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martes, 4 de abril de 2023

0824.- L.A. Woman - The Doors



"L.A. Woman" da título al último disco de The Doors con Jim Morrison, publicado en 1971, y es una de los himnos imperecederos que nos dejó la banda angelina. Grabada en el local de ensayo de The Doors en Santa Mónica Boulevard (Los Ángeles), es un tema largo (casi 8 minutos) y con cambios de ritmo y progresiones de acordes bastante complejos, lo que hizo que el grupo solo la interpretara completa en una ocasión en Dallas, en el que a la postre sería su penúltimo concierto.

Con la excusa o hilo conductual de la vida de una mujer de Los Ángeles, la letra (inspirada en el libro "La ciudad de la noche" de John Rechyes) es en realidad una descripción de la sórdida vida en la gran urbe estadounidense, que más allá de la percepción de ser un lugar lleno de "chicas en bungalows de Hollywood" o "afortunadas señoritas en la ciudad de la luz", es un reducto de "ángeles perdidos", en el que se puede "Conducir por sus suburbios, dentro de su tristeza" o por "Callejones de medianoche" por los que "vagan Policías en coches" y están llenos de "bares de topless". Morrison se enmascara a sí mismo como el trovador de la historia, refiriéndose a un tal "Mr. Mojo Risin", en realidad un anagrama de "Jim Morrison".

Como ocurriera también con "Hyacinth house" y otras canciones del disco "L.A Woman", Morrison grabó la parte vocal en el baño del estudio, debido a la reverberación de aquella habitación, y aunque la mayor exigencia vocal de "L.A Woman" pone mucho más de manifiesto el deterioro que el constante abuso del alcohol y el tabaco estaban produciendo en sus cuerdas vocales, la canción se beneficia de la voz rasposa y desgarrada del cantante, que transmite a la perfección la tristeza y la soledad de una anónima mujer de Los Angeles, ocultas tras el brillo de las luces de los bares, en los sucios callejones de la noche, magistralmente descritas por Morrison cuando canta a voz en grito: "Nunca vi a una mujer tan sola"

lunes, 3 de abril de 2023

0823.- Hyacinth House - The Doors



"Hyacinth House" está incluida en el álbum L.A. Woman (1971), el último disco de The Doors con Jim Morrison, que fue el responsable de las letras, mientras que la música corrió a cargo de Ray Manzarek, que tomo prestadas partes de la "Polonesa en la bemol mayor, Op. 53" de Frédéric Chopin para el solo de órgano. El título hace referencia a la mitología griega, en concreto al personaje de "Hyacinth" ("Jacinto"), una bella amante del dios Apolo, que según el mito, la mató accidentalmente durante un concurso de lanzamiento de disco. Tras su muerte, y a partir de su sangre, Apolo creó la planta del jacinto.

Existen particularidades que hacen de esta canción una "rara avis" dentro de aquel disco. Mientras que el resto de temas de L.A. Woman fueron grabados en 8 pistas, "Hyacinth House" fue registrada en una grabadora de cinta de solo 4 pistas, y la voz de Morrison se grabó en el cuarto de baño del estudio, para lograr la acústica deseada. Irónicamente, la letra de la canción menciona precisamente un cuarto de baño ("Veo que el baño está libre, como si alguien estuviera cerca, estoy seguro de que alguien me sigue"), pero tiene una profundidad lírica que va mucho más allá de lo que pudiera parecer en una primera escucha, y es en realidad una continuación del lúgubre y fatalista mensaje de "The End", la mítica canción de su álbum de debut ("The Doors, 1967"), en la que Morrison hacía referencia a un premonitorio final, que acabaría encontrando en la bañera de un hotel de París.

Desde esa perspectiva, el mensaje de un hombre en el baño, intuyendo una extraña presencia, adquiere una profundidad inquietante y premonitoria. La conexión con "The End" es aún más evidente al seguir escuchando: "¿Por que tiraste la Sota de Corazones? Era la única carta de la baraja que me quedaba por jugar... Y lo diré otra vez, necesito un nuevo amigo: El final". Sin duda, "Hyacinth House" es una de las canciones más extrañas y tristes compuestas por Morrison, pero también una de las más profundas e intensas.

domingo, 30 de octubre de 2022

0668.- Waiting for the sun - The Doors

 

Waiting for the sun es una canción de The Doors que tiene la particularidad de dar título a un álbum en el que no apareció (Waiting for the sun, 1968). Se desconocen los motivos por los que Waiting for the sun no fue lanzada en el disco del mismo título, pero lo más probable es que en aquel momento no estuviera del todo terminada... ¿Por qué titular entonces el disco con el nombre de una canción que se quedó finalmente fuera? Sin duda fue una extraña decisión, que solo puede comprenderse abriendo la mente y "las puertas de la percepción" y asumiendo los designios y las rarezas de Jim Morrison y sus Doors.

