva fusión de géneros y letras provocativas, este álbum ofrece una experiencia auditiva emocionante y a menudo subversiva.

El álbum se inicia con la pista homónima "Electric Spanking of War Babies", que establece un tono enérgico y rítmico desde el principio. Con ritmos pulsantes y guitarras vibrantes, la canción encapsula la habilidad de Funkadelic para combinar elementos de rock y funk en una mezcla electrizante. La voz característica de George Clinton agrega una capa adicional de personalidad, mientras que las letras crípticas y provocativas invitan a los oyentes a adentrarse en la narrativa.

"Shockwaves" continúa con una energía contundente, impulsada por sus ritmos contagiosos y las capas de sintetizadores. La canción muestra la habilidad de la banda para abrazar influencias electrónicas, creando un ambiente futurista y experimental que se suma a la paleta sonora del álbum. La voz de Clinton, llena de carisma y entrega, sigue siendo un punto focal que guía a los oyentes a través de las diferentes pistas.

Canciones como "Funky Kind (Gonna Knock It Down)" y "Electro-Cuties" mantienen el ritmo en alto con su combinación de ritmos funk y elementos de rock. Las letras juguetonas y a veces provocativas son un recordatorio del enfoque audaz de Funkadelic en la música y la expresión lírica. Estas pistas también destacan por sus arreglos instrumentales intrincados y su capacidad para mantener a los oyentes moviéndose.

El álbum se toma un momento para explorar territorios más serenos y melódicos con "Icka Prick" y "The Blender". Estas pistas muestran un lado más suave y melódico de Funkadelic, revelando su versatilidad y capacidad para crear ambientes cambiantes dentro del álbum. La voz suave y melancólica en "Icka Prick" contrasta con la instrumentación más estratificada de "The Blender", que crea una sensación de inmersión sonora.

Una de las pistas destacadas del álbum es "One of Those Summers", que presenta una mezcla de nostalgia y reflexión. Con su tono más melódico y letras que capturan la esencia de la época, la canción ofrece una mirada introspectiva sobre la vida y el paso del tiempo. La voz emotiva de Clinton agrega profundidad emocional a la pista, creando una conexión con los oyentes.

En "The Electric Spanking of War Babies", Funkadelic logra un equilibrio hábil entre la experimentación y la accesibilidad. La combinación de influencias musicales y la mezcla de elementos electrónicos con el funk y el rock demuestran la evolución constante de la banda. Las letras enigmáticas y a veces provocativas complementan la narrativa sonora, invitando a los oyentes a desentrañar el significado detrás de la música.

En resumen, "The Electric Spanking of War Babies" es un álbum audaz y ecléctico que muestra la capacidad de Funkadelic para desafiar las convenciones musicales y fusionar géneros de manera única. A través de su mezcla de funk, rock y elementos electrónicos, la banda crea un paisaje sonoro en constante cambio que invita a la reflexión y al movimiento. Este álbum demuestra que, a pesar de los años transcurridos desde su fundación, Funkadelic seguía siendo una fuerza creativa e innovadora en la música.

Daniel 
Instagram storyboy 

domingo, 17 de septiembre de 2023

Funkadelic - Standing On The Verge Of Getting It On (Mes Funkadelic)

 

Standing On The verge If Getting On, Funkadelic


     Corre el año 1974, Y Funkadelic viene de tener algún que otro problema provocado en su mayoría por el abuso de las drogas. El guitarrista Tawl Ross había dejado la banda debido a una mala experiencia con el LSD. El baterista Ramon "Tiki" Fulwood al igual que el gran guitarrista Eddie Hazel consumían drogas, por lo que George Clinton había decidido suspender sus salarios para que no se gastaran el dinero consumiéndolas. El bajista Billy Bass Nelson y Eddie Hazel habían abandonado Funkadelic a finales de 1971 por disputas financieras con George Clinton, aunque Hazel siguió contribuyendo de forma esporádica en los álbumes American Eats Its Young (1972) y Cosmic Slop (1973), y en canciones de Parliament entre 1970 y 1973.

En ese ambiente nace Standing on the Verge of Getting It On, el sexto álbum de estudio de Funkadelic, disco donde regresará Eddie Hazel, quien tendrá un mayor peso en la fase creativa y composición del disco. Para esta aventura el grupo cuenta nada menos que con 15 músicos.  El disco, producido por George Clinton, es publicado el 19 de julio de 1974 por el sello discográfico Westbound Records. La portada del disco, que presenta una provocativa imagen, también contribuyó a que el álbum fuera notorio tanto por fuera como por su contenido, donde siguen con ese único y característico sonido de musica funk fusionada con soul, rock y música psicodélica.

Hay momentos, mientras escuchamos el disco, donde todo parece caótico, extravagante y psicodélico. Hace tiempo leí una reseña donde se afirmaba este disco como un desastre loco, y no puedo estar más de acuerdo, pero Clinton y los suyos lo hacen todo entro de un orden, "loco" pero con mucho sentido. Ahí radica la grandeza de un álbum que sigue combinando con una facilidad y exquisitez extraordinarias estilos musicales, y donde nos regalan algunas muy buenas jam sesions de funk rock. 



