Mostrando las entradas para la consulta folk ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas para la consulta folk ordenadas por fecha. Ordenar por relevancia Mostrar todas las entradas

miércoles, 23 de abril de 2025

1574.- Small Hours - John Martyn

John era un romántico empedernido que cantaba con el corazón; ningún otro artista cantaba con tanta entrega y emoción. La gente se ha enamorado y desenamorado escuchando las canciones más perdurables, mágicas y de profunda sensibilidad que se han cantado a lo largo de sus más de cuarenta años de carrera, nunca se aferró a un sonido probado y donde se manejaba bien, siempre prefirió explorar, experimentar y abrir nuevos caminos. Sus melodías y letras, características de su estilo, son únicas, y su voz, impregnada de placer y dolor, alegría y miedo, amor y odio, expresa emociones como ninguna otra y puede hacer llorar incluso al hombre más fuerte. John Martyn nació como Ian David McGeachy el 11 de septiembre de 1948 en New Malden, Surrey, hijo único de dos cantantes de ópera ligera. Sus padres se separaron y John pasó su infancia en Glasgow, recuerda: «Salías y te mataban a patadas o te consideraban un maricón». John aprendió a tocar la guitarra a los quince años y, al terminar el colegio a los diecisiete, empezó a tocar en algunos clubes de folk locales bajo la tutela de Hamish Imlach, quien lo animó a tocar. John recibió influencias de diversos géneros musicales, incluyendo a Debussy, y pronto comenzó a explorar la música con su guitarra. Davey Graham fue uno de los primeros ídolos de John, al igual que Clive Palmer. En julio de 1968, John tocó en vivo para el programa de radio Night Ride de la BBC y pronto volvería a aparecer en el mismo programa con el lanzamiento de su siguiente álbum, The Tumbler, en diciembre de 1968. El flautista de jazz Harold McNair, que tocó en The Tumbler, se unió a John e interpretó varias canciones, entre ellas Dusty, Hello Train, Flying On Home, Seven Black Roses y The Easy Blues, que aparecería cinco años después en Solid Air. Woodstock fue una gran experiencia para John: «Hendrix vivía prácticamente al lado. Solía llegar todos los jueves en un helicóptero morado, se quedaba el fin de semana y se iba el lunes. Era increíble... un buen chico».

El máximo testimonio del proteico talento musical de Martyn se encuentra en One World , de 1977, un álbum producido por el fundador de Island Records, Chris Blackwell, grabado por Phill Brown (cuyo CV es asombroso, pero para elegir solo algunos nombres: Jimi Hendrix, Rolling Stones, Bob Marley, Pink Floyd, Joni Mitchell, Led Zeppelin, Little Feat, Talk Talk), y con Danny Thompson y Dave Pegg en el bajo, John Stevens y Andy Newmark en la batería, Steve Winwood en todo (pero más notablemente en el sintetizador), Rico en el trombón y el propio Lord Rockingham, Harry Robinson, arreglando las cuerdas. Imaginen una casa casi completamente rodeada de agua, una casa al borde de una gravera abandonada que se había inundado hasta convertirse en un lago. Esta era la casa de Chris Blackwell, donde se grabó One World. Una de las técnicas de grabación de Phill Brown para el álbum, por sugerencia de Blackwell, consistió en instalar un gran sistema de sonido al aire libre y colocar los monitores al otro lado de los establos, apuntando hacia el lago. Luego, usaron dos micrófonos al otro lado de la casa para captar el sonido del sistema de sonido exterior proveniente del lago, y dos más cerca del borde del agua para captar el chapoteo del agua en la orilla, así como el sonido distante y extremadamente ambiental de la guitarra proveniente del sistema de sonido. Fue esta configuración la que capturó las sobrenaturales Small Hours, con voces en vivo y todo, temprano una mañana de julio de 1977. Ola tras ola suave de la guitarra Echoplex de Martyn resuena en tus parlantes mientras un ritmo débil de una caja de ritmos marca el tiempo (súbela, sin embargo, y siente lo que le sucede al sonido del bombo), hasta que, tres minutos después, se cuela la voz de saxofón tenor de Martyn.


viernes, 11 de abril de 2025

Disco de la semana 425: Argus - Wishbone Ash

 

Argus, Wishbone Ash


     Para la recomendación de esta semana traemos bajo el brazo un álbum considerado considerado el punto culminante en la carrera de la banda británica Wishbone Ash: Argus, el cual presenta una mezcla perfecta de hard rock, folk y rock progresivo, con complejas estructuras y unas armonías, tanto vocales como con las guitarras, impresionantes. Las twin guitars, o guitarras dobles, de Andy Powell y Ted Turner es una de las características más destacadas del disco, y la interpretación de ambos en este trabajo es sencillamente maravilloso.

El álbum es grabado, entre enero y marzo de 1972, en los De Lane Lea Studios de Londres, bajo la produccin del productor inglés Derek Lawrence, y publicado el 28 de abril de 1972. Fue uno de sus trabajos más exitosos, llegando a alcanzar el puesto número 3 en las listas de ventas del Reino Unido. Aunque el disco no fue concebido como un álbum conceptual, se inspiró en la mitología griega, y combina rock progresivo, folk y hard rock. Otro de su puntos fuertes es su evolución en las guitarras, pues dieron un gran paso en la evolución de la armonización de las guitarras solistas, algo que ya hacían también Allman Brothers band, y que posteriormente adoptarían bandas como Thin Lizzy, Judas Priest o Iron Maiden ntre otras muchas bandas. Si bien el productor de sonido fue Derek Lawrence, el ingeniero de sonido fue el gran Martin Birch

La portada del álbum fue diseñada por Storm Thorgerson y Aubrey "Po" Powell, de la famosa empresa que se dedicaba a hacer portadas Hipgnosis. dicha portada presenta a un guerrero contemplando un paisaje en las Gargantas del Verdon, en la provenza francesa.  El traje del guerrero se inspiró en el vestuario de la película "Los demonios" de Ken Russell (1971) . Thorgerson y Powell pretendían que el guerrero empuñara una espada además de una lanza, y habían alquilado la espada utilizada en la película "Macbeth" de Roman Polanski , también de 1971. Sin embargo, mientras seleccionaban la ubicación para la sesión, les robaron la espada, por lo que las fotografías se tomaron sin ella. La persona vestida como el guerrero era un asistente de Hipgnosis, Bruce AtkinsSe rumorea que el guerrero de la portada fue la principal inspiración para el diseño del personaje de Darth Vader en "Star Wars"Andy Powell reconoció este rumor, aunque él mismo nunca confirmó su veracidad. Esta portada también hizo que Jimmy Page, de Led Zeppelin, contactara con Hipgnosis y les pidiera que diseñaran la portada de su álbum de 1973, "Houses of the Holy".

