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domingo, 5 de febrero de 2023

Björk - Vespertine (Mes Björk)


Tod@s atent@s, que hoy hablamos de sexo... con un disco que, tras años de gira y la experiencia de haber grabado Homogenic en España, Björk disfrutó grabando desde la comodidad de su casa, creando un microcosmos íntimo y sensual, en el que jugó con la sencillez y la limpieza de sonido, en contraste con la complejidad de su trabajo anterior, sin que eso le restara un ápice de intensidad a sus nuevas composiciones. De hecho, el título inicial del álbum iba a ser Domestika, existiendo incluso una canción con ese nombre, que finalmente quedo fuera del álbum, y que fue incluida como cara B del single de Pagan Poetry. A día de hoy puede considerarse un tema de culto, una auténtica expresión de sonido lo-fi que narra la historia de una mujer que quiere salir de su casa y no logra encontrar sus llaves.

¿Y por qué hablaremos de sexo vespertino en un disco tan doméstico? Porque lírica y conceptualmente, el álbum es una por momentos explícita recreación de su relación sentimental con su pareja de entonces, el artista plástico Matthew Barney. Björk quería hacer un álbum íntimo, invernal y doméstico, y la combinación de esas tres cosas es lo que hace especial a Vespertine, aunque no todas ellas nos terminen gustando. Lo íntimo puede ser delicado, y de lo doméstico sacó algunos sonidos y ritmos realmente sorprendentes, pero el invierno es sinónimo de frío, y esa frialdad es lo que siempre me ha costado digerir en la obra de la artista islandesa. En Vespertine nos encontramos instrumentos como el arpa, la celesta o el clavicordio, así como unos cuidados arreglos de instrumentos de cuerda, pero lo verdaderamente curioso son los peculiares ritmos basados en el sampleado de una extensa colección de sonidos domésticos. La experimentación sonora se completa con el ya mencionado toque intimista y erótico, y todo mezclado en la coctelera dio lugar al que muchos consideran el mejor álbum de la carrera de Björk.

El disco comienza con Hidden Place, una exaltación del universo íntimo de la pareja, con un curioso sampleado del arrastre de las cartas de una baraja. Este sonido aparece también en Cocoon, pieza en la que los susurros de la cantante convierten el inocente intimismo inicial en explícita sensualidad. Le sigue la bella y menos optimista It's Not Up to You, que refleja que no todo en casa es idílico, y que también hay que asumir con naturalidad algún que otro día malo. Undo sigue la línea sonora y sensual del disco, y tras ella llega la que para mí es la mejor canción del disco, Pagan Poetry, tema icónico sobre una novia que decide coserse el vestido nupcial a su cuerpo. Junto con Hidden Place y Coccoon, fue uno de los singles del disco.

En Frosti es el hielo siendo golpeado el sonido casero que sorprende al oyente, y casi como hilo conductor del frío que buscaba transmitir, en Aurora es el ruido de una pala retirando nieve el que sube a la palestra musical de la islandesa, que firma además casi todas las letras del disco, pero que en An Echo, a Stain se basa en la obra Crave de Sarah Kane, y en Sun in My Mouth adapta y musicaliza el poema I will wade out de E. E. Cummings. La música también viene también firmada en su mayor parte por Björk, con colaboraciones esporádicas de Thomas Knak Sigsworth, y una de las pocas concesiones a otros artistas la encontramos en Heirloom, en la que la música corresponde casi exactamente con la canción Crabcraft de Martin Console. De hecho, muchos programas de reconocimiento de canciones devuelven como resultado "Crabcraft" al reproducirla.

Encontramos una nueva colaboración en Harm of Will, cuya letra está escrita por Harmony Korine, está supuestamente basada en su relación con el cantante de música country y actor norteamericano Will Oldham. Tras este buen tema, Björk cierra el disco con la impactante balada trip-hop que es Unison, en la que samplea al coro de la Catedral de Sao Paulo en un segmento de Viri Galilaei de Patrick Gowers. Todo un cierre épico y ceremonial para una canción final que describe el momento en que la pareja se convierte en una sola entidad tanto física como emocionalmente, y para un disco que, como prometíamos al principio, viene a demostrar que al sexo y al amor vespertinos hay pocas cosas que se les puedan comparar.