Todo este magnífico "Desastre" comienza con uno de los mejores temas del disco, Red Hot Mama, acreditado a Bernie Worrel, George Clinton y Eddie Hazel. Es todo un enérgico trallazo de funk rock que presenta unas guitarras distorsionadas y un ritmo que se nos pega al instante. La voz de Clinton lidera la canción mientas Hazel nos demuestra por qué es uno de los guitarristas más influyentes del funk. Alice in My Fantasies, acreditada a George Clinton y Eddie Hazel, es otro de los momentos más brillantes del álbum, una pista psicodélica que juega con multitud de efectos de sonidos mezclados con unas letras surrealistas. Es uno de los temas más experimentales del disco, todo un ejemplo de lo bien que puede encajar algo que por momentos parece psicótico y extravagante. I'll stay (George Clinton, Eddie Hazel), es tranquilo y agradable momento entre tanta locura y desorden lo que nos regalan los quince músicos, una conmovedora balada soul que nos demuestra la gran versatilidad de estos músicos. Sexy Ways (George Clinton, Eddie Hazel), es otra pista de funk llena de groove y sensualidad. La sección de viento y los coros cobran un gran protagonismo en esta canción. Esta canción se encarga de cerrar la cara A del disco. 

Abre la cara B Standing on the Verge of Getting It On (George Clinton, Eddie Hazel), la canción que da nombre al álbum. Una mezcla de funk crudo con unas guitarras muy funky y unas letras muy provocativas. Este tema, junto con Red Hot Mama y Alice in My Fantasies es otro de los grandes momentos del álbum. Atentos a la guitarra de un Eddie Hazel descomunal. En Jimmy's Got a Little Bit of Bitch in Him (George Clinton, Eddie hazel) dan un sorprendente pero efectivo giro. Esta es una canción en clave de humor y con toques de hip hop que nos habla de un amigo Gay. Una canción que por aquel entonces se salía de la norma, pues en aquellos años la homofobia era reinante y mayoritaria en la música. Cierra la cara B y por tanto el disco Good Toughts, Bad Toughts (George Clinton, Eddie Hazel), Una épica y reflexiva canción con unas letras filosóficas rodeada en un ambiente psicodélico. Una experiencia auditiva única para cerrar el disco. Una curiosidad: En todas las canciones excepto en la primera, Red Hot Mama, Eddie Hazel figura en los créditos de composición con el nombre de su madre, Grace Cook

Stading on the Verge Of Getting It On es un caótico y psicodélico viaje musical a través de varios géneros, desde el funk más crudo, hasta la psicodelia, el rock, el hip hop o el soul entre otros. El disco tiene ese distintivo y exclusivo toque experimental que solo Funkadelic era capaz de aportar en sus trabajos, mezclar tantos estilos, darle un toque experimental, y que además todo encajara y sonara bien es algo que Funkadelic sabía hacer como pocos, y en este disco lo consiguen. El sonido P-Funk seguía evolucionando y en plena forma.

miércoles, 13 de septiembre de 2023

Funkadelic - Cosmic Slop (Mes Funkadelic)

 


Lo primero que nos llama la atención al escuchar Cosmic Slop no es que el Funk sea menos palpable, a veces incluso trasciende lanzamientos anteriores, pero lo primero que nos salta es que aquí hay indicios de que el grupo quería hacer las cosas un poco diferentes. Esto es más evidente en 'March To The Witch's Castle', un viaje a la tierra prometida bellamente orquestado, asombrosamente simple y, sin embargo, evidentemente poderoso. Es como 'Maggot Brain' improvisado en seis minutos, no recortado, proporcionando suficientes giros interesantes a pesar de seguir hurgando en una línea de batería de marcha. En otros lugares se centran más en el Evangelio glorificado que mancha debajo de un puñado de sus huellas. 'The Broken Heart' y 'Can't Stand The Strain' hacen esto, con múltiples partes vocales cantando una debajo de la otra, aportando algunos elementos country desafinados que brindan una gran perspectiva y un sonido maravilloso. Cosmic Slop se puede resumir como la paradoja definitiva del canon Funkadelic, si bien la banda suena aquí más limpia que nunca, el material del tema es decididamente extraño. Otra de las características es que el álbum con la formacion más "pequeña" de la banda, después del elenco de miles de personas que aparecieron en 'America Eats Its Young', la formación aquí se limita a dos guitarristas, un bajista, un baterista y un teclista, sin lujos adicionales, salvo un arreglo de cuerdas ideado por Bernie Worrell en la hermosa balada "This Broken Heart", estamos con diferencia, ante el álbum más esquizofrénico de su discografía, ya que el R&B generalmente "seguro" (aunque empapado de una capa ácida) se yuxtapone con rugientes excursiones de funk y rock.


 

