domingo, 13 de septiembre de 2020

The Rolling Stones - Let it Bleed (Mes Rolling Stones)



LET IT BLEED (1969)

El que fuera octavo disco de los Rolling Stones (en Reino Unido, el décimo en USA) es, como la surrealista portada diseñada por Robert Brownjohn indica, una tan diversa como genial tarta de cumpleaños, en la que en cada porción podemos encontrar sabores y texturas muy diferentes. La guitarra slide da el punto de blues al conjunto, apareciendo en la mayor parte de los temas y firmada casi siempre por Keith Richards, pero a lo largo del disco van apareciendo diversos instrumentos que le dan al conjunto una atmósfera más ecléctica que la de su predecesor, Beggars Banquet (1968). Para ello, contaron con colaboradores en el estudio de la talla de Ian Stewart (teclado), Nicky Hopkins (teclado), Al Kooper (órgano y trompa), Bobby Keys (saxo) Byron Berline (violín) o Ry Cooder (mandolina).

Let it Bleed es el segundo de los cuatro discos consecutivos que se consideran la cumbre creativa y artística de los Stones. Le seguirían el brillante Sticky Fingers (1971) y el desbordante Exile on Main St. (1972), completando una etapa irrepetible. Es, además, el disco que marca el comienzo de la etapa del guitarrista Mick Taylor, ex guitarrista de John Mayall & The Bluesbreakers, aquí de momento en solo un par de canciones, mientras en cocina aún quedaron un par de recetas residuales en las que participó el malogrado Brian Jones, despedido durante la grabación y fallecido sólo un mes después, ahogado en la piscina de su casa. En estas circunstancias, el peso de la mayor parte del disco recayó en el resto de Stones clásicos, que cocinaron una de sus mejores obras.



Tras el éxito del "Banquete de mendigos", su siguiente plan fue golpear a base de tarta hasta "hacernos sangrar". Y aprovechando el #MesRollingStones, y que en septiembre ya no le tenemos respeto a la "operación bikini", hemos encontrado tanto el hueco, como la excusa, para sentarnos a degustar esta tarta de principio a fin. Y ya desde la primera porción, Gimme Shelter, comprobamos que esto no va a ser una dieta blanda, ni apta para cardíacos. Es una de las canciones míticas del cancionero de los Stones, y en gran parte es culpa de la incendiaria interpretación vocal de Merry Clayton, que canta este incandescente tema junto a Mick Jagger. La letra es una cruda compilación de la violencia de los 60, mencionando desde la guerra de Vietnam, como referencias a asesinatos y violaciones, mientras el protagonista pide a gritos un refugio seguro ante tanta locura.

El siguiente trozo de tarta tiene sabor a blues clásico, el de Love in Vain de Robert Johnson. Un tema sobre el amor no correspondido, al que los Stones dan un toque algo más country y más elaborado que el que tiene el original de Johnson, quizá para que el cambio de estilo no fuera tan abrupto en el siguiente tema, Country Honk, una versión en modo country de una tema que ya había grabado anteriormente el grupo (Honky tonk women). Como curiosidad, y aparte de ser el primer tema en el que aparece Mick Taylor, en este tema hace arreglos Alan Parsons, amigo de Keith Richards y una influencia en algunas de sus composiciones de entonces.
El disco vuelve al rock con Live with Me, toda una declaración de intenciones sobre el estilo de vida del rock and roll. En este tema hace aparición el saxofonista Bobby Keys, que les ha acompañado tanto en la mayor parte de sus giras desde entonces, y es el segundo de los dos temas en los que Mick Taylor deja su particular sello a la guitarra, para lo cual Keith Richards sustituyó a Bill Wyman al bajo, en una formación nada habitual. Tras ese anecdótico pero buen tema, llega Let it Bleed ("Déjalo sangrar") la canción que da título al album, con las habituales alusiones al sexo y a las drogas. Es un tema de aires country, no tan relevante como para haber dado nombre al disco, que inicialmente iba a titularse Automatic Changer ("tocadiscos automático"), y de hecho es en ese título original en lo que se inspiraba la icónica portada, con los cinco miembros de los Stones representados en las figuritas que coronan la tarta, que en sus capas inferiores incluye un neumático, una pizza, el panel de un reloj y una lata de cinta, todo ello sobre el tocadiscos sobre el que iba a girar el título.​

La segunda cara comienza con fuerza con Midnight Rambler (que podría traducirse como el "excursionista de medianoche" o el "merodeador nocturno"), cuya letra narra la historia del asesino en serie conocido como "el estrangulador de Boston". Un tema largo e inquietante, con los Stones clásicos (Brian Jones incluido, a la percusión) en plena forma. El disco está plagado de curiosidades, como la de ser el primero en el que Keith Richards empezó a meter uno o dos temas en los que asumía la voz cantante. Es el caso de You got the Silver, segundo y último tema en el que Brian Jones hizo su aparición, esta vez a los mandos de una cítara.


En la cara B aún hay tiempo la sátira de Monkey Man, en la que Jagger critica la artificial y frívola vida de los que viven en el foco de la imagen pública, rodeados de drogas y aduladores por doquier, y para regalarnos la última joya del disco, el "gran finale" que es You Can't Always Get What You Want, un tema de aires hippies interpretado en modo gospel, con la participación del London Bach Choir, y de nuevo, no exento de curiosidades. Charlie Watts no conseguía sacar correctamente el ritmo en la batería, y en la grabación fue sustituido por Jimmy Miller, el productor del disco. Como el buen vino, Charlie debe haber mejorado con los años, porque es un tema habitual de los conciertos y no ha vuelto a necesitar recambio.

