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viernes, 28 de mayo de 2021

Disco de la semana 227: I Am The Blues - Willie Dixon

 

I Am The Blues, Willie Dixon


     Cuando Hablamos de Willie Dixon, nos estamos refiriendo a uno de los compositores de blues más prolíficos de su tiempo, y junto con Muddy Waters, la persona más influyente en el desarrollo del sonido del blues de Chicago posterior a la II Guerra Mundial. Dixon, además de componer, cantaba, arreglaba, producia discos y tocaba con maestría el bajo, el contrabajo y la guitarra.

Muchas de las canciones que Dixon compuso durante su carrera han sido grabadas por innumerables músicos de muchos géneros musicales. Para muestra el disco recomendado para la ocasión, I Am The Blues, que es un álbum que contiene nueve canciones que Dixon compuso para que fueran grabadas por otros artistas en su etapa como compositor principal y músico de sesión para el sello discográfico Chess Records. Nueve temas que Dixon decide grabar el mismo y que ha día de hoy son grandes clásicos y referentes dentro del blues. 

Cuatro de los nueve temas, Back Door Man, Spoonful, I Ain't Superstitious y The Little Red Rooster fueron originalmente grabados por Howlin' Wolf. Los cuatro temas contaron con la presencia al contrabajo de Dixon en aquellas sesiones de grabación de Howlin' Wolf. The Same ThingYou Shook Me y (I'm Your) Hoochie Coochie Man fueron grabadas por Muddy Waters, The Seventh Son fue grabada por el cantante y compositor de R&B Willie Mabon, y I Can't Quit You, Baby, no se llegó a grabar para Chess Records, siendo por primera vez grabada por Otis Rush para el sello Cobra Records.

El disco es producido por Abner Spector y publicado en 1970 bajo el sello discográfico Columbia Records. Dixon, a los mandos vocales y el bajo, contó con la colaboración de Walter Horton a la Armónica, Lafayette Leake y Sunnyland Slim al piano, Johnny Shines a la guitarra, y Clifton James a la batería.



Comienza la cara A con el clásico Back Door Man, tema donde Dixon hace referencia al "Hombre de la puerta trasera", que en la cultura sureña es como se referían a cuando un hombre tenía una aventura con una mujer casada. El hombre siempre usaba la puerta trasera para escapar antes de que el marido engañado regresara a casa. Esta temática del hombre de la puerta trasera era bastante recurrente en las canciones de blues de la época. I Can't Quit You, Baby, donde Dixon se hace eco de las consecuencias del adulterio, y de cuando un hombre no puede renunciar a tener dicha relación, aunque eso sea su ruina. Dixon admitió que para escribir el tema se basó en una relación por la que Otis Rush estaba preocupado en ese momento. De hecho el tema fue compuest para que fuera grabado originalmente por Rush, como así fue. The Seventh Son, tema donde al igual que en "Hoochie Coochie Man", Dixon vuelve referirse al tema popular y folclórico del séptimo hijo de un séptimo hijo: "Ahora todo el mundo habla del séptimo hijo, pero en todo el mundo, sólo hay uno, yo soy el indicado, sí, soy el único, soy al que llaman el séptimo hijo...". Cierra la cara A Spoonful, uno de los grandes clásicos del blues. Dixon se basó para componerlo en los temas "All I Want Is A Spoonful" (1925) de Papa Charlie Jackson, "Cocaine Blues" (1927) de Luke Jordan, y "A Spoonful Blues" (1929) de Charlie Paton. En cuanto a a letra, "Spoonful" significa "cucharada", y Dixon la utiliza metafóricamente para referirse a los extremos que pueden alcanzar las personas para satisfacer sus placeres, como pueden ser el sexo, el alcohol o las drogas. 



Se encarga de abrir la cara B I Ain't Superstitious, donde Dixon trata la temática de las supersticiones como la típica de gato negro cruzando el camino. You Shook Me, acreditada a Dixon y al guitarrista y cantante de blues estadounidense J. B. Lenoir. El tema, interpretado por Muddy Waters, se convirtió en uno de los más exitosos de principios e los años 60. Surge a partir de una improvisación que Earl Hooker utilizó para calentar, utilizando el slide en su guitarra, en las sesiones de grabación que realizó con su banda de respaldo para el  sello Chief Records, que se sucedieron en mayo de 1961. El productor del sello Chief Records, encantado con aquella improvisación decidió publicarla como sencillo bajo el título "Blue Guitar". Leonard Chess, propietario de Chess Records, al escuchar "Blue Guitar", pensó que el tema tenía mucho potencial, y como estaba buscando material nuevo para que lo grabara Muddy Waters, llegó a un acuerdo para que Willie Dixon escribiera la letra de la canción. El resultado de aquello fue you Shook Me, un tema al que tambíen se le atribuyen créditos en la composición al guitarrista y cantautor J. B. Lenoir, que por entonces también trabajaba para Chess Records. (Im Your) Hoochie Coochie Man, otro de los grandes clásicos de siempre. La letra del tema, además de tener referencias sexuales trata de la mística. El término Hoochie Coochie es un eufemismo para referirse a la vagina, y también se llamaba así a un provocativo baile aparecido a finales del siglo XIX. Dixon afirmaba que este tema, Hoochie Coochie Man, era un ejemplo de las conexiones entre los videntes y clarividentes con el folclore del sur de los Estados Unidos. The Little Rooster, para componer este tema, Dixon se basó y utilizó elementos de varias canciones de blues anteriores, entre las que se encuentran "Banty Rooster Blues" (1929) de Charlie Paton y "If You See My Rooster" (1936) de Memphis Minnie. El tema refleja las creencias populares que existían a principios del siglo XX en el sur de Estados Unidos, donde el gallo contribuía a la paz del corral. Y cierra la cara B, y por tanto este disco repleto de grandes clásicos The Same Thing, tema que fue grabado por primera vez en 1964 por Muddy Waters, y que a la grabación de Dixon, padre del tema en 1970, le han seguido artistas de la talla de George Thorogood, The Allman Brothers Band, Grateful Dead, Lousiana Red y Eddie C. Campbell entre otros.

I Am The Blues es un disco que pone de manifiesto la importancia que Willie Dixon tuvo para el desarrollo del blues de Chicago. Basta con mirar los nueve clásicos grabados para la ocasión y fijarse en los créditos, donde Willie Dixon figura como compositor y padre de todos los temas, unos temas que han alcanzado por derecho propio el estatus de grandes clásicos del blues.

martes, 30 de marzo de 2021

Un país, un artista: Irlanda - Rory Gallagher

 

Rory Gallagher


    Cuando los que hacemos posible 7dias7notas nos enteramos del siguiente país elegido para reseñar al artista de turno, automáticamente todos clavaron la mirada en mí, sabían que sería yo el que se encargaría de la reseña, a no ser que no pudiera, tuviera un esguince en las dos muñecas de ambas manos que me impidieran escribir, o simplemente me encontrara desganado. Ninguna de las circunstancias se había producido, por lo que mi compañeros de andanzas sabían que la reseña de país de Irlanda era para mí, conocedores de la importancia que ha tenido dicho país para mi crecimiento musical. 

Ahora tenía que elegir el artista a reseñar, pues tenía varios candidatos, por un lado Phil Lynott, uno de los mejores compositores que el rock mundial ha dado, o su amada banda Thin Lizzy, los cuales fueron de los primeros en conseguir abrir fronteras y expandir la música irlandesa al resto del mundo. Por otro lado estaba el León de Belfast, Van Morrison, del cual poco podemos decir que no se haya dicho ya, y sus Them, el grupo con el que se dió a conocer y que junto a Thin Lizzy fueron los primeros que lograron expandir la música irlandesa a otros lugares. U2 eran otros de los candidatos, dignos herederos de todos los artistas anteriores, continuando con el legado de seguir expandiendo la música irlandesa por el mundo, alcanzando cotas increíbles. 