El disco comienza con "Nappy Dugout", donde se presenta al baterista original de Funkadelic, Tiki Fulwood, como invitado, y su típico estilo de ejecución de asalto funk frontal establece un ritmo inmortal aquí. En los primeros 30 segundos de esta canción, entendemos que se trata de algo nuevo, es un ritmo al estilo Meters, justo cuando el riff comienza a volverse aburrido, aprecias las complejidades, como el ritmo del bongo, luego entra un trino de armónica e introduce una nueva sensación, George no puede evitar agregar sonidos de bocinas de autos viejos para equivocarse un poco y mantener al oyente consciente del hecho de que este es el mismo George Clinton que estaba detrás de todos los clásicos. Las voces de esta canción no deben pasarse por alto. Aunque solo constan de tres palabras, "Eyyyy Nappy Dugout", se usan de tal manera que realmente añaden valor a la canción, y no solo la hacen exagerada. "You Can't Miss What You Can't Measure" es una interpretación modificada de la antigua canción de Parliaments "Heart Trouble", una improvisación de R&B tipo Motown-by-way-of-Saturn llevada por un delicioso riff de guitarra en capas, está subiendo una escalera, cuando llegas a lo alto de esa escalera, abres una puerta y entras a un grupo. Esta fiesta la organiza nada menos que el loco George Clinton, así que sabes que has venido al lugar correcto. Al entrar a la fiesta, te asalta el jolgorio, como una armonía vocal de tres partes sobre un ritmo impenetrable de batería y bajo. Mientras deambulas por la habitación encuentras puertas, al abrir cada puerta liberas a un nuevo cantante, en una puerta se esconde Gary Shider, en the Brides of Funkenstein. Después de haber liberado a todos los cantantes a la fiesta, te relajas y admiras la hermosa orquestación de estos increíbles talentos por parte de George Clinton. Las cosas se vuelven inquietantes con la espeluznante "March to the Witch's Castle", un ritmo oscuro, inquietante y lento que trata sobre la "pesadilla del reajuste" que afectó a muchos veteranos de Vietnam que regresaban a casa en esa época. La voz principal de bajo profundo de Ray Davis, que aquí suena como un predicador siniestro, convierte este inquietante paisaje sonoro musical en un terrible sermón sobre la locura de la guerra, escuchas a George predicar sus caminos pacíficos junto a la excelente guitarra de Eddie Hazel que establece un tono muy apropiado para la canción. Continua con “Let's Make It Last” donde el arreglo musical se inclina más hacia la vibra psico-rockera del estribillo, aunque esta canción conceptualmente no tiene relación con su predecesora, es una gran canción por derecho propio, tiene un ritmo como ningún otro, y la voz de Gary Shider en esta canción es simplemente increíble, sus impresionantes falsetes simplemente perfeccionan la canción y el tono wah característico de Eddie devuelve el rock a Funkadelic.

 

"Cosmic Slop" es lo más destacado de este disco, es simplemente una pieza musical increíble, nos sumerge en una atmósfera de pesadilla mientras Garry Shider canta la historia de una mujer del gueto obligada a prostituirse para mantener a sus hijos. Presentada sobre un ritmo funk duro y plagada de arrebatos espásticos en la guitarra, esta está lejos de ser una canción con mensaje sensiblero. Es una dura realidad de la vida ambientada en un ritmo macabro de funk-rock. Déjate hipnotizar por los gemidos de la guitarra de Eddie y una fascinante sección de percusión. “No Compute” ¿Qué es esto?, esto no es funk, esto no es rock, esto es... ¡esto es bueno! Vaya, lo que me doy cuenta es que George entiende que hemos escuchado suficiente funk rock y suficientes epopeyas hipnotizantes, así que nos ofrece algo completamente diferente donde nos relata el débil intento de un hombre por lograr el placer sexual. “This Broken Heart” es otra ruptura del asalto funk-rock que estamos acostumbrados a escuchar. Escucho mucha influencia de los Beatles en esta canción y George no estaría en desacuerdo. Esta canción tiene un gran estribillo que realmente hace que la canción se sienta completa, y no solo cabos sueltos atados. Tiene una gran parte de batería que se vuelve más importante más adelante en la canción. Una vez más, esta canción no es demasiado larga, realmente cuenta una historia completa y tiene un final satisfactorio. Otro gran pico en el disco es este “Thrash-a-Go Go” una vuelta con la habitual explosión de funk-rock que estamos acostumbrados a escuchar. En esta canción tenemos a George Clinton en la voz y Eddie Hazel en la guitarra, además de quien tocaba la pandereta. George raspa y canta con toda su capacidad, mientras Eddie gime y baila con otro gran solo. Esta canción sentó las bases para canciones como "Get Off Your Ass And Jam" y otros rockeros dinámicos. “Can't Stand the Strain” es muy extraña, quizás un epilogo no a la altura, pensé: "¿Qué es esto? ¿Fleetwood Mac?" Luego escuché a the Brides of Funkenstein formar equipo con Shider y Clinton para lograr excelencia vocal con grandes armonías y a George gritar "Este viejo corazón no puede soportar la tensión", supe que esta canción era realmente un clásico.


Un álbum fantástico, a veces divertido y funky, a veces completamente oscuro y sucio... Puro Funkadelic. También apareció la primera portada diseñada por Pedro Bell, el maestro de las palabras y los marcadores mágicos, cuyos extraños paisajes aparecerían en muchas portadas posteriores. Un álbum conciso, con muy pocos músicos involucrados y una lista de canciones bastante corta, con este disco, vemos una nueva cara de Funkadelic, un Funkadelic más ajustado y completo, con menos cabos sueltos y combinaciones y capas más sofisticadas. Esto no quiere decir que Funkadelic estuviera perdiendo originalidad, no, para nada. De hecho, Funkadelic, aunque lo mantuvo todo junto, realmente superó los límites con este disco. Después de todo, ¿qué tenían que perder?

domingo, 10 de septiembre de 2023

Funkadelic - America Eats Its Young (Mes Funkadelic)

El artista del mes Funkadelic y su álbum America Eats Its Young #mesFunkadelic

El álbum "America Eats Its Young" de Funkadelic es una obra maestra musical que encapsula la creatividad, la diversidad y la audacia de la banda en su máxima expresión. Lanzado en 1972, este álbum doble es un viaje emocionante a través de una variedad de géneros y temas, ofreciendo una visión única de la América de la época y desafiando las convenciones musicales establecidas.

Desde su apertura con "You Hit the Nail on the Head", el álbum establece de inmediato su tono enérgico y festivo. Esta pista presenta una mezcla electrizante de funk y rock, con guitarras ardientes y ritmos contagiosos. La voz líder y las armonías respaldadas por coros brindan un dinamismo vocal distintivo que se convierte en una característica recurrente a lo largo del álbum.

A medida que avanza, el álbum se sumerge en una variedad de temas, desde cuestiones sociales y políticas hasta exploraciones psicodélicas y experimentales. Canciones como "Biological Speculation" y "Philmore" llevan a los oyentes a un territorio sonoro más abstracto, utilizando efectos y capas de sonido para crear paisajes atmosféricos. 