Los Rolling Stones seguían escalando a lo más alto y con paso firme, con su rock de guitarras ásperas y cortantes, y sus influencias blues y country, en una vuelta de tuerca que llevó un paso más allá a lo experimentado en Beggars Banquet, y que en su lanzamiento logró desbancar temporalmente al Abbey Road de los Beatles del número uno británico. Un disco cargado de referencias a la situación social del momento, la guerra, la situación política, la violencia, las drogas... pero también con sus momentos de amor sentido y no correspondido. Su receta, para todas estas "heridas" del ser humano, es tan simple como efectiva. Lo que no te mata, te hace más fuerte: Déjalo sangrar.

sábado, 12 de septiembre de 2020

La música en historias: Los músicos de sesión II



     En 7dias7notas decidimos crear una serie de capítulos dedicados a los músicos de sesión, músicos que son versátiles y capaces de trabajar en equipo, que muchas veces tienen que trabajar con otros músicos a los que apenas conocen o con los que nunca han trabajado y sin embargo están más que a la altura del trabajo para el que han sido contratados.
Al igual que en el primer capítulo y en los siguientes que vendrán iremos reseñando importantes músicos de sesión en tandas de cinco, así que vamos a por los siguientes cinco:


Comenzamos nuestro segundo capítulo con el baterista estadounidense Vincent "Vinnie" Colaiuta, nacido en Brownsville, Pensilvania en 1956. Vinnie recibe clases de batería ya desde niño, pero ha de esperar hasta los 14 años para hacerse con su primer set de batería. Tras estudiar durante una año en la famosa Berklee College Of Music toca aquí y allá en varias bandas hasta que contando con 22 años realiza una audición para tocar con Frank Zappa. Zappa lo contrata y graba varios discos con él. Después de tocar en la banda de Zappa, Vinnie se centra en tocar sobre todo en estudio para diferentes artistas de pop y rock, entre los que podemos encontrar Joni Mitchell, Sting, Eric Clapton, Barbra Streisand, Leonard Cohen, The Beach Boys, Joe Satriani, Megadeth, Gustavo Cerati ó Jeff Beck entre otros. Vinnie tiene acreditadas colaboraciones en más de 1200 álbumes.


Cambiamos de instrumento, concretamente a la guitarra, instrumento que domina a la perfección el guitarrista de jazz Larry Carlton. Larry nace en Torrance, California en 1948, y con seis años empieza a recibir clases de guitarra. Con 14 años realiza su primera actuación como profesional, y si bien se decide a investigar y tocar el género jazz la guitarra de B. B. King ejerce también una gran influencia en él. Larry durante los 70 prosigue dando los pasos adecuados y perfeccionando su técnica trabajando en estudios de grabación de California. Durante su brillante carrera ha publicado 29 álbumes de estudio, pero también ha tenido tiempo para trabajar como músico de sesión durante su extensa carrera, llegando a realizar hasta 500 grabaciones al año. Steely Dan, Joni Mitchell, Billy Joel, Michael Jackson, Quincy Jones, Barbra Streisand ó Charly García entre otros, y en 1998 se une al supergrupo de jazz Fourplay. Larry ha ganado durante su extensa carrera un premio Grammy por la mejor actuación instrumental (1981) y otro Grammy por el mejor álbum de pop instrumental (2010).


Que decir del baterista Jeff Porcaro, que además de su brillante carrera en Toto tuvo además tiempo de participar en la grabación de más de 1000 álbumes. Jeff nace en 1954 en Hartford, Connecticut (Estados Unidos) y su prematura y trágica muerte en 1992 nos privó de seguir disfrutando de uno de los mejores bateristas de la historia. Jeff fue durante más de dos décadas uno de los bateristas más respetados y codiciados de la industria musical, cambió la forma de entender y tocar dicho instrumento y es considerado como uno de los maestros del Groove. Hasta su muerte, Jeff grabó ocho disco con Toto, llegando a ganar seis premios Grammy con la banda. Tenía un gran sentido de equipo y compañerismo, pues a pesar de recibir multimillonarias ofertas para integrarse en bandas como Dire Straits o la banda de Bruce Springsteen siempre permaneció fiel a su banda Toto, lo que no impidió que grabara durante su carrera como músico de sesión para artistas tan dispares como Luis Miguel, Rubén Blades, Pink Floyd, Steely Dan, Bruce Springsteen, Paul MacCartney, Madonna ó Michael Jackson entre otros.


Vamos ahora con el bajista estadounidense Anthony Jackson, considerado por los especialistas como uno de los bajistas más importantes de la historia. Anthony nace en 1952 en Nueva York (Estados Unidos), y comienza a tocar el piano, para después pasarse a la guitarra y finalmente adoptar el bajo como instrumento principal debido a la influencia que ejerce en él el gran bajista del sello Motown James Jamerson. Anthony empieza a trabajar como músico de sesión con 18 años de edad y fue el inventor del llamado "bajo de seis cuerdas", instrumento que él bautizó como "guitarra contrabajo", adelantándose a todos los bajos estándar de seis cuerdas que empezaron a aparecer veinte años después. Tiene acreditadas trabajos en más de 900 álbumes de diferentes artistas, entre los que se encuentran Chick Corea, Billy Cobham, Steely Dan, Al Di Meola, Roberta Flack, Chaka Khan, Pat Metheny, Michael petrucciani, Simon Phillips y Paul Simon entre otros.


