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sábado, 25 de septiembre de 2021

0268: Moon don't come up tonight - Patty Waters

 


Patty Waters es una vocalista de jazz, conocida por sus grabaciones de free jazz en la década de 1960 para el sello ESP Disk. Aunque rara vez ha grabado desde entonces, es cada vez más reconocida como una innovadora vocal cuya influencia se extiende más allá del jazz. Otras cantantes como Yoko Ono y Diamanda Galás, o la cantautora de rock Patti Smith, han nombrado a Patty Waters como una gran influencia.

 

Patty Waters nació el 11 de marzo de 1946 en Iowa. Comenzó a cantar de forma semiprofesional en la escuela secundaria. Después de la escuela cantó para la Jerry Gray Hotel Jazz Band. Su familia se mudó a Denver, Colorado, donde comenzó a escuchar a Billie Holiday, cuya vida y canto tuvieron una profunda influencia en ella. A principios de la década de 1960, se traslado a Nueva York y alli fue invitada a cantar con Bill Evans en el Village Vanguard. Trabajaba en un restaurante cuando Albert Ayler la escuchó en un comedor y le presentó a Bernard Stollman, el dueño del sello de jazz experimental ESP Disk. En 1965 publicaron el álbum “Sings”, tremendo disco y delicado cuyo núcleo temático se encuentra en los fracasos en las relaciones, la soledad y la desesperación, todo resaltado por la sensación íntima de la voz de Patty. Las siete primeras canciones son Patty Waters sola con su piano y su voz navegando en melodías de gran sensibilidad. La segunda mitad se compone solo de una pista "Black Is The Color Of My True Love's Hair". En esta la cantante es acompañada por un trío de piano / bajo / batería durante 14 minutos y se embarca en una lenta espiral hacia la locura en la que explora las posibilidades de su voz mucho más que antes.

 

Nos vamos a detener quizas en su éxito mas reconocido, "Moon, Don't Come Up Tonight", una oración de jazz mínima y desesperada que se calma con el delicado canto de Patty, con un descenso de la melodía sigue siendo realmente inquietante, un paisaje austero pero lleno de tesoros que encontramos en la voz calida de Patty que llega a sonar casi como un llanto, una delicadeza absoluta que merecemos rescatar y que merecéis disfrutar, aunque Patti únicamente nos dejo este álbum, vale por la carrera de otros muchos…