Una de las joyas del álbum es "Babies Makin' Babies", que aborda temas de relación y reproducción con un ritmo contagioso y letras ingeniosas. La fusión de los elementos funk y soul en esta canción muestra la habilidad de Funkadelic para crear música que invita a moverse mientras mantiene una profundidad lírica. 

"Pussy" destaca por su atmósfera hipnótica y sus elementos electrónicos. Esta pista se adentra en un territorio más psicodélico, con efectos de sonido que evocan imágenes surreales. La voz de George Clinton guía al oyente a través de esta experiencia alucinante, donde la música y la narrativa se fusionan de manera intrigante.

En "America Eats Its Young", Funkadelic también aborda temas más serios y reflexivos. "March to the Witch's Castle" y "Miss Lucifer's Love" son ejemplos de canciones que exploran la oscuridad y la ambigüedad de la sociedad. Las letras provocativas y a veces crípticas invitan a los oyentes a interpretar y reflexionar sobre el contenido.

La diversidad instrumental es un punto fuerte en todo el álbum. Desde los impresionantes solos de guitarra hasta los interludios instrumentales, Funkadelic demuestra su destreza musical y su capacidad para fusionar una variedad de influencias. La incorporación de sintetizadores y efectos electrónicos agrega una dimensión futurista y experimental a la música, mostrando cómo la banda estaba dispuesta a ir más allá de los límites convencionales.

En última instancia, "America Eats Its Young" es un testimonio atemporal de la creatividad y la innovación de Funkadelic. A través de su mezcla única de géneros, su enfoque audaz en la experimentación y su voluntad de abordar temas sociales y políticos, la banda creó un álbum que sigue siendo relevante en la actualidad. Esta obra maestra musical refleja la América de su época y establece un estándar elevado para la música que trasciende generaciones. Con su diversidad de canciones y su riqueza artística, el álbum sigue siendo un monumento perdurable a la influencia duradera de Funkadelic en la historia de la música.

Daniel 
Instagram storyboy 

miércoles, 6 de septiembre de 2023

Funkadelic - Free Your Mind and Your Ass Will Follow (Mes Funkadelic)



La mejor manera de describir Free Your Mind... and Your Ass Will Follow ("Libera tu mente, y tu culo la seguirá"), la segunda entrega del imprevisible funk rock de Funkadelic, es haciendo referencia a un comentario de su líder George Clinton, que describió la grabación del disco en los United Sound Studios, Audio Graphic Services, and G-M Recording Studios de Detroit como "un intento de ver si eramos capaces de crear un álbum completo bajo los efectos del ácido".

El disco comienza con "Free Your Mind and Your Ass Will Follow", la larga pieza que da título al disco, que ocupa prácticamente un tercio de la duración del mismo, y en la que George Clinton y compañía combinan letras cargadas de subversivas referencias a la salvación del mundo a través de la liberación de la mente, con una instrumentación recargada de feedback y distorsión. En ésta y otras canciones, como "Eulogy and Light", utilizan para las letras conceptos cristianos que envuelven y distorsionan hasta convertirlos en lisérgicos y satíricos mensajes.

La canción titular y los cinco minutos de "Friday Night, August 14th" componen la totalidad de la cara A de un disco tan interesante como, en ocasiones, musicalmente caótico y confuso, que tiene en "Funky Dollar Bill", la canción que abre la segunda cara, uno de los momentos más apreciables del mismo. A partir de aquí, y sin abandonar la línea lisérgica y enloquecida de toda la obra, es difícil encontrar canciones que bajen del notable. Temas como "I Wanna Know If It's Good to You?", que fue la elegida como single promocional del álbum y llegó hasta el nº 82 en las listas de ventas de singles, "Some more" o la ya mencionada "Eulogy and Light", que ejerce de gran broche final, conforman un magnífico álbum de funk sucio con un espectacular despliegue de irreverentes e inesperados efectos de sonido marca de la factoría Clinton.
 
Publicado en Julio de 1970 por la discográfica Westbound Records, Free Your Mind... and Your Ass Will Follow llegó al puesto 92 en las listas de ventas estadounidenses, quizá una posición discreta pero la mejor que había alcanzado el grupo hasta entonces, y un récord que mantuvieron hasta el pelotazo definitivo de One Nation Under a Groove en 1978, un disco que también reseñaremos aquí en 7dias7notas.net, dentro del apetecible y extravagante #MesFunkadelic.

domingo, 3 de septiembre de 2023

Funkadelic - Funkadelic (Mes Funkadelic)

 

Funkadelic


     Mommy, What's a Funkadelic? (Mama, qué es Funkadelic?). Con esta pregunta que servía de título para la primera canción de su primer álbum, arrancaba la andadura de Funkadelic. Esta banda, junto con su banda hermana Parliament, serán de uno de los grupos que marcarán una nueva era dentro del Funk, Rock y música psicodélica al mezclar estos estilos con absoluta brillantez y marcar la era del llamado sonido P-Funk, cuyo padre no es otro que Geroge Clinton, el creador de ambas bandas. Parliament se movía en un sonido funk más tradicional mientras que Funkadelic era la encargada de experimentar con sonidos como el rock o la música psicodélica y mezclarlos con gran maestría con el funk. Y este mes de septiembre nos vamos a centrar en la rama más experimental del sonido P-Funk, e intentar durante este mes, a través de una selección de sus discos, explicar que es Funkadelic y que significa el sonido P-Funk.