La edición original de Argus consta de siete canciones, todas compuestas por la banda y con las letras escritas principalmente por el bajista y vocalista principal de la banda, Martin Turner. Comienza el álbum con Time Was, con una introducción acústica suave y melancólica, liderada por las guitarras de Andy Powell y Ted Turner. A medida que avanza, evoluciona hacia un segmento más eléctrico y enérgico. Las armonías vocales y los solos de guitarra destacan y marcan el estilo característico de "guitarras gemelas". La letra, que contiene un aire nostálgico, reflexiona sobre el paso del tiempo, la pérdida de la juventud y la fugacidad de la vida. Le sigue Sometime World, un introspectivo tema que aborda reflexiones sobre escapar de estecaótico y decepcionante mundo. Ojo al sólo de guitarra de Andy Powell aquí, para enmarcar. Le sigue uno de los grandes éxitos del grupo, Blowin' Free, que trata sobre Annalena Nordstrom, la novia sueca del bajista Martin Turner de su anterior época con el grupo Empty Vessels. Andy Powell afirmaba que la canción fue una de las pimeras que escriberon, más concretamente en 1971 en el Whisky A Go-Go de Sunset. Sobre como se le ocurrió el riff de guitarra a Powell, éste afirmó: "Estábamos de gira con The Who y me gustaron algunas de las progresiones de acordes que estaba haciendo Pete Townshend, así que todo lo que hice fue tomar algunas de sus ideas que se le ocurrieron y acelerarlas". Las armonías entre Martin Turner y Andy Powell brillan aquí, y el doble solo de guitarra es un ejemplo perfecto del estilo que influiría a bandas como Iron Maiden y Thin Lizzy. 



La cara B abre con The King Will Come. Martin Turner se inspiró para esta canción investigando y estudiando la Biblia. Trata sobre la idea cristiana de que, cuando el mundo se acabe, quienes crean se salvarán. En una entrevista Powell explicaba: "LA gente se identifica mucho con esta canción. No puedo decir que seamos una banda praticularmente cristiana, pero hay una sensación en ella, de que es un sentimiento, un sentimiento universal. Es bastante fuerte para la época de la que proviene. Y a todos les encanta la introducción; sencillamente pone a todo el mundo de buen humor". Leaf and Stream es una tranquila y delicada balada escrita por el baterista Steve Upton. La canción tiene un enfoque más folk con unas armoníasmuy suaves, lo que nos da un respiro frente a los temas más intensos del álbum. Las letras parecen hablarnos de la simplicidad y la belleza del mundo natural. Warrior es una de las piezas con una aire épico y mitológico. Con un aire sombrío y marcial, las guitarras son capaces de crear una sensación de conflicto y lucha, y la voz de Turner nos transite poder y fuerza por un lado, y vulnerabiilidad por otro lado. La canción está considerada como parte de la trilogía implícita del lado B del disco, junto con "The King Will Come" y Throw Down the Sword", aunque la banda nunca confirmó que este álbum fuera conceptual. Cierra la cara B, y por tanto este álbum, Throw Down the Sword, que tiene una letra que habla sobre las consecuencias de una sangrienta batalla. Colabora en los teclados en esa canción John Tout, que fue teclista de la banda de rock progresivo Renaissance durante la década de los años 70. La canción, como buen cierre, es un mensaje de redención, un canto a la paz, de dejar artrá la violencia y dejar sanar las heridas.

Wishbone Ash incursionó de manera muy notable en las principales corrientes del rock británico de principios de los años 70, pero al contrario que otras bandas como Yes, Pink Floyd, Led Zeppelin o Ten Years After, que se forjaron un arcado sello de identidad, nunca se decidió por un estilo o corriente concreta. En Argus la banda utilizó una amalgama única de todos esos estilos para crear su propio sonido. Esto sumado a los arreglos, con sus dos guitarristas principales y los espacios abiertos para improvisar, hace que el álbum destaque sobremanera, siendo el trabajo que mejor ha sido capaz de expresar la compleja visión del grupo. Y para terminar, no quiero dejar pasar una frase del bajista y fundador de Iron Maiden, Steve Harris, que para mí expresa claramente la importancia que ha tenido Wishbone Ash en el mundo de la música: "Creo que si alguien quiere entender los primeros trabajos de Maiden, en particular las guitarras de armonía, todo lo que tiene que hacer es escuchar el álbum Argus de Wishbone Ash ".

viernes, 14 de marzo de 2025

1534.- Black Betty - Ram Jam

 

Black Betty, Ram Jam


     En la década de los años 60 hubo un grupo llamado The Lemon Pipers, grupo que se caracterizaba por hacer un sonido basado en el pop psicodélico. Entre los miembros de ese grupo se encontraba el guitarrista Bill Bartlett, y nos vamos a centrar en Bill, que una vez acabada la aventura de los Lemon Pipers decidió formar un grupo llamado Startruck.

Durante su aventura en StartruckBill cogió un tema llamado Black Betty, el cuál era una composición de Leadbelly (1888-1949), cantante y compositor americano de blues y folk, un tema que tenia una duración de unos 59" al cuál le hizo unos arreglos y compuso la música. El tema lo editan con el sello perteneciente a la banda StartruckTruckStar Records, y tiene una buena acogida comercial a nivel regional. A partir del éxito cosechado con Black Betty varios productores le recomiendan a Bill Bartlett que forme un grupo para dar un salto cuantitativo a la vez que cualitativo. Es en ese momento cuándo Bill decide hacer caso a las recomendaciones y crea el grupo llamado Ram Jam, y lo primero que hace es reeditar el tema Black Betty. En la reedición de Black Betty con Ram Jam, Bill contó con los componentes de su antigua formación Startruck.

El single del tema se convierte a partir de su reedición en un exitazo para la formación, consiguiendo el puesto nº 18 en las listas de ventas en Estados Unidos, y el álbum homónimo de la banda donde se incluye dicho tema alcanza el puesto nº 40 en dichas listas. El tema también estuvo rodeado de cierta polémica, la letra del mismo habla sobre una mujer de étnia negra de Alabama que tiene un hijo salvaje, esto hizo que numerosos grupos en pro de los derechos civiles en Estados unidos consideraran que la letra del tema era racista pues faltaba el respeto a las mujeres negras.

sábado, 15 de febrero de 2025

1507- Peter Gabriel - Solsbury Hill


1507 - Peter Gabriel - Solsbury Hill

Peter Gabriel, conocido por su capacidad para contar historias a través de su música, nos regaló en 1977 una de sus piezas más personales y emotivas: "Solsbury Hill". Este tema, lanzado como su primer sencillo en solitario tras su salida de Genesis, no solo marcó el inicio de una carrera independiente llena de éxitos, sino que también se convirtió en un himno de liberación y autodescubrimiento. Escrita por el propio Peter Gabriel, la canción es una reflexión íntima sobre el cambio, la libertad y la búsqueda de uno mismo.

Desde el primer acorde, "Solsbury Hill" captura la atención con su estructura poco convencional y su ritmo envolvente. La guitarra acústica, tocada en un compás de 7/4, crea una sensación de movimiento constante, como si llevara al oyente en un viaje personal. La instrumentación, que combina elementos acústicos y eléctricos, es a la vez sencilla y sofisticada, permitiendo que la voz de Peter Gabriel, llena de emotividad, sea el centro de atención. Su interpretación vocal es sincera y cargada de matices, transmitiendo una mezcla de nostalgia, esperanza y determinación.

