viernes, 13 de mayo de 2022

El disco de la semana 275: Twelve Nudes - Ezra Furman



Con el sugerente título de Twelve Nudes ("Doce desnudos"), tomado de las meditaciones de Anne Carson sobre "el intenso dolor con el que lidiamos a lo largo de la vida", llega al blog de 7dias7notas el quinto álbum de estudio de Ezra Furman, publicado en 2019 en el sello Bella Union. Furman se inspiró en la obra de Carson, y en la ira que le producían las decisiones que la administración estadounidense tomaba sobre temas de identidad transgénero y del colectivo LGTBI.

Esa ira es más que evidente en el registro vocal de Furman en temas como Calm Down aka I Should Not Be Alone, en el que su voz se desgarra a ritmo de afiladas guitarras de rock garajero, todo ello salteado con unos coros "Uhh-Uhh" que recuerdan al Simpathy for the devil de los Rolling Stones. No menos intensa es Evening Prayer aka Justice, brillante tema de glam rock con todo lo necesario para convertirse en un himno. Furman echa entonces el freno por un instante, y su voz cambia a registros más suaves en la melancólica y existencial Transition from Nowhere to Nowhere. No es solo un momento de calma, es también una de las mejores canciones del disco, al nivel de cualquiera de las dos anteriores.

Más insustancial resulta Rated R Crusaders, en la que las guitarras y la voz se acercan a terrenos de punk rock, mientras que Trauma es todo lo contrario a lo que su título indica, y se disfruta plenamente de su escucha sin riesgo alguno de padecer dolencia alguna. En cualquier caso, y para prevenir cualquier situación inesperada, contamos inmediatamente después con un Thermometer que sigue manteniendo el mercurio del disco en los niveles más altos, preparándonos para un nuevo giro musical en I wanna be yout girlfriend, delicada balada clásica de rock and roll que de nuevo supone uno de los picos creativos e interpretativos del disco.

Tras un tema tan redondo como el anterior, el escaso minuto de punk acelerado y ruidoso de Blown es en los "doce desnudos" de Furman como ese inoportuno sujetador cuyo cierre se atasca en el peor momento, rompiendo la atmósfera y el hechizo que se estaba creando con la hasta entonces acertada combinación de efectivas y urgentes canciones de garaje, glam, punk y rock. Tras ese pequeño traspiés, Furman retoma la omnipresente ira del disco, justificada en este caso por un intenso dolor  muelas (My Teeth Hurt).

El dolor de muelas (que no de oídos) se nos olvida rápidamente al escuchar ese gran tema de pop rock que lleva por título In America, y que es sin duda otro de los grandes momentos del disco, antes de cerrar con buen sabor de boca y actitud rockera con What Can You Do But Rock 'n' Roll (Qué puedes hacer salvo tocar rock and roll). No es poca cosa, y el rock and roll puede ser tan poderoso e impactante como doce desnudos delante de los que toman decisiones contra las libertades y los derechos fundamentales.

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