Después de darle no pocas vueltas, y de barajar los anteriores candidatos y algunos más, decidí elegir al artista que voy a desvelar a continuación, un artista autodidacta, dotado de un talento innato, capaz de tocar varios instrumentos con gran habilidad, cuyo instrumento fuerte era la guitarra, y todo un maestro en el arte del slide. Si tuviera que definirle con un adjetivo, sería la Humildad por encima de todos los demás, algo muy raro y escaso de ver cuando nos fijamos en artistas de primera línea. Sí amigos, el artista elegido para hablar de Irlanda no podía ser otro que Rory Gallagher. Rory fue un artista para el que siempre prevaleció la música y su público por encima de todo, jamás buscó ocupar las listas de éxitos, la calidad de su música y poder compartirla en vivo con su público estaba por encima de todo. Todo esto quizás ha hecho que  su nombre no suene tanto ni esté en las quinielas cuando se habla de los grandes guitarristas de la historia, pero puedo asegurar que Rory forma parte de ese selecto grupo por derecho propio.

Rory Gallagher nace en Ballyshannon, Irlanda, el 2 de marzo de 1948. Su padre, trabaja para la Junta de Suministro de Electricidad de Irlanda, hecho que hace que cambien a menudo de residencia por motivos de su trabajo. Un año después la familia se muda a la ciudad de Derry, lugar donde nace el hermano de Rory, Dónal. Poco después, la madre de Rory y Dónal se acabará instalando junto a los dos niños en la localidad de Cork, donde Rory acabará viviendo gran parte de su vida. La madre de Rory, Monica, era cantante y llegó a actuar con un grupo llamado The Abbey Players en el Teatro de Ballyshannon, el cual ahora se llama Teatro Rory Gallagher

Los padres de Rory siempre animaron tanto a él como a su hermano a dedicarse a la música. Dónal llegó a tocar el acordeón y cantar con la Tír Chonaill Céilí Band en Donegal, y Rory se decantó por la guitarra, tocando primero el ukelele para perfeccionar su técnica para tocar la guitarra y actuando en pequeñas funciones. La primera guitarra que Rory tiene es la que le regalan sus padres cuando tiene 9 años, aprende a tocarla de forma completamente autodidacta. Más tarde empezará a dominar también con gran habilidad la armónica, el saxofón alto, el banjo, el sitar, la mandolina y el dobro entre otros. 



A los 12 años participa en un concurso de talentos y lo gana, y tres años más tarde compra su primera guitarra eléctrica, una Fender Stratocaster que se convertirá en su gran acompañante durante toda su carrera musical. La guitarra fue comprada de segunda mano con la ayuda de sus padres, según Rory, era una de las primeras Fender Stratocaster que circulaban por el país irlandés, y su precio no fue barato, pero él tranquilizaba a su madre diciéndole que no se preocupara por el dinero, pues con esa guitarra podía hacer las funciones de guitarra solista y guitarra rítmica a la vez, y así no tenía que tener un segundo guitarrista, por lo que ganaría más dinero y amortizaría la guitarra más rápido. Es durante ésta época cuando empieza a experimentar con el blues, el folk y el rock, y como no tiene dinero para comprar discos, se queda despierto hasta altas horas de la nohe escuchando las emisoras de radio Radio Luxembourg y AFN, donde descubre artistas que se convertirán en grande influencias para él, como Lonnie Donegan, uno de los maestros del Skiffle, género con influencias de jazz, blues y música folclórica estadounidense, Eddie Cochran, Buddy Holly y Muddy Waters entre otros. 

Con 15 años debuta como profesional en una formación llamada Fontana, banda que deja en 1966 para crear el power trío The Taste, que después de algún que otro cambio terminará desembocando en Taste, formado por él a la guitarra y voz, Richard "Charlie" McCracken al bajo y John Wilson a la batería. Con este magnífico power trío, y a pesar de su corta vida, acabará marcando una época, llegando a tocar en el mítico Festival de la Isla de Wight en 1970, donde comparte cartel gente de la talla de Jimi Hendrix, Leonard Cohen, The Who, Emerson, Lake & Palmer, The Moody Blues o Sly Stone ente otros. En su etapa en Taste aprenderá muhísimo del negocio, pues tras acabar harto de dar conciertos sin parar y hacer giras usando unos viejos equipos de sonido, casi nunca tiene dinero en el bolsillo mientras ve como otros se están forrando a su costa. Es precisamente después de ese festival, en 1970, con dos magníficos discos de estudio a sus espaldas con la discográfica Polydor, Taste (1969) y On the Boards (1970), cuando el mánager de la banda y los otros dos miembros quieren dar una dirección diferente al grupo, pero Rory se niega y decide disolver el grupo e iniciar así su carrera en solitario. En 1971 Polydor publica dos directos de la formación, Live Taste y Live at the Isle of Wight, y en 1974 la discográfica Emerald publica un disco no autorizado titulado In the Beginning, bajo el apodo Taste and Rory Gallagher.

Tras desmantelar Taste, Rory ficha al bajista Gerry McAvoy, quien le acompañará prácticamente durante toda su carrera, y al baterista Wilgar Campbell, ambos del grupo Deep Joy, a quienes Rory había conocido durante su etapa en Taste. Rory inicia a partir de aquí una carrera en solitario repleta de discos de gran calidad, donde para él siempre prevalecerá la calidad  de su música y poder ofrecérsela a su público en directo, sin importarle las listas de éxitos. De hecho siempre que la discográfica de turno o alguien le alienta a sacar algún tema de éxito para vender más discos, él siempre se negará, la calidad debía primar ante todo. La mayoría de sus discos serán grabados bajo la fórmula del power trío, si bien en algunos añadirá también un tecladista.

rory Gallagher & Gerry McAvoy

En 1971 Rory debuta en solitario con la discográfica que le viene acompañando desde su inicios en Taste, Polydor, y en mayo de 1971 publica su disco debut titulado Rory Gallagher. En noviembre de 1971 publica su segundo trabajo, Deuce. Como podemos comprobar, hasta principios de la década de los 80, la actividad de Roy será frenética, con la publicación de hasta dos discos por año y la celebración de multitud de giras y conciertos, la gran pasión de Rory, ofrecer y disfrutar de su música con el público en directo. En febrero de 1973 publica Blueprint, y en noviembre de 1973 Tattoo, quizás su opera prima, aunque esto es difícil de afirmar si uno ha escuchado toda la discografía de Rory. Después de Tattoo, Polydor publicará el indispensable directo Irish Tour '74, publicado en julio de 1974, y que recoge toda la magia desplegada por el guitarrista durante una gira realizada en enero de 1974 por tierras irlandesas, recogiendo actuaciones en Dublín, Belfast y su Cork natal. Como comentamos anteriormente, Rory ha aprendido muchísimo del negocio, y ejecutará una jugada maestra que le permitirá seguir haciendo lo que más desea en el mundo, música de calidad. En 1975 Rory es ya toda una estrella, lo que le permite firmar un contrato con la compañía Chrysalis Records, y aquí es donde hace una cosa muy interesante al negociar el contrato con la potente compañía, renuncia a una considerable parte de sus emolumentos acambio de tener el control total de sus temas y discos, siendo él quien tenga siempre la última palabra sobre el material que se editará y saldrá a la luz. 


