
La canción comienza con una guitarra acústica suave, apoyando a la voz de Paul Weller, que desde el primer verso nos deja claro que, en esta ocasión, la temática noes ni la política ni la rebeldía adolescente, y que por el contrario, ha llegado el momento de hablar del amor y la añoranza que siente alguien que, habiendo viajado por medio mundo, siempre acaba volviendo a ella, a su "rosa inglesa" en un romántico ejercicio de fidelidad emocional a un lugar o a una persona.
La música de “English Rose” se aleja también de la energía punk por su toque acústico y minimalista, y la ausencia de batería y de arreglos adicionales, en un ejercicio de desnudez musical en el que la guitarra y la voz son las únicas protagonistas. Con esas características, funciona a la perfección para coger aire a mitad del disco, en un momento de pausa y contemplación que contrasta con la energía del resto de temas.
Aunque no fue lanzada como sencillo, “English Rose” se ha ganado un lugar especial en el corazón de los fans de The Jam, y también en este repaso de las mejores canciones de la historia en 7días7notas.net.