La letra de la canción es profundamente autobiográfica. Peter Gabriel escribió "Solsbury Hill" tras tomar la decisión de dejar Genesis, una banda en la que había sido el vocalista principal durante años. Aunque no menciona explícitamente este hecho, las metáforas y las imágenes que utiliza reflejan su proceso de liberación y su búsqueda de una nueva identidad. Frases como "My heart going boom, boom, boom" y "I was feeling part of the scenery, I walked right out of the machinery" evocan la emoción y el alivio de dejar atrás algo familiar para abrazar lo desconocido. El título de la canción hace referencia a un lugar real cerca de Bath, Inglaterra, que Peter Gabriel visitaba para reflexionar, añadiendo un toque de autenticidad a su narrativa.

Musicalmente, "Solsbury Hill" es una obra maestra que combina elementos del folk, el rock progresivo y la música experimental. La producción, manejada por el propio Peter Gabriel junto con Bob Ezrin, es limpia y detallada, permitiendo que cada instrumento tenga su momento para brillar. Los arreglos de vientos y la percusión sutil añaden capas de textura a la canción, creando una atmósfera que es a la vez íntima y expansiva.

A lo largo de los años, "Solsbury Hill" ha sido interpretada como un himno de transformación personal. Su mensaje de dejar atrás lo seguro para perseguir lo desconocido resuena con cualquiera que haya enfrentado una encrucijada en su vida. La canción no solo marcó un nuevo comienzo para Peter Gabriel como artista en solitario, sino que también se convirtió en un recordatorio poderoso de la importancia de seguir el propio camino, incluso cuando eso implica tomar decisiones difíciles.

"Solsbury Hill" es mucho más que una canción; es una experiencia emocional que invita a la reflexión y al crecimiento. Peter Gabriel logró capturar en esta pieza un momento crucial de su vida, transformándolo en un mensaje universal que sigue inspirando a quienes la escuchan. Su legado perdura no solo por su calidad musical, sino por su capacidad para conectar con las emociones más profundas del ser humano.

Daniel 
Instagram storyboy

miércoles, 12 de febrero de 2025

1504.- Songs From the Wood - Jethro Tull

 

Song From the Wood, Jethro Tull


     El lanzamiento del álbum Songs from the Wood en 1977 supuso el regreso a la forma y al estilo después de los ambiciosos proyectos y, para algunos oídos, menos exitosos, anteriores a este. El grupo cambió el sello discográfico de Chrysalis por el recién formado por Ian Anderson/Terry Ellis, llamado SST y relacionado con EMI, y formó equipo con el veterano productor Robin Black, el cual se hizo cargo de toda la ingeniería de sonido. El grupo aparecía con una formación renovada y revitalizada, ahora compuesta por el bajista John Glascock, el guitarrista Martin Barre que regresaba, y el polifacético compositor y provocador Ian Anderson además de del tecladista John Evan y el percusionista Barriemore Barlow. También sería incluído en este álbum Dee Palmer como miembro oficial de la banda después de ocho años de servir como arreglista orquestal de la banda. Palmer se había unido como segundo teclista a principios de 1976. El grupo se reforzó en otrs aspectos y contrató al diseñador de iluminación Bruce MacPherson para encargarse del diseño y la ejecución de los aspectos visuales de los próximos conciertos, con el objetivo de un espectáculo de luces integrado que fuera manejado y controlado. 

Songs from the Wood fue el  décimo álbum de estudio dela banda, grabdo ente septiembre y noviembre de 1976 en los Morgan Studios de Londres, bajo la producción de Ian Anderson, y publicado el 11 de febrero de 1977. El disco está considerado como una vuela a las raíces y el primero de tres álbumes de folk rock lanzados por la banda a finales de la década de 1970, seguidos de Heavy Horses (1978) y Stormwatch (1979). Inspirándose en el folclore inglés y la vida en el campo, el álbum marcó una reanudación del amplio estilo folk rock de la banda, que combinaba instrumentos y melodías tradicionales con tambores de hard rock , sintetizadores y guitarras eléctricas, todo ello dentro del complejo estilo de rock progresivo de la banda. 

Incluído en el álbum se encuentra el tema que da nombre al ábum, Songs From the Wood, escrita por el líder del grupo Ian Anderson. Fue inspirada en la tradición folclórica inglesa, y su creador, Ian Anderson consideraba esta como una de sus mejores canciones de Jethro Tull. La canción recibió bonanzas de la crítica especializada y fue lanzada como sencillo en Nueva Zelanda en 1977. La canción, más concretamente, se inspiró en un libro de cuentos populares ingleses que le habían regalado a Ian Anderson. Él explicó: "Escribí 'Songs From the Wood' basándome en elementos del folclore y cuentos fantásticos y tradiciones del entorno rural británico. Nuestra encargada de relaciones públicas, Jo Lustig, me había regalado un libro sobre el folclore inglés como regalo de Navidad, y lo hojeé y encontré un montón de ideas, personajes, historias y cosas interesantes que decidí convertir en una serie de canciones". La canción comienza con voces a capela antes de que aparezcan la flauta y las guitarras acústicas. Después, entra el resto de la banda. Cuando le preguntaron sobre la canción unos año más tarde, concretamente en 2015, Anderson dijo: "Esta, la canción principal de nuestro álbum de 1977, era descaradamente cursi. Es folk rock decorativo. Ensalza abiertamente las virtudes del campo y los valores que quieres transmitir a través de esto a otras personas. Supongo que es country rock, pero en el sentido británico. Todo está entregado con una buena cantidad de música fuerte. Hay grandes riffs de guitarra y mucha flauta también. Y se enoja un poco, pero con un propósito"Clasificó la canción como una de sus 10 mejores canciones de Jethro Tull.

domingo, 9 de febrero de 2025

1501.- Warszawa - David Bowie

Antes de grabar "Warszawa" (Varsovia), Bowie había estado en la ciudad una vez en su vida, durante unas horas. Había pasado por Polonia en mayo de 1973, viajando de Moscú a Berlín Occidental, pero no había bajado del tren. En abril de 1976, Bowie e Iggy Pop tomaron un tren de Zúrich a Moscú, de nuevo vía Polonia. Según la biografía de Iggy Pop escrita por Paul Trynka: Vieron pueblos todavía marcados por agujeros de bala y un paisaje marcado por cráteres de bombas sin reparar; al acercarse a un tren de mercancías en Varsovia, presenciaron a un trabajador descargando carbón pieza por pieza en el aguanieve gris y gélido. En Varsovia, el tren se quedó detenido durante unas horas en Dworzec Gdański (estación de trenes de Gdansk), por lo que Bowie salió a dar un paseo por el distrito Żoliborz de Varsovia, en lo que entonces se llamaba Plac Komuny Paryskiej (Plaza de la Comuna de París) (desde entonces ha sido rebautizada con su nombre original, Plac Wilsona). Años más tarde, los fans polacos de Bowie contarían su paseo, casi paso a paso. Bowie se detuvo en una tienda de discos y compró algunos LP del conjunto de canto y danza folk Śląsk , uno de los cuales incluía la composición de Stanisław Hadyna "Helokanie". De estas escasas impresiones Bowie hizo un mundo, o al menos una ciudad. El himno melancólico de más de seis minutos que abre la parte “nocturna” de Low no le puso el nombre de Moscú, una ciudad de la que había tenido alguna experiencia, ni de Berlín, su futuro hogar, sino de Varsovia, una ciudad que sólo había vislumbrado. Tal vez Varsovia fuera sólo un lienzo más vacío, o tal vez algo en la ciudad resonó en Bowie durante su breve paseo. Acababa de salir de Los Ángeles, una ciudad de sueños profesionales; había crecido en un Londres que experimentaba una breve segunda infancia; había hecho su arte a partir de invenciones: cantantes de rock imaginarios, distopías de cómic alegremente violentas. Varsovia tenía poco de esto. Lo que Varsovia tenía era el residuo férreo de la historia: fue casi arrasada durante la guerra, una gran parte de su población asesinada en campos de exterminio, en levantamientos fallidos, en represalias. Para Bowie, era una ciudad caída, una ciudad conquistada, una ciudad abandonada a los espías y al invierno.