Cerramos el segundo capítulo con otro extraordinario bajista, David Hungate, y al igual que Jeff Porcaro integrante de la mítica formación Toto, banda en la que permanece desde su fundación en 1978 hasta 1982. David nace en 1948 en Texas (Estados unidos), y estudia en la Escuela de Música de la Universidad del Norte de Texas. Allí en la universidad toca el bajo en una banda llamada One O'Clock Lab Band, llegando a presentarse en el Festival de jazz de Montreux en 1970. Si bien su instrumento fuerte es el bajo, también toca guitarra, batería, trompeta, trombón y piano, y además de tocar el bajo como músico de sesión también se ha dedicado a los arreglos, la producción y la grabación. Tiene acreditadas colaboraciones en más de 800 álbumes, entre los que se encuentran su álbumes con Toto, un álbum en solitario en 1990 (Souvenir) y multitud de colaboraciones con artistas tales como Boz Scagss, Alice Cooper, Joe Cocker, Barbra Streisand, Olivia Newton-John, Shania Twain, Linda Ronstadt, Bette Midler, Cher, Johnny Rivers, Sara Vaughan, Neil Diamond, Kenny Rogers, José Feliciano ó Dolly Parton entre otros.

viernes, 11 de septiembre de 2020

El disco de la semana 190: Las Pelotas - Cerca de las nubes

 


El disco de la semana 190: Cerca de las nubes - Las Pelotas 

Estimados amigos, aquí una nueva entrega del "El disco de la semana", y fiel a mis recomendaciones en 7dias7Notas, hoy les traigo un disco de una de las bandas de rock argentino, que más me gustan, será por su pasado, parte de una historia del rock icono de la argentina, si estamos hablando de Las Pelotas, luego de la disolución de SUMO, una de las dos bandas que se conformaron fueron Las Pelotas, conformada por Germán Daffunchio y un recordado Alejandro Sokol (†), como hemos dicho ambos eran parte de SUMO. 

Pero esta vez nos centraremos en un disco que demuestra sobre todo la esencia de la banda, un disco de altura, un Germán (Daffunchio) lo demuestra desde el principio, con el tema "Cuantas Cosas" que marcara el ritmo al disco, un tema tan simple en sus letras, que demuestran que esa simplicidad se expresa en frases como "Hoy es un día bueno, no sé cómo decirlo bien".

"Cuantas Cosas"

Esta entrada muestra un primer lado del disco donde la banda demuestra todo su lado sensible con baladas, donde se podría decir que esta entre lo mejor que grabó la banda en su historia, será por la madurez artística de Germán, pero no solo sino que Las Pelotas se deben un disco de estas características, han pasado por demasiadas turbulencias, la perdida en tan corto tiempo de dos miembros de la banda, un Alejandro Sokol y Tavo Kupinski, en tan solo un par de años, y toda esta sensibilidad queda plasmada en "Como el viento", a la vez se muestra Gabriela Martínez, bajista y segunda voz fortalecida acompañando a Germán. 

Pero "Cerca de las nubes" nos guarda una segunda parte un lado B del disco, que sube el volumen y en distorsión de sus guitarras, temas que invitan a bailar también, pero sobre todo creerme el viejo Alejandro Sokol revive en esta segunda parte del disco, para quien no lo han conocido con escuchar "Escondido Bajo El Brazo" te harás una idea de su esencia.

"Escondido Bajo El Brazo"

Las Pelotas no es ni más ni menos, esas bandas que valen la pena conocer, así que hoy en 7dias7notas nuestra recomendación espero que les guste.

Daniel 
Intagram Storyboy

jueves, 10 de septiembre de 2020

Canciones que nos emocionan: Can't You See, The Marshall Tucker Band

The Marshall Tucker Band


     En 1972 ve la luz el proyecto de la banda The Marshall Tucker band, grupo gestado en 1972 y pionero del sonido Southern-Rock junto a bandas como The Allman Brothers Band, Lynyrd Skynyrd ó 38 Special. Durante sus más de 40 años de vida la formación ha combinado su sonido con el rock, el rhythm & blues, el jazz, el country y el gospel entre otros géneros.

La frormación original y que gesta el proyecto del grupo está compuesta por Toy Caldwell (guitarra, voz y compositor principal), Jerry Eubanks (teclados y flauta), Doug Gray (vocalista), Paul Riddle (batería), George McCorkie (guitarra) y Tommy Caldwell (bajo). El nombre de la banda se gesta cuando el grupo se encuentra en un antiguo almacén que habían alquilado como local de ensayo. Mientras los componentes del grupo discutían sobre que nombre poner al grupo alguién se fijó en la llave de la puerta del almacén, dicha llave tenía inscrita "Marshall Tucker", aquello gustó y el grupo adoptó The Marshall tucker Band. Lo que el grupo no sabía y se enterarían después es que Marshall Tucker en realidad era una persona real, concretamente un afinador de pianos ciego que además había afinado el piano que se encontraba en aquel almacén y que tenía inscrito su nombre en una tecla.

En 1973 The Marshall Tucker Band debuta con su álbum homónimo, The Marshall Tucker Band, un disco donde además del rock sureño incorpora elementos de country, rock progresivo, rock psicodélico, jazz, gospel ó folk entre otros. Incluido en el álbum nos encontramos con el tema Can't You See, otro de esos temas que tanto me emocionan, una mezcla de country con rock sureño compuesta por Toy Caldwell. La letra del tema está dotada de cierta oscuridad y nos relata la angustia de un hombre que ha iniciado el proceso de curarse a a sí mismo.

El tema incorpora una curiosidad, la apertura del mismo está hecha por una guitarra y una flauta, la cual es tocada por Jerry Eubanks. El sonido de la flauta le da un toque muy curioso y distinto al tema, más si cabe cuando la flauta no es un instrumento habitual dentro del rock sureño. La publicación Ultimate Classic Rock llegó a nombrar este tema como la mejor canción jamas escrita de southern rock por delante de Sweet Home Alabama de Lynyrd skynyrd.