Con un buen contrato con una discográfica potente, y más aún, con la tranquilidad de hacer y deshacer a su gusto, Rory sigue regalando al personal discazos, Against The Grain, publicado en octubre de 1975, y Calling Card, publicado en octubre de 1976. Al año siguiente, 1977, Rory, aprovechando su creciente popularidad en Estados Unidos, decide irse a grabar a la ciudad de San Francisco bajo la dirección del productor Elliot Mazer. Una vez finalizado el proceso de grabación, durante el cual ya habían surgido fricciones entre el guitarrista irlandés y el productor, y una vez mezclado el que sería su nuevo trabajo, Rory muestra su disconformidad con el resultado final, llegando a discutir con el productor, Elliot. Tanto el productor como la dicográfica Chrysalis, quieren publicar el material, pero Rory guarda un as en la manga, es él quien tiene la última palabra sobre el producto, pues tiene el control total de su música. Fruto de ello ha perdido una considerable cantidad de dinero, pero sabe que así nadie podrá adulterar su música. En el más que recomendable documental sobre el guitarrista, Rory Gallagher: Ghost Blues - The Story of rory Gallagher, su hermano Dónal, quien es su mánager y gerente, habla sobre este episodio, cuando Rory le comunica que no va a publicar ese material, y teniendo en cuenta que apenas queda tempo para cumplir con los plazos con la discográfica Chrysalis, el grado de estrés para Dónal en ese momento es brutal. Las grabaciones de San Francisco las guarda en un cajón Rory, y parte de ellas verán la luz en el año 2011 bajo el título Notes from San Francisco.

Nos encontramos en un punto en el que Rory ha decidido no publicar el trabajo hecho, y quien no está muy contenta es su discográfica, Chrysalis, pues apenas queda tiempo y Rory tiene que presentar un disco nuevo. Rory, lejos de ponerse nervioso toma una decisión, despide a toda la banda que viene acompañándole durante lo últimos cinco años, menos a su inseparable bajista, Gerry McAvoy, y ficha al baterista Ted McKenna, volviendo a la típica formación power trío que tanto le gusta. Con esta formación se marcha a los Dierks Studios de Colonia, Alemania, para trabajar con Dietr Dierks, productor de varios discos de Scorpions entre otros, y en un mes graba Photo Phinish, otro gran trabajo, consiguiendo cumplir con los plazos con la discográfica.



En septiembre de 1979 publica Top Priority, y tras dos años de extensas giras por Estados Unidos y Europa, publica en mayo de 1982 Jinx. La gira de presentación de éste disco fue la más extensa y exitosa del artista, llenando durane cuatro meses consecutivos lugares emblemáticos de Estados Unidos como el Madison Square Garden de Nueva York, el Rosemont Horizon de Chicago o el Spectrum de Filadelfia. Habría que esperar cinco años para disfrutar de su siguiente trabjo, Defender, publicado en julio de 1987. Este disco fue lanzado bajo el propio sello discográfico del artista, Capo Records junto al sello discográfico Demons Records. Tres años después, concretamente en mayo de 1990, Rory publicara con su sello, Capo Records, Fresh Evidence, que se convertirá en el último disco de estudio grabado por el artista. 

Durante su carrera musical, Rory había desarrollado una grave aerofobia, miedo a volar, y para superarla le había sido prescrito un fuerte sedante para ayudarle a superarla y así poder volar. El habitual consumo de este medicamento, mezclado con el habitual consumo de alcohol por parte del guitarrista generó graves daños en su hígado, el cual dijo basta en enero de 1995 mientras se encontraba de gira por los Países Bajos. La gira tuvo que ser cancelada. En marzo de 1995 Roy fue ingresado en el hospital King's College de Londres, donde se determinó que ante su grave estado de salud, la única forma de salvarle era practicarle un trasplante de hígado. El 14 de junio de 1995, y después de pasar trece semanas en cuidados intensivos tras serle practicado un trasplante de hígado, Rory Gallagher fallecía por complicaciones debidas a una infección. se marchaba uno de los mejores guitarristas de la historia, dejando su legado e influencia en gran infinidad de artistas. The Edge (U2), Slash, Johnny Marr (The Smiths), Janick Gers (Iron maiden), Glenn Tipton (Judas Priest), Vivian Campbell, Gary Moore, Joe Bonamassa y Brian May, entre otros tantos, han citado a Rory Gallagher como una fuente de inspiración durante sus años de formación musical. 

No se me ocurre mejor manera de despedir este especial dedicado a Rory Gallagher que hacerlo con la afirmación que de él hizo el mismísimo Jimi Hendrix cuando se le preguntó como se sentía al ser el mejor guitarrista del mundo, Jimi simplemente contestó: "No sé, pregúntale a Rory Gallagher", aunque hay quien dice que esto es una leyenda urbana. Lo que está claro es que Rory se ganó por derecho propio el respeto y un lugar entre los más grandes dominadores de las seis cuerdas.

Esquina Rory Gallagher (Dublín)

lunes, 8 de marzo de 2021

El disco de la semana 215: Skin & Bones - Susan Santos

 

Skin & Bones, Susan Santos


     Hoy, día 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer, un día de carácter festivo que conmemora la lucha de la mujer por su papel y participación dentro de la sociedad, su emancipación y su desarrollo íntegro como persona. La reivindicación del papel de la mujer abarca todos los ámbitos, el de la música no podía ser menos, y en 7dias7notas lo tenemos muy presente. Para celebrarlo como se merece, en este día tan señalado os traemos nuestra siguiente propuesta con la intención de reivindicar el papel de la mujer dentro del maravilloso mundo de la música. No se nos ocurría mejor forma que hacerlo que con una guitarrista española que se ha ganado por méritos propios ser uno de las mayores referentes del blues en España, y que se ha ganado sobradamente el reconocimiento fuera de nuestras fronteras, llegando a ganar en el año 2018 el prestigioso galardón The Best Musician Perfomance dentro de los European Blues Awards, y siendo nominada en 2019 para los Texas Sound Music Awards.

En 1982 nacía en Badajoz una artista que se ha convertido por derecho propio en una de las puntas de lanza del blues de este país, Susan Santos. Nacida en el seno de una familia numerosa, la más pequeña de seis hermanos, quien le iba a decir que a las puertas de la mayoría de edad iba a sentir la llamada de la música. Su primera guitarra es acústica y se la costea ella misma con el dinero ganado en una fábrica. Luego llegaría su primera guitarra eléctrica con la inestimable ayuda de su madre y sin que su padre se enterase, pues temía que su hija se convirtiese en una heavy. Sin embargo más tarde sus padres comprenderían que Susan había elegido correctamente, pues a día de hoy lleva una significativa carrera y se ha ganado una gran reputación dentro del blues, y no sólo dentro del país.

Susan es zurda, aprende a tocar la guitarra de forma autodidacta y va forjando su propio estilo personal de entender e interpretar la música. Como hemos comentado anteriormente, su carrera no ha parado desde entonces y ha compartido su feeling con la guitarra en muchos clubes famosos, en festivales por toda Europa, Estados Unidos y México.

En 2010 Susan Santos lanza junto a The Papa's Red Band su primer trabajo, Take Me Home, y en 2011 también con ellos su segundo disco, Shuffle Woman. En 2014, tras abandonar su proyecto con The Papa's Red Band, publica Electric Love. La gran calidad que atesora y va demostrando Susan le lleva incluso a ser fichada para la televisión, concretamente para el programa televisivo Las Mañanas de TVE 1 durante un par de años.