La canción que Bowie bautizó con el nombre de Varsovia comienza con un sonido lento, el sonido de una campana fúnebre tocada por un niño al piano.  Los instrumentos eran principalmente el pequeño grupo de sintetizadores que Bowie y Eno habían traído a las sesiones (EMS y Minimoog de Eno, Chamberlin de Bowie) junto con la pequeña colección de ARP del estudio (y posiblemente alguna guitarra tratada). Tanto los sintetizadores como el piano tocan las octavas A o C que suenan continuamente por debajo de gran parte de la pieza; el Chamberlin hace las veces de sección de viento. Como la música de “Warszawa” es obra de una orquesta sintética, un puñado de máquinas que hacen las veces de docenas de instrumentos, sus voces son un coro de la voz manipulada de un solo hombre. Bowie canta las primeras líneas con su habitual voz de barítono. Luego, comenzando con “cheli venco”, Bowie cantó en una cinta que Visconti había ralentizado dos semitonos: reproducida a velocidad normal, la voz de Bowie se había convertido en la de un niño. El punto culminante creativo de Low , “Warszawa” es una de las obras más sublimes de Bowie, y su influencia se sentiría durante años. Ian Curtis estaba tan obsesionado con la canción que le puso su nombre a su grupo de punk. “The Electrician” de Scott Walker parece inspirada en el inicio sonoro de “Warszawa” (la mayoría de las contribuciones de Walker a Nite Flights , un disco de los Walker Brothers de 1978, son reacciones a Low y “Heroes” ).


jueves, 6 de febrero de 2025

1498.- The Chain - Fleetwood Mac

 

The Chain, Fleetwood Mac


     El 4 de febrero de 1977 la banda de rock británica Fleetwood Mac publica su undécimo álbum de estudio, Rumors. Fue grabdo entre febrero y agosto de 1976 en los Criteria Studios de Miami, los Record Plant Studios de Los Angeles, En el Zellerbach Auditorium de Berkeley y en Wally Heider's Studio 3 de Hollywood. El disco fue producido por el grupo y por Ken Caillat y Richard Dashut, y publicado bajo el sello discográfico Warner Bros. Records. Las sesiones de grabación se llevaron a cabo mientras los miembros de la banda lidiaban con rupturas amorosas y luchaban contra el consumo excesivo de drogas, los cuales dieron forma a la dirección y las letras del álbum. La idea era hacer "un álbum pop" que ampliara el éxito comercial del álbum Fleetwood Mac de 1975. Rumours contiene una mezcla de instrumentación eléctrica y acústica, así como ritmos acentuados, guitarras y teclados. Sus letras tratan sobre relaciones personales y a menudo problemáticas. Su lanzamiento se pospuso por demoras en el proceso de mezcla del material del disco. El álbum se convirtió en el primer álbum número uno de la banda en la lista de álbumes del Reino Unido y también encabezó el Billboard 200 de Estados Unidos. Recibió certificaciones multiplatino en Australia, Canadá, Dinamarca, Nueva Zelanda, el Reino Unido y los Estados Unidos.

Fruto de estos problemas y tensipones en el seno de la banda nace The Chain, que además es la única canción del disco en la que todos los miembros, colaboraron y aprecen acreditados, Stevie NicksLindsey BuckinghamChristine McVieJohn McVie y Mick FleetwoodLa canción tiene una estructura básica de rock, aunque tiene dos partes distintas: la estrofa principal y el estribillo. También podmeos apreciar influencias del hard rock , el folk y el countryStevie Nicks escribió la letra sobre Lindsey Buckingham cuando su relación se estaba desmoronando. Buckingham y Nicks comparten la voz principal en la canción. Se juntaron fragmentos de distintas tomas de estudio para formar la canción. La línea de bajo que suena aproximadamente a los 3 minutos de la canción fue escrita de forma independiente por John McVie, quien originalmente planeaba usarla en una canción diferente. Originalmente esta canción comenzó como una canción completamente diferente de Christine McVie llamada Butter Cookie (Keep Me There)", que está disponible en la edición ampliada de Rumours . El comienzo de la canción no funcionaba, pero a la banda le encantó el final de Mick Fleetwood y John McVie, que ahora estaba grabado. Entonces, contaron hacia atrás desde la línea de bajo, usaron el bombo como metrónomo, Nicks accedió a dar las letras de los versos, Buckinghan y Christine McVie escribieron la música y la letra del estribillo y Lindsey agregó la guitarra sobre el final. Así nació The Chain como la conocemos.

viernes, 24 de enero de 2025

1485 - KISS - Hard luck woman


1485 - KISS - Hard luck woman

En 1976, KISS sorprendió a sus seguidores con “Hard Luck Woman”, una balada acústica incluida en su álbum Rock and Roll Over. Conocida por su estilo de rock glamuroso y sus espectáculos cargados de energía y extravagancia, la banda mostró una faceta más suave e introspectiva en este tema. La canción fue escrita por Paul Stanley, quien originalmente pensó ofrecérsela a Rod Stewart debido a sus similitudes estilísticas. Sin embargo, al final, KISS decidió mantenerla en su repertorio y confiar la interpretación vocal a Peter Criss, cuyo tono rasposo y emotivo le dio al tema una autenticidad única.

Musicalmente, “Hard Luck Woman” se aparta del sonido característico de KISS, destacando por su enfoque acústico y un aire folk rock que recuerda a canciones como “Maggie May” de Rod Stewart. Con una instrumentación sencilla pero efectiva, las guitarras acústicas dominan la melodía mientras la batería de Criss proporciona un ritmo discreto pero sólido. Esta combinación crea una atmósfera melancólica y serena que resalta la emotividad de la letra.

La canción relata la historia de una mujer desafortunada en el amor, transmitiendo sentimientos de tristeza, resignación y añoranza. Líneas como “If I could, I’d take you anywhere you wanted to go” muestran un amor que no puede concretarse, encapsulando la vulnerabilidad humana. Es un contraste notable con los temas de fiesta y desenfreno por los que KISS es conocido, lo que demuestra su capacidad para explorar emociones más profundas.

La producción, a cargo de Eddie Kramer, es impecable. Kramer logró un balance perfecto entre las guitarras acústicas, la voz de Criss y los arreglos vocales de fondo. Aunque no alcanzó el éxito comercial de otros sencillos de la banda como “Rock and Roll All Nite” o “Beth”, “Hard Luck Woman” se convirtió en una pieza clave en el repertorio de KISS, apreciada tanto por su innovación como por su sensibilidad.