I'm gonna take a freight train, down at the station

I don't care where it goes

Gonna climb me a mountain, the highest mountain

Jump off, nobody gonna know
Can't you see oh can't you see

What that woman, she been doin' to me

Can't you see, can't you see

What that woman lord been doin' to me
I'm gonna find me a hole in the wall

I gonna crawl inside and die

'Cause my lady now, mean ol' woman lord, never told me goodbye
Can't you see oh can't you see

What that woman lord she been doin' to me

Can't you see, can't you see

What that woman lord been doin' to me
I gonna buy me a ticket now, as far as I can

Ain't a-never comin' back

Ride me a Southbound

All the way to Georgia now
Till the train run out of track
Can't you see oh can't you see

What that woman, she been doin' to me

Can't you see, can't you see

What that woman, she been doin' to me, oh lord
Can't you see oh can't you see

What that woman lord she been doin' to me

Can't you see oh can't you see

What that woman, she been doin' to me
Can't you see (oh she's such a crazy lady) can't you see

What that woman (what a woman) she been doin' to me

Can't you see (lord I can't stand) oh can't you see

What that woman, oh she been doin' to me
Can't you see (I'm gonna take a freight train) can't you see

(I'm down at the station lord) what that woman (ain't never gonna go back) been doin' to me

Can't you see oh can't you see (gonna ride me the southbound)

(All the way to Georgia) what that woman (till the train run out of track) been doin' to me

miércoles, 9 de septiembre de 2020

The Rolling Stone - Bridges to Babylon (Mes Rolling Stones)







El vigésimo primer álbum de los Rolling es un álbum bastante estimable, después de que dominaran los 60 y los 70 con su música, estaban dispuestos a volver a hacerlo en los lejanos noventa y se marcaron un álbum con un puñado de canciones memorables, resultado de un gran trabajo que habían desarrollado durante la última década. La épica es antológica si el álbum es acompañado de una gira que fue aún más apoteósica, con 108 conciertos y un escenario que en aquel momento fue el más grande de la historia. Aun así hay que reconocer que están lejos de sus grandes momentos, si bien nos deja un gusto muy bueno poder recorrer estos puentes de Babilonia.

Comienza el álbum con Flip the Switch, que contiene una soberbia batería de Watts y que, sin ser revolucionario, sí permite entrever que estábamos ante 'algo' que sonaba diferente de lo que habían hecho hasta ahora, resultado una buena canción, aunque bastante lejos de lo que habían hecho en sus momentos álgidos y con una letra que según el propio Mick Jagguer “Es una letra muy extraña, de verdad, sobre la muerte, la locura, la criminalidad y demás. Cosas bastante pesadas, de verdad, pero es una buena. Es excelente para empezar un disco”.  El siguiente tema es Anybody Seen My Baby?, que gozó de un buen éxito en las listas, tiene ese lametazo funky/dance jaggeriano que recuerda a las producciones de los Stones de finales de los 70 y incluye un rapeo de Biz Markie, incluido para tratar de hacer ver que los Stones (y sobre todo Jagger) se habían atrevido a dar un paso adelante. Este tema se ha convirtido en uno de los mas famosos de los Stones en los últimos años, en el video musical podemos ver a Angelina Jolie. Con Low Down, bajan el pistón, es quizás uno de los temas más flojos del álbum, un simple tema de transición con toques modernos, pero con falta de gancho. Con Already over me llegamos a la balada de rigor, demasiada pausada para lo que esperamos de los Stones, pero con ese toque Jagger que hace que nos entreguemos a más de cinco minutos de melancolía. Gunface se vuelve a la canción cruda, un intento de hard rock mezclado con tema de lista de éxitos donde destaca un punteo de guitarra absolutamente excelso, y son estos pequeños encuentros los que nos hace reencontramos con los chicos de Jagger intuyendo que están aun bastante lejos de lo que nos han ofrecido, intuimos que podemos disfrutar de nuevo en ciertos momentos. You Don't Have to Mean It es el típico reggae donde Keith Richards toma el micrófono, es quizás un corte muy abrupto con lo que estábamos escuchando hasta ahora, pero hay que reconocer que ha quedado una canción muy divertida y apañada para tomar aire con lo que se nos avecina, y es que lo que viene es Out of Control, segundo single del álbum, que comienza casi sibilino y va creciendo hasta transformarse en una montaña rusa a golpes de efecto, empieza sexy con un Mick Jagger que musita a la par que ritmos caribeños y funkarras sacados casi del “Slave” van progresando para desembocar contundente y profesionalmente en un estribillo que hace que saltes mientras lo estas escuchando, sello total Rolling. 


Saint Of Me es un pegadizo tema pop ideal para cantar a coro en los conciertos, un ejemplo de lo que debían ser y cómo debían sonar sus satánicas majestades en 1997 mimetizándose con lo que sonaba en esos momentos y a fe que lo consiguieron, un tributo al legendario intérprete de R&B Billy Preston, quien toca los teclados en esta pista. Preston ha tenido un largo historial de enfrentamientos con la ley por cargos como asalto y posesión de drogas y es el único hombre que ha grabado canciones con los Beatles y los Rolling Stones, tocó el famoso solo de teclado en "Get Back". Might as Well Get Juiced es la pieza más extraña del disco, con la voz de Jagger distorsionada, y sintetizadores a porrillo; no es rock, no es pop, casi psicodélico. Aquí surge la paradoja que atraviesa a muchos artistas si hay que seguir haciendo “más de lo mismo” con beneplácito asegurado del fan de siempre o debe seguir corriendo los riesgos propios de sus inquietudes. El tema estaría bien si….lo hiciese otro artista pero no los Stones. Always Suffering es otro medio tiempo de aires countries realmente delicioso, con la voz de Jagger en forma, penalizada por un estribillo demasiado comercial. Too Tight es un puro rock, tema rápido y sin concesiones que nos hace movernos y cantar. Thief in the Night es otro tema flojo a pesar de los intentos de buscar la excelencia con un saxofón, de igual manera que How Can I stop no es el mejor cierre del álbum