Dos años después de su álbum Electric Love, con el que ya había llamado considerablemente la atención, se encierra en unos estudios de Madrid, y junto con Manuel Bagües al bajo y Ezequiel Navas a la batería graba Skin & Bones. El disco es producido por Juan De Dios Martín y mezclado por este en Los Ángeles. Susan cuenta en este álbum con la colaboración de músicos de la talla de Eduardo Molina, David Salvador y Pablo Martín entre otros. El disco es publicado en 2016 bajo el sello discográfico Paella Records



Skin & Bones se convertía en su mejor trabajo hasta la fecha, un disco apoyado en el característico y personal estilo de Susan de entender el blues y asomándose a estilos como el country o el sonido pantanoso del blues del Delta. El disco comienza con la potente Rattlesnake, todo un cañonazo donde Susan, acompañada de una gran base rítmica, ya nos ha puesto en pie con su guitarra. Le sigue el magnífico tema se toque country Goin' Down South, donde el banjo y el bajo nos trasladan hasta los mismísimos terrenos pantanosos del delta. Red Lips, tema donde la guitarra cobra el protagonismo de un tema que nos recuerda a los australianos AC/DC. Sunset's Glaze, un magnífico medio tiempo donde el protagonismo es para la calidez que transmite la voz de Susan, aspecto que cuida tanto como su instrumento, la guitarra. Le llega el turno a Dusty Road y su ritmo frenético. Para mí uno de los momentos cumbre del disco, donde podemos apreciar el uso de la Washboard (tabla) de la mano de Juan de Dios, usada antiguamente como elemento de percusión. Este es el típico tema que me gustaría estar escuchando si estuviera viajando a través de las típicas carreteras con sus eternas rectas y que cruzan el país originario del blues de punta a punta, como por ejemplo la Ruta 66. 

Let Your Light Shine, otro de los momentos más íntimos del disco, con esa guitarra acústica que por momentos nos recuerda a Eric Clapton. Skin & Bones, el tema que da título al álbum, puro rock & roll con sabor a la década de los años 50 que hará que los pies se nos muevan solos. Como antesala al cierre llega Stop Drivin' My Crazy, otro de lo grandes momentos del disco con esta magnífica balada, uno de esos temas que a uno le gustaría degustar en la mecedora del porche de la típica casa con vistas al delta. El final de este magnífico y más que recomendable disco llega de la mano de Right On Time, donde la guitarra de Susan está brillantemente acompañada por la calidez que da al tema el sonido del Hammond. 

domingo, 28 de febrero de 2021

Gary Moore - Scars (Mes Gary Moore)



Llegamos al final del #MesGaryMoore, y lo hacemos con Scars (Cicatrices) el décimo quinto álbum de estudio del genial guitarrista de jazz rock, blues rock y hard rock. Mencionamos, una vez más, varios de los grandes estilos en los que se movió, porque Scars fue, tras diez años dedicado a explorar los terrenos musicales del blues rock, una especie de vuelta a los discos de sus orígenes, sin dejar por ello de lado al blues y, sobre todo, a las influencias de grupos como Cream o The Jimi Hendrix Experience.

Publicado en 2002, el disco fue grabado por una banda en formato power trío, algo muy del gusto de Gary, que ya había explorado esa fórmula en "BBM" con Jack Bruce y Ginger Baker. En esta ocasión, los elegidos fueron Cassie Lewis (ex-bajista de Skunk Anansie) y Darrin Mooney (batería de Primal Scream). Este último impresionó a un Moore conocido por ser extremadamente exigente con los baterías, que pensó que con el sonido que el baterista podía dar a sus canciones, lo que realmente pegaba era un disco más crudo y directo que lo que normalmente venía haciendo, por lo que una vez reclutado el bajista, decidió que esa sería la banda de Scars.

A diferencia del trabajo realizado en el combo Bruce-Baker-Moore, que en todo momento se trató como un trabajo puntual y paralelo a su discografía, Scars tiene en todo momento el sello de un disco personal de Gary Moore, empezando por el propio título. Las "Cicatrices" pueden hacer referencia a la experiencia y los momentos difíciles vividos a los largo de toda una carrera en la música, o más directamente a las propias cicatrices físicas en el rostro del guitarrista norirlandés, a consecuencia de una reyerta en un pub a finales de los años setenta.

When the sun goes down es el tema de apertura, y la primera muestra clara de la fuerza y la química de Moore, Lewis y Mooney. Si las cicatrices pueden a veces ser bastante profundas, también lo son las raíces del rock gestado por los tres músicos, siempre con la guitarra de Moore y su sonido wah wah típico de Hendrix mandando en cabeza. Rectify sigue la misma línea cruda y guitarrera, con un riff más pesado y el mismo tono amargo en la voz de Moore, más grave y rasposa que en discos anteriores. Gary no nació en Chicago, como reza el título de siguiente tema, pero en Wasn't born in Chicago se maneja a sus anchas sobre una batería de estilo jazz y sonidos electrónicos que bien podrían haber nacido en uno de los oscuros bares de jazz y blues de la ciudad estadounidense.

Tras la rítmica y efectiva Stand Up, con sus peculiares silencios al final de cada vez que se pronuncia el título, llega el turno del Moore más lento y melódico en la balada Just Can't Let You Go, intenso tema de estructura blues y de más de 7 minutos de duración. Es sólo un alto en el camino, porque el blues rock de garaje y carretera vuelve con fuerza en My Baby (She's so good to me). Vuelven también las influencias de Hendrix, tanto en World of Confusion, que juega con la estructura de Manic Depression, como en Ball and Chain, tema de casi 13 minutos, que bebe de las fuentes de Voodoo Child. La cosa no queda ahí, porque en el abrasivo arranque de World Keep Turnin' Around y en su acelerado riff se vislumbran guiños evidentes a Foxy Lady.

Y después, como a todo disco, y como al #MesGaryMoore, a Scars le llega el momento de decir adiós. A estas alturas, y pese a las visibles cicatrices que las ramas de los árboles le han producido por el camino, el caballo que galopa Gary se sabe ya ganador, y se permite el lujo de aminorar el paso y disfrutar del paisaje en los metros que le separan de la meta final en Who Knows (What Tomorrow May Bring?), que además de un gran tema lento, es una gran pregunta. ¿Quién sabe lo que el mañana traerá? Nadie lo sabe, y esperamos que sean más alegrías en forma de discos como este, ideales para cerrar para siempre, y a golpes de blues y rock, algunas profundas cicatrices.

miércoles, 24 de febrero de 2021

Gary Moore - A different beat (Mes Gary Moore)

 



En los últimos años del siglo XX, los avances en las tecnologías de la creación musical, originaron una epidemia que se extendió de forma transversal a todo tipo de músicos, actualmente los amantes dl rock sufrimos todo tipo de sonidos que no llegan a emocionarnos lo que una guitarra tocada con manos expertas nos puede trasmitir, tampoco quizás hayamos explorado demasiado, tampoco seguramente nos interese demasiado, esta nueva música es un paisaje del que realmente se muy poco, lo que sé es que los tecno-beats y otros paisajes sonoros relacionados producidos electrónicamente fueron un terreno tentador para los fuegos artificiales de guitarra, y los músicos de Jeff Beck a Joe Satriani exploraron ese territorio con resultados no demasiado satisfactorios para los puristas. Gary Moore no escapó ileso, y se atrevió a entregarnos un disco donde podemos disfrutar de su guitarra y la voz habituales en otros discos, a los que añadió un bajo adicional y algunas funciones de teclados, el resto es solo programación y sintetizadores y nos vamos a adentrar en terreno peligroso. 


 

Tras una primera pasada por A different beat rápidamente te das cuenta de que lo que tienes delante está muy alejado de lo que ha sido la carrera de Moore, sin embargo a poco que lo intentes es fácil descubrir que los mejores momentos que se dan en el disco es cuando Gary es acompañado por una batería real, por ejemplo en esa versión urgente y demoledora de "Fire" de Hendrix (único tema no original de Moore), o en la cruda y diabólica "Worry no More", alternando entre la fuerza bruta del Hard Rock y las reminiscencias sensuales de Boogie al estilo de J.Lee Hooker, agudizando los sentidos y quedándonos en nuestro ambiente podemos encontrar ecos de los pioneros Delta-Blues en “Bring My Baby Back”, donde el espíritu de Robert Johnson parece flotar sobre ritmos muestreados, sonidos de sintetizador, blips y otros efectos variados que ha decidido incluir, mientras. Otras reminiscencias al sabor añejo del blues, como cuando Gary viaja al terreno de Santana en el Power-Pop con inflexión de "Lost in Your Love" donde descubrimos una interpretación tanto vocal como instrumental apasionada y de gran altura, o cuando es una sensibilidad similar a la de Peter Green la que templa al candidato perfecto y melancólico a la canción favorita de las estaciones de radio "Surrender", una pista de más de 9 minutos con un vago ambiente parecido al de Sade. En “Can't Help Myself”, también podemos escuchar las reverberaciones del héroe de la guitarra que conocemos.