Para hablar de Funkadelic inevitablemente tenemos que hablar de su fundador, George ClintonGeorge nace en 1941 en Kannapolis, Carolina del Norte (Estados Unidos). A finales de los años 50 George que era copropietario de una barbería en New Jersey, decide fundar en la parte de atrás de la misma un grupo de música para entretener a los clientes, en la parte de atrás de esa barbería nacería The Parliaments. Al principio hacían un sonido doo-woop (género que nació mezclando básicamente los géneros R&B y góspel), pero durante la década de los 60 van evolucionando en su forma de enender y hacer música hasta acabar desarrollando un sonido único basado en el soul y el funk. Además de hacer un sonido único, también se empiezan a inclinar por unas letras más ocuras.



Durante los 60, 
George encuentra empleo en la potente discográfica Motown records, empleo que compatibiliza con el grupo The parliaments. En 1967, con el sello discográfico Revilot Records graba su primer éxito con The parliaments, llamado (I Wanna) Testify, tema con el que consiguen una gran acogida en las listas de ventas. Con motivo del éxito del single George decide iniciar una gira, para la cuál se lleva a The Parliaments y además crea una banda de acompañamiento para que respalde al grupo durante dichas gira. Sin embargo justo en ese momento, cuando empieza a despegar George, se ve envuelto en una batalla contractual con Revilot Records y pierde los derechos del grupo. Lejos de desanimarse y para poder seguir en la brecha George cambia el nombre a toda aquella formación (The parliaments y la formación de apoyo) que había fichado para la gira y la llama Funkadelic.

Y así nace Funkadelic, una banda que además se aleja del sonido doo-woop, que se inspira en Jimi Hendrix y Sly & the Family Stone entre otros, y mezclan en sus composiciones soul, funk, rock psicodélico e incluso hard rock. Posteriormente refundaría a los extintos The parliaments llamándolos Parliament, y así George grabaría y haría innumerables giras cons sus grupos parliament y su banda hermana Funkadelic. Todo esto daría lugar al denominado sonido P-funk, un sonido bailable a la vez que psicodélico y con tintes rockeros. 

En este contexto nace Funkadelic, el álbum debut de la banda estadounidense. El disco es grabado entre 1968 y 1969 en los Tera Shirma Sound Studios de Detroit, Michigan, bajo la producción de George Clinton y publicado el 24 de febrero de 1970 por el sello discográfico Westbound Records. En los créditos del disco figuran como Funkadelic el propio George Clinton junto a Mickey Akins (órgano hammond), Tiki Fulwood (batería), Eddie Hazel (guitarra), Billy "Bass" Nelson (bajo) y Tawl Ross (guitarra rítmica). También se incluyó en los créditos al resto de vocalistas que habían formado parte de The Parliaments, Clarence "Fuzzy" Haskins, Calvin Simon, Ray Davis y Grady Thomas, así como varios músicos de sesión que por entonces eran empleados del sello Motown



Este disco debut es para mí uno de los mejores álbumes del grupo de principios de la década de los 70. En aquel momento  había muchos grupos que habían apostado por sonidos soul y funk más psicodélicos, sin embargo ningún grupo había sido capaz de conseguir un equilibrio entre los sonidos más suaves y melódicos del soul y los potentes riff de guitarras rockeras hasta que llegó Funkadelic con esos ritmos y densos arreglos de coros y voces, pero con unas guitarras ruidosas y saturadas. En este disco la banda conseguirá sentar las bases de sus sonido marcado por sus raíces del soul de los 60 entremezclándolo con el funk de los 70 y todo aderezado con altas dosis de rock y psicodelia a partes iguales.  

La edición original de Funkadelic contiene 7 canciones, Mommy, What's a Funkadelic?, uno de sus temas más icónicos. La canción comienza con una cómica introducción para irse transformando en todo un trallazo lleno de un potente ritmo funk. I'll Bet You es otra de las canciones más brillantes del álbum. Bajo una prominente línea de bajo y un ritmo pegajoso, mezcla con gran destreza elementos del rock y el funk. Music My Mother es otra rítmica y animada pieza con una mezcla de voces y coros que resaltan el sonido funk. En I Got a Thing, You Got a Thing, Everybody's Got a Thing  las guitarras con el efecto wah wah y el órgano Hammond marcan el paso mientras suenan unos grandes coros que por momentos tienen toques de gospel. En Good Old Music George Clinton vuelve a capturar con maestría la esencia del soul y el funk. La sensación rítmica con el groove que se marcan aquí es espectacular. Qualify and Satisfy es una de las canciones más tranquilas del disco, una mezcla entre elementos R&B y funk donde destacan las excelentes voces y armonías. What Is Soul cierra este brillante álbum, una introspectiva canción donde George Clinton explora en la esencia, el alma y el significado de las letras de la música soul.

Funkadelic, a través de su particular enfoque a la hora de experimentar y fusionar géneros en este primer disco, sentó las bases para la evolución de su sonido en sus trabajos posteriores. George Clinton y Funkadelic en este álbum son capaces de plasmar su capacidad y visión única para crear música innovadora y llena de ritmo y energía.

sábado, 31 de diciembre de 2022

Wilson Pickett - The Exciting Wilson Pickett #Píldora 17

 