En definitiva, es un álbum para disfrutar siempre y cuando no seas muy exigente, si bien podemos decir que es de los mejorcito que hicieron sus satánicas majestades en la década de los noventa.

lunes, 7 de septiembre de 2020

Canciones que nos emocionan: When A Blind Man Cries, Deep Purple

Single Never Before / When A Blind Man Cries


     Para hablar de otro de esos temas que a mí tanto me emocionan nos vamos a centrar en esta ocasión en Deep Purple y en un temazo que debido a las imposiciones de Ritchie Blackmore no vió la luz en un disco hasta 1997, apareciendo como cara B en una edición de single, el tema: When A Blind Man Cries.

Este tema fue grabado en el Grand Hôtel de Montreux, Suiza entre diciembre de 1971, formando parte del material que el grupo estaba preparando para su sexto álbum de estudio, Machine Head. Dicho material iba a ser grabado en el Casino de Montreux, pero un desafortunado incidente que provoca el incendio del Casino mientras actúa Frank Zappa obliga al grupo a buscar alternativas. Ian Gillan (voz), Ritchie Blackmore (guitarra), Ian Paice (batería), Roger Glover (bajo) y Jon Lord (teclados) deciden mudarse junto con el productor Martin Birch y concebir Machine Head en el Grand Hôtel de Montreux.

Dentro de las sesiones de grabación para el álbum el grupo al completo compone otro de esos temas que a mí tanto me emocionan, When A Blind Man Cries, pero el tema no es del agrado de Ritchie Blackmore, y aunque al resto del grupo si le gusta se impone Ritchie, por lo que el tema no se publica en Machine Head que aparece publicado el 25 de marzo de 1972. El tema aparece publicado como cara B del single Never Before, el cuál aparece en la cara A, el 18 de marzo de 1972.

When A Blind Man Cries, al igual que Smoke On The Water, tiene como temática el incidente del incendio del Casino de Montreux, de la misión que tenía el grupo de grabar el álbum en esas fechas que coincidían con un breve descanso de la gira y de como tienen que reubicarse apresuradamente, encontrando el Grand Hôtel de Montreux. La habitación del casino donde se graba el material para Machine Head era en realidad un pasillo que tenía forma de T, los instrumentos se se instalaron cubriendo todos los rincones del pasillo y se instalaron bombillas rojas para crear un ambiente más cómodo.

El tema nunca ha sido tocado en presencia de Ritchie Blackmore, la primera vez que se toca en directo es el 6 de abril de 1972 en Quebec, Canadá, debido a que Ritchie se encuentra enfermo y es sustituido por el guitarrista Randy California. Habrá que esperar a la gira The Battle Rages On en 1993 donde el guitarrista es Joe Satriani para degustar el tema en directo. Con la llegada del guitarrista Steve Morse al grupo el tema se convierte en un habitual dentro del repertorio de la banda.
Además, el tema se incluye y publica dentro de la reedición especial del 25º aniversario del LP Machine Head en 1997.

If you're leaving, close the door

I'm not expecting people, anymore

Hear me grieving, lying on the floor

Whether I'm drunk or dead, I really ain't too sure
I'm a blind man

I'm a blind man

And my world is pale

When a blind man cries

Lord, you know
There ain't a sadder tale
Had a friend once, in a room

Had a good time, but it ended much too soon

In a cold month, in that room

We found a reason, for the things we had to do
I'm a blind man

I'm a blind man

Now my room is cold

When a blind man cries

Lord, you know
He feels it from his soul

domingo, 6 de septiembre de 2020

The Rolling Stones - Beggars Banquet (Mes Rolling Stones)

Beggars Banquet - Mes #TheRollingStones

Amigos que mejor que este mes de septiembre para reconocer una de las mejores banda de rock de todos los tiempo, y como siempre desde 7días7Notas, queremos recorrer la carrera de The Rolling Stones,

Por ello hoy les traemos Beggars Banquet (El Banquete de los mendigos) el 7mo. álbum de la banda, el cual fue publicado en Reino Unido en diciembre 1968, donde la banda vuelve a un sonido más original más propio, luego de su experiencia con sonidos psicodélicos en sus anteriores disco. 


Por ello creo que Beggars Banquet, seré en la carrera de la banda en un disco que dará comienzo a un sonido musical mucho más Stones, a lo conocido hoy en día, y esta obra maestra nos trae ni más ni menos temas musicales tan vigentes como Sympathy For The Devil, que es el primer corte del álbum. 

Sympathy For The Devil, es verdaderamente una joya maestra de los Stones, pero no sera la única que acompañara este disco No expectations, su segundo corte con sonido Country, donde tenemos un ensoñador slide de guitar que pone los pelos de punta recordando que tal vez fue lo último que hizo Brian Jones junto a los Stones. 

Portada de 1968
Como hemos dicho, luego de pasar por una experiencia hacia lo psicodelico, los Stones quieren volver a un sonido mucho más de ellos, y lo vuelven a demostrar con Dear Doctor, pero lo Stones tienen mucho más para dar, y tras un espectacular lado A de este disco, no recibe Street Fighting Man otra joya de la corona, que nos tiene acostumbrado los Stones, y en particular Street Fighting Man la manera en que los Stones se pronunciaran en contra de la guerra de Vietman. 

Una curiosidad del disco es que originalmente no salio con la portada que hoy lo conocemos por parecer ofensiva, y la discográfica y la banda luego de discutir el asunto, decidió salir con una portada en blanco y en ella solo ponía "Rolling Stones - Beggars Banquet" en letras doradas, pero por suerte luego la banda re edito el álbum, con la portada original.   