El legado de la canción radica en su capacidad para mostrar otra dimensión de la banda, rompiendo el molde que los encasillaba únicamente en el rock glamuroso. Peter Criss, quien ya había triunfado con “Beth”, demostró una vez más su versatilidad y conexión emocional con el público, haciendo de esta interpretación una de las más destacadas de su carrera.

Hard Luck Woman” es una obra maestra que combina una letra íntima, una melodía conmovedora y una producción brillante. Es un recordatorio de que incluso las bandas más estridentes pueden producir baladas que trascienden generaciones, mostrando un lado inesperado pero profundamente conmovedor.

Daniel 
Instagram storyboy 


sábado, 4 de enero de 2025

1465.- Joan Armatrading - Love and affection

 

Joan Armatrading es sencilla, directa, y con mucho que contar, posee mucho más que una inclinación por la composición ingeniosa y una fuerza metafórica que impregnan su vasta obra. Es una gran músico que maneja bastante instrumentos además de una vocalista dinámica y una intérprete magnética…. Un dato, tocó el piano en algunos álbumes de Thin Lizzy, entonces, ¿por qué no es un nombre conocido? Porque somos locos ignorantes, tal vez. Joan nació en la isla antillana de St. Kitts antes de mudarse a Birmingham, Inglaterra, en 1958 a los ocho años. Su madre le dio a Joan su primera guitarra, intercambiando dos cochecitos de bebe en la casa de empeños local. Creció en los años 60, y estuvo influenciada por los muchos remolinos de música popular que confluían en ese momento, desde el rock, el reggae y el folk, hasta el jazz y el soul. Armatrading se convirtió en una fuerza única en la escena musical inglesa, con su piel oscura, su gran afro, su voz cordial y sus letras conmovedoras que son imposibles de negar. Fue nominada a varios premios Grammy, obtuvo discos de oro y platino y abrió el camino a través de su canto y su musicalidad a muchas cantautoras populares de la actualidad, desde Tori Amos y Ani DeFranco hasta Norah Jones. Pero su gama dinámica de estilos es probablemente la razón por la que no es más grande de lo que es. Joan Armatrading desafía la categorización, algo con lo que la industria musical siempre ha tenido problemas, menos en los años 70, pero particularmente ahora. En este sentido, es más parecida a Me'Shell NdegeOcello, otra brillante letrista y fuerte música que comparte tanto la obsesión de Armatrading con el amor y el dolor como su voluntad de fusionar múltiples géneros en cualquier canción.


Love And Affection es una canción de amor para entendidos, es un pudín de pan y mantequilla almibarado y salado, con miel quemada, un vino de postre sensual de color castaño, una canción de amor. También es un ensayo sobre el tema del dolor, arde, el primer verso es como una colilla de cigarrillo arrojada desde un auto a la maleza seca al costado de la carretera. Tiene necesidades. Anhela. Una cinta de humo blanco apenas se percibe contra la hierba quemada.

“Pero con un amante”

Esta frase es la clave de toda la canción, la nombra dos veces, le da la vuelta a la idea de que los amigos leales son más importantes que las relaciones románticas. Aquí las amistades parecen aventuras amorosas en comparación con la fusión de almas que ella busca. Amante es una palabra cargada en el mejor de los casos. Joan Armatrading la sobresatura de significado. Baja la voz en la palabra "pero", reserva esa profundidad suave y añeja del roble para hablar de amantes. Ese "pero" marca el comienzo de un descenso vocal hacia un mundo de tabaco, carbón y melaza. Una súplica de amor conmovedora, hecha de manera desgarradoramente hermosa por una voz que casi naufraga en la oleada de emoción, es seguida por repetidas peticiones de amor; repetición en el sentido más literal. A veces, los buenos amigos no son suficientes. Love And Affection es una canción de emociones desgarradoras, basada en una gran idea, interpretada por una voz de un registro exquisito, una obra de grandeza sublime.


viernes, 3 de enero de 2025

Disco de la semana 411: Rainbow Race - Pete Seeger


Tras más de treinta años dedicado al folk más clásico y reivindicativo, Pete Seeger siguió el ejemplo de Bob Dylan y, sin perder un ápice de intensidad social y política en sus proclamas, se arriesgó a revestir sus canciones con instrumentos adicionales a sus tradicionales y característicos banjo y guitarra acústica. Al no electrificar su sonido, la decisión no fue tan arriesgada como la de Dylan, pero fue tanto o más acertada, ya que dotó a su octavo disco de estudio Rainbow Race (1971) de un sonido mucho más completo y accesible para el gran público. sin enterrar con ello la escucha de sus reivindicativas y afiladas letras.

Para lograr el sonido y el efecto deseados para Rainbow Race, Pete Seeger se encomendó a la efectiva producción de Bob Johnston, que precisamente había trabajado en varios de los discos de Bob Dylan y de Simon and Garfunkel, entre otros, y el resultado sorprendió a muchos, pero no defraudó a nadie, ya que todas y cada una de las diez piezas que lo componen brillan por la agradable sonoridad de sus melodías y sus sencillos pero efectivos arreglos orquestales. Ocho de ellas están firmadas por el propio Pete Seeger, que como siempre volcó en ellas mensajes reivindicativos sobre la problemática social y política del momento en Estados Unidos, y se lanzó además a versionar un par de temas de otros artistas del género.

El disco abre con la incisiva "Last train to Nuremberg" ("Último tren a Nuremberg"), en la que Seeger denuncia la responsabilidad colectiva de su país en la guerra de Vietnam, enumerando a los culpables a los que enviaría en tren a Nuremberg para ser juzgados por sus delitos: "Veo al presidente Nixon, a ambas Cámaras del Congreso, veo a los votantes, a mí y a ti. Último tren a Nuremberg...¡Todos a bordo!

La brillante canción de arranque no será la única en tratar las profundas heridas sociales y políticas de la participación en la guerra de Vietnam, ya que tras la también brillante "Sailing Down this Golden River" ("Navegando por este río dorado") el tema vuelve con fuerza en "Uncle Ho" ("El tío Ho"), en la que se inspira en una frase de Benjamin Franklyn ("Ama a tus enemigos: Ellos te descubren tus defectos")La cara A se completa con la bella y melancólica "Snow Snow" ("Nieve, nieve") y "My Rainbow Race" ("Mi carrera del Arco Iris"), un efectivo tema con aires de canción infantil, con el que Pete Seeger dio título al disco.