El disco The Exciting Wilson Pickett tiene unos musicos de acompañamiento excelentes (Cropper, Hayes, entre otros), pero se necesita Pickett para convertir este disco en uno de los grandes discos de soul de la época solo es capaz de entregar esa implacable dureza en su voz, pero que nunca nos resulta insoportable o áspera. Pickett es la estrella, obviamente, estamos escuchando a uno de los mejores cantantes de soul de su época y no importa si es alguna de las canciones no la conoces acaba impresionando cada tema, hace un trabajo excepcional por eso no es un título inapropiado, sumale a los MG (aquí sin Booker T, con Isaac Hayes en su lugar) que están en buena forma y sale algo casi perfecto. "Emocionante" fue el epíteto correcto para este semental de un disco: Pickett inicia el disco a la velocidad vertiginosa de "Land of 1000 Dances", y no lo suelta ni por un segundo. Incluso aunque todos hemos memorizado "Dances" y "Midnight Hour", no se dejen engañar pensando que son un par de éxitos en un mar de relleno: el disco es aterradoramente consistente y no tienes ningún momento para recuperar el aliento. Aunque la sección de llamada y respuesta "naa-na-na-na-naa" es la parte más icónica de "Land Of 1000 Dances", es realmente la introducción lo que me encanta de la canción. Las secciones de vientos pasan como un rayo mientras el bajo las impulsa hacia adelante, es una canción ejecutada a la perfección. Sin embargo, Pickett sigue siendo la estrella del espectáculo aquí, entregando todos y cada uno de los versos de introducción como un golpe limpio y usando las letras como dispositivos de látigo. El clásico "634-5789" es un himno glorioso del espíritu de los primeros R&B, y "Ninety-nine and One-half" construye un ritmo turbio donde Pickett da su actuación más agresiva y tensa del disco (bien por el público por hacer de esta canción un poco menos comercial un éxito). Atencion al rock duro y duro de "Ninety-Nine and a Half (Won't Do)", con su ritmo sólido, trompetas contundentes y la voz cruda y áspera de Pickett. Además, Isaac Hayes está al piano aquí. La versión individual alcanzó el R&B Top 15, mientras que su lado B, el ritmo "Danger Zone" también se incluye en este LP.

viernes, 21 de mayo de 2021

Disco de la semana 226: Game, Dames and Guitar Thangs - Eddie Hazel

 

Game, Dame And Guitar Thangs


     El 29 de julio de 1977 se publica bajo el sello discográfico Warnes Bros. el único álbum publicado en vida del magnífico gutarrista Eddie Hazel, Game, Dames and Guitar Thangs.

Edward Earl "Eddie" Hazel, más conocido como Eddie Hazel, nace en Brooklyn, Nueva York (Estados Unidos) en 1950. Desde muy pequeño, su madre Grace intenta que su hijo crezca en un entorno más favrable y se lo lleva a New Jersey. Es también a muy temprana edad cuando Eddie se interesa por la guitarra, justo en el momento que su hermano mayor le regala una. 



En su juventd conoce al bajsta Billy "Bass" Nelson, con el que hace una gran amistad, y juntos van de aquí a allá tocando en diferentes proyectos. En 1967, George Clinton, que anda buscando músicos de apoyo para tocar con su banda The Parliaments, ficha al Bass Nelson. Es Nelson quien recomienda a Clinton que fiche a Eddie como guitarrista, pero la primera tentativa de ficharle no sale debido a que este ya tiene un compomiso y además se topa con la negtiva de la madre de Eddie. Sin embargo, Clinton, consciente de la calidad de Eddie, no se da por vencido y con la ayuda de Bass Nelson consigue convencer a la madre de Eddie. Eddie pasaría a formar parte de la columna vertebral de Funkadelic, formación que Clinton forma para apoyar a Parliament, banda que deriva de The Parliaments debido a los porblemas legales de derechos que Clinton tuvo sobre el grupo. 

Con Funkadelic, Eddie Hazel se acabará convirtiendo en el más influyente guitarrista del funk, con un sonido basado en rock, hard rock, funk y rock psicodélico, y con un estilo que mezcla con una maestría brutal estilos de artistas como Jimi Hendrix o Sly & the Family Stone entre otros.

Para disfrute de nuestro oídos Eddie, con Funkadelic, nos regaló memorables discos como Funkdelic (1970), Free Your Mind ... and Your Ass Will Follow (1970),  Maggot Brain (1971) y Standing on the Verge of Getting It On (1974), y otras tantas aportaciones en discos como America Eats Its Young (1972) y Cosmic Slop (1973). Sus problemas con las drogas, que acabaron con su vida el 23 de diciembre de 1992, nos privaron de disfrutar durante más tiempo de este genio de las seis cuerdas.

Aunque después de su muerte se han editado varios discos tanto en estudio como en directo a título póstumo, es en 1977 cuando se publica su único álbum de estudio en solitario en vida del guitarrista, Game, Dames and Guitar Thangs, el disco recomendado para esta semana por 7dias7notas.



Para la grabación del disco, basado en un sonido que va desde el funk, el soul y el funk psicodélico y el hard rock, Eddie se rodea de los músicos de la onda de Funkadelic y la Bootsy's Rubber Band, Michael Hamptom, Garry Shider y Glenn Goins a las guitarras, Bootsy Collins, Billy Bass Nelson y Cordel Mosson al bajo, Jerome Brailey y Tiki Fulwood a la batería, Bernie Worrell y Doug Duffey a los teclados, y Linn Mabry, Dawn Silva y Gary Cooper a las tareas vocales. El resultado es un disco que obviamente rebosa sonido P-Funk por los cuatro costados, pues además de la colaboración de los músicos de la banda, el mismísimo Geroge Clinton se involucró en tareas de composición del álbum. Sin embargo tiene la particularidad de contener muchísimo más materia instrumental, no en vano fue un disco concebido para resaltar las magníficas dote de guitarra de Eddie Hazel.