Beggars Banquet en la carrera de los Rolling Stones es mucho más que un álbum de Rock, como hemos dicho es la bisagra que en la carrera musical de los Stones, marca un cambio en los discos que vendrán de la banda. 

Por ello no quisimos dejar pasar de mencionarlo en el mes de #TheRollingStones este disco, por ello amigos les dejo con este clásico que es todos ya conocemos pero sin duda queremos volver a escuchar. 

The Rolling Stones - Sympathy For The Devil



Daniel 
Instagram: Storyboy

sábado, 5 de septiembre de 2020

La música en historias: Los músicos de sesión I



     En el mundo de la música además del grupo o artista en cuestión es muy importante cuidar otros aspectos para que todo salga bien. Son parte fundamental los productores e ingenieros a los que además solemos dedicar espacio. En 7dias7notas hemos decidido dedicar espacio durante una serie de capítulos a todos esos músicos de sesión que son parte fundamental dentro de este noble arte y vamos a empezar con algunos de los más destacados y que tienen además en su haber más grabaciones.


Si hablamos de músicos de sesión, inmediatamente nos viene a la mente unos de los más prolíficos, Steve Lukather, quien tiene acreditadas colaboraciones en unos 1477 álbumes. Steve nace en 1957 en Estados Unidos y además de ser el miembro fundador del grupo Toto junto con David Paich y Steve y Jeff Porcaro ha puesto su guitarra al servicio de innumerables artistas de la talla de Michael Jackson, Bozz Scagss, Ringo Starr ó Van Halen. También ha tenido tiempo para cuidar su carrera en solitario publicando 7 álbumes en solitario, ha tocado géneros como el pop rock, rock, rock progresivo, hard rock e incluso jazz fusión y ha sido nominado a 12 premios Grammy ganando 5 de ellos.


Otro ilustre que además acredita colaboraciones en más de 1400 álbumes es el compositor y baterista estadounidense de jazz y jazz funk Harvey Mason. Harvey nace en 1947 en Atalntic City (Nueva Jersey) y comienza a recibir clases de batería a los 7 años de edad. A los 16 años consigue el dinero suficiente para adquirir su primer set de batería y logra ingresar en la prestigiosa Berklee School Of Music. Además de publicar varios discos en solitario y como miembro del supergrupo de estadounidense de jazz y smooth jazz Fourplay ha tenido tiempo de prestar sus servicios con las baquetas para gente de la talla de Earth Wind & Fire, The Headhunters, Nancy Wilson, Art Blakey, Notorius Big, Nathan East, Carlos Santana, George Benson, Isaac Hayes, Barbra Streisand, Donna Summer, Carole King, James Brown, Luis Miguel ó Henry Mancini entre otros muchos.


Otro que tiene acreditadas colaboraciones en nada menos que 1392 álbumes es el baterista y percusionista Steve Gadd. Steve nace en 1945 y crece en Nueva York, a la edad de 11 años es uno de los ganadores del concurso de talentos Mickey Mouse, ganado un viaje a California donde conoce al mítico Walt Disney. Como premio también aparece tocando la batería en The Mickey Mouse Club. En 1968 realiza su primera grabación de estudio, concretamente en el álbum Diana In The Autumn Wind del pianista de jazz Gap Mangione. Steely Dan, Simon & Garfunkel, James Taylor, Joe Cocker, Chick Corea, Eric Clapton, Chet Baker, Al Di Meola y Michael Petrucciani son sólo algunos de los nombres con los que ha colaborado durante su larga carrera.


Con más de 1330 álbumes acreditados nos encontramos al bajista y vocalista estadounidense Nathan East. Nathan nace en 1955 en Filadelfia, Pensilvania (Estados Unidos), y con cuatro años se muda con sus 7 hermanos a San Diego. empieza a estudiar de niño el piano para pasarse después al chelo, pero con 14 años da un giro cuando se empieza a interesar por el bajo, instrumento que toca uno de sus hermanos mayores, David. Estando todavía en primaria ingresa en un grupo llamado Power, grupo que suele ser utilizado como banda base para las giras de algunos artistas del sello Stax Records. Es ahí donde llama la atención de Barry White quien lo contrata para una de sus giras. Despues de cursar sus estudios en la Universidad de California y graduarse en Artes Musicales se muda a Los Ángeles donde inicia una más que lucrativa carrera como músico de sesión. Además de formar parte junto con Harvey Mason del supergrupo Fourplay, Barry White, Al Jarreau, Eric Clapton, Phil Collins, Lionel Ritchie, Whitney Houston, Michael Jackson, Elton John, anita Baker, George Harrison, Stevie Wonder, Bob Dylan, Ray Charles, George Benson, Frank Sinatra, Sammy Davis Jr, Tomo Jones, B. B. King, Toto, Sting ó Steve Vai son sólo algunos de los grandes artistas que han contado con los servicios de su bajo.