En la cara B alterna buenos temas propios como "Our Generation" ("Nuestra generación"), "Old Devil Time" ("El Tiempo del viejo demonio") o "Words, Words, Words" ("Palabras, palabras, palabras") con las dos mencionadas versiones de temas ajenos: "The Clearwater", un tema de protesta ecológica que Bud Foote, un profesor de escuela de Georgia, había escrito tras escuchar a Seeger en un concierto, y "Hobo's Lullaby", un viejo tema de country de Goebel Reeves que Seeger aprendió de Woody Guthrie en los años cuarenta. Se dice que era la canción que Pete Seeger cantaba a Guthrie en sus últimos días, cuando iba a verle al hospital. Quizá por eso, y por ser el tema más antiguo, es también la interpretación más austera y desnuda del disco, un sentido homenaje al folk clásico de Guthrie con el que terminar de manera brillante un disco en el que Pete Seeger estaba dando un paso más allá de las sabias enseñanzas de su maestro. 

domingo, 29 de diciembre de 2024

Rod Stewart - Foot Loose & Fancy Free (Mes Rod Stewart)

 



Si hay un artista con el que siempre me ha costado conectar fue Rod Stewart, y es que desde joven fui expuesto a algunos de sus hits, considerando que a mis padres le encantaban, muchos de los temas sueltos que le escuché eran bastante malos, y años después supe que pertenecían a su etapa más cuestionada, los discos post 1978, así que a la tarea encomendada de reseñar este Foot Loose & Fancy Free no llegue con mucha confianza aunque es uno de sus trabajos más celebrados y vendidos en los 70, más sabiendo que abre con “Hot Legs”, tema del que nunca fui tan fan, pero que al menos si le tenía tolerancia, ya que había cierto desplante en el vocalista coqueteando con ese riff clásico. A Rod algo le salió terriblemente mal entre 1971, cuando Stewart lanzó el clásico Every Picture Tells a Story, y 1977, cuando Foot Loose & Fancy Free llegó a las estanterías de discos. ¿Qué había sido del Rod Stewart que vagaba por los bosques de abedules blancos de la provincia de Saskatchewan, cantando con todo su corazón? Se había convertido en un periodista, vendió su alma por un dinero inmundo, Sin embargo hubo un cambio de timon, lo que me encontré fue una grata sorpresa, ya que el buen Rod experimenta con varios géneros y cuenta con unos aliados bastante potentes, creando algunas de las mejores canciones de su catálogo. El álbum ofrece un valor tremendo desde la perspectiva de los éxitos, ya que contiene algunos de los éxitos más grandes, adiós a Hollywood y todo eso... con una mirada borrosa y embelesada, Rod Stewart mira fijamente desde la portada de este álbum, con su traje blanco arrugado. Tras deshacerse de Britt, Stewart no ha conseguido librarse del todo de su aburrimiento en Los Ángeles, pero ha hecho un buen intento, con lo que parece ser un retorno deliberado a tiempos pasados. El libreto interior del álbum enfatiza la imagen de peleas borrachas (ahí está Rod, bebiendo a todo trago). Una de las claves del vigor del álbum puede ser la elección de los músicos -no los músicos de sesión de los dos lanzamientos anteriores- sino la banda que Stewart trajo consigo al local Western Springs de Nueva Zelanda a principios de 1977, la empatía entre Stewart y su banda le da a la música una base mucho más firme.

El comienzo es espectacular con “Hot Legs”, una potente pieza de rock 'n' roll inspirado en los Rolling Stones con el enorme sonido de batería de Appice al estilo John Bonham, un gran riff de guitarra y Stewart lamentando memorablemente “I love ya honey” al final de cada estribillo. Se adentra en el territorio más funky de los Stones en “You're Insane”, que está impulsada por un ritmo cargado de bajos (cortesía del coautor Chen). Me encanta el ritmo escalonado que sigue a la última línea de los estribillos: “This whole mad town thinks you're insane”. Una de las baladas mas queridas de su carrera se encuentra a continuación, “You're In My Heart (The Final Acclaim)” fue un éxito Top 5 en los EE. UU, este lento shuffle es una declaración de amor a su novia en ese momento (“Eres una rapsodia, una comedia, eres una sinfonía y una obra de teatro. Eres cada canción de amor jamás escrita pero cariño, ¿qué ves en mí?”), pero admite que “ha habido muchos amoríos y muchas veces he pensado en irme”. Hasta hace poco no había notado la similitud vocal con Steve Forbert, cuyo debut se lanzó al año siguiente. Cierra la cara A con "Born Loose", otro tema rockero con aires de los Stones que es innecesariamente largo y, en última instancia, olvidable, algo que no se puede decir de las otras 7 canciones.

Su versión de 7 minutos y medio de “You Keep Me Hangin' On” de The Supremes se inspiró en la antigua banda de Appice, Vanilla Fudge, que grabó una versión similar a una versión más lenta una década antes, no coincide del todo con esa grabación anterior, pero la voz de Stewart es fantástica, el arreglo es ajustado y rockero y hay un solo de dos guitarras delicioso, a continuación se adentra en el territorio del deep soul con una versión del éxito de R&B número uno de Luther Ingram de 1972, “(If Loving You Is Wrong) I Don't Want To Be Right”. Aparentemente, esta canción fue grabada por The Faces a principios de los 70, pero nunca se lanzó oficialmente, por lo que esta fue la oportunidad de Stewart de corregir ese error (sin juego de palabras). “You Got A Nerve” es una balada folk inquietante en la línea de Fairport Convention, que se destaca por un sonido similar al del sitar (quizás cortesía de un sitar real). Rod tiene un don para interpretar baladas lentas, podría hacer llorar a un gigante tuerto y extrañar a su madre. Esta canción tiene a Rod cantando una balada encantadora sobre decirle a una antigua ex amante que se pierda y se vaya a la mierda, simplemente encantador. En el cierre del álbum, “I Was Only Joking”, lo encuentra en modo narrador completo, con melodías impresionantes, un arreglo principalmente acústico (que se interrumpe con un solo de guitarra eléctrica de un minuto de duración en 3:45) y un coro enérgico con toques del folk que hizo que los éxitos anteriores “Maggie May” y “You Wear It Well” fueran tan entrañables.

En resumen, este es un muy buen álbum de Rod, y sus fans deberían estar encantados. Los oyentes ocasionales tal vez prefieran limitarse a sus grandes éxitos, ya que este álbum es desenfadado y elegante, pero no gratuito, un disco bastante versátil y que sorprenderá gratamente. Menos mal no hice caso a mis prejuicios para llegar al que quizás es uno de los mejores discos de Rod Stewart… Lo que me hace preguntar: ¿Qué pasó después?  Si hay una crítica sobre el álbum, es que las canciones son demasiado largas y duran unos cinco minutos en promedio. Habría sido mejor acortar un poco y luego agregar un par de canciones más divertidas.

1459 - George Harrison - Woman Don't cry for me


1459 - George Harrison - Woman Don't cry for me

"Woman Don’t You Cry For Me" es la canción que abre el álbum Thirty Three & 1/3 de George Harrison, lanzado en noviembre de 1976. Este tema marca un punto de inflexión en la carrera del ex-Beatle, pues combina sus raíces musicales con un enfoque renovado y más relajado, reflejo de la madurez artística que había alcanzado en ese momento.

Musicalmente, la canción es un híbrido entre funk, soul y rock, un estilo poco habitual para George Harrison, quien es más conocido por sus exploraciones en la música espiritual y sus influencias del folk. Desde los primeros compases, el riff de guitarra slide, una marca registrada de George, se destaca como el elemento central del tema. Acompañado de un groove sólido en el bajo y una percusión rítmica que invita al movimiento, la canción se siente alegre y despreocupada, contrastando con algunas de las composiciones más introspectivas de su discografía.