La crítica de la época acogió con mucha tibieza esta obra, sin perdonar al artista el giro decisivo hacia otros caminos, aunque a la vez gratificado por escenarios aún rebosantes de sus interpretaciones. Personalmente escucho a Gary Moore por su rock, que básicamente dejó de publicar después de 1990. Desde entonces, ha sido el blues, o versiones del blues, en lo que se ha concentrado. Este álbum fue en realidad un poco experimental, usando lo que supongo que podría llamarse fusión de blues, junto con elementos de muestreo y rap. A veces lento, otras veces simplemente irritante, pero, al final del día, una forma diferente de escuchar a Gary Moore en busca de formas alternativas de encender su sensibilidad Blues única en su tipo; puede ser gratificante, definitivamente es una experiencia auditiva digna, he escuchado cosas menos interesantes de nuestro guitarrista irlandés, y una cosa es segura: no se le puede acusar de repetirse. En general, y como concepto, tiene su mérito. Gary Moore nunca ha tenido miedo de probar cosas diferentes o abordar las cosas desde un ángulo diferente, y esto es lo que hace en este álbum.

 

domingo, 21 de febrero de 2021

Gary moore - After Hours (Mes Gary Moore)

 

After Hours, Gary Moore


     Con Still Got The Blues (1990), Gary además de volver a las raíces, había conseguido situarlo como el más exitoso de su carrera, vendiendo más de tres millones de copias en todo el mundo. Acababa de sentar los cimientos de su retorno a un estilo que siempre le había acompañado, no en vano, durante  la gira de apoyo del último álbum de hard rock que publicó, After the War (1989), en los camerinos solía tocar blues para calentar.

Gary tenía claro la senda que quería seguir, la senda del blues, y publica su siguiente trabajo seguido orientado a este género musical. Con Still Got the Blues había sentado los cimientos de un género que conocía desde hace mucho tiempo ya, de hecho, ya coqueteaba con él en su inicios. Cómo olvidar su etapa con la formación irlandesa Skid Row, y su primer disco de estudio, Grinding Stone, el gran olvidado de su carrera, muy recomendable. Con su valiente decisión de volver a las raíces muchos pensaron que Still Got The Blues sería fruto de una noche de pasión, no podían estar más equivocados, y con After Hours se encargaría de demostrarlo. Un disco a la altura de su anterior trabajo, Still Got The Blues, y en mi humilde opinión, en su conjunto, mejor incluso.

Para la grabación del álbum, Gary cuenta con los ya habituales bajistas Bob Daisley y Andy Pyle además de Will Lee y Johnny B. Gaydon, con Grahm Walker y Anton Fig a la batería, y Tommy Eyre a los teclados. Y la sección de viento de la que se rodea no puede ser mejor, Martin Drover a la trompeta, Richard Morgan al oboe, Frank Mead, Nick Pentelow y Nick Pain al saxofón, y el dúo de los maravillosos Memphis Horns, Andrew Love (saxofón) y Wayne Jackson (trompeta). Los coros del disco corren a cargo de Carol Kenyon y Linda Taylor. Gary, además contó con la colaboración de BB King y Albert Collins en un par de temas. El resultado es After Hours, publicado el 10 de marzo de 1992 bajo el sello discográfico propiedad de Virgin, Charisma Records.  El disco consigue buenas cifras en las listas de ventas, consiguiendo la certificación de platino en Suecia y la de oro en el Reino Unido, además de conseguir buenas cifras también en España, Francia, Australia y Nueva Zelanda. 



En el disco apreciamos la importancia que van a tener, además de la guitarra de Moore, las interpretaciones de las secciones de viento de los Memphis Horns y compañía. Encontraremos brillantes versiones que Moore hace suyas como los marchosos Don't You Lie To Me (Hudson Whittaker), Key To Love (John Mayall) y The Blues Is Alright (Milton Campbell), tema éste último donde colabora Albert Collins. También se marca un maravilloso cover de la balada compuesta por Duster Bennett, Jumpin' At Shadows, y es que cuando Moore se pode sentimental lo clava como pocos con su guitarra. Podremos disfrutar de composiciones suyas llenas de ritmo como Cold Day In Hell, con los coros magníficos de Kenyon y Taylor, Only Fool In Town, uno de los temas más cañeros del álbum, y Since I Met You Baby, donde cuenta con la colaboración del maestro BB King, y cuyo single alcanzó el puesto numero 4 en las listas de ventas del Reino Unido. Encontraremos Brillantes baladas, como The Hurt Inside, con esas sobresaientes secciones de viento y Noting's The Same, donde Moore, armado únicamente con su voz y su guitarra nos hará soñar. Mención aparte para dos temas que en mi opinión elevan el nivel de un álbum de por sí ya muy bueno, Story Of The Blues y Separate Ways, temas donde se combinan todos los elementos para regalarnos dos maravillas composiciones, los músicos, la potente sección de viento de la que Moore sabe sacar partido, y cómo no, esa guitarra de la que sabe cómo lanzar notas llenas de sentimiento que se clavan en nuestro corazón y nos hacen vibrar, sentir, disfrutar...

En 2002 se reedita After Hours en formato CD con cinco temas extras All Time Low y Movin' On Down The Road, ambas composiciones de Moore, dos versiones, Woke Up This Morning (BB King, Jules Taub) y Don't Start Me Talkin (Sonny Boy Williamson), y Once In A Blue Mood, compuesta por Moore junto con Anton Fig, Will Lee y Tommy Eyre, un instrumental donde volvía a contar con la colaboración de Albert Collins.

Con After Hours Gary seguía recorriendo la senda del blues, una senda que ya había iniciado en sus comienzos como músico, y que siempre le acompañó, pues fue uno de los géneros musicales que le acompañaron siempre y del que estaba fuertemente influenciado.

viernes, 19 de febrero de 2021

El disco de la semana 213: Colosseum II - Strange New Flesh (Mes Gary Moore)

 

Strange New Flesh, Colosseum II


     Nos encontramos en el mes de febrero, un mes que estamos dedicando a la figura del guitarrista irlandés Gary Moore. Si bien nos estamos haciendo eco de su discografía en solitario, no podíamos dejar pasar la oportunidad de hablar de una etapa en la que se involucró en el jazz Rock y jazz fusión. Una etapa que sirvió al genial guitarrista para elevar su nivel con el domino de las seis cuerdas con su trabajo en la formación Colosseum II, en la que ingresó en 1975 y la cual dejó en 1978 con 3 discos grabados en su haber.

Para hablar de Colosseum II tenemos que hablar de John Hiseman, el genial baterísta que había formado parte del grupo Colosseum (1968-1971), una de las primeras formaciones en fusionar jazz, rock y blues. Cuando desparace ésta en 1972, Hiseman junto con su compañero en la desparecida banda Mark Clarke, forman Tempest, formación con la que publica 2 discos, hasta la desaparición de ésta en 1974. 