No quiero cerrar este primer capítulo dedicado a los músicos de sesión sin mencionar a uno de mis bateristas preferidos, Simon Phillips, quien acredita más de 600 colaboraciones en distintos álbumes. Simon nace en 1957 en Londres (Reino unido) y con 12 años empieza a tocar profesionalmente la batería en una banda llamada Dixieland, la cual estaba dirigida por su padre. Después del fallecimiento de su padre empieza tocar estilos como el pop y el rock y encuentra trabajo en una producción musical de Jesucristo Superstar. En la década de los 70 trabaja con gente de la talla de Jeff Beck, Stanley Clarke, Peter Gabriel, Pete Townshend ó Frank Zappa. También toco en el supergrupo 801 junto a Brian Eno y Phil Manzanera en su álbum 801 Live en 1976. En 1977 sustituye a Alan Moore en Judas Priest con quienes graba Sin After Sin. Es con Judas Priest donde introduce la combinación del doble bombo con ritmos rápidos en semicorchea, marcando el camino a seguir a la hora de tocar la batería dentro del género heavy metal. Además de ser miembro de Toto durante 21 años (1992 - 2014) haber tocado la batería con los mencionados Judas Priest, Jeff Beck y 801, ha colaborado con Gary Moore, Bernie Marsden, Jon Lord, Mike Olfield, Mike Rutherford, Tears For Fears, The Who, Gerg Howe, Pink Floyd, Michael Shenker Group, David Gilmour, Phil Collins, Roger Daltrey, Pete Townshend ó Asia entre otros.

viernes, 4 de septiembre de 2020

El disco de la semana 189: Gatoperro - Ríen los Dioses

Ríen los Dioses, Gatoperro


     "Gatoperro es el fruto de una improbable relación entre gato de escayola transgresor y perra escasamente prejuciosa. Fue criado en los bajos fondos de mil ubres, de los que durante años se ha esforzado por no salir. Tras una breve y desafortunada estancia en un circo ruso, encontró mas tarse que pronto en el rock de pelo y barba su razón de malvivir."

Así definía su alter ego el músico vallisoletano David Llosa, quien a los 25 años decidió abandonar la tierra que le viera nacer y mudarse a Madrid donde quiso probar suerte en el complejo y difícil mundo de la música. Mal no le ha ido pues en este tiempo ha publicado ya cinco discos de estudio y se ha ganado una más que solvente reputación en éste siempre complicado de la música.

Gatoperro como David dice no es más que un personaje  que se encarga de dar la cara en el escenario para no tener que darla directamente él. Es Gatoperro un músico que no ve la música como un trabajo, es para él una pasión a la que está entregado, y por la que mantiene una ilusión inquebrantable, pues si la ilusión muere con ella desaparecerá la creatividad.

En 2018 Gatoperro publica su quinto álbum de estudio, Ríen los Dioses, álbum producido por el mismo, con arreglos de David Llosa (su alter ego), Iñigo Coppel, Pato Frank y Jairo Martín. El álbum es grabado por Christian Chloé, mezclado por David Llosa y Christian Chloé y masterizado por Denis blackham. Todos los temas están escritos por David Llosa excepto La banda de Carso Water (David Llosa y Jairo Martín) y Hecho a medida (Oscar Aguado y David Llosa).

Febrero de 2018, Gatoperro está en forma y la banda rodada, habían publicado en primavera de 2017 el disco Cowboys pero inexplicablemente no encuentran conciertos donde explotar todo su potencial. Este hecho llega a frustar a Gatoperro, pero lejos de lamentarse decide coger el toro por los cuernos y decide que si no pueden tocar van a grabar un nuevo disco. Decide entonces llamar a su banda de músicos, Christian Chloé (batería), Jairo Martín (teclados), Pato Frank (bajo) e Íñigo Coppel (guitarra) y los cita en el estudio que tiene el batería Christian Chloé. Decide además que se lo van a guisar y comer todo ellos, grabación, mezclas, producción, etc., sin técnicos de por medio. 

Cinco músicos que se encierran en una casa y entre rutinas, quehaceres y ratos de relajación y absueto diarios van componiendo y dando forma al quinto disco de Gatoperro. El resultado de aquella apuesta es Ríen los Dioses, disco donde podemos percibir influencias de artistas como Bob Dylan o The Band, basándose en el clásico sonido de las grabaciones de los años 60 y 70, y donde coquetean con sonidos como el rock latino ó el genuino sonido del country pop y el southern rock americanos.


jueves, 3 de septiembre de 2020

Canciones que nos emocionan: Mississippi Queen, Mountain

Mississippi Queen, Mountain


     Nos encontramos en 1970 y la banda procedente de Long Island, Nueva York (Estados Unidos) Mountain  iba a debutar con su primer álbum de estudio. Leslie west (guitarra y voz), Felix Pappalardi (bajo, piano y voz), Corky Laing (batería y percusión) y Steve Night (órgano), publicaban el 7 de marzo de 1970 bajo el sello discográfico Windfall Records el disco titulado Climbing!. De la producción del disco se encargaría el propio Félix Pappalardi, quien ya había producido anteriormente material del grupo Cream.

Hay quien considera y acredita como el primer álbum de la banda el primer álbum grabado en solitario por Leslie West un año antes titulado Mountain. Para el disco West contó prácticamente con la misma formación que posteriormente formaría Mountain: Pappalardi, Corky Laing y el teclistas Steve Night.

El grupo graba entre 1969 y principio de 1970 el material que compone este primer álbum en los Record Plant Studios de Nueva York. El álbum se convertirá a la larga en el más exitoso de la banda, llegando a ocupar el puesto nº 17 en la famosa lista americana Billboard 200.
Incluido en el álbum se encuentra el tema Mississippi Queen, otro de esos temas que a mí tanto me emocionan. Una canción que se convertiría en el sencillo más exitoso de la formación, alcanzando el puesto nº 21 en la lista Billboard Hot 100. También es uno de los temas más versionados del grupo, encontrándonos con versiones de artistas de la talla de WASP, Sam Kinison, Overdrive y Ozzy Osbourne entre otros.