El origen de esta pieza tiene una historia curiosa: George Harrison escribió "Woman Don’t You Cry For Me" en 1969, mientras estaba de gira con Delaney & Bonnie. La inspiración le llegó cuando Delaney Bramlett le enseñó a tocar un riff de slide guitar, un estilo que Harrison no había explorado a profundidad hasta entonces. Aunque la canción estuvo guardada durante varios años, finalmente encontró su lugar en Thirty Three & 1/3, encajando perfectamente con el tono ligero y optimista del álbum.

En cuanto a la letra, "Woman Don’t You Cry For Me" es sencilla pero efectiva. En ella, George Harrison se dirige a una mujer, pidiéndole que no se aflija por él y que no se deje llevar por la tristeza. Aunque el mensaje puede parecer convencional, la interpretación vocal de Harrison le da una dimensión emocional sincera, mostrando su talento para conectar con el oyente de manera íntima.

La producción del tema es impecable, como es característico del álbum en el que aparece. George Harrison trabajó con un grupo de músicos talentosos, incluidos Billy Preston en los teclados y Willie Weeks en el bajo, quienes aportaron energía y sofisticación al arreglo.

"Woman Don’t You Cry For Me" es una de esas joyas escondidas en el catálogo de George Harrison, que merece más reconocimiento del que ha recibido. Representa su habilidad para diversificar su sonido y su pasión por experimentar con diferentes géneros, mientras conserva el corazón y la autenticidad que lo definieron como artista. Esta canción, aunque menos conocida, es una muestra brillante de la creatividad que George Harrison siguió desplegando después de la separación de The Beatles.

Daniel 
Instagram storyboy 

miércoles, 18 de diciembre de 2024

Album Smiler de Rod Stewart, celebrando el legado de una leyenda musical (Mes Rod Stewart)


Album Smiler de Rod Stewart

#MesRodStewart: celebrando el legado de una leyenda musical

Lanzado en 1974, Smiler es el quinto álbum de estudio de Rod Stewart, un disco que encapsula un período de transición tanto en su carrera como en la escena del rock británico. Aunque no logró la misma recepción que sus predecesores, como Every Picture Tells a Story (1971) o Never a Dull Moment (1972), Smiler es una obra llena de matices que merece atención, especialmente durante este #MesRodStewart, donde celebramos el impacto y la versatilidad de este icono de la música.

Rod Stewart lanzó Smiler en un momento en el que su fama como solista estaba alcanzando niveles estelares, mientras seguía liderando The Faces, una banda que representaba lo mejor del rock desenfadado. Esta dualidad entre su carrera individual y su rol dentro del grupo es palpable en el álbum, que combina versiones de clásicos y composiciones originales. Sin embargo, esta mezcla también dejó en evidencia ciertas tensiones estilísticas que, según algunos críticos, impidieron que el disco alcanzara la coherencia de sus antecesores.

En este #MesRodStewart, es importante reflexionar sobre cómo este álbum marcó el cierre de un capítulo significativo en su carrera antes de adentrarse en un sonido más comercial con álbumes posteriores como Atlantic Crossing (1975).

Con 12 temas que varían entre el folk, el soul y el rock, Smiler es un álbum diverso en cuanto a estilos, aunque desigual en su ejecución.

"Sweet Little Rock 'n' Roller"

El álbum abre con este dinámico cover de Chuck Berry, un homenaje al espíritu del rock 'n' roll. Aunque Rod Stewart ofrece una interpretación cargada de energía, la versión carece del toque único que marcó otros covers de su carrera. A pesar de ello, es una declaración de intenciones que establece el tono inicial del álbum.

"Farewell"

Esta balada nostálgica es uno de los puntos altos del disco. Con tintes folk y una narrativa lírica melancólica, Rod Stewart brilla al contar una historia de despedida con su característica mezcla de vulnerabilidad y carisma. Es un tema que conecta profundamente con la sensibilidad emocional que define muchos de sus trabajos más icónicos.

"Bring It On Home to Me/You Send Me"

El medley de dos clásicos de Sam Cooke es un homenaje sentido al soul que siempre ha sido una gran influencia en la música de Rod Stewart . Este momento del álbum resalta su habilidad para reinterpretar canciones ajenas con una autenticidad que pocas veces falla. En este #MesRodStewart, este tema se destaca como un recordatorio del amor de Rod Stewart por la música negra estadounidense.

"Let Me Be Your Car"

Escrita por Elton John y Bernie Taupin, esta colaboración debería haber sido un punto culminante, pero el resultado es algo caótico. Aunque la energía está presente, la canción parece una mezcla desordenada de estilos. Aun así, es un experimento interesante que muestra la disposición de Rod Stewart para probar cosas nuevas.

"Girl from the North Country"

En este cover de Bob Dylan, Rod Stewart entrega una interpretación minimalista y respetuosa que refleja su capacidad para capturar la esencia emocional de una canción. Aunque no supera la profundidad de la versión original, añade un toque personal que la convierte en uno de los momentos destacados del álbum.

"Mine for Me"

El álbum cierra con esta composición de Paul y Linda McCartney, un tema melódico que funciona como un cierre ligero y agradable. Aunque no es una canción especialmente memorable, deja una sensación cálida que encapsula el tono general del disco.

En términos de producción, Smiler mantiene el enfoque en el folk rock y el blues rock que habían definido la etapa inicial de Rod Stewart como solista. Sin embargo, a diferencia de sus álbumes anteriores, aquí se percibe una falta de cohesión. Mientras que algunas canciones destacan por su calidad lírica y vocal, otras se sienten como experimentos que no logran integrarse plenamente en la narrativa del disco.

La participación de músicos como Ron Wood e Ian McLagan, junto con otros colaboradores de The Faces, aporta un sólido respaldo instrumental, pero también subraya la desconexión entre el Rod Stewart que miraba hacia un futuro más comercial y el Rod Stewart que aún estaba profundamente arraigado en el rock de raíces.

Smiler debutó en el número 1 en las listas del Reino Unido, pero tuvo una recepción crítica dispar. Muchos señalaron que el álbum no alcanzaba la frescura ni la chispa de trabajos anteriores, en gran parte por la dependencia de versiones y la falta de un hilo conductor claro. Aun así, con el paso de los años, el disco ha ganado una valoración más justa, especialmente entre los seguidores más acérrimos de Rod Stewart.

Este álbum, aunque no es su obra más icónica, juega un papel importante en el desarrollo de su carrera. Marca el final de una era en la que Rod Stewart navegaba entre el rock tradicional y el folk antes de embarcarse en un viaje hacia un sonido más comercial que definiría la segunda mitad de los años setenta.

En el contexto del #MesRodStewart, Smiler merece ser revisitado como un testimonio de la versatilidad de este artista y su capacidad para reinventarse constantemente.

Aunque Smiler no está a la altura de los clásicos más aclamados de Rod Stewart, es un álbum que ofrece momentos brillantes y permite apreciar diferentes aspectos de su estilo musical. Desde baladas conmovedoras como "Farewell" hasta homenajes al soul como "Bring It On Home to Me/You Send Me", este disco es un recordatorio de la amplitud del talento de Rod Stewart.