El sonido psicodélico y ensoñador de Waiting for the sun parece encajar más con la propuesta sonora de Waiting for the Sun (disco) que en la de Morrison Hotel (1970), álbum en el que encontró por fin su sitio tras no ser tampoco seleccionada para The Soft Parade (1969), y en el que el grupo empezaba a derivar hacia propuestas más blues rock, en clara transición hacia lo que sería L.A Woman (1971). No solo encontró acomodo en ese álbum de The Doors, sino que se convirtió además en uno de sus principales singles, con el tema Peace Frog en la cara B. 

Como siempre les ocurría cuando salía de fiesta, la noche debió ser larga para Jim Morrison, tanto que tuvimos que esperar dos discos para ver por fin salir del sol, y disfrutar de la canción que debió dar título a aquel disco, y que además lo habría mejorado sustancialmente. Es lo que tiene la espera, que cuanto más larga sea, más se disfrutará después lo que fuera que estuviéramos esperando, aunque solo sea ver salir el sol mientras suenan las notas de Waiting for the Sun.

sábado, 29 de octubre de 2022

0667.- Roadhouse Blues - The Doors

 

Roadhouse Blues, The Doors


     El 9 de febrero de 1970 el grupo californiano The Doors publica el que  sunpondrá su quinto álbum de estudio, Morrison Hotel. El disco es grabado entre noviemebre de 1969 y enero de 1970 en los Elektra Sound Studios de Los Ángeles, bajo la producción de Paul A. Rothchild, y publicado por el sello discográfico Elektra Records.

Morrison Hotel significa la vuelta del grupo a sonidos como el blues y el rock psicodélico, marcado en parte por la fría recepción de los fans a su anterior trabajo, The Soft Parade, disco con un enfoque más hacia el jazz. En este disco la banda también hizo alguna que otra incursión en sonidos como el hard rock, el raga rock e incluso el jazz, y las letras que Morrison compuso fueron más profundas. El disco fue todo un éxito comercial, alcanzando el puesto número 4 en la lista estadounidense Billboard 200, el puesto número 12 en las listas del Reino Unido, y el 6 en las listas de ventas de Países Bajos.

Incluido en este disco se encuentra Roadhouse Blues, toda una declaración de intenciones y un decálogo de modo de vida al más puro estilo Jim Morrison. Roadhouse Blues se convertiría con el tiempo en uno de los temas más redondos e inspirados del grupo, llegando a trasladar con éxito las ideas y textos de Morrison al formato de canción de rock. Cuando Jim Morrison se emborrachaba le gustaba cantar blues en jam sessions, y esta canción surgió en una de esas sesiones. Joan Sebastian, del grupo Lovin' spoonful, tocó la armónica, y el gran guitarrista Lonnie Mack el bajo. The Doors por lo general no solían usar bajista.

sábado, 13 de agosto de 2022

0590.- The Soft Parade - The Doors



The Soft Parade (1969) es uno de los álbumes menos reconocidos de The Doors. Es verdad que, en este disco, la deteriorada dinámica de grupo deja entrever un distanciamiento creativo que les llevó a firmar las canciones por separado, pero en conjunto y pese a la desconexión estilística entre los temas, entregan un puñado de buenas canciones, entre las que destaca sin duda el último tema, la larga suite de Morrison que da título al álbum.

Comienza con un recitado de Morrison que podríamos titular "Petition the lord with a prayer", que con el grito final (¡No puedes pedir al Señor con oraciones!) da pie al desarrollo de la primera parte de la canción ("Sanctuary"), una pieza psicodélica a ritmo de clavicordio clásico e inspirada en unas detenciones policiales en Miami y New Havens, y que desemboca después en tramos más coloridos de blues y rock psicodélico, a través de una interminable sucesión de variados cambios de ritmo y audaces giros en la lírica y el desarrollo musical de la canción, en la que en más de ocho brillantes minutos, se va detallando el peculiar "desfile" surgido de la imaginación del icónico cantante y poeta angelino.