En noviembre de 1974 Hiseman anuncia un nuevo proyecto, y para éste ficha a Gary Moore. Hiseman y Moore, bajo el nombre de Ghosts se pasan desde noviembre de 1974 hasta mayo de 1975, fecha en la que queda conformada la formación permanente del grupo, ensayando y audicionando a otros músicos para el proyecto a la vez que intentan conseguir un contrato con alguna discográfica. Tras los 18 meses de auiciones, el grupo queda formado por John Hiseman (batería), Gary Moore (guitarra), Don Airey (teclados), Neil Murray (bajo) y Mike Starrs (voz). Tras varios meses en busca de una discográfica, consiguen que el jefe de Bronze Records, Gerry Bron, se interese por ellos y su material. Gerry les ofrece un contrato a la vez que les aconseja encarecidamente que cambien el nombre del grupo, el cual acabrá llamándose entonces Colosseum II. El sonido del grupo se moverá entre el jazz rock y el rock progresivo, si bien tendrá poco que ver con el sonido de la primera formación de Colosseum (1968-1971), pues el sonido de esta nueva formación es un sonido más contundente y endurecido sin perder la esencia de la fusión del jazz y el rock, en el cual Moore tiene gran parte de culpa con el afilado sonido de su guitarra.

Con el grupo consolidado y con un contrato en el bolsillo con Bronze Records, Hiseman, Moore y los demás se encierran en el estudio y graban 6 temas, de los cuales 5 son cosecha propia y el restante una versión de un tema de Joni Mitchell. Así se gesta Strange New Flesh, publicado el 19 de abril de 1976. Seis temas, apenas unos 40 minutos donde estos grandes y talentosos músicos que influenciarán más adelante a infinidad de músicos y en multitud de géneros, conciben un gran álbum que entonces pasó ciertamente inadvertido y fue bastante infravalorado.

Abre el disco Dark Side Of The Moog, instrumental compuesta por Gary Moore y Don Airey. Todo un burlesco guiño a la oda de Pink Floyd donde además de mostrar lo excelentemente engrasado y el funcionamiento como una sola unidad de la banda con los pasajes melódicos, podemos deleitarnos con la maestría de Airey y Moore a los teclados y a la guitarra respectivamente, que nos regalan unos duelos fabulosos. Down To You, el único cover incluido en el disco. Tomando el tema de la gran Joni Mitchell como base, Mike Starr consigue estar a la altura del grupo con su trabajo vocal en un tema que alargan durante más de 9 minutos y que contiene una sección instrumental intermedia donde Don Airey demuestra el por qué es uno de los mejores tecladistas que hay. Gemini and Leo, compuesta por Hiseman y Moore. Magnífico tema compuesto sobre una base funky donde el grupo suena más que bien y sin ninguna fisura. Secret Places, compuesto por Hiseman y Moore. Tema con un rítmo acelerado donde Mike Starr está más que bien secundado por la destreza rítmica y armónica de unos músicos que suenan más que compenetrados. One Second Troughts, compuesto por Moore. Podemos apreciar la característica mano de Moore en la composición, un tema lento donde Mike Starrs se desata con sus virtudes vocales, que son adornadas por esos característicos toques de guitarra de Moore y los magníficos efectos de los teclados de Airey. Cierra el disco Winds, una composición de más de 10 minutos obra de Moore y Hiseman. La apertura a toda pastilla de batería de Hiseman es sencillamente espectacular, y el tema es sencillamente una fusión de estilos perfecta. 

Desafortunadamente este genial disco pasó comletamente inadvertido y el grupo fue despedido por la discográfica Bronze Records. El grupo todavía tendría tiempo de regalarnos dos álbumes más, pero eso es otra historia. En 2005 se reeditaría el álbúm como un set compuesto por un doble CD con material de estudio de la banda que abarca más de una hora de estudio y un concierto grabado en vivo por la BBC en 1976, material muy recomendable para los amantes del jazz rock y el rock progresivo. Quizás, una de las claves del fracaso de éste álbum lo podemos encontrar en el hecho de que los seguidores esperaban que Strange New Flesh tuviera las hechuras y el característico sonido de la primera formación de Colosseum, pero Hiseman, Moore, Airey, Murray y Starrs no eran Colossseum, eran colossseum II...


miércoles, 17 de febrero de 2021

Gary Moore - Still got the blues (Mes Gary Moore)

 



El álbum Still Got The Blues de 1990 fue un cambio de juego abrupto y arriesgado que reavivó la tradición de la guitarra de blues británica, y es Gary Moore quien fue el encargado asumir ese riesgo. Fue en 1989, cuando empezaría a tomar forma un álbum de blues, si llegaba a publicarse ya que todo estaba muy en el aire. Bob Daisley (bajista de entre otros Ozzy Osburne) tenía entre ceja y ceja hacer un álbum de blues. " Esa idea fue planteada a la compañía discográfica por el manager de Moore, Steve Barnett. Según John Wooler, integrante del equipo de Virgin Records A&R, uno de los primeros pensamientos fue hacer un álbum conceptual de Fleetwood Mac con el productor de Blue Horizon , Mike Vernon, y tratar de que tocara parte de la banda original. Pero Moore pronto abandonó ese plan y se dedicó a formar un equipo de músicos con su propio nombre. Dentro de Virgin, la conversación se centró inicialmente en que se trataba de un proyecto paralelo, en otras palabras, no un álbum que contara como parte de los compromisos contraídos de Gary Moore para ello se acercó primero al bajista Andy Pyle, con quien había tocado en 1980, que tenía sólidas actuaciones de blues con varias bandas, incluidas Savoy Brown y Blodwyn Pig. Moore y Pyle se conocieron y comenzaron a trabajar en algunas ideas. La actividad luego se trasladó a un pequeño estudio en un granero reformado en Woodcray, Berkshire, no lejos de la casa de Gary en Henley. Andy trajo al ex baterista de Blodwyn Pig, Clive Bunker, y cuando eso no funcionó, recurrió a Graham Walker, que no era específicamente un baterista de blues, y el pianista Mick Weaver. Se pusieron a tocar algunos temas y de ahí nació el embrión del álbum. Steve Barnett llevó las demostraciones a Virgin. "La gente reaccionó muy bien dentro de Virgin a algunas de las canciones más comerciales", dice Wooler. “la gente no era muy experta en blues y pensaron que tal vez las canciones tenían un potencial mayor que un simple disco de blues. La interpretación era genial, por lo que aún atraería a los fans de la guitarra y podría atraer a un público más amplio ya que eran muy melódicas ". Con esta presentación Virgin decidió darle a Gary Moore la oportunidad de ser la cabeza del álbum. Tras muchos meses de trabajo el disco estaba listo, Moore estaba extremadamente nervioso por la reacción de los fans y los críticos. Temía defraudar a sus fans del rock y no impresionar a la comunidad del blues, que se burlaría de sus credenciales. Pero Bob Daisley ya le aviso que: "Esto va a ser lo más grande que hayas hecho". Qué razón tenía. 



Abre el álbum Move On, un hard rock que el irlandés traía como marca registrada, acompañado de ciertos ramalazos de blues, empezamos de forma genial, desde el principio descubres que vas a navegar por lugares inmensos. Oh Pretty Woman cuenta con la guitarra y la voz de Albert King, quien popularizó esta composición de A. C. Williams, compositor estadounidense que trabajó en la emisora de radio WDIA de Memphis, Tennessee, desde principios de la década de los 50 hasta 1980. El riff inicial te coge por sorpresa dando paso a toda la banda para acompañar el estilo elegante de Moore. Las trompetas y el saxofón entran en escena para crear una sólida base que aportan riqueza a la aparentemente sencilla labor de bajo y batería sobre la que Moore extiende sus magistrales solos, hay un sobresaliente contrapunto entre King y Moore. al parecer cuando Moore le enseñó el tema a King, éste le hizo parar en el acto, horrorizado por el volumen y cantidad de notas tocadas por Moore. Debieron llegar a un acuerdo, pues el tema es una auténtica delicia, sobre todo por el contraste entre los punteos clásicos y puristas de King y la demostración hard rockera de Moore, un tema que pasaría a formar parte de su habitual repertorio: nacía un clásico de clásicos. El enorme Jimmy Rogers, conocido por su participación en los trabajos de Muddy Waters durante las décadas de 1950 y 1960 y que fue uno de los mentores y precursores del blues de Chicago, jamás se hubiese imaginado que su Walking By Myself seria llevado a un extremo tan soberbio entre el blues y el rock, tres minutos brutales con cambios de melodía y tono constantes, pero compacto, que consigue llevarte al éxtasis. 