Game, Dames and Guitar Thangs es buen disco, donde podemos disfrutar de versiones como California Dreamin' (grabada por primera vez por The Mamas & the Papas), I Want You (She's So Heavy) (grabada originalmente por los Beatles) y Physical Love (originalmente grabada por la banda de Bootsy Collins, Bootsy's Rubber Band). También nos encontramos con What about It?, escrita por George Clinton y Eddie Hazel, la cual es un remake, una nueva versión instrumental del famoso tema Wars of Armageddon, incluido en el disco Maggot Brain, y dos temas compuestos para la ocasión, Frantic Moment (George Clinton, Bootsy Collins, Bernie Worrell) y So Goes The Story (Clinton, Collins, Hazel). En cuanto al sonido, Eddie se acerca más al relajado ambiente de Parliament en detrimento de la locura psicodélica a la que nos tenía acostumbrados con Funkadelic

Game, Dames and Guitar Thangs es un buen trabajo, con una buena producción, donde se nota la mano de Geroge Clinton y de los músicos que colaboran, todos de la órbita del sonido P-Funk, como por ejemplo el sonido de los sintetizadores de Bernie Worrell o el magnífico trabajo con el slap de Bootsy Collins

jueves, 29 de abril de 2021

La música en historias - El final del Mes Prince

 

Qué difícil es cerrar el #MesPrince sin tener la sensación de que, pese a haber reseñado más de una docena de sus obras, nos hemos dejado muchos discos buenos en la "bóveda" de 7días7notas. Para aliviar esa sensación de obra inconclusa, he creído necesario terminar el #MesPrince con uno de esos recuerdos asociados al momento en que su música se convirtió en la banda sonora de mi adolescencia. Después de que discos como Sign of the Times y Lovesexy "me volaran la cabeza", me embarqué en la búsqueda de todos sus discos anteriores, con la ayuda de una página de una revista que reseñaba brevemente todos los discos publicados hasta entonces, ordenados cronológicamente y con las fotos de las portadas. Como mencioné en la reseña de Parade, "recorté esa página y la colgué en la pared de mi habitación, y se convirtió en la hoja de ruta de mi búsqueda de Prince". Ha llovido mucho (y púrpura) desde entonces, y lamentablemente no se dónde fue a parar aquel recorte, pero su recuerdo me invita a cerrar el #MesPrince continuando aquellas breves reseñas, y que esta "segunda parte" pueda serviros de guía a todos los que queráis profundizar en los mejores discos de su obra posterior, quizá menos conocida, pero no por eso menos interesante:

 

Love Symbol (1992)

El mejor disco de Prince en los 90, con singles rotundos como My Name is Prince, Sexy MF o Seven, rodeadas de un buen puñado de buenos temas como The Continental, Love 2 the 90's, Damn U o The Morning Papers. Prince juega con la melodía de Rave unto the Joy Fantastic en los arreglos orientales de The Max, explora ritmos reggae en la juguetona Blue Light, y muestra su gusto por el erotismo y las películas de Roger Vadim en And god created woman. Las concesiones al rap están más acotadas que en Diamonds and Pearls, y sólo llegan a lastrar un tema como The Flow, al que salva el genial final instrumental, con la sección de vientos a tope. El disco iba a ser conceptual, pero los tramos hablados en los que se contaba la misteriosa historia de tres antiguas monedas de oro (3 chains O'gold) fueron en su mayoría eliminados para incluir canciones prescindibles (I wanna melt with U, Arrogance), pese a las cuales sigue siendo un disco sólido y desbordante, en el que anticipa ya la travesía entre el My Name is Prince del primer tema, y el sacrificio de cambio de nombre (The Sacrifice of Victor) que dejaba entrever en el tema final.


The Undertaker (1993) 

En 1993, Prince convocó al baterista Michael Bland y el bajista Sonny Thompson, miembros de New Power Generation para grabar un disco de power trío. Eran las 3 de la mañana, y dedicaron aproximadamente una hora a hacer un disco rudo y en directo, sin añadidos, basado en la canción que le da título, un alegato antidrogas y violencia de diez minutos de duración. La secuencia de canciones del disco es exactamente como la tocaron, y entre ellas hay joyas como la blusera The Ride, curiosidades como la revisión de Bambi, también en clave de blues, canciones que después encontrarían su sitio en discos posteriores (Dolphin, Zannalee) y hasta una versión del Honky Tonk Woman de los Rolling Stones Prince planeaba distribuir The Undertaker junto con la revista Guitar World, pero Warner Brothers lo impidió. La canción The Undertaker terminó saliendo en el disco The Voice de Mavis Staples en 1993.

 

The Gold Experience (1995)

El primer disco que sacó firmado con el símbolo impronunciable con el que renunciaba a su nombre, era un disco muy especial para Prince, y es uno de los mejores discos que sacó durante la década. Temas como Dolphin, Billy Jack Bitch, Gold y, sobre todo, I hate U serían suficientes para elevar este disco a la categoría de grande, pero además es el disco en el que finalmente incluyó una versión de The most beautiful girl in the world, su single de mayor éxito en esa década. Un disco que podría haber sido aún más grande, porque inexplicablemente en la selección de temas Prince descartó canciones como Days of wild o Interactive, superiores a otros temas que acabaron formando parte de The Gold Experience.

 

Chaos and Disorder (1996)

A lo largo de la década de los noventa, Prince entregó los trabajos que tenía pendientes con Warner sin demasiado ánimo, tirando de la "bóveda" para rescatar temas antiguos. Y, sin embargo, varios de esos discos entregados por contrato, tienen un nivel de calidad elevado y, en el caso de Chaos and Disorder, una estimable unidad como disco, gracias al marcado enfoque oscuro y rockero que comparten la mayoría de sus canciones. Chaos and Disorder, I like it there o The same december suenan frescas y rotundas, y Dinner with Delores es un correcto single de sonido limpio y áspera letra. Junto con The Undertaker, podría decirse que es el disco más "heavy" de Prince, sin llegar a serlo realmente.