Durante este #MesRodStewart, Smiler representa una oportunidad para explorar un capítulo menos conocido de su carrera y reflexionar sobre cómo incluso los discos más irregulares pueden ser fundamentales en la evolución de una leyenda musical.


Daniel
Instagram storyboy

domingo, 15 de diciembre de 2024

Never a Dull Moment - Rod Stewart (Mes Rod Stewart)

 

Never a Dull Moment, Rod Stewart



     En el mundo del rock, nunca es fácil forjarse una carrera de éxito, y muy pocas son las estrellas del rock que pueden afirmar su condición de leyendas. En las últimas décadas, pocos hombres han conseguido construir una carrera tan fructífera y sólida como la de Rod Stewart. Le hemos visto triunfar en todo lo que ha hecho, y le hemos visto crecer tanto como artista como hombre, creyendo hasta el día de hoy en la música. Su discografía es asombrosa, sus premios dan testimonio de su historia musical, su talento está fuera de toda duda y tiene en su haber algunos de los mayores éxitos de la historia de la música.



Rod Stewart
ha construido una carrera a lo largo de cinco décadas y no es fácil repasar la notable vida y obra de un gigante como él.  Su verdadero hogar está en el escenario, y aunque ha sido bastante seguido fuera del mismo por la prensa de todos los colores, el ha elegido la música para hablar de sí mismo, la única ventana segura al mundo que siempre ha sido su verdadera pasión. El enorme éxito que ha alcanzado demuestra una vez más lo poderoso que es su talento. Son cincuenta años de éxitos, giras y logros. Sus canciones son conocidas, apreciadas, tarareadas y amadas por fans. Sus acciones, sus elecciones y sus éxitos dan testimonio de una voluntad incansable. Concierto tras concierto, álbum tras álbum, nuestro artista nos ha demostrado su amor y dedicación a la música, y dicha pasión por la música ha sabido combinarla con su inteligencia y su curiosidad por aprender y mejorar siempre, porque la música es como el vino: mejora con el tiempo. Y esta es la idea que pretendemos seguir al explorar la maravillosa carrera musical de Rod Stewart.

El 21 de julio de 1972 el Stewart publica su cuarto álbum en solitario, Never a Dull Moment. Dicho trabajo es grabado entre marzo y mayo de 1972 en los Morgan Studios y los Olympic Studios de Londres, bajo la producción del propio artista, y publicado bajo el sello discográfico Mercury Records. El disco consiguió ese mismo año posicionarse en el puesto número uno durante dos semanas en las listas de ventas de Reino Unido, llegando a alcanzar el puesto número dos en las listas de Estados Unidos. Como era costumbre del aritsta en aquella época, cuenta con numerosas e importates contribuciones musiales de los miembros de la banda Faces y de otros tantos músicos: Ronnie Wood (guitarra), Ronnie Lane (bajo), Micky Waller (batería), Kenney Jones (batería), Ian McLagan (piano, teclados), Neemoi "Speedy" Aquaye (congas), Pete Sears (piano y bajo), Brian (piano), Spike Heatley (bajo), Dick Powell (violín), Martin Quittenton (guitarra acústica), Gordon Huntley (guitarra) y Ray Jackson (madolina).




El álbum, que alcanzó un gran éxito en las listas de ventas, incluye una mezcla de temas orioginales y versiones, comenzando por True Blue, acreditada a Rod Stewart y Ron Wood. Cuando empezó a lanzar álbumes en solitario en 1969, Stewart también estaba en la banda Faces, cuyos miembros solían colaborar en sus canciones, y True Blue es esencialmente una canción de la época de Faces; Stewart la escribió con su compañero de banda Ronnie Wood, que también tocó la guitarra en la canción, y los otros músicos son los miembros de Faces, Ronnie Lane (bajo), Ian McLagan (piano) y Kenney Jones (batería). Stewart solía escribir asumiendo el papel del personaje, lo que explica el personaje oprimido de esta canción y la primera línea, "Nunca he sido millonario". Como curiosidad, "true blue" nunca aparece en la letra de esta primera canción de Rod Stewart. El siguiente tema es Los Paraguayos, acreditada también a Stewart y Wood. Un tema lleno de humor y energía que refleja la habilidad de Stewart para contar historias, usando como hilo conductor una mezcla de toques acústicos con matices de country-rock. Mama, You Bee on My Mind es la primera versión que aparece en el álbum. Fue escrita por Bob Dylan en 1964 durante un viaje a Europa. La canción trataba sobre la reciente ruptura de Dylan con su novia por entonces, Suzie Rotolo. Italian Girls cera la cara A. Acreditada al dúo Stewart-Wood, es un divertido tema con una mezcla de rock y folk que hace alusión a referencias culturales. 




Rod stewart & Ron Wood


Comienza la cara B con una maravillosa versión de Angel de Jimi Hendrix. La canción original fue incluida en el álbum póstumo de Hendrix "The Cry Of Love" en 1971. La canción fue escrita por Hendrix como un homenaje a su madre. Ron Wood y Hendrix habían compartido un apartamento a finales de los años 60 y ambos se encontraban en un club en el Soho la noche en que el guitarrista murió. Interludings, la breve pieza instrumental que sigue, es una composición de Art Wood, el cual era hermano de Ron Wood. You wear It Well fue escrita  entre Rod Stewart y Martin Quittenton. El tema de esta canción es Stewart escribiendo una carta a un antiguo amor, y teniendo una actitud bastante buena al respecto. Esta canción encaja perfectamente en el trabajo central de Stewart como otra balada soul folklórica. La frase "Madame Onassis no tiene nada que envidiarle a ti" hace referencia a Jacqueline Kennedy Onassis, ex primera dama y viuda del presidente John F. Kennedy. En la época de esta canción, Jacqueline, era la esposa del magnate naviero griego Aristóteles Onassis hasta su muerte en 1975, cuando ella volvió a enviudar. Jacqueline se ganó una gran reputación como mujer de gracia, encanto y estilo, lo que llevó al periódico London Evening Standard a comentar: "Jacqueline Kennedy le ha dado al pueblo estadounidense... algo de lo que siempre ha carecido: majestuosidad". El siguiente tema es otra versión, en esta ocasión de I'd Rather Go Blind, popularizada por la gran Etta James en 1967. Es una canción de blues escrita por Ellington Jordan con créditos de coautoría de Billy FosterEtta James. Etta James se refirió muy favorablemente a la versión de Stewart en su autobiografía, "Rage to Survive ". Cierra la cara B, y por tanto el álbum, otra versión, en este caso el tema Twistin' the Night Away, escrito por Sam Cooke y lanzada por el mismo en 1962. Rod Stewart lanzó su versión como tercer sencillo del disco. Esta versión logró notable éxito, alcanzando el puesto número 59 en la lista Billboard Hot 100 de Estados Unidos. En 1987 Stewart volvió a grabar la canción para la banda sonora de la película Innerspace, dirigida por Joe Dante.

En Never a Dull Moment destaca la química ente Rod Stewart y Ron Wood, siendo uno de los puntos fuertes de este trabajo. Este disco está considerado como un clásico y es una clara muestra más del gran talento que atesora Rod stewart.