domingo, 28 de diciembre de 2025

1823 - Brass in Pocket - Pretenders

Brass in Pocket - Pretenders

Brass in Pocket” no entra en escena pidiendo permiso. Aparece como quien cruza una habitación con paso firme, consciente de que todas las miradas se van a girar. Desde sus primeros segundos, la canción de The Pretenders transmite una seguridad que no necesita alzar la voz: avanza con un ritmo contenido, casi sigiloso, como si estuviera midiendo el terreno antes de decir lo justo y necesario. Y ahí está su encanto. No es una explosión, es una tensión sostenida.

La voz de Chrissie Hynde se mueve con una mezcla singular de aplomo y vulnerabilidad. Canta desde un lugar íntimo, pero nunca frágil. Hay deseo, sí, pero también cálculo; hay seducción, pero no sumisión. “I’m special, so special”, dice, y no suena a eslogan ni a desafío vacío. Suena a alguien que se conoce, que sabe lo que vale y que decide mostrarse tal como es, sin adornos ni disculpas. Esa frase se queda flotando como una declaración personal más que como un gancho pop.

Musicalmente, “Brass in Pocket” juega a la elegancia. El bajo marca el pulso con suavidad, la guitarra se desliza sin estridencias y la batería acompaña sin empujar. Todo parece diseñado para no romper el clima, para dejar que la canción avance con naturalidad. Hay ecos de new wave, de pop y de soul, pero nada se impone por completo. La canción no busca exhibir influencias: las absorbe y las transforma en algo propio, sobrio y magnético.

La letra, lejos de contar una historia cerrada, sugiere escenas. Una mujer que se prepara, que se observa, que se reconoce capaz de provocar una reacción. No hay romance explícito ni promesas grandilocuentes. Lo que hay es actitud. Esa sensación de caminar por la calle sabiendo que algo puede pasar, de tener “dinero en el bolsillo” no como riqueza material, sino como símbolo de autonomía, de control sobre la propia narrativa.

Con el paso del tiempo, “Brass in Pocket” se ha convertido en algo más que un hit. Es una postal de una época, pero también una canción que sigue sonando actual porque habla de una seguridad construida desde adentro. No grita empoderamiento, lo practica. Y tal vez por eso sigue funcionando: porque no intenta convencer a nadie. Simplemente se planta, avanza y deja claro que, cuando suena, ya tiene la atención ganada.

Daniel 
Instagram storyboy 

No hay comentarios:

Publicar un comentario