Y llegamos a la obra maestra incontestable del álbum Still got the blues, que podría compararse al “Still Loving You” de Scorpions, para nada en estilo y temática, pero sí en el sentido de canción universal que todo el mundo conoce y relaciona con el artista, es el tema que no dejó de sonar en las radios y que consiguió que este fuera el disco más vendido de la discografía del irlandés. Una balada bluesera made in Gary Moore donde hace llorar su Les Paul al estilo de Parisienne Walkways o Empty Rooms, los increíbles sostenidos de Gary Moore te harán llorar. Bella y a la vez desgarradora, Still got the blues consigue erizarme la piel y aflorar lágrimas en los ojos con cada una de las notas que extrae de su guitarra. ¿Canción perfecta? Para el resto no sé, para mí está incluida en mi lista. Fuera de lo estrictamente musical contaros el “lunar” por todos conocidos, en 2008, la banda alemana de rock progresivo Jud's Gallery grabó una sesión en una radio, uno de sus temas, "Nordrach" llama particularmente la atención, un tema de 12 minutos en el que, en las secciones intermedias, el guitarrista ejecuta una línea similar a la del emblemático tema del norirlandés. Moore negó haber siquiera conocido la canción. De hecho, el juez aleman encargado del caso afirmó que la canción solo podía escucharse en vivo o en la radio en aquella época, pues no había lanzamiento en CD de "Nordrach", es más: la banda alemana jamás lanzó un álbum. Finalmente, el 3 de diciembre de ese año el juzgado determinó que, pese a no existir pruebas de que el solo fue tomado deliberadamente, sí existía infracción a los derechos de autor. Por ello, ordenó que el guitarrista y su sello discográfico debían indemnizar a Juergen Winter, líder de Jud's Gallery, quien presentó el caso.


 

 

El lento inicio de Texas Strut sirve para coger impulso tras el “one, two, three, four de Moore y recorrer de nuevo la carretera, aroma total a ZZ Top que aquí rebosa toda su esencia, con sonido Stratocaster, un homenaje a los sonidos de blues blanco contemporáneo. Los guiños a “The Grange” de los barbudos tejanos está más que presente, sólo hay que escuchar el “ho ho ho” al minuto veinte de canción o el riff que suena a los tres minutos y quince segundos. Blues, country y rock se fusionan perfectamente. Orgía musical concentrada en casi cinco minutos. Trompeta, saxo y piano vuelven a aparecer en Too Tired y la espectacular batalla guitarrera junto a Albert Collins, que con su sonido Telecaster y pinzando las cuerdas con los dedos vuelve a crear un bonito contraste con el estilo de Moore. Con King of the Blues, te viene a la cabeza la icónica imagen de los locales de jazz y blues, con el humo en el ambiente y bourbon servido en las mesas. El teclado flota mezclado con los instrumentos de viento, los dedos de Moore se mueven ágiles sobre las seis cuerdas extrayendo gritos de placer apoyado por la imponente base de bajo y batería.  As the years go passing by es un tema de casi 8 minutos ejecutado de forma lenta y melancólica, ideal para los nostálgicos días de lluvia gracias a la atmósfera que consigue crear Gary, consiguiendo hacer suyo esta composición de Deadric Malone, apodo de Don Deadric Robbey, y que ya habían grabado antes Fenton Robinson (1959) y Albert King (1967). Más que destacable el fantástico piano del veterano Nicky Hopkins que se funde con una gran exquisitez con los lamentos de la guitarra de Moore. Midnight Blues es otra pausada y bonita canción de tempo moderado, que como muy bien indica su título es muy apropiada para escuchar a medianoche, debido a su sonido elegante y relajado. Moore nos regala unos solos intimistas y muy personales, cargados de un sentimiento impregnado de nostalgia, con otro paseo de Moore por su Gibson Les Paul.

 


Pero no está todo dicho ya que en la edición especial encontramos otros tres temas muy potentes, empezamos por That kind of Woman, esta vez es el ex-beatle George Harrison, el que regala a Moore una canción diferente en el conjunto del disco, además de que Harrison se encarga de un personalísimo slide y de los coros. All Your Love original de Ottis Rush, es otro de los homenajes que Moore hace a los músicos que le han influenciado, aportando una ligera versión alejada de la tosca producción de la original. Dinámica y guitarrera canción. Cierra los extras con Stop Messin’ Around, original de Fleetwood Mac, escrita por su mentor Peter Green un blues rock que ya tocaba Gary en sus directos desde mediados de los 80.

martes, 16 de febrero de 2021

Un país, un artista: Estados Unidos - Robert Johnson

 

Robert Johnson


     El país elegido por nuestros amigos y seguidores en esta ocasión ha sido Estados Unidos. Se me ocurren, a bote pronto, cientos de artistas y bandas que merecen ser elegidos en esta sección, y me encuentro ante la encrucijada de tener que elegir únicamente uno. Después de darle no pocas vueltas, elegí para esta sección al legendario bluesman Robert Johnson, al cual elegí por varias razones, concretamente 29, que fueron las grabaciones que el artista hizo en vida.

  1. kind Hearted Woman Blues (23/11/1936). Robert nace en 1911 en Hazlehurst, Mississippi, hijo de Julie Ann Majors, hija de de esclavos, y de Noah johnson, un jornalero que estaba de paso por el poblado. Al parecer Julie tuvo a Robert cuando estaba temporalmente separada de su esposo, Charles Dodds Jr., un próspero fabricante de muebles. Julie abandona Hazlehurst al poco de tener a Robert, y acaba dirigiéndose a Memphis para que Robert se crie con su esposo Charles, el cual se había cambiado el apellido a Spencer, apellido con el que Robert crece sin saber que este no es su apellido real y que charles no es su padre biológico. 
  2. I Believe I'll Dust My Brown (23/11/1936). Robert pasa su infancia en Memphis,  donde asiste a la escuela, recibiendo formación en aritmética, lectura, lenguaje, música, geografía y ejercicio físico. Es allí en Memphis, durante su infancia, donde descubre su interés por la música, concretamente por el blues y la música popular. Comienza entonces a tocar el arpa y posteriormente la armónica. 
  3. Sweet Home Chicago (23/11/1936). Entre 1919 y 1920 vuelve con su madre, y tras vivir una temporada en una plantación, acaban finalmente instalados en Commerce, localidad situada en el Delta del río Mississippi. Todo esto hace que la música pese más que los estudios, los cuales acaba dejando en 1927 alegando tener problemas de visión. En 1929 ya ha adoptado el apellido de su padre biológico, Johnson, pues su madre, Julie, ya le ha contado la verdad.
  4. Ramblin' on My Mind (23/11/1936). En 1929 contrae matrimonio con Virginia Travis. virginia queda embarazada, y en abril de 1930 fallece durante el parto junto al bebé que ambos están esperando. Robert se casará una segunda vez, concretamente con Esther Lockwood, quien era la madre de Robert Lockwood Jr., quien se convertirá posteriormente en guitarrista de blues. 
  5. When You Got a Good Friend (23/11/1936). Tras la muerte de su primera esposa, Virginia Travis, se extiende el rumor de que aquello es un castigo divino por la decisión de Robert de cantar canciones seculares y profanas
  6. Come on My Kitchen (23/11/1936). El propio Robert Johnson al parecer aceptaba el dicho de que había vendido su alma al diablo como una descripción de su determinación de la abandonar la vida estable de marido y granjero para convertirse en músico de blues a tiempo completo.
  7. Terraplane Blues (23/11/1936). El guitarrista y cantante de blues del Delta Son House recordaba por aquel entonces a Robert Johnson como un músico muy competente y como un guitarrista vergonzosamente malo.
  8. Phonograph Blues (23/11/1936). Es durante la época que permanece en el área de Martinsville, cerca de su lugar de nacimiento, donde se cree que se muda para buscar a su padre biológico, donde perfecciona su estilo y técnica con la guitarra, aprendiendo de artistas como el guitarrista de blues Isaiah "Ike" Zimmerman, considerado el principal profesor de guitarra de Robert.
  9. 32-20 Blues (23/11/1936). El hecho de que se rumoreara que Ike Zimmerman había aprendido a tocar la guitarra visitando cementerios a medianoche, sumado a las confusas respuestas de Son House sobre si Robert Johnson había aprendido su técnica de guitarra producto de un pacto con el diablo, alimentaron la leyenda.   
  10. They're Red Hot (23/11/1936). Entre 1932 y hasta 1938, la fecha de su muerte, Robert ejerce como músico ambulante, viajando habitualmente entre las ciudades de Memphis y Helena.                                                                                       