Referente a la composición del tema, Corky Laing había escrito algunas letras del tema, algunos acordes y parte de la batería y se lo enseñó a Leslie West. El propio West recuerda que el día que Laing le muestró el material se habían drogado mucho y que sacó una servilleta que le serviría para plasmar el riff principal y los acordes del tema. Laing también reconoció en su momento que era muy seguidor del grupo The Band y se basó en el tema Up The Cripple Creek del grupo para componer Mississippi Queen, y que no sintiéndose del todo cómodo con aquello llegó a hablar del asunto con el baterista y vocalista de The Band Levon Helm, quien le hizo saber que no se preocupara y que no encontraba grandes similitudes entre los dos temas y que por lo tanto no veía plagio alguno, los temas eran diferentes.

Si nos atenemos al título del tema, podría parecer que éste se trata sobre un barco fluvial cuando en realidad trata de una experimentada y seductora mujer que enseña al protagonista un par de cosas ó tres sobre el amor. También podemos reconocer el famoso cencerro en la intro del tema, y es que el famoso cencerro no estaba previsto que apareciera pues al principio se puso allí ante la insistencia de Pappalardi para que Corky llevara la cuenta del tema, pero luego gustó tanto que decidieron incluirlo. Aparte de Corky Laing y Leslie West, también trabajarían en el tema Félix Pappalardi y el letrista David Rea, siendo estos cuatro acreditados en la composición del tema.

Mississippi Queen

You know what I mean
Mississippi Queen
She taught me everything
Went down around Vicksburg

Around Louisiana way
Where lived the Cajun Lady
Aboard the Mississippi Queen
You know she was a dancer

She moved better on wine
While the rest of them dudes were gettin' their kicks

Boy, I beg your pardon, I was gettin' mine
Mississippi Queen

If you know what I mean
Mississippi Queen
She taught me everything
This lady she asked me

If I would be her man
You know that I told her
I'd do what I can
To keep her lookin' pretty

Buy her dresses that shine
While the rest of them dudes were makin' their friends

Boy, I beg your pardon, I was loosin' mine
You know she was a dancer

She moved better on wine
While the rest of them dudes were gettin' their kicks

Boy, I beg your pardon, I was gettin' mine
Yeah, Mississippi Queen

miércoles, 2 de septiembre de 2020

The Rolling Stones - Steel Wheels (Mes Rolling Stones)


Se acaba el verano, y al llegar el mes de septiembre nos ponemos de nuevo serios. La "vuelta al cole" es lo más parecido a un descenso a los infiernos, y para sobrellevarlo, que mejor que escuchar los sabios consejos de sus "Satánicas Majestades". Y para poner en marcha la maquinaria pesada de rock y blues con la que vamos a realizar este viaje, nada mejor que pisar a fondo y que chirrien contra el pavimento las "ruedas de acero" de Jagger, Richards y compañía. Abróchense los cinturones, aquí comienza el #MesRollingStones.

STEEL WHEELS


Comenzamos casi por el final, porque Steel Wheels es el décimo noveno álbum de estudio (en Reino Unido), o el vigésimo primero (en Estados Unidos).  La razón es que, como miembros de lo que se llamó la "Generación X", empezamos a descubrir el poder de la música ya entrada la década de los ochenta. Habíamos oído hablar de los Rolling Stones, y habíamos escuchado sus canciones más representativas, pero en aquel ya lejano 1989, la publicación de un nuevo disco de los Stones, tras varios años de silencio, era para nosotros el momento de acercarnos, en tiempo real y por primera vez, a un disco completo de la banda.


Ayudó bastante que, tras un período de distanciamiento entre Jagger y Richards desde la publicación del anterior disco (el fallido Dirty Works, 1986), este nuevo retorno viniera, además, marcado por una vuelta a su sonido más clásico en buena parte de los temas del disco. Tras un período de composición conjunta, del que salieron más de cuarenta posibles canciones, convocaron al resto de miembros de la banda y comenzaron la grabación de los temas de la que sería su primera grabación digital, entre Montserrat y Londres, a excepción del tema Continental Drift, que se grabó en Tánger con la colaboración de The Master Musicians of Jajouka, lo que le dio a la canción un marcado aire oriental e innovador, que no fue del agrado de los más puristas fans de la banda británica.

El primer single lanzado para promocionar el disco fue Mixed Emotions, un gran ejemplo de esa vuelta a los sonidos de guitarra más clásicos del grupo, y un guiño a la ambivalente relación de amor y odio entre Jagger y Richards. Posteriormente, otros tres singles más fueron lanzados al mercado, en concreto la rotunda Rock and a hard place, la sentida balada para románticos Almost hear you sigh y uno de los temas más brillantes del disco, la rítmica y versátil Terrifying, que mostraba a unos Stones en plena forma en el estudio.

Si a esto unimos que la vibrante Sad Sad Sad, que arranca de manera fiera y engrasada la maquinaria del disco, se quedó sin el merecido premio de convertirse en uno de los singles, y que los dos temas interpretados por Richards (Can't be seen y Slipping Away) rayan también a gran altura, nos encontramos sin duda ante un gran disco en su conjunto. Cierto es que cualquier disco de los Stones a partir de los ochenta, y Steel Wheels incluido, palidece ante sus joyas de finales de los sesenta y primeros de los setenta, pero junto a A bigger bang es, probablemente, el mejor disco de las décadas posteriores y hasta la actualidad.

Tiempo tendremos, durante este mes, para profundizar en éstos y otros discos. Un tiempo que pasará para nosotros, como lo ha hecho este extraño y cálido verano, pero que no parece pasar para sus Satánicas Majestades. Las ruedas de acero han seguido moviendo la máquina, que durante 2020 ha ido soltando perlas de lo que podría ser su nuevo disco, incluida la brillante y profética Living in a ghost town. Mientras seguimos adaptándonos a la nueva vida, añorando la cercanía de los abrazos en ciudades fantasmas marcadas por la distancia, intentaremos hablar de todo esto, y mucho más, en el #MesRollingStones.