The Truth (1998)

The Truth es uno de los discos más consistentes e interesantes de Prince, a la vez que uno de los más ocultos y desconocidos. Un disco de cuidada y minimalista producción acústica, que hace que el talento musical de Prince se disfrute de manera desnuda y directa. Canciones como The Truth, Don't Play Me, The other side of the pillow o Welcome 2 The Dawn están entre lo mejor de este disco, en el que también hay espacio para sensuales y sencillas baladas de sugerentes teclados (Circle Of Amour, Dionne) y otros temas destacados como 3rd Eye o One of our tears. Un disco en el que sólo sobra el innecesario tema Animal Kingdom, una anecdótica oda al veganismo que musicalmente es pobre y poco acertada, dentro de un disco de producción impecable, una auténtica rareza acústica dentro de su discografía.


The Vault: Old Friends 4 Sale (1999) 

Al igual que ocurriera con Chaos and Disorder, estamos ante un disco obligado por contrato, y de nuevo basado en una colección de temas que Prince tenía almacenados y sin publicar (Old Friends for Sale se quedó fuera de Parade), o que habían sido inicialmente ofrecidos a otros artistas (Five Women había sido compuesto para Joe Cocker), y de nuevo el resultado es un disco bastante unitario e, incluso, de mayor calidad que el disco publicado como "El Artista" en ese mismo año (Rave unto the joy fantastic), gracias al marcado toque jazz de la mayor parte del disco. She spoke 2 me, en una versión extendida con una improvisación jazzistica, se erige como el mejor tema del disco, y temas como When the lights go down o Extraordinary brillan también con luz propia en este disco.

 

The Rainbow Children (2001)

Su disco más valiente e interesante de la década de los 2000. Una apuesta arriesgada y conceptual que narra una historia de tintes bíblicos, con un marcado regusto a jazz-funk, y con transiciones en las que Prince va contando la historia con voz distorsionada. El tema The Rainbow Children son diez minutos de jazz experimental, mientras The Work pt I o 1+1+1=3 son funk al más puro estilo James Brown. El disco tiene tramos que parecen parodiar los musicales (Everywhere), con toques incluso operísticos (Wedding feast), y en su tramo final alterna reivindicativos temas funk que incluyen recitados de Martin Luther King (Family Name, The Everlasting now) con brillantes temas acústicos (She loves me 4 me, The Last December) No llega al nivel de sus discos de los ochenta, pero es innegablemente valiente.

 

One Nite Alone (2002)

Los mismos halagos que se llevó un disco como The Truth son aplicables a One Nite Alone, un disco concebido con la misma dinámica de producción sencilla y minimalista, pero dónde The Truth se basaba en guitarra acústica y la voz, aquí el protagonismo es para el piano de Prince y su voz aterciopelada y de falsete, con apenas añadidos adicionales. El resultado es también el mismo, estamos ante uno de los discos más consistentes e interesantes de Prince, y de nuevo pasa a engrosar las filas de sus "discos rareza" de no muy fácil adquisición. Encontramos aquí joyas como la propia One Nite Alone, U're gonna C me, Here on Earth o Have a Heart, canciones para sentarse y disfrutar en la oscuridad, y dejarse llevar por las notas del piano de Prince y su voz cálida y directa. Incluye una versión de A Case of U de Joni Mitchell, uno de los temas favoritos de Prince, que encuentra en "el disco de Piano de Prince" el sitio perfecto para ser incluida. Una rareza que de nuevo es impecable y altamente recomendable.

 

Musicology (2004): El deseo de Prince de regresar a la primera línea le llevó en este disco a alejarse de la experimentación y a entregar un álbum de corte más convencional. Consiguió el objetivo, con canciones destacables como Call my Name, A million days y, especialmente, Musicology, el single de lanzamiento y la canción que representó ese ansiado regreso  al calor de los focos, el éxito y el reconocimiento, ya como artista consagrado más que como el admirado innovador de antaño. Se cuelan en este disco un par de canciones en las que Prince muestra su preocupación por los problemas raciales post 11-S (Cinnamon Girl) y las demandas de los menos favorecidos, en forma de carta abierta al presidente en Dear Mr. Man,  el mejor tema del disco.

 

 Art Official Age (2014): El regreso del hijo pródigo a Warner, veinte años después, era un acontecimiento por el que Prince puso toda la carne en el asador, con temas tan rotundos como Clouds, y aunque seguía esforzándose por sonar moderno (Art Official Age), le salió un disco que volvía a esquemas pasados (Breakdown recuerda a The Beautiful Ones en estructura, y The Gold Standard a Superfunkycalifragisexy). Por si fuera poco, el mejor tema del disco (This could be us) es el recuerdo nostálgico de la relación con Apollonia en Purple Rain.

 

Hit 'N' Run Phase Two (2015): Tras la decepcionante primera parte de la saga Hit 'N' Run, esta segunda entrega supuso un regreso / homenaje a las raíces de la música negra (Look at me, look at you) el soul (When she comes) y el funk clásico (Black Muse). Grabado en analógico y a la vieja usanza, y apoyado en una sección de vientos de hasta 11 miembros en algunos temas (Big City), con guiños al pasado (Stare incluye, por un instante, la guitarra de Kiss perfectamente ensamblada en el ritmo) y visitas a la "bóveda" (Xtraloveable) que no desentonan en un conjunto sobrio y equilibrado. Una brillante despedida para una carrera inigualable.