  11. Dead Shrimp blues (23/11/1936). Si bien su radio de acción estaba entre Memphis y Helena, en ocasiones viajó a otros lugares más lejanos, como Chicago, Texas, Nueva York, Canadá, Kentucky o Indiana.
  12. Cross Road Blues (23/11/1936). Los músicos que conocían a Robert Johnson, decían de él que era un buen tipo, una persona normal con deblidad por el whisky y las mujeres, y dotado con un talento excepcional para la música, y con un gran compromiso con la carretera.
  13. Walking Blues (23/11/1936).Cuando Robert llegaba a una ciudad nueva , solía tocar en las esquinas, frente a la barbería local ó frente a los restaurantes. En vez de tocar sus complejas composiciones, solía complacer al público con los temas más populares de la época, temas que no eran necesariamente de blues.
  14. Last Fair Deal gone Down (23/11/1936). Además de su asombroso talento, tenía una gran habilidad para conectar con la audiencia y establecer lazos con la comunidad local donde se encontraba tocando, lo que le servía para ser bien recibido siempre que volvía.
  15. Preaching Blues (Up Jumped the Devil) (23/11/1936). Robert Johnson, según sus contemporáneos, además de por su pasión por el blues, también se interesó por otros estilos como el jazz o el country.
  16. If I Had Possession Over Judgement Day (23/11/1936). En 1936, en Jackson, Mississippi, Robert Johnson contacta con el cazatalentos y propietario de una tienda de discos, HC Speir, quién a su vez le pone en contacto con el vendedor Ernie Oertle, que trabajaba para el sello discográfico ARC Records, y éste a su vez le presenta al productor de discos Don Law. Es con Don Law con quién realiza la primera de las dos sesiones de grabación que realiza en su vida, en la habitación 414 del Hotel Gunter de San Antonio, Texas.
  17. Stones in My Passway (19/6/1937). Para las grabaciones en San Antonio, que se llevan a cabo entre el 23 y el 25 de noviembre de 1936, Brunswick Records crea un estudio temporal en la habitación del hotel donde se llevan a cabo dichas grabaciones.
  18. I'm a Steady Rollin' Man (19/6/1937). De entre los 16 temas grabados en su primera sesión de grabación en San Antonio, es Terraplane Blues la que más éxito tiene en vida del artista, convirtiéndose en un modesto éxito local y vendiendo unas 5.000 copias.
  19. From Four Until Late (19/6/1937). La segunda y última sesión de grabación de Robert Johnson se realizó en un improvisado estudio en el edificio Vitagraph (Warner Bros.), en 508 Park Avenue, en Dallas, Texas, en el tercer piso del edificio, donde se encontraba Brunswick Records. Dichas grabaciones se realizan entre el 19 y e 20 de junio de 1937.
  20. Hellhound on My Trail (19/6/1937). El 16 de agosto de 1938 fallece Robert Johnson cerca de la localidad de Greewood, Mississippi, sin que se llegue a conocer la causa exacta de su muerte. Hay hipótesis que hablan de una sífilis congénita como factor que contribuyó a su muerte, mientras que hay otras que apuntan al envenenamiento como la causa de su muerte. También hay quien apunta que sufría un trastorno genético conocido como el síndrome de Marfán.                                                                                                                                  

  21. Little Queen of Spades (19/6/1937). La ubicación exacta de la tumba de Robert Johnson se desconoce oficialmente, encontrándose su localización según los expertos, en alguno de los tres cementerios de tres iglesias locales en las afueras de Greenwood.
  22. Malted Milk (19/6/1937). Cuenta la leyenda, que Johnson, ante el ferviente deseo de convertirse en un gran músico de blues, fue citado para llevar su guitarra a un cruce cercano a la plantación de Dockery a medianoche. Es allí donde le recibió el Diablo, quién tomó la guitarra, la afinó, tocó algunas canciones, y luego se la devolvió a Robert Johnson dotándole de un completo dominio del instrumento. 
  23. Drunken Hearted Man (19/6/1937). Robert Johnson es considerado como uno de los más grande e influyentes maestros de blues del Delta
  24. Me and the Devil blues (19/6/1937). Hay tres constantes en las letras de las canciones de Johnson, lo efímero de las relaciones humanas, el vagabundeo constante, y los terrores irracionales. Las letras además entremezclan motivos religiosos, sexuales y festivos.
  25. Stop Breakin' Down Blues (19/6/1937). La singular poética de las letras, sumado al uso del bluesman de la microtonalidad, ayudan a explicar la poderosa emoción que Robert Johnson transmitía cuando cantaba. Eric Clapton llegó a describir la música del bluesman como "El grito más poderoso que puedes encontrar en la voz humana".
  26. Traveling Riverside Blues (19/6/1937). También es conocido por usar una técnica con la guitarra conocida como "El otro vocalista de la canción", de modo que la guitarra simula otra voz complementaria. 
  27. Honeymoon Blues (19/6/1936). Cuando el músico Keith Richards conoció la música de Johnson de la mano de su compañero de banda en los Rolling Stones, Brian Johnson, preguntó al escucharlo "¿Quién era el otro chico que tocaba con él?", sin darse cuenta que Robert Johnson era el único que estaba tocando la guitarra. Su revolucionaria forma de tocar la guitarra le ha llevado a ser considerado como uno de los mejores guitarristas de todos los tiempos.
  28. Love in Vain (19/6/1936). El legado e impacto de la música de Johnson es enorme, llegando hasta nuestros días y siendo imprescindible tanto en la historia de la música como en los músicos que llegaron tras él. Tal es su influencia, que ha estado presente en géneros que se desarrollaron después de su muerte, como el rock and roll y el rock.
  29. Milkcow's Calf Blues (19/6/1937). Brian Jones, Eric Clapton, Robert Plant, Fleetwood Mac, Bob Dylan, John Fogerty, Jimi Hendrix, Johnny Winter, The Allman Brothers Band, Slash, Queen, The White Stripes, The Black Keys, Neil Young y Jeff Beck son sólo algunos de los innumerables artistas y grupos que han estado marcados por la influencia de Robert Johnson
Como comentaba al principio de éste artículo, Estados Unidos es cuna de infinidad de artistas, grupos y estilos musicales dignos de ocupar esta sección, pero no se me ocurren 29 mejores razones como las anteriormente mencionadas, por las que Robert Johnson no merezca estar.