Alejada de las estructuras instrumentales de otros temas largos del grupo ("The End", "When the music's over"), The Soft Parade representa un gran paso adelante en la experimentación del grupo, y es una auténtica rareza en su ya de por sí interesante discografía. Es una canción en la que la música y la poesía encuentran un perfecto vehículo de simbolismo y psicodelia en el que desfilar y brillar por si mismas, sin llegar nunca a pisarse la una a la otra. "El desfile suave ya ha comenzado", y solo tienes que darle al "play" para disfrutarlo.

viernes, 12 de agosto de 2022

0589.- Touch Me - The Doors

 

Touch Me, The Doors


     El 18 de mayo de mayo de 1969 The Doors publican su cuarto álbum de estudio, The Soft Parade. Jim Morrison, Ray Manzarek, Roobby Krieger y John Densmore graban el material que compone este disco entre julio de 1968 y mayo de 1969 en los Elektra Sound Recorders de Hollywood, California bajo la producción de Paul A. Rothchild. El álbum es publicado en julio de 1969 bajo el sellos discográfico Elektra Records.

El disco no tuvo tanto éxito como los anteriores, en parte debido al cambio de sonido característico del grupo, ya que integran instrumentos de bronce y cuerdas y la guitarra de Krieger adquiere más protagonismo en este disco. Es el primer disco donde se atribuye cada tema a sus autores en lugar de firmar como The Doors como en sus anteriores trabajos.

Incluido en este cuarto trabajo de estudio de la banda se encuentra Touch Me, compuesto Robby Krieger, y que fue además el primer sencillo promocional del álbum. Es muy llamativa la utilización de instrumentos de cuerda y bronce para acentuar la voz de Jim Morrison, y podemos disfrutar de un magnífico solo de saxofón interpretado por el saxofonista, clarinetista y flautista estadounidense Curtys Amy

La canción fue compuesta por Robby Krieger inspirándose en las peleas que había tenido con su novia. En un principio el título de la canción que Krieger puso al tema era Hit Me (pégame), pero Jim Morrison, haciendo gala de una rara muestra de moderación consideró que Tocuh Me (tócame) era un nombre más correcto para la canción. Al final de la canción se puede escuchar a Morrison decir. "Stronger than dirt" (Más fuerte que la suciedad), que era el eslogan de la conocida empresa de limpieza Ajax, incluyendo además los tres acordes finales del conocido comercial de la marca.

viernes, 22 de julio de 2022

0568.- Cinnamon girl - Neil Young



Cinnamon girl, del disco de Neil Young "Everybody Knows This Is Nowhere" tiene una estructura de dúo en la que juega un papel principal la voz de Danny Whitten, colaborador habitual en sus primeras grabaciones, que canta las armonías vocales altas mientras Young hace lo mismo en las bajas. La canción comparte el mismo tono que otras grandes canciones de Young, como "The Loner", "The Old Laughing Lady" o "Ohio", entre otras, y fue escrita en su casa de Topanga, California, junto a otras dos canciones del mismo disco ("Cowgirl in the Sand" y "Down by the River"), en un estado febril producido por una fuerte gripe.

Lanzada como single en 1970, Cinnamon girl solo alcanzó el puesto 55 del Billboard estadounidense, pero más allá de su aceptable recorrido comercial, la canción destacó por sus muchas e innovadoras virtudes musicales. Su progresión de acordes de apertura está considerada uno de los mejores riffs de guitarra de todos los tiempos, y su vertiginosa línea de bajo descendente y su repetitivo solo de guitarra, consistente en gran parte en la repetición de una nota "Re" tocada muy aguda y alargando la duración del sonido, han hecho que se la considere un ejemplo adelantado y primerizo de lo que en los años noventa sería el grunge.

En la letra, Young sueña despierto con una misteriosa chica ¿mexicana?. Mucho se ha especulado sobre si la "chica canela" era real, y de serlo, cual sería su identidad. Una de las teorías apunta a Pamela Courson, novia de Jim Morrison, por ser parte del entorno de Young en aquella época, y por el color rojizo de su pelo, muy parecido al de la canela. Young siempre ha negado que escribiera la canción pensando en ella, así que nos quedamos con las ganas de saber si existió realmente la Cinnamon girl de Neil Young, o solo fue fruto de su imaginación y, ahí es nada, de su increíble talento.

viernes, 29 de abril de 2022

0484.- Not to touch the Earth - The Doors



Not to Touch the Earth, tema incluido en Waiting for the sun, el tercer disco de estudio de The Doors, es en realidad una de las partes del mítico poema "Celebration of the Lizard" (La celebración del lagarto) de Jim Morrison. Muchas de las canciones de The Doors se basaban en musicar algunos de los poemas que previamente Morrison había escrito, y no fue diferente en el caso de "Celebration of the Lizard". Durante las sesiones para Waiting for the sun, se intentó una grabación del extenso poema, que muchos años después se incluyó como tema extra en una reedición especial del disco, pero en el momento de la grabación se descartó finalmente por considerarlo demasiado largo y denso, y no encajar con el resto de temas del disco.

La parte que tenía una estructura de canción más clara y potente era el tramo conocido como Not to Touch the Earth, y sobrevivió a la quema para acabar formando parte del álbum. El primer y segundo versos (No toques la tierra, No mires al Sol) son los títulos de dos partes de "Between Heaven and Earth (Entre el Cielo y la Tierra), un capítulo de la novela The Golden Bough (La rama dorada) de James Frazer, cuya obra fue una gran influencia en las composiciones de Morrison.

Como poema, es una críptica declaración del llamado "Rey Lagarto", una especie de sacerdote o dios animal al que seguir en un rito iniciático, y está plagada de misticismo y referencias a tabúes y supersticiones ancestrales. Como canción es, junto a Hello I love you y Five to one, una de las tres canciones más agresivas de un disco, por lo general, marcado por la melancolía de los teclados y las melodías vocales. En Not to touch the Earth el ritmo es asfixiante e intenso, y solo en los momentos en los que Morrison repite "Run with me" ("Corre conmigo"), los teclados parecen cobrar vida para describir la epopeya de un viaje del que es difícil imaginar un destino.

martes, 26 de abril de 2022

0481.- Hello, I love you - The Doors



Hello, I Love You es uno de los mayores éxitos comerciales grabados por The Doors. Una canción pegadiza y rotunda que, como le ocurrió a otras composiciones de la banda, fue escrita en 1965 durante los comienzos del grupo, pero no vio la luz hasta que fue grabada para ser el tema de arranque del tercer disco Waiting for the Sun de 1968.

La letra de Morrison se inspira en una bella mujer afroamericana que vio pasear por la playa de Venice, en California. Al verla, se le ocurrió esa frase tan directa que es la base de toda la canción: "Hola, te quiero, me dices tu nombre?" Ignoramos cual fue su respuesta, pero si cual fue la del público y los fans del grupo. Pese a que muchos consideraron que el impactante zumbido de guitarras del tema lo convertía en una rareza y no era el sonido característico del grupo, las ventas del single de Hello, I Love You se dispararon hasta catapultarlo al primer puesto de las listas de Estados Unidos y Canadá.

Su publicación no estuvo exenta de polémica, ya que el grupo británico The Kinks interpuso una demanda aduciendo que el ritmo y el riff de la canción eran demasiado parecidos a los de su canción All Day & All of The Night. El guitarrista Robbie Krieger negó haberse inspirado en la canción de The Kinks, reconociendo por contra que sí que había influencias del Sunshine of your love de Cream en el ritmo de batería. Morrison y Manzarek acabarían admitiendo que el parecido entre ambos riffs era muy grande pero al final, y no se sabe si gracias a un acuerdo extrajudicial entre las dos bandas, la demanda no llegó a buen puerto. 

sábado, 29 de enero de 2022

0394.- When the music's over - The Doors


When the Music's Over es el épico tema de cierre del álbum Strange Days, segundo disco de los angelinos The Doors. Fue escrita mucho antes de que el grupo tuviera un contrato discográfico, al tiempo que algunas de las canciones más recordadas de su disco de debut, en el que finalmente no fue incluida, probablemente por falta de espacio por su larga duración (más de 11 minutos).

Jim Morrison quería que la canción fuera grabada en vivo en el estudio, sin añadir efectos o partes posteriores, pero se ausentó durante la grabación del tema, y fue sustituido por el teclista Ray Manzarek en las voces. A su regreso, el resto de miembros de la banda se negó a volver a grabarla, por lo que finalmente Morrison tuvo que grabar las voces por separado, y su voz reemplazó a la de Manzarek sobre la música de la primera grabación.

Esta larga e intensa suite se divide en cinco partes diferenciadas, empezando por la que podría denominarse "Turn Out the Lights/Dance on Fire" ("Apaga las luces / Baila en llamas"), el tramo más musical y reconocible, en la que destaca la frase central de la canción (Cuando la música se acabe, apaga las luces). Le siguen los tramos "Cancel My Subscription" (Cancela mi suscripción), "What Have They Done to the Earth?" (¿Qué le han hecho a la tierra?) y "Persian Night" (Noche persa) en los que los recitados se imponen sobre una música más minimalista y oscura.

El quinto y último tramo, "Return to the Main Themes" (Retorno a los temas principales) es un regreso a estructura musical y la letra del comienzo de la canción, y como reza su posible título, a los temas principales de la canción, que no eran otros que los mismos que, de manera recurrente, aparecían en el universo lírico de Morrison y compañía. Así, este "baile en llamas" entronca con el "enciende mi fuego" de Light my fire, y el "Cuando termine la música, apaga las luces" adquiere todo su sentido en los versos finales: "La música es tu única amiga, hasta el final", en clara referencia a The End y su verso "Esto es el final, mi único amigo, el final".

lunes, 29 de noviembre de 2021

0333: Soul Kitchen - The Doors

 

Soul Kitchen es una de las canciones más destacadas del homónimo álbum de debut de The Doors en 1967. A la sombra de temas como Break on through, Light my fire o The End tuvo menos recorrido mediático, pero este tema habría podido ser punta de lanza de cualquier otro LP de The Doors, además de estar lleno de matices y anécdotas que lo hacen todavía más interesante.

La letra de la canción se inspira en el restaurante Soul Olivia's en Venice Beach, California, en el que Jim Morrison solía quedarse hasta muy tarde, siendo habitual que el encargado del local o los camareros tuvieran que echarle para poder cerrar. De ahí viene que, en el estribillo, Morrison pida fervorosamente: "Déjame dormir toda la noche, en tu cocina del alma", o que en el tramo final haga referencia a que "los relojes dicen que es hora de cerrar, supongo que me tengo que ir ahora, pero realmente quiero quedarme aquí toda la noche".

Precisamente esa última frase convirtió a esta canción en icónica e imprescindible durante el final de los conciertos de The Doors. En una época en la que la policía de Los Ángeles ponía especial celo en que las actuaciones de los grupos de rock a los que consideraban problemáticos terminaran en el horario establecido, y mientras se desplegaban alrededor del escenario como medida disuasoria para que no se les ocurriera seguir tocando. En ese momento, y mientras el grupo estaba tocando Soul Kitchen, Morrison arengaba a las masas cambiando la frase por "Los policías dicen que es hora de cerrar, supongo que me tengo que ir ahora, pero realmente quiero quedarme aquí toda la noche".

jueves, 25 de noviembre de 2021

0329: Break on Through (to the other side) - The Doors


Break on through (to the other side), en español "Ábrete paso hacia el otro lado" era el tema de arranque de The Doors (1967), el primer disco de la breve pero intensa carrera del grupo de Los Ángeles. La letra firmada por Jim Morrison es toda una invitación a romper con las reglas establecidas, y a atravesar más allá, hacia un espacio o realidad alternativos, donde veremos las cosas de manera muy diferente.

El que fuera primer sencillo de la banda, tardo inicialmente en abrirse también paso hacia el otro lado, con un éxito discreto en las listas de ventas, pero que con el paso del tiempo se convirtió en uno de los temas más emblemáticos de la banda angelina. La rabiosa y a la vez psicodélica letra de Morrison, unida a la fuerza de la guitarra de Robbie Krieger y el solo de teclado de Ray Manzarek, se convierten en un artefacto explosivo y urgente, una atronadora salva con la que despertarnos del letargo en el que estamos sumidos, haciendo que abramos los ojos a lo que nos espera al otro lado de las puertas de la percepción, para comprobar al atravesarlas que "el día destruye a la noche, y la noche divide al día".

Break on through tuvo que resistir también los envites de la censura de la época, debido a la frase "She gets high" que se podía interpretar como "Ella tiene un subidón" desde su connotación de "colocarse" con el consumo de drogas. La versión del álbum original altera esta frase para que se escuche solamente "She gets" seguida de un soplido en el lugar donde debía ir "high", pero en las versiones en directo y en otras ediciones nadie pudo evitar que Morrison se abriera paso y llevara la canción hasta lo más alto de ese otro lado tan lisérgico y transgresivo.

martes, 23 de noviembre de 2021

Grandes éxitos y tropiezos: The Doors


 

En 7días7notas abrimos en esta ocasión las puertas de la sección de Grandes éxitos y tropiezos a The Doors. Es difícil equivocarse en la compra de un disco de Morrison & Cía, porque todos sus discos tienen cosas interesantes, y al atravesar las puertas de la percepción nunca se encontraron escalones en los que tropezar de manera ostentosa. Sin embargo, esas mismas puertas pueden también conduciros por caminos que, no teniendo la etiqueta de equivocados, si que pueden llevaros a lugares que no fueran los esperados. Así que, sin más demora, vamos de nuevo a la imaginaria y vieja tienda de discos de segunda mano en la que esta sección comenzó, a buscar discos de The Doors ¿Qué discos suyos deberíamos comprar? ¿Cuáles deberíamos evitar?:

Estás tardando en comprarlo:

Los seis discos de The Doors publicados en vida de Jim Morrison son realmente grandes discos, pero si hay uno que destaca por encima del resto es precisamente The Doors (1967), disco debut en el que estaban canciones de la talla de Break on Through (to the other side), Light my fire o The End, pero no nos quedaríamos tranquilos si no mencionáramos también aquí discos como Morrison Hotel (1970), un disco en el que apostaron por un sonido más pesado y rockero en temas de la talla de Roadhouse Blues, Peace Frog o Waiting for the sun, entre otras. No se queda atrás tampoco el brillante ejercicio de blues ebrio y taciturno del disco L.A Woman (1971), combinando la brillantez de piezas oscuras y decadentes (Cars hiss by my window, Hyacinth House) con algunos de los mejores temas de su carrera (L.A Woman, Riders on the storm)

Si te queda pasta, llévate también: 

Si os queda presupuesto, el siguiente disco al que tendríais que hincar el diente sería Waiting for the Sun (1968). La adicción al alcohol de Morrison avanzaba a marchas forzadas, al tiempo que aumentaba también el número de seguidores de la banda, gracias a temas tan rotundos como Hello, I love you o The Unknown Soldier. También incluye la canción Not to Touch the Earth, en realidad un extracto de una larga pieza conceptual llamada The Celebration of the Lizard, disponible en alguna de las últimas reediciones especiales del disco, y en el directo Absolutely Live. Y si el dinero sobrante os deja aún más margen, entonces sería el momento adecuado para incluir en el pack el disco Strange Days (1968), el siempre difícil segundo disco, que contiene joyas de la talla de People are strange, Moonlight Mile o, especialmente, When the music is over. 

Vuelve a dejarlo en el expositor:

Pensando en la estructura de este artículo, el disco elegido para la tarjeta roja era The Soft Parade (1969), pero estaríamos siendo unos árbitros demasiado rigurosos, porque aunque palidece en la comparación con sus otros cinco hermanos, no deja de ser un buen disco al que, siendo justos, dejaríamos seguir jugando con una amonestación verbal o una tarjeta amarilla. Si lo dejáis de nuevo en el expositor, os estaríais perdiendo canciones como Touch me, Shaman`s Blues o, sobre todo, el tema que le da título, un auténtico desfile de color y larga duración en el que manejan con maestría los cambios de ritmo, la psicodelia y la bohemia descarada en la que vivía inmerso su carismático cantante. Y como, al perdonar a este disco, dejaríamos huérfana esta sección, mencionaremos en su lugar dos de los tres álbumes que los miembros restantes de The Doors sacaron tras la muerte de Jim Morrison.  Decíamos, al principio, que algunas puertas llevaban a caminos inesperados, y tanto Other Voices como el posterior Full Circle dejan la sensación de haber dejado pasar la parada en la que los miembros supervivientes deberían haberse bajado del autobús, haciendo caso al compañero caído, cuando cantaba aquello de "Esto es el final".

Si lo que buscas son canciones sueltas:

Estas son las cinco canciones top que no pueden faltar en tu colección o en tu playlist:

1- Break on through

2- Light my fire

3- Riders on the storm

4- L.A